Salió del cuarto de baño, ya duchado y cambiado con ropa cómoda. Se secaba el cabello con una toalla y colocaba sus chanclas de baño en su lugar. Se sintió liberado y un poco más despierto. Anoche se durmió después de las 5 de la mañana, entre despidiendo a todos de la fiesta después del alboroto y recogiendo el desastre en su casa.
Si bien nunca le contaron nada sobre el "ex novio" de SeokJin y la gravedad que hubiese tenido si este lo hubiera visto. Le había quedado claro cuánto odio le tenían los amigos del pelinegro. Solo imaginen al punto de agarrarse a golpes contra él. Hasta Ho Seok se había llevado golpes por defender a Taehyung quien termino con la nariz sangrando y JungKook con la boca que escupía sangre. Si no hubiese sido por Yoongi y Jimin, habría terminado la policía en su casa. Yoongi teniendo el don de controlar a un J-hope enojado y Jimin pidiéndole ayuda a gritos desde fuera de su habitación para que corriera a todos de la fiesta.
Después de arruinar la fiesta de Ho Seok, con las caras largas y golpeadas se marcharon, dejando a Jin en su habitación placenteramente dormido.
Se paró justo en frente de su cama, sin dejar de secarse el cabello y observo al de ojos avellana durmiendo. Lo de anoche, había sido simplemente mágico para el moreno. La forma de entregarse el uno al otro y cada palabra dicha. La experiencia más hermosa de su vida. Eso le provocaba el pelinegro y muchas cosas más, que pudo llegar a preguntarse si era amor, si era su alma gemela, que lo quería. Sobre todo que por fin había sido capaz de sentir amor.
Pero, por otro lado estaba las circunstancias en que lo habían hecho. El pelinegro estaba completamente borracho y él; más cuerdo no hizo nada para evitarlo. Era el remordimiento y culpa era lo que sentía ahora. Tenía miedo de como reaccionaria Seok Jin. Si le correspondía o solo lo lastimaría. Más bien, que los dos terminaran lastimados. No podría con eso. No se perdonaría hacer sufrir al de ojos avellana.
Soltó un gran suspiro y dejo caer la toalla en su escritorio para bajar por agua mineral y una pastilla de dolor, por si el pelinegro despertaba.
En la cocina, sirvió el agua en un vaso y tomo del botiquín un paracetamol. Cuando regreso el agua al refrigerador, se encontró con una nota. Era de su madre, se había ido temprano al trabajo. Gracias al cielo que había llegado después de todo el alboroto anoche.
El timbre de la casa se escuchó, dejo la nota donde estaba y grito desde la cocina que pasaran. Seguramente eran los amigos del pelinegro que quedaron en venir por la por la mañana.
Tomo el vaso con el agua y la pastilla para subir de nuevo a su habitación. Vio entrar a los menores cuando ya estaba en el último escalón y les grito que bajaría en un momento.
Se encontró con un Seok Jin removiéndose en su cama. Se quedó quieto frente a él, esperando que despertara por completo.
El pelinegro se movía levemente por la cama con los ojos bien cerrados como si le doliera algo. Era su cabeza, pues poso sus dos manos en ella y balbuceo quejándose. Abrió sus ojos con dificultad, la poca luz que sentía le molestaba demasiado. Pronto sintió un sentimiento de adrenalina al oler ese ya reconocido aroma y sentir las sabanas diferentes a las suyas. Se tallo los ojos y se sentó de sopetón. Entonces se volvió quejar de su cabeza y agacho el rostro dándose cuenta que su polera la tenía levantada hasta su pecho. Ahora abrió los ojos más de lo normal e ignoro la molestia de la luz.
Con miedo y aun el sentimiento de adrenalina, se fijó bajo las sabanas. Definitivamente estaba desudo de la cintura para abajo en la cama de Nam Joon. Sintió un nudo en la garganta de inmediato. Lo que le dolía era que solo tenía escenas borrosas de lo que había pasado y se odio por ser tan estúpido. Se suponía que no se entregaría otra vez y seria frio con él. Todo se fue a la mierda. Se tapó el rostro con ambas manos y comenzó a sollozar.
-Jin...- le llamo el rapero quien vio todas las acciones anteriores del pelinegro. El cual no se había percatado de su presencia.
