Kai era un simple adolecente que vivía con su hermano mayor, Luhan. Ambos estaban en casa de sus padres los cuales solían viajar por un mes cuando estaban de aniversario. Luhan estaba en primer año de la universidad y a Kai le faltaban dos años para alcanzar a su hermano. Ambos eran my unidos, le encantaba estar siempre detrás de su perfecto y hermoso hermano mayor.
Todo cambio un verano, cuando Kai accidentalmente vio a Luhan en su cuarto, desnudo, pero no solo. Sehun estaba con el, no habían sido cuidadosos al cerrar la puerta. Luhan estaba debajo de Sehun quien era su novio. Sus hermosos y finos labios estaban hinchados, su cuerpo se arqueaba cada vez que Sehun entraba en su cuerpo.
Kai reprimió las ganas de entrar y detenerlos, pero… le gustaba. Le gustaba ver lo sumiso que era su hermano con una polla en su culo. Algo cambio en su interior, deseaba ser el mismo quien estuviera asi con el mayor. La erección bajo su pantalón creció mas cuando Luhan se puso en cuatro, como alzaba su culo para que su novio lo siguiera follando.
-Mas Sehun… mas. –Le pedia mientras este lo follaba con mas fuerza. Kai no pudo mas, tuvo que salir de ahí, tuvo que encerrarse en su cuarto, desde ese dia las cosas iban a ser diferentes.
Habia pasado una semana desde lo ocurrido, Kai esquivaba a Luhan siempre y eso le dolia a los dos.
-Kai, hermanito por favor… dime que pasa. –Luhan le hablaba a travez de la puerta, sin mas entro y obligó al menor a mirarlo.- Desde hace días que ya no me hablas y cuando te abrazo me apartas, ¿Qué te hice? ¿Puedes explicarme?
-No pasa nada. –Cortó el moreno, se dejó caer en su cama simulando que el mayor no estaba ahí. Pero Luhan no se movió, se sentó a un lado y tomó su mano.-
-Kai, ¿Hice algo mal? –Preguntó con inocencia, esa inocencia que solo el poseía pero a la hora de follar no le servía para nada. ‘Estabas follando con otro’ ‘quiero hacerlo yo’ ‘¿Por qué no me lo pediste a m?’.-
-Luhannie… ¿Amas mucho a Sehun? –Se dignó a preguntar a pesar de querer decir lo que tenia en mente.-
-Claro que lo amo, es muy lindo conmigo, me da besos y me cuida. Es el novio perfecto. –Sonrió al describir al amor de su vida. Según Luhan, en lo que Sehun terminara el colegio y pasara a la universidad, se casarian y se irían a vivir juntos.
-Pero yo también te puedo dar besos. Te cuido y te amo. –Luhan solo sonrió por la palabras del menor y se inclinó para besar su mejilla. Kai se sonrojó y sólo desvió la mirada. ‘Cobarde’ se dijo a sí mismo.-
-Tu eres mi hermanito y también te amo. Ahora sé que estas celoso de mi novio… bobito no debes estarlo. –Le dijo antes de ponerse de pie, salió de la habitación y se fue a la suya.
El beso había tenido replicas en su cuerpo, Kai era conciente que estaba mal desear de esa forma a su hermano, pero era demasiado perfecto. Su sonrisa, esa cara de niño bueno, su cuerpo desnudo, sus gemidos.
-Mierda… -Molesto Kai tuvo que meterse una mano bajo la ropa, su miembro estaba duro, completamente duro. Con la mano lo rodeó y comenzó a masturbarse mientras cerraba los ojos y se imaginaba a su hermano, se mordió el labio al verlo desnudo, sus mejillas sonrojadas. Su cadera se movía de una forma lenta, como si fuera él quien estuviera penetrando al mayor, podía imaginar su calor, ese culo estrellándose contra su pelvis, permitiendo que su duro miembro entrara hasta lo más profundo de su ser.
Kai no era mal dotado, su cuerpo estaba tomando mas anchura, mas sus hombros y sus músculos se podían notar un poco. Su miembro pues, a comparación con otros, pues se tenía fe.
Su mano tomo más velocidad y entre gemidos podía llamar al mayor, hasta que su tormento llego a su fin, terminando por eyacular en su mano.
Sehun y Luhan habían discutido.
Luhan estaba herido.
Sehun lo odiaba.
Dos meses habían pasado cuando ya despedían a sus padres, Luhan sin su sonrisa genuina, Kai con una cara de preocupación. El mayor se fue hacia su habitación, cerró la puerta y se recostó apagando la luz, extrañaba a su novio, se había negado a lo que le pedía, Luhan era reservado. Sehun extrovertido. Ya era de madrugada y sus ojos pesaban, una figura se asomó en la puerta y se acerco a él, estaba oscuro. No veía nada.
De pronto unos labios se apoderaron de los propios, Luhan solo correspondió, sus labios se movían de un lado al otro, absorbían su saliva, su calor. El beso era muy intenso, demasiado y le gustaba. Rodeo su cuello con ambos brazos y lo atrajo mas a él, haciendo que el cuerpo ajeno se recostara sobre el suyo. Luhan abrió un poco las piernas dejando que el otro se acomodara.
Estuvieron de esa forma hasta que ninguno de los dos quedo con aliento.
Ya había amanecido, Kai estaba tumbado boca abajo roncando. Luhan lo miraba con sorpresa, asco, no podía creer que el hombre con el que se había besado era su hermano menor, su hermanito. Luhan solo lloro, dejo que las lagrimas salieran en silencio, Kai entre quejidos se despertó y se dio vuelta, vio al mayor y salto de la cama; en su desesperación se había metido en la habitación del mayor para consolarlo pero los impulsos le ganaron, terminó por besarlo.
-Lu…-Se acercó al mayor pero este se había alejado abruptamente. Kai entendió que el mayor estaba en shock.- Lo siento…
-No te vuelvas a acercar a mí, en tu vida me vuelvas a tocar. –Con los ojos inyectados de rabia y dolor se metió en el baño.
Kai salió de la habitación y fue hacia la propia, sabía que su hermano lo odiaba. Tomó una mochila y guardó algunas de sus pertenencias, llamó a su amigo Chen para que lo pasara a buscar. Al cabo de un rato ya había abandonado su casa, lo que había hecho no tenia perdón, era incesto, era malo y asqueroso para los ojos de los demás.
-¿Me vas a explicar que ocurrió? –Pregunto Chen mientras manejaba con tranquilidad hacia su casa.- Tú y Lu jamás habían discutido, siempre los vi unidos.
-No lo entenderías Chen. –Kai solo suspiro y se acomodó en el asiento del copiloto, llevó una mano hacia sus labios y recordó ese momento en que se habían fundido con los de su hermano. Era muy extraña esa sensación, pero le gustaba.
Desde ese día, no habían vuelto a hablar, Luhan no llamaba a Kai, ni un mensaje ni nada. Todo había pasado muy rápido y eso no le gustaba.