Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Paletas y elogios - JongKey por Bumkey

[Reviews - 171]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Al día siguiente, el misterioso joven se encontraba una vez más en la tienda de dulces, envolviendo sus auriculares alrededor de su iPod. 
Kibum se preguntaba qué tipo de música él escucharía y se rió un poco ante la idea de que fuera hardcore. Se veía tan tranquilo y sereno, que era demasiado gracioso pensar en él como alguien que va a gritar a viejos y gordos que usan delineador.
Kibum empezó a sonreír, era algo que hacía automáticamente cuando veía a un cliente, especialmente a este cliente, e hizo un giro de 180 grados para coger las paletas. Tenía, como cualquier otro día, las dificultades para alcanzarlas, su camisa se levantaba un poco cuando extendía su brazo, y dejaba ver un poco de piel. 
Dejó escapar un pequeño resoplido cuando se dio la vuelta, y pudo jurar que vio un poco de rubor en las mejillas del chico guapo, lo que hizo que se ruborizada el también.

El chico guapo no pudo salir de la tienda con mayor rapidez. 
Un par de días después, el muchacho estaba allí de nuevo para comprar una paleta. 

Kibum había llegado a la plataforma, pero se encontró con una caja vacía de paletas. 
Rápidamente se dirigió a la sala de almacenamiento, pero no pudo encontrar los dulces.
Volvió a entrar en la tienda con una pequeña mueca en sus labios, y se disculpó con el apuesto extraño.
El cliente no se movió, en su lugar se mantuvo mirando los labios de Kibum. El más joven frunció el ceño un poco, se deshizo del puchero que el apuesto extraño claramente encontró lindo. 

"Quiere otro sabor? “ 

En silencio desvió la mirada negando con la cabeza 

"No, está bien", - Al día siguiente, el muchacho fue allí de nuevo por su paleta y por suerte había un nuevo tarro de estas. 

Hubo un sonido "ding 'cuando Kibum estaba poniendo algunos tarros llenos de caramelos en un estante delante del mostrador.
Se volvió hacia el muchacho para saludarlo y lo vio mirando sus piernas.
No estaba seguro de si estaba juzgando sus pantalones o lo estaba comiendo con los ojos.
Decidió regresar rápidamente a donde pertenecía, detrás del mostrador.

El de piel pálida estaba harto de tratar de averiguar lo que estaba tratando de decirle. No es fácil lidiar todos los días con alguien que habla con los ojos, así que decidió poner fin a todo esto.

"Usted es un poco raro, ¿lo sabes?" 

Mentalmente se abofeteó a sí mismo por ser tan audaz y directo.
¿Por qué no iniciaste la conversación con "Hey, soy Kibum, cómo te llamas?" como cualquier otra persona decente haría.

Vio como los ojos de su cliente se abrían un poco por la sorpresa y se ablandaban de nuevo cuando vio la pequeña sonrisa en los labios de Kibum. 

"Y tu eres femenino," respondió, su voz suave flotaba por el aire llegando a los oídos de Kibum.

¿Realmente acaba de decir que soy femenino? ¿Eso es un cumplido o...
Miró al chico guapo con una mirada inquisitiva, pero decidió darse la vuelta para conseguir su paleta. 

"Deberías ponerlos en un estante más bajo," Oyó otro murmullo muy suavemente y Kibum hizo un pequeño baile de victoria en su cabeza. 
¿Realmente acaba de tener éxito en hacer que el chico guapo hablara con él?

Él sólo se rió ligeramente, agarro la paleta y se dio la vuelta, la entregó al muchacho quien estaba mirando su pecho. 
Sentía náuseas cada vez que el muchacho lo miraba de esa manera. 

"Soy Kibum por cierto," Se presentó, haciendo un intento de deshacerse de la tensión incómoda. 

Al igual que cualquier otra persona lo haría, contestarías diciéndole su nombre, pero se limitó a decir: "Hola,”

¿Cuál es su problema? Ni siquiera sonreía, pero, oh dios miren esos abs ...
El guapo desconocido llevaba una camiseta negra con gráficos llamativos sobre ella, sus brazos musculosos expuestos y santa mierda Kibum no quería imaginar cómo sería su pecho.

"Uh, adiós," le dijo con nerviosismo tirando de la envoltura del dulce mientras miraba directamente a los ojos del otro. 

"sí seguro" respondió Kibum distraídamente.
Kibum levantó un poco la comisura de sus labios, dándole una pequeña sonrisa y dejando caer accidentalmente las monedas al suelo. 

Ambos saltaron un poco ante el sonido, rompiendo el contacto visual. 
El más joven murmuró una disculpa y se agachó a la suelo, queriendo dar un paso atrás, pero en el proceso se golpeó la cabeza contra el borde del mostrador. 

"Ay...", murmuró, frotándose y pudo ver una pequeña sonrisa en los labios del chico guapo.

Kibum no tuvo tiempo de reaccionar, y antes de que pudiera decir algo, el joven ya había desaparecido.

Al día siguiente, el muchacho entró a la tienda alrededor de las 4 pm y los ojos de Kibum se iluminaron de pura alegría al verlo. 
Por desgracia, el muchacho no le devolvió la sonrisa y apenas le dio una pequeña inclinación de cabeza. 

"¿Cómo estás?" Pidió amable, tratando de forzar una sonrisa. El desconocido, si aún se le puede llamar así, sólo se encogió de hombros, "Estas bien, supongo"

Normalmente, cuando la gente actuaba de esa manera con él, él los trataba por igual, pero había algo en ese cliente que hacía que su estómago se aloque por lo que siguió intentando.

"Cuál es tu nombre?" Pidió con la misma sonrisa en sus perfectos labios "Si se puede saber, por supuesto", añadió rápidamente.

"Uh, Jonghyun," Al escuchar su voz, kibum casi se provoca un desmayo.

"Oh," dijo Kibum suavemente, su mirada se desplazó por el cuerpo de Jonghyun cuando notó que llevaba puesto un suéter, por lo tanto, no era capaz de comerse con los ojos esos abdominales.

Jonghyun se aclaró la garganta con torpeza, tratando de romper la atmósfera incómoda. Kibum saltó un poco, dándose cuenta de que aún no le había dado la paleta y rápidamente se dio la vuelta. 

"puede tomar dos de ellas," Le ofreció amablemente, empujando la caja hacia él. 

Los ojos de Jonghyun se abrieron un poco.

"Sólo una está bien" 

"Pero yo quiero que tengas dos" Kibum sonrió cortésmente, empujando la caja un poco más cerca de él. 

"Gracias..." Su voz flotó a través de la tienda de dulces, y Kibum agradeció al joven internamente por hablar en voz tan baja porque su jefe no estaría muy feliz de saber que Kibum regalo una paleta. 

Tomó dos y le dio a Kibum su dinero, metió una paleta en su bolsillo y deshizo el envoltorio de la otra. 

El más joven escribió rápidamente algo en un pequeño trozo de papel y lo entregó junto con su cambio, regalándole una pequeña sonrisa cuando Jonghyun lo miró confundido.

"Adiós," dijo Kibum suavemente, un rubor empezó a colarse en sus mejillas.

"Uh, sí...", fue la única respuesta que obtuvo del chico que se dio la vuelta, en dirección a la puerta. 

Estaba ocupado desplegando el papelito y cuando observó que era el número de teléfono del chico más joven, una pequeña sonrisa apareció en sus labios.
Se dio la vuelta para mirar al chico, y Kibum podría jurar que vio a Jonghyun sonreírle.

Notas finales:

Espero que les haya gustado:)

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).