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Singular Amor por AkiraTetsuya

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Notas del capitulo:

Review anteriores no respondidos por el maldito internet mio, publico rápido porque se me cae y bueno, espero que les guste ¡Enjoy!

Cap 6: Confuso

Miro fijamente el objeto que se encontraba en sus manos mientras caminaba ya casi al atardecer, podría decir que eran las cuatro o tres, no lo sabía con exactitud, ni si quiera le importaba. Su vista estaba fijada única y exclusivamente en ese pequeño peluche, un poco gastado y viejo, pero conservado de una manera que parecía nuevo

No sabía porque, pero ese objeto le llenaba de una sensación melancólica, como si tuviera algo que ver con él, aunque no lo recordaba. Pensó que quizás tenía que ver con su infancia, poco recordaba de esa época, sólo eran leves visualizaciones que tenía de vez en cuando de su niñez. ¿Acaso era eso?

Era un poco tonto, el pensar que de un momento a otro todo estaría patas arriba, no podía evitar reírse de ello, incluso sonaba tonto, estaba seguro de que si alguien le decía “Soy un doncel que pensaba que era hombre por olvidar la memoria y que posiblemente este embarazado de un tipo que estaba en la cárcel pero termino siendo mi prometido” incluso se escuchaba ridículo, pero extrañamente, así era, ¿qué podía debatir él contra eso?, ahora lo único que podía desear era que eso del embarazo fuera una broma, quizás simplemente era una confusión y que las nauseas de esa mañana hubieran sido casualidad

Suspiro una vez más esperando el cambio de cruces mientras guardaba el peluche en su bolso, pero justamente en ese momento el semáforo cambio y termino siendo empujado por una estampida de personas, muy comunes en la actualidad

-¡Carajo, tengan cuidado idiotas!- y así de rápido como sucedió, así de rápido paró -Maldición, tengo que tener cuidado con estas estúpidas horas de la tarde- obviamente, a esa hora la mayoría de las personas salían de sus trabajos y facultades, aunque claro que él no estaba ni pendiente de eso -¿En dónde demonios está mi celular?, por lo menos tengo la cartera-

Miro todas sus cosas esparcidas en el suelo y recogió rápidamente lo que pudo, podía ver que el nuevo cambio se avecinaba así que era mejor que comenzara a correr

·····

-¡Ya llegue!- los ladridos del perro a sus pies le recibieron en la entrada, tal parecía que estaba solo, mejor así, no se sentía de ánimos para habar con su hermano. Tiro su bolso en el suelo y se dirigió al baño para darse una ducha, sentía su cuerpo y su mente extremadamente cansados

Como era usual en él, prendió una pequeña radio y la coloco en la taza del escusado escuchando la música que tanto le gustaba. Logró relajarse un poco y le subió más volumen, e inevitablemente se puso a imitar los sonidos mientras se duchaba. En la sala el extraño can comenzó a olisquear dentro de la mochila del albino, moviendo la cola alegre al ver un objeto nuevo dentro, y en cuanto lo tomo con el hocico se aventuro a morderlo y sacudirlo jugueteando con el objeto

Por lo mismo, ya luego de la ducha y de apagar la radio suspiro tranquilo olvidando temporalmente todo el estrés que cargaba, camino sólo con una toalla atada a su cintura a la cocina, pero apenas llego a la sala casi se atraganto con su propia saliva

-¡Samehada, deja eso ya, maldito perro!- el perro comenzó a gruñir al ver que le planeaban quitar su nuevo juguete, lo que provoco un gruñido de exasperación por parte del albino. Decidido comenzó a corretear siendo perseguido por el albino, este por su parte maldecía con todos los insultos posibles al perro -¡Ya me harte!-

Dio un suspiro y puso una sonrisa bastante cínica de su parte ideó un perfecto plan para atrapar al can.

Unos minutos después el extraño perro olfateo algo en el aire identificándolo rápidamente, corrió a la cocina viendo nada más y nada menos que un plato con carne, y bueno, como era de esperarse de un perro se olvido completamente de lo que llevaba en el hocico para ir a comer

Suigetsu se sentía orgulloso de si mismo, ¡le había ganado!... aunque pensándolo mejor era un simple perro, pero bleh', ¡le había ganado al fin y al cabo!. Satisfecho tomo el objeto ahora lleno de baba del perro, suspirando un poco triste al ver que el conejo estaba rasguñado y con varios cortes y magulladuras

-Tch, puto perro- enojado consigo mismo se tiro a la cama con la intensión de dormir de una vez, ya repararía el peluche después, no estaba tan mal, incluso podría dormir con él si quería... claro que ya era mayor, no era un tonto niño que jugara con peluches... él ya no era un niño...