Detuvo sus sollozos y descubrió su rostro para ver al moreno con un vaso y pastilla en mano. Se miraron por largos segundos sin decir nada, hasta que Seok Jin rompió en llanto.
El rubio suspiro pesadamente. Su corazón no había dolido tanto. Ver al pelinegro llorando era tan cruel. Se acercó a él por un lado de la cama y le ofreció el agua.
-No quiero- se limpió las lágrimas.
-No llores, por favor- dejo las cosas en la mesita junto a la cama.
-Lo arruinamos todo- alzó la voz y derramo más lágrimas. El moreno agacho el rostro. –Soy un imbécil- dijo y busco su ropa sobre la cama.
El rapero se dirigió al buro donde había dejado su ropa y se la dio. El de ojos avellana se la arrebato lo más rápido que pudo.
-Date la vuelta- le ordeno aun llorando. El rubio no dijo nada y le dio la espalda.
Comenzó a vestirse y encontró otra razón por llorar, su cuerpo dolía demasiado. Lo hizo lo más rápido que su dolor le permitiera y busco sus zapatos del lado contrario de la cama de donde estaba el moreno.
El rapero se dio la vuelta de nuevo asegurándose primero de que ya hubiese terminado. Jin, cuando termino se dirigió a la puerta para marcharse sin ni siquiera decirle algo a Nam Joon. Este corrió a él para evitar que se fuera y lo paro colocándose frente a él evitándole el paso.
-Me quiero ir NamJoon- le dijo sin mirarle.
-Lo lamento ¿sí?-
-¿No entiendes? Echamos a perder todo, ¡Todo NamJoon!- le alzo de nuevo la voz y comenzó a llorar más.
-¿Recuerdas algo de lo que hicimos ayer?- le pregunto retándolo con la mirada.
-Si, a eso me refiero-
-¿Me vas a decir que no sentiste nada?- le levanto la barbilla para que lo viera a los ojos.
-Estaba borracho, y aun así me dejaste hacerlo- le dijo con la voz cada vez más ronca y los ojos llenos de lágrimas.
-Entonces nada de lo que me dijiste fue verdad- hablo más serio sin despegarle la mirada.
-Dije muchas cosas-
-Dijiste que me querías, que me extrañabas. Elegiste estar conmigo, fuiste quien comenzó pidiéndome un beso- ahora el moreno se sentía dolido.
El pelinegro le quito la mano de la barbilla. -¡Estaba borracho! Se suponía que no debía pasar. Se suponía que no debía entregarme, se suponía que la historia no se debía repetir- le decía desesperado y soltó todo el llanto con dolor al decir lo último.
El rapero bufo. -¿De qué historia hablas?-
No le respondido y le saco la vuelta para salir de la habitación ignorando su llamado cuando bajaba las escaleras. Se detuvo cuando llego a la sala y vio a sus amigos y a los raperos amigos del rubio sentados.
-¿Estas bien hyung?- dijo Kook quien fue el primero en ponerse de pie para dirigirse al pelinegro.
El mayor intento detener su llanto y vio a su amigo. Tenía la boca rota y una bandita blanca lo cubría.
-¿Qué te paso?- pregunto con la voz mormada.
El de rasgos parecidos a un conejo, se quedó callado y bajo el rostro. Seok Jin busco respuesta en los ojos de sus otros dos amigos, pero estos también le desviaron la mirada.
-¿Qué fue lo que paso Taehyung?- se dirigió al otro quien también tenía una bandita pero en su nariz. Este le sostuvo la mirada pero no le respondió. El pelinegro comenzaba a sentir miedo.
-Hey- se escuchó la voz del moreno de tras suyo que lo tomo por el brazo para darle vuelta y lo mirase. –Perdón si te lastime-
El pelinegro no le dijo nada y se soltó de su agarre para marcharse de la casa. Los universitario menores se miraron unos a los otros junto con sus respectivas parejas y se marcharon de tras del mayor sin decir nada también.
-Que mierda- susurro el rubio llevándose ambas manos a la nuca en gesto de frustración.
Los otros dos que quedaron, se vieron luchando con la mirada por quien diría la primera palabra.
