Cuando Kibum despertó con el chico más guapo junto a él, quien lo estaba mirando con sus ojos de color marrón oscuro no pudo dejar de sonreír ampliamente.
Miles y miles de pequeñas mariposas vagaron a través de todo su cuerpo, descansando en las flores que florecían dentro de él apenas vio a su novio.
Sus delgados brazos rodearon todo el cuerpo fuerte de Jonghyun, tirando de él más cerca para ser capaz de obtener una mejor vista.
Sus miradas nunca se rompieron, nadando en esos orbes interminables y poco a poco ahogándose lentamente en ellos. Jonghyun puso sus brazos musculosos alrededor del cuerpo desnudo de Kibum, acariciando lentamente su espalda y alzándose para darle un suave beso en los labios. Si esto no era perfecto, entonces que era?
El menor enterró su rostro en el pecho del otro, sonriendo contra la piel. Había algo en Jonghyun ahora que hacía que su corazón latiera más rápido, si eso era posible. La forma en que sus ojos le decían más que mil palabras, la forma en que mostraba todos sus sentimientos. Kibum podía ver mucho cuidado y cariño en sus hermosos ojos.
Lentamente levantó la cabeza para darle un beso por segunda vez, sólo porque quería sentir los labios del otro de nuevo. Sus bocas se movían lentamente una contra otra, pequeñas manos jugando con los cabellos castaños, entrelazando el pelo alrededor de su dedo y suavemente tirando de él.
La manta los estaba cubriendo por debajo de sus cinturas, no queriendo asustar a cualquier residente que entrara descaradamente en la habitación.
Las manos grandes de Jonghyun acariciando la suave piel de la espalda de Kibum. Deslizando suavemente sobre sus hombros, sus dedos pasando ligeramente sobre sus costados suaves y las uñas suavemente raspando su cadera prominente.
El mayor cambio de posiciones quedando sobre el cuerpo de Kibum, admirando su bonito rostro.
"Eres tan hermoso" dijo en voz baja, sólo para que Kibum pudiera oír, y el menor podía decir que lo decía en serio, por la forma en que lo miraba con tanto amor.
El cumplido hizo que su corazón se hinchara, labios estirándose y las esquinas alzándose hacia arriba, mostrando una perfecta fila de dientes. Jonghyun alzo su mano para acariciar la mejilla de su novio.
"Ni siquiera sabes cuánto Te amo" susurró Jonghyun, los labios todavía en contacto.
Kibum sonrió, presionando sus frentes y envolviendo sus brazos alrededor del cuello del otro.
Era la primera vez que Jonghyun se lo decía a la cara e intentó saborear cada palabra, cada sílaba que había salido de sus labios. Quería recordar exactamente esas palabras, la forma en que se formaron en su lengua y cómo le había sonreído después.
Nunca pensó que llegaría el día en el que tendria la sensación de que podría explotar por todo el amor que estaba recibiendo de su novio, su cuerpo caliente sólo para él y el corazón latiendo rápidamente contra su caja torácica, también, sólo para él .
Jonghyun escondió su rostro en el hueco del cuello del otro, inhalando profundamente para recuperar el aroma y respirar de nuevo, su respiración golpeando la piel sensible.
"Además," Jonghyun comenzó, levantando la cabeza del cuello del otro para mirarlo a los ojos "todavía puedes ser amigo de ese tipo Dongwoon" dijo en voz baja, pero Kibum todavía podía oír la leve vacilación, los celos en cada palabra.
Kibum sonrió, inclinando la cabeza para evitar que sus narices chocaran cuando dio un pequeño beso en los labios carnosos.
"Confío en ti" Añadió Jonghyun, susurrando, rozando sus mejillas para enterrar su rostro en el cuello suave otra vez, dejando pequeños besos en el hombro
Ellos seguían siendo los mismos, no se puede simplemente cambiar la personalidad de alguien, pero Kibum sabía que su novio le quería, más que nada en el mundo, por lo que no tenía que preocuparse más.
