La conexión que siente con Naruto es algo que nunca imagino poder tener y es por eso que no tiene miedo de abrirle su corazón y mostrarle sus debilidades. Le cuenta cada pequeño aspecto de su vida, cada perdida que sufrió que lo marco profundamente haciendo que se cerrara más en sí mismo.
Mientras juega con los cabellos del joven le cuenta sobre la pérdida de su padre, quien se suicidó porque no podía soportar la carga del fracaso y como eso hizo que su (errada) visión de “como debe ser un ninja” se forjara por los años que siguieron –le murmura bajito como por muchos años no fue capaz de verse a sí mismo en un espejo porque cada vez se parecía más a su padre-
Que formo el equipo siete con Obito, Rin y Minato-sensei – Se ríe cuando compara a Obito con Naruto cuando este tenía 12, Naruto también ríe diciendo que suena mucho a él cuándo tenía esa edad-
Le cuenta de cómo las palabras de Obito cambiaron lo que el creí era lo correcto para un ninja, pero en esa misma misión cuando se había sentido tan cerca de Obito este murió dejándole la tarea de cuidar a Rin y a la vez su ojo como un presente por su cumpleaños -también le explica que esa es la razón por la que no celebra su cumpleaños-
Con frustración en su voz le dice que no fue capaz de proteger a Rin –a pesar de que lo intento- ; que la muchacha se atravesó a si misma con su chidori porque habían sellado a sanbi en ella. Que luego de ese incidente despertaba todos los días temblando y con la necesidad de lavar sus manos como si aún estuvieran manchadas de sangre
Minato, su ex-sensei en su posición de Hokage y en una muestra de su preocupación por él le pide que forme parte de su anbu siendo su mano derecha desde las sombras y no puede negarse. Anbu sacó a relucir su potencial como ninja pero también le confirmo que sus manos solo servían para arrebatar vidas a favor de proteger otras
Le cuenta como Minato le pidió que cuidara de Kushina cuando estaba esperándolo a él, las estrepitosas risas de kushina,las constantes visitas de Jiraiya al ahijado que aún estaba en el vientre de la mujer pelirroja, de como Minato insistía que el entrara a casa para comer con ellos a pesar de sus constantes negativas y ceño fruncido.
Se disculpa con el rubio, dios es tan desconsiderado, está hablando de todas las personas que Naruto también perdió. Naruto niega con la cabeza y le dice que no se preocupe
Como cuando minato murió el siguió en ANBU, que se ganó el mote de “Kakashi el sanguinario” que luego de unos años el tercero lo asigno a cuidar mocosos, que nunca aprobó a ningún grupo hasta el Grupo 7 del que formaba parte el rubio chico que había sido su alumno y que ahora era su sol.
Naruto ríe por el apodo y el pecho de kakashi se siente cálido. Naruto toma sus manos y lo besa en los nudillos
“Estas manos me salvaron el culo muchas veces” –ríe recordando cada vez que Kakashi lo salvo de los errores que cometía debido a su impulsividad- “Estas manos tienen la manía de alborotar mi cabello”– Naruto suspira mientras deposita un beso en la palma de sus manos- “Estas manos con cada toque me gritan lo mucho que me amas”
Acaricia el rostro del chico paseando su pulgar sobre los suaves labios del rubio. Dios, es tan afortunado de tenerlo.
“Creo que yo también debería contarte de mí” –le dice Naruto mientras se sienta frente a él- “De mostrarte esa parte de mí que nunca he compartido con nadie”
Se sorprende, porque él creía que el muchacho era como un libro abierto respecto a sus emociones
“Me siento tan incómodo cuando la gente ahora habla de mi como el héroe de la aldea o el chico que obro un milagro. La misma gente que me odiaba hace menos de un mes, la misma gente que me gritaba monstruo cuando yo apenas tenía la noción de lo que esas palabras significaban” – Las manos de Naruto se tensan en el agarre de su ropa mientras habla- “Todos esos ojos mirándome hacia abajo, haciéndome sentir tan insignificante”
“Me transforme en un bufón” –dice con una sonrisa amarga en el rostro – “Si me iban a odiar entonces quería darles una razón para que lo hicieran pero aun así ellos seguían mirándome mal”
“Odio, eso era todo lo que sentía. Siento que fue mi motor en algún momento, fue mi odio el que me permitió vivir y no morir de la soledad asfixiante en la que estaba rodeado” –suspira mientras lo mira a los ojos- “Dios, tanta soledad que ahora lo pienso y me duele”
“Pero no sé en qué parte del camino, ese odio se transformó en necesidad de demostrar lo que yo valía. Supongo que al ver a ji-chan, él era un hombre amable que amaba y velaba por cada persona de la aldea, inclusive a mí que era un mocoso revoltoso, con el empezó mi sueño de ser hokage” – Naruto le sonríe- “Yo sabía que era pura palabrería, no tenía las habilidades de ninguna manera pero si yo no lo creía nadie lo haría”
“Pero todo mejoro cuando Iruka-sensei me reconoció como un ninja de esta aldea. Y las cosas se pusieron aún mejor cuando forme parte del equipo siete con un Sensei que siempre llegaba tarde, con sakura-chan y sasuke. Ya no estaba solo y cada vez llegaba más gente a mi vida que llenaba ese vacío con amor y confianza como Ero-Sennin y Tsunade-baachan” – La sonrisa que el muchacho le regala lo hace sentir tan feliz de poder conocerlo-
“Luego Sasuke se fue y yo no pude detenerlo porque era jodidamente débil” – la mueca en el rostro de Naruto es siempre la misma cuando habla del uchiha, culpabilidad- “Es como si la historia estuviera condenada a repetirse. Ero- sennin no pudo detener a Orochimaru y yo no pude detener a sasuke”
“Naruto” –es lo que alcanza a susurrar antes de que el chico siga hablando.
“Pero ahora soy más fuerte. Mi maestro me confió su camino ninja y me eligió como el niño de la profecía y yo estoy orgulloso de eso” – Lo toma las manos de naruto entre las suyas y lo atrae más cerca rodeándolo en un abrazo-
“Eres tan maravilloso, naruto” – le susurra en el oído mientras sus manos le acarician la espalda-
“Kakashi” –susurra y lo toma del rostro para atraerlo cerca, besándolo en los labios con tanta ternura. Ellos se comprenden mutuamente, ambos han vivido con el dolor, la soledad y ahora se tienen para reconfortarse, se tenían incluso antes de saberlo.