Pactos de sangre por Alayashilum

Narración de Anshel

Yed había despertado, así que comenzamos el día yendo a aquel lugar llamado colegio en busca de un pactado humano para él.
Son bastantes interesantes los pactados humanos de los Hides, la unión entre estos es tan valiosa como la unión que tenemos Yed y yo. Mientras yo lo ayudo por que es mi pactado, el trato con el humano me ayudará a mi por que no deberé preocuparme tanto en cuidar las alas de mi amigo.

Los pactos humanos sirven para proteger el poder de sus alas y evita que tenga que preocuparme tanto por el bienestar de estas, aunque es un hecho que tiene sus pros y sus contras.
La peor cosa que puede pasar y que me fastidia es que cuando él elija a su pactado/a humano, tendré que cuidar tanto de Yed como de él o ella, realmente será insoportable.

Llegamos al lugar y mire a Yed.

_ Apúrate esto es aburrido y hay mucha gente, sabes que me molesta la gente!!!
_Anshel deja de quejarte y busca.
_¿ Y exactamente, que debo buscar ?_Dije mirando todo distraídamente.
_Buscamos a una chica.
_¿Chica? ¿ Quieres una pactada humana mujer?_ Pregunte sorprendido.
_Si, ¿algún problema Anshel?_ Me dijo observándome con enojo y golpeándome la cabeza.
_Auch!! OK, buscare otra idiota, para mi idiota Hide_ Respondí burlonamente mientras observaba.
_¿ A quien le dices idiota, princesa?
_Jaja, olvídalo sigamos buscando_ Dije cuando una chica rubia llamo mi atención.
_Eh!! ¿Qué tal esa chica? Parece de tu tipo.
_¿Cómo lo sabes?_Dijo mirándola.
_Ni idea, solo lo sé, parece lista y va contigo ya que tiene ese aire de libertad que me recuerda a ti.

Yed me miro un buen rato y luego miro a la chica.
_Okay.


Sonrío y camino hacía ella. Paso un largo rato, por lo que me apoye en la pared del establecimiento mientras Yed hablaba con aquella humana, a la hora él se me acerco.

_La pegaste !! Tenemos mucho en común_ Dijo con un tono alegre y emocionado.
_¿Lo ves? Además de tener un súper sentido de la moda, tengo un buen ojo con los humanos.
_Deja de presumir, idiota_ Dijo golpeando otra vez mi cabeza.
_Auch, ¿y eso por que fue? _ Dije acariciando el lugar donde me golpeo.
_Por las dudas_ Respondió contento.
_Claro.

Luego de eso volvimos a casa, en todo el camino Yed no paraba de hablar de quien sería su nueva pactada “ Caroline”.

_Eh Yed!!! para, ya me cansa tanto “Caroline esto… Caroline lo otro” BASTA, dime… ¿ya le pediste que fuera tu pactada?
_Si
_¿ Y acepto?_Respondí sorprendido de lo rápido que se lo había dicho.
_Si, tengo que ir a buscarla hoy a las 4 al colegio, sellare el pacto y daré mis alas.
_Ok, pero creo que ya son las 4..._Dije mirando el reloj de pared.
_AH, cierto… me voy_ dijo volando a la salida a toda velocidad y tirando la mitad de las cosas de la sala.

Yo mire el desorden, suspire profundamente, tome la escoba y limpie la casa. Al terminar ya eran las 5 y Yed no llegaba, moría de hambre y el no volvía, ¡¡mi comida no llegaba!!

Se hicieron las 6 y ya estaba agonizando por devorar un pedacito de carne, lo mínimo.
Estaba sentado en el sillón cuando oigo el sonido de la puerta abriéndose, corrí a una velocidad increíble hacia la entrada y tumbe en el piso a Yed, lo mire desesperado con el propósito de devorarlo.

Ah, ¿olvide decirlo no?, yo comía carne humana pero gracias al pacto entre demonios y ángeles, solo puedo alimentarme de Yed, jeje no le gusta que lo coma. ¡Pero y una mierda, si no me deja comer humanos algo tengo que comer!
Yed me miro con su típica cara de enojo.

_Anshel ¿desde que hora no comes?
_Desde ayer
_Bien, come un poco pero no me ensucies mucho la ropa ¿quieres?
_Intentare lo que pueda lady_ Dije burlonamente mientras me sentaba a su lado y comenzaba a comer su brazo.
_Cállate!! …prin…ce…sa_ Dijo con dificultad por el dolor.
_¿Estás bien? _Dije luego de tragar, mientras limpiaba la sangre de su piel y cubría la herida abierta y expuesta de Yed.
_¿CÓMO VOY A ESTAR BIEN, SI ME QUITASTE UN PEDAZO DE CARNE?_ Respondió quejándose como siempre.
_Ya cállate, estás bien ¿ves?_ Le mostré su herida ya curada mientras limpiaba mi boca.
_Ah… nunca me acostumbrare_ Dijo levantándose y ayudándome para que haga lo mismo.
_ A mi me sorprende lo rápido que te curas, bien… me iré a bañar ¿ que te parece si vas a la cocina y comes algo?
_Lo haré ¿ luego puedo ir a volar?
_Si, pero quédate cerca y ten cuidado.
_Claro princesa_ Dijo riéndose de camino a la cocina.

Subí a mi cuarto por mi ropa, este era gris y rojo, se encontraba al lado del de Yed, también era grande, poseía una cama en forma de ataúd abierto que me encantaba, tenía un balcón que daba a un árbol, un gran espejo de pared con telas y un armario negro con bordes plateados.
Entré al baño que estaba en el otro lado de mi habitación y observe mi cara en el espejo, estaba cubierta de sangre así como varios de mis mechones de pelo, suspire mientras lamía algo del liquido de mi rostro.
Realmente la sangre de los Hides es deliciosa y aún me sorprende su capacidad para regenerarse.

En cuanto termine de bañarme me acerque al balcón y vi a Yed volando, por lo que baje a revisar que no hubiera nadie, una vez seguro volví a subir a mi cuarto y me acosté.
Mañana sería un día difícil, no solo debía cuidar a Yed, ahora también empezaría a cuidar a la tal Caroline.