"Hey Jonghyun, ¿vienes?" Kyuhyun gritó desde abajo, apoyado en la puerta de su habitación del hotel.
Jonghyun corrió escaleras abajo, abrochándose la camisa blanca en el camino.
Iban a un bar. Sodam había visto uno cerca hace unas horas.
Jonghyun dudo al principio, pero ya que los otros dos iban y él no quería quedarse en el hotel solo, decidió ir al final. Salieron del hotel, dejando las llaves a la recepcionista para dirigirse al bar.
Kyuhyun y Jonghyun de inmediato fueron a buscar algo de beber, dejando a Sodam con un mar de gente en la pista de baile.
Habían algunos cachondos mirando a mujeres bailando pole dance en ropa interior en la parte posterior de la barra.
De inmediato llamó la atención de Kyuhyun, y Jonghyun tuvo que recordarse que tenía un novio increíble, por lo tanto, mejor que no se atreva a permitir que esas putas lo seduzcan.
Jonghyun era bi, decir que no estaba incómodo por el baile de las mujeres sería una completa mentira.
Hey, un hombre siempre será un hombre.
Como los fieles novios que eran, decidieron permanecer en el bar y la pista de baile, sin acercarse más a las chicas.
"Maldita sea, ¿qué estamos haciendo aquí si ni siquiera se nos permite hacer algo sin sentirnos culpables?” Kyuhyun se quejó, tomando otra copa de licor.
Jonghyun solo resopló, sorbiendo lentamente su propia bebida.
De repente, una chica rubia se acercó a ellos. Llevaba un par de pantalones cortos muy cortos y una camisa blanca con cuello en V que dejaba ver su escote, inclinándose a propósito para dar a los jóvenes una buena vista mientras les decía algo seductoramente. De cualquier manera, no podían entender una sola mierda de lo que estaba tratando de decirles.
La cara de Kyuhyun se sonrojó, corriendo rápidamente a otra parte del club, dejando a su amigo a solas con la chica.
Jonghyun sonrió amistoso, rompiendo la mirada de sus senos para hacerle saber que él no estaba interesado.
La chica empezó a decir algo en inglés, dejándolo completamente sorprendido, porque no entendía ni una mierda de Inglés.
Él negó con la cabeza y quiso alejarse cuando la chica lo empujó hacia uno de los taburetes, y sentándose entre sus piernas. Los ojos de
Jonghyun inmediatamente cayeron a su escote, ya que tenía una vista perfecta de lo que había dentro.
Tragó saliva, empujándola débilmente pero ella no se movió.
Desvió la mirada, buscando desesperadamente a su hermana o a Kyuhyun para que lo ayudaran a salir de esta situación embarazosa, pero la chica era persistente.
Ella le susurró algo al oído.
Lo único que pasaba por su cabeza era la manera de deshacerse de ella sin ser descortés.
No quería engañar a Kibum, su dulce y lindo novio quien lo esperaba en Corea y a quien extrañaba a muerte.
Él ni siquiera sabía lo que estaba pasando cuando la chica pego sus labios contra los suyos.
Sus gruesos labios se sentían pegajosos y asquerosos.
Quería retroceder, quiso empujarla de su regazo, quería llamar Kibum para escuchar su voz y ver su cara bonita. Pero diablos, esta chica era una experta.
No sentía las chispas cuando ella apretaba sus caderas contra las suyas pero se sentía bien. Se sentía diferente a Kibum.
La lujuria era algo diferente al amor, y esto era pura lujuria, sin chispas de amor incluidas.
No quería ser infiel pero estaba demasiado confundido en este momento, y era demasiado tarde.
La chica saltó de su regazo y lo jaló a una de las habitaciones desocupadas. Él hizo un último intento en buscar a su hermana o amigo, pero fue en vano. Tenía el pelo revuelto y la mayoría de los botones de su camisa estaban desabrochados. La chica lo llevó dentro, tirando de su camiseta para continuar desvistiéndolo.
Jonghyun sabía desde el principio que ir a un club era una mala idea.
Cerró los ojos, tratando de ahogar todos sus pensamientos lujuriosos, pero nada funcionó.
Todos sus pensamientos racionales volaron por la ventana cuando la rubia se quitó los pantalones cortos, quedando en ropa interior.
Esto estaba mal.
La joven lo empujó contra la pared, tomando sus manos para llevarlas al gancho de su sostén.