-¡Juugo!-

Mordió su labio intentando ignorar esos extraños recuerdos, no eran imágenes, sólo sonidos, sonidos que recordaba muy vagamente

·····

Prendió la luz de la sala notando un desastre por donde sea que mirara, rió disimuladamente, ¿quién iba a pensar que él terminaría cuidando a esos dos niños revoltosos como si fueran suyos?. Aunque no se lamentaba después de todo, luego de la muerte de su hermana y su cuñado, no sabían a donde ir, agradecía eternamente que no se los hubieran llevado el servicio adopción

Se quito su saco y acaricio la cabeza de su mascota mientras esta le recibía alegremente. Como siempre, cada vez que llegaba tarde, subía y revisaba ambos cuartos, notando que Mangetsu no se encontraba, abrió lentamente la puerta de el menor y vio algo que hacía mucho tiempo no veía. Entro y río internamente al ver que el menor abrazaba ese peluche como un niño pequeño mientras babeaba, claro que no perdió la oportunidad y le tomo una foto, estaba seguro de que se burlaría de eso mucho

Ya luego de salir vagamente recordó como es que habían llegado a él, ese día fue uno muy triste para la familia, nunca lo olvidaría y sabía también que Mangetsu no lo olvidaría... lamentablemente, Suigetsu, sí lo olvido

·····

Repiqueteo, otro repiqueteo, y otro y otro más, estaba que tiraba el bendito aparato por la ventana, ¿a quién se le ocurría llamar a las tres de la mañana?. Con fastidio se levanto sin importarle estar desnudo, le había dado mucha flojera ponerse ropa, aunque lo que importaba era encontrar su celular

Busco por sobre su mochila y contesto escuchando una sarta de insultos por demorarse a contestar, claro que reconocía esa voz

/¡Estúpido cara de pez, yo aquí intentando ayudarte y mira nada más, en este momento yo debería de estar en mi hermoso sueño reparador, pero no, todo por tu culpa!/ suspiro con fastidio y se tiro en la cama mientras se cubría los ojos con el antebrazo, como le cansaba hablar con esa chica

-Hola también a ti, Karin- otros insultos en su contra, el sonido de unos golpes a una almohada y otras cosas más, hasta que finalmente la chica suspiro

/Sé que se te olvido hacerte la prueba, así que mejor me aseguro, ¿te hiciste la prueba?/ se levanto de un salto murmurando una maldición haciéndole saber a la chica que se le había olvidado... como lo suponía /Volveré a llamar en cinco minutos, ¡así que hastela ya!/

-Tch, ya lo sé,... sólo... dejame buscarla- sin colgar, corrió hacía su mochila rebuscando entre ella, un poco extrañado al no encontrar la pequeña caja. Desesperado saco todo el contenido y le regó en el suelo con la esperanza de ver el sobre... pero nada -Hum... Karin, creo que hay un pequeño inconveniente-

/¿Qué mierda es?, ¿sabes que estoy gastando mi saldo verdad?/ se enfureció con la chica casi apretando el aparato hasta desbaratarlo, pero tenía que calmarse, ¡aún así él allí buscando la puta prueba ¿y ella preocupándose por el saldo?!, valla amigos que tenía

-Pues podría decirse que... lo perdí, o se extravió, o yo qué sé- un minuto de silencio se extendió por la linea hasta que un estridente chillido se escucho obligándole a alejar el teléfono como si de un bicho se tratara

/¡¿Te das cuenta de lo que has echo?, mi papi me va a regañar, si no tiene esa prueba ¿cómo demonios va a hacerte el examen eh?!, ¡estúpido, tonto, imprudente, Hag!!/ no soporto seguir escuchando los insultos de la pelirroja y colgó tirando el celular a cualquier parte. Ni si quiera en la noche podía tener un minuto de paz... aún así ¿cómo coño se perdió esa prueba?, él estaba seguro de que lo había metido allí

-¡Tch!, maldita sea- definitivamente, no volvería a salir en la tarde, fue en esa bendita estampida donde todas sus cosas salieron prácticamente disparadas. Ahora ¿qué debería hacer?, no podía ir a una farmacia a comprar una prueba de embarazo cuando ni si quiera era mayor de edad, ¡no se lo permitirían!