Kibum besó el hombro del otro, sus manos buscando las del mayor en el colchón y entrelazando suavemente sus dedos.
La piel contra piel se sentía como el cielo y no les importaba quedarse así durante horas, corazones latiendo contra el pecho del otro, demostrando lo que sienten y hacerles saber que estaban latiendo exclusivamente para ellos.
Ellos no se molestaron en separarse durante toda la noche, sólo hasta cuando ya se podían escuchar las ollas y sartenes indicando que la señora Kim estaba haciendo el desayuno. Se levantaron de la cama, besándose otro buen par de minutos, sintiendo el contacto para recordar el cuerpo y el rostro del otro.
Tomaron juntos una ducha rápida y se vistieron, tratando de mantener sus manos fuera del cuerpo del otro cuando llegaron abajo para no asustar a la familia de Jonghyun, y fue la tarea más difícil que tuvieron que pasar.
Sus palmas estaban juntas y sus dedos entrelazados conforme entraban a la cocina para comer lo que la señora Kim había hecho para su familia y Kibum.
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La madre de Jonghyun les regalo una mirada de amor, sonriendo un poco cuando se dio cuenta de sus manos entrelazadas debajo de la mesa. Sodam parecía no saber nada en absoluto, pero los padres de Jonghyun podían decir que algo había sucedió para que estuvieran así.
Cuando Kibum decidió ir a la escuela, a pesar de que era más que tarde, Jonghyun no quería dejarlo ir. Se besaban en la puerta, con los brazos volando alrededor del cuerpo del otro para decirle que no quería que se vaya, apretando su agarre en todo el cuerpo delgado.
El aire frío entro al interior de la casa bastante grande, pero esta vez los padres de Jonghyun no dijeron nada.
Algo grande había sucedido. Pero eso no importaba, la felicidad que su hijo irradiaba era más que suficiente para mantener el calor de su hogar.
Kibum puso las manos sobre el ancho pecho de Jonghyun, tirando un poco hacia atrás como diciendo que realmente tenía que irse, pero Jonghyun disminuyo la distancia entre sus labios una vez más para darle a Kibum uno de sus besos adictivos.
"Te amo" susurró con voz suave, sonando como una bella melodía para los tímpanos del otro.
"Te amo, también" Kibum sonrió, dándole al mayor un último abrazo antes de separarse con mucha fuerza de voluntad.
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Ni siquiera sabía por qué fue al colegio en primer lugar, ya que su mente no estuvo en historia, ni matemáticas, ni Inglés, su mente estaba completa y totalmente bombardeada con pensamientos de cómo había pasado la noche anterior, de Jonghyun diciéndole las más bellas palabras y de lo mucho que amaba a su novio tanto que incluso no sabía cómo explicar sus sentimientos.
El día continuó, sus amigos se dieron cuenta de la ternura y el comportamiento adorable que tenía. Él estaba saltando alrededor como un niño pequeño, hablador como siempre y llevaba una de las más bellas sonrisas.
Cuando las clases terminaron, se dirigió a la tienda de dulces. Su mochila colgada sobre sus hombros.
Abrió la tienda y saludó a otro empleado que acababa de terminar su turno, lanzando su mochila en un rincón detrás del mostrador y aflojándose la corbata un poco. Comenzó a llenar con dulces los tarros que estaban casi vacíos.
Atendió a un par de clientes, hoy no había muchos. La mayoría eran estudiantes, que acababan de regresar del colegio y pasaban por la tienda.
La sonrisa en su rostro seria permanente por lo menos durante el próximo mes.
Cuando todos los clientes se habían ido y él quedó solo, el sonido de la campana por encima de la puerta y una figura haciendo su camino en el interior detuvo su corazón. Miró hacia arriba, viendo a su novio mirándolo fijamente. Él le dedicó una linda sonrisa, mostrando sus adorables hoyuelos causando que Jonghyun se derritiera.
Kibum apoyo sus antebrazos en el mostrador con una sonrisa astuta.
"Lo siento, pero no hay paletas"
FIN