-Escuchamos gritos, ¿Qué paso?- hablo Ho Seok ante la mirada amenazante del otro rapero más bajo.
-Eche a perder todo con Seok Jin- respondió mientras se sentaba junto a sus amigos.
-Estaba llorando- susurro Suga.
-Lo menos que quería era lastimarlo- reposo su rostro en sus manos.
-¿Qué paso anoche?-
Suspiro y vio al techo dejando caer su cuerpo en el sofá. –Hicimos el amor- los otros se miraron con los ojos bien abiertos.
-Estas de joda NamJoon, ¿Qué no estaba borracho?- dijo Yoongi asombrado.
-Si, por eso lo arruine todo. Pero es que... él estaba tan cariñoso que incluso me pido que le diera un beso. Soy un idiota-
-Vale, que no lo obligaste a nada- dijo casi aliviado Hope.
-Por supuesto que no. No soy un violador- dijo ya muy frustrado. –No logro entenderlo-
-Lo de anoche pudo tener mucho que ver- dijo un pensativo Suga.
-Pero no le dije nada-
Los otros dos se vieron de nuevo. Para esas alturas ellos ya sabían un poco de la historia de Seok Jin después de que sus respectivos novios les contaran anoche después del escándalo.
-Ustedes saben algo ¿verdad? Malos amigos- reclamo el moreno al percatarse de las miradas que se echaban los raperos.
-Mira Nam, por lo que sabemos el pendejo ese que agarramos a golpes anoche, fue un hijo de puta con SeokJin cuando andaban de novios- comento Ho Seok.
-De la gravedad en la que te hablamos es tan alta que Taehyung, Kook y Jimin lo odian a muerte- dijo esta vez el de piel más blanca.
-De eso pude darme cuenta. Pero, ¿es por eso que Seok Jin es tan inseguro?-
-Si. Tae me conto que Jin cayó en una depresión tan grande que hasta tuvo problemas alimenticios-
-Ese tipo lo trataba de lo peor, de esos de doble cara y patán-
El moreno se quedó pensando en las palabras que hace un momento lo había dicho el de ojos avellana. También cuando lloro en su hombro al recordar esa relación. Ahora comenzaba a entenderlo.
-Por eso me dijo que no quería que la historia se repitiera- dijo bajito, como diciéndoselo a el mismo. –Demonios, que estúpido soy- soltó mas alto volviendo a cubrir su rostro frustrado.
-Deberías arreglar las cosas-
-Dijo que lo arruinamos, no le tomaba la importancia a lo que le dije. Y dios, estaba llorando tanto- recordó su rostro lleno de lágrimas.
***
Los tres universitarios corrieron para alcanzar al pelinegro quien luchaba por correr también, pero su cuerpo simplemente no lo dejaba. Se sentía tan cansado, que le pesaba en cada paso. De su rostro caían más lagrimas que le nublaban la vista que no logro avanzar mucho.
-¡Espera hyung!- le grito Kook y logro alcanzarlo tomándolo del hombro. –Llamemos a un uber, no llegaras ni a la esquina en ese estado- lo sacudió un poco para que le prestara atención. Este solo se resignó y sollozo.
-Yo lo llamo- dijo Taehyung quien llegó poco después junto con Jimin.
-¿Me van a decir porque están así?- pregunto asechándolos con los ojos llenos de lágrimas.
El pelinegro menor suspiro. –Cuando estemos en tu casa, hyung-
-No iré a ningún lado con ustedes si no me dicen- amenazo con la voz ronca.
Taehyung dejo su celular y solo le asintió a su amigo dándole a entender que se lo podía decir, sabía que cuando Jin se pone de terco no hay manera de convencerlo. Jimin vio a Kook con los ojos llenos de miedo. Sabía que saldría mal, pero de todos modos se lo tenían que decir.
-Prométeme que te vas a tranquilizar-
-Dilo de una vez- ignoro su comentario y hablo desesperado. Kook bufo y les dirigió una última mirada a sus amigos.
-Ryuk estuvo en la fiesta de Ho Seok hyung. Ya te imaginaras el resto- respondió sin más rodeos.