Se volvió a acostar sintiendo una leve punzada en su cabeza, sentía ganas de golpear cualquier cosa que se le atravesara en el camino, pero no podía hacer nada. Frustrado intento volver a dormir sin conseguirlo, se retorcía, se daba vueltas pero no hacía ningún efecto

-¿Qué eh echo para merecer esto?- sin querer coloco una mano en su (según él) estómago, cuando en verdad era su vientre, aunque la verdad no tenía tiempo de pensar en ello. Intento pensar en si mismo de una manera positiva, ¿cuanto le faltaba para salir del instituto?... como unos tres años, él sabía que era casi seguro de la posibilidad de estar en estado, pero no quería admitirlo, pensar que tendría que dejar su sueño de ser nadador profesional, ¡incluso había conseguido una beca por ser el ganador de los últimos tres trofeos ganadores!, si estaba embarazado tendría que dejar eso, buscar trabajo, aprender a cuidar de un niño, ¡no podía!... aún así, tampoco sería capaz de dejar a un niño solo -Maldición-

Apretó sus ojos esperando a que todo se solucionara de alguna forma, por ahora, sólo tendría que preocuparse de lo importante

[Karin, no importa como, pero adelanta la consulta a mañana por la mañana, no le digas a nadie más en el instituto, cerca de las siete estaría bien]

·····

-Usagi... este peluche... no sé porque pero... siento como si...- sonrió levemente viendo como el albino parecía muy interesado en el conejo. Internamente sabía que después de ese accidente nada volvería a ser como antes, incluso cuando estuvo en prisión, siempre mantuvo la esperanza de saber que estaba vivo, y en cierta forma, debía de medirse siempre, no podía volverse a permitir lo mismo que siempre le pasaba

-Sólo deseo que lo conserves- sin ser verdaderamente consciente recuerdos de el incendio vinieron a su mente, suprimió ese impulso que sentía apretando sus manos, no debía, no ahora -Debo marcharme-

-¡Espera un momento!- justo cuando se dio la vuelta su brazo fue sujetado con fuerza, incluso para ser un doncel, su fuerza era incluso más que la de un chico común -¿Qué tiene que ver este conejo conmigo?, ¿por qué lo tenías tú?, y será mejor que no me ignores porque odio que lo hagan- internamente pensó que era tan típico para alguien de su temperamento, pero sin mucho esfuerzo logro zafarse de el agarre y seguir caminando, no sin antes susurrar

-Pronto, muy pronto lo sabrás... sólo dame tiempo-

Suspiro una ves más leyendo una nota que había llegado del hospital psiquiátrico en donde lo habían internado, conocía para que, nuevamente tendría que ir a que verificaran su estado. Aunque lo comprendía, después de todo, no podían permitir dejar salir a un criminal con problemas

Entendía su condición, y no era normal, ya que muchas personas no son capaces de aceptar que son bipolares, pero aceptarlo, sólo le hacía sentir aún más débil, no ser capaz de controlarse, de no ser consciente de sus actos... de poder lastimar a más personas, ya no quería eso

-¡Juugo!- no hizo falta ni si quiera levantar la mirada, puesto que rápidamente ya tenía a su psicólogo favorito, protector y mejor amigo sonriéndole con amabilidad como siempre que él llegaba a ese lugar -Cuanto tiempo ah sido, veo has crecido tanto-

-Kimimaro-

·····

Suspiro una vez mas subiendo su cuello y colocándose una gorra junto a una sudadera, lo que verdaderamente quería evitar era que lo descubrieran caminando dentro de el hospital directo a el consultorio de maternidad. Sentía tanta vergüenza... y algo de bochorno al ver a todas esas personas embarazadas o con hijos cruzándose por los pasillos, comenzaba a sentir algo de calor y sofocamiento. Enfoco la vista a una enfermera muy pulcra vestida de un impecable blanco con una linda flor de papel adornando sus azulinos cabellos recogidos, muy hermosa a decir verdad. Intento lucir despreocupado y camino hacía el mesón en donde estaba dispuesto a preguntar por el padre de su amiga, aunque claro, también para echarle una miradita

-Preciosa, me estaba preguntando si_...-

-Pasillo tres cubículo cinco, el doctor Nagato le esta esperando. Siguiente- se descoloco viendo incrédulo a la mujer mientras esta seguía anotando cosas en una libreta, otra puñalada a su orgullo.