Jonghyun no se movió y en su lugar la empujó hacia la cama. Salió algo Inglés de su boca, pero no le hizo caso.
Su piel se sentía diferente.
No había un pecho plano presionando contra el suyo, no había piernas hermosas envueltas alrededor de sus caderas, no había labios acorazonados presionando en su cuello.
Se sentía tan extraño, demasiado extraño.
Lo estaba haciendo con una desconocida cuando tenía la más perfecta y bella persona en el mundo que lo esperaba a miles de kilómetros de distancia.
¿Quería reemplazar a su hermoso novio por alguien que probablemente hace este tipo de cosas todas las noches? Trató de pensar en otras cosas que una chica rubia retorciéndose debajo de él, trató de pensar en Kibum. ¿Por qué estaba aún haciendo esto? ¿Por qué no se detiene?
Kibum tenía mucho más que ofrecer, mucho más para dar. Él la miró y examinó su cuerpo y algo hizo clic en su mente. ¿Qué demonios estaba haciendo?
Esta persona... debajo de él era tan diferente de la persona que normalmente estaría en esa posición.
Era una chica. Ni siquiera una bonita.
Enormes tetas, piernas cortas, sus brazos se sentían diferentes alrededor de su cintura y apenas podía levantarla de la cama.
Esto no era lo que había planeado, en absoluto. No quería engañar a Kibum, él no quería verlo triste y definitivamente no quería ser el quien le haga llorar.
Rápidamente retiró las manos de ese cuerpo como si tuviera alguna enfermedad contagiosa, mirándola con asco.
Ella lo miró confundida
"¿Qué pasa?"
Él no se molestó en contestar y se apartó de la cama.
Ella se sentó, enviándole a Jonghyun una mirada frustrada.
¿Estaba capacitado? Sí.
¿Estaba dispuesto? Sí.
¿Estaba Kibum? No.
"Joder" Maldijo, abotonándose apresuradamente la camisa. La joven se puso de pie, acercándose con un balanceo de caderas.
Justo cuando estaba cerca, jonghyun abrió la puerta para salir de inmediato.
Se sentía enfermo, se sentía mal, se sentía disgustado.
¿Cómo pudo hacer algo así? ¿Cómo pudo serle infiel a la persona más importante en su vida?
Sintió un escalofrío a través de su cuerpo, la extraña sensación de manos extranjeras que no eran de ninguna manera tan suave como las de su novio.
Trató desesperadamente de deshacerse del brillo pegajoso en su mejilla.
Necesitaba a su amado en este momento, él estaba tan confundido.
Jonghyun fue en busca de su hermana, encontrándola en la pista de baile con un chico. Después de muchos intentos tratando de decirle que ya regresaría al hotel, ella finalmente entendió.
Cuando salió al aire fresco, todo lo que hizo fue tomar una respiración profunda y despejar su mente de todas sus repugnantes acciones.
No pasó mucho tiempo para que estuviera en su habitación, quitándose rápidamente la ropa para entrar en la ducha. Él empezó a frotar su cuerpo, deseando desesperadamente de deshacerse del sudor y brillo de labios y todo todo todo lo que le recordaba de lo que había sucedido.
Ni siquiera tuvo el valor de mirarse en el espejo cuando termino, salió corriendo del baño y rápidamente se puso ropa cómoda.
¿Cómo podría?
Incluso Kyuhyun quien era tan recto como un palo tenía la fuerza para ignorar a todas esas chicas y continuar fiel. No había manera de ocultárselo a Kibum, él tenía que saber. No sabía cuándo ni cómo iba a decirle, pero tenía que hacerlo. Nunca sería capaz de tocar y besar a su novio, sabiendo que había hecho cosas a sus espaldas.
Miró el teléfono que había dejado en su hotel todo el día, olvidando verlo desde el momento en que se despertó esa mañana.
Tenía dos nuevos mensajes de texto. Su corazón empezó a golpear fuertemente contra su caja torácica cuando vio el nombre del remitente.
< Te echo de menossssss :( >
< Eww, la clase es muy aburrida >
Lo siento mucho, Kibum...
< ¿Tienes tiempo para llamar? >
< Estoy un poco ocupado ahora, lo siento :( >
< Bueno. Llámame cuando puedas. Te extraño <3 >
Tanto y tanto
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