Tcheo molesto la lengua metiendo con brusquedad las manos en su sudadera, comenzando a caminar al tal cubículo, quería que todo aquello terminara rápido. Como siempre entro sin tocar y se sentó de mala gana en la silla frente al escritorio. Aunque no se esperaba ver al tan famoso “papi” de su amiga luciendo tan tranquilo aún cuando él había entrado de esa manera

-Veo que ya has llegado, ¿Suigetsu no?. Mi hija ya me ah informado sobre la situación, y antes que nada me gustaría que respondieras este formulario mientras te hago algunas preguntas- miro fastidiado la hoja que le tendía y sin mas remedio comenzó a contestar, eran preguntas rutinarias, que si nombre, número de teléfono, edad, etc -Según tengo entendido, hace algunos días te enteraste de tu condición-

-Espere, espere, espere. Lo que yo quiero es saber qué mierda me está sucediendo, hace sólo cinco malditos días me enteré de que podía engendrar y creame que no fue nada bonito. Así que limitese a preguntar y ya- se sentía levemente incomodo ya que ese hombre no le apartaba la mirada de encima, ¡parecía que ni si quiera parpadeaba!, y tenía unos ojos muy extraños

-Bien, Suigetsu, comenzaré con preguntarte sobre tu salud, ¿has sentido algún dolor o síntoma fuera de lo normal?-

-¿Síntoma?... hum, además de el vómito del otro día nada fuera de lo común, ¿qué tiene que ver eso?- pregunto confundido notando como el hombre anotaba en una hoja para luego mirarle nuevamente

-Ya veo, si no hay síntomas delatadores, supongo que tendré que hacerte una prueba de sangre- mientras aquel hombre le sacaba la sangre se puso a pensar internamente si estaba bien con aquello. Quizás, si hubiera sabido de que era doncel se hubiera cuidado más, incluso sabría algo de el tema, pero lo único que sabía era que los donceles eran personas capaces de concebir y que eran muy afeminados, punto, y que él supiera no era afeminado ni tenía cuerpo de mujer, parecía hombre por dentro y por fuera -Dentro de quince minutos estará listo, puedes salir si lo deseas- dudó un momento, pero no tenía a nadie a quien mas preguntarle, así que con todo su orgullo tragado, susurro una pregunta que el otro no logró entender muy bien -¿Qué has dicho?-

-Tch... que si... ¿existen donceles que no parezcan... donceles?- el doctor le miro el silencio para luego asentir y volver a sentarse

-Verás, antes muy pocas personas lo sabían, los donceles no fueron creados por la ciencia, la propia naturaleza decidió que era lo mejor, podría decirse que nacieron de la evolución humana. Supongo que entiendo un poco tu situación, hace mucho tiempo yo no sabía que era doncel- miro casi atónito al hombre sentado frente a él, ¡tenía por seguro que era hombre!, tenía el cabello corto, casi como él y tenía una voz gruesa, además su figura no era para nada afeminada, no podía creer que fuera un doncel -Karin nació casi como descuido, por suerte la familia de Yahiko no tenía problemas y mi familia no era perjuiciosa. Aún así fue muy duro, y en el transcurso de mi vida conocí a muchos donceles que tampoco sabían eso, eso es porque a algunos donceles las hormonas no se producen con mayor frecuencia y no se sienten como donceles sino como hombres, el nivel de testosterona es levemente más similar al de un hombre- se mantuvo en silencio analizando la información en su mente. Suspiro una vez más y miro a una ventana abierta intentando tranquilizar un poco su mente -¿Sucede algo?-

-Yo... la verdad, no sé qué es lo que soy, siempre pensé que era un hombre, nunca vi nada raro en mi cuerpo ni algo similar, y ahora con todo esto...- dejo la frase incompleta escuchando como el doctor suspiraba y se cruzaba de brazos ya conociendo la situación, después de todo, él también pensaba igual

-Haré un análisis con la muestra de sangre, te quitaré esa duda ya-

Notas finales:

¡Muchas gracias a todos, respondere en cuanto pueda ^u^!


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