Los ojos color avellana se abrieron más de lo normal y pudo sentir que dejo de respirar por segundos. Su pecho comenzó a subir y bajar notoriamente, como si le faltara el aire. Pronto las lágrimas volvieron a salir abundantemente y se alejó del pelinegro con pasos hacia atrás lentamente.
-Hyung...- le llamo Jimin acercándose a él con los brazos abiertos.
-Volvió...- susurro. -¿Por qué?- grito esta vez quitándose del alcance de Jimin quien pretendía abrazarlo. –No otra vez, ¡No otra vez!- continuaba gritando.
-Cálmate hyung- hablo Tae quien también intento acercarse a él pero no se lo permitió.
-Regreso ahora que... que arruine todo con NamJoon. No quiero que pase de nuevo, ¡no quiero!- comenzó a alegar mientras lloraba cada vez más fuerte. Kook lo veía lleno de furia y con un nudo en la garganta. Sabía que lo único que vino a hacer el idiota ese, fue poner a Jin así y eso era lo que más le dolía. Ver de nuevo llorar a su hyung por él.
El pelinegro comenzó a gritar tan desgarradamente que probablemente todo el vecindario lo había escuchado. Estaba tan lleno de dolor y malos recuerdos que lo soltó todo gritando mientras lloraba.
-¡Kook, le va a dar una crisis nerviosa!- le grito el más bajo de los tres quien el miedo lo había consumido y estaba a punto de llorar al ver tan mal a Seok Jin.
El antes mencionado apretó sus puños mientras se acercaba con pasos largos y tomo a Jin de los hombros. –Cálmate hyung. No puedes caer de nuevo. ¡Mírame a los ojos y dime que todo va a estar bien!- le grito esto último y lo sacudió para que reaccionara.
Lo que había dicho, era lo que el mayor le decía cuando este estaba internado en el hospital por su desorden alimenticio y depresión. Siempre que el menor lo iba a visitar le decía eso para despreocuparlo. JungKook lo pudo recordar cuando comenzó a gritar muy fuerte.
SeokJin solo volvió a gritar en respuesta. Ya había entrado en crisis. Escuchar tan solo el nombre de su ex–novio, lo invadió de aquellos dolorosos recuerdos en combinación con lo que había pasado con el rapero. Después de años había vuelto a experimentar una crisis y pensó que no se había sentido tan mal. Quería desaparecer y con él su dolor.
-Le está dando. Pidan ayuda, háblenle a su madre o una ambulancia. ¡Rápido!- les decía desesperadamente el pelinegro menor, cuando vio que Jin ignoro sus palabras y seguía gritando.
Jimin derramo un poco de lágrimas y con las manos temblorosas tomo su celular para pedir ayuda. El primer número que tenía era el de Yoongi, además era la persona más cerca justo en ese momento.
JungKook lo acerco a él y trato que lo notara tomando su rostro con ambas manos. Tenía que hacer que se calmara antes que comenzara a hacerse daño a sí mismo. Taehyung de inmediato actuó y tomo por detrás a Jin que no se moviera y no dejarle libre las manos para evitar que se lastimara.
-¡Yoongi! Tienes que ayudarme- hablo sollozando por la bocina del celular. –Es Jin hyung, se puso mal. Tenemos que llevarlo al hospital...estamos como a seis casas de la de RM hyung, ven rápido... ¡espera!, que no venga el hyung, no puede verlo Jin hyung; por el bien de ambos- dicho esto último colgó y ayudo a Kook a calmar al mayor.
El rapero blanquecino salió rápido de la casa de su amigo al instante en que colgó.
-Espera hombre, ¿Qué paso?- le hablo el moreno yéndose de tras de el.
-Jin se puso mal. Tengo que ir- le dijo en tono serio y se asomó al exterior para asegurarse de que si estaban cerca.
-¿Cómo que mal? ¿Qué le paso?- ahora NamJoon sentía un nudo en la garganta. Si algo malo le pasaba a SeokJin, nunca se lo perdonaría. Sentía la culpa sobre él.
-Necesito que me prestes el carro de tu madre- le miro esta vez cuando pudo divisar a los cuatro individuos cerca.
El moreno fue en seguida al estante de la cocina y tomo las llaves del auto de su madre, el cual estaba estacionado en el patio de en frente de su casa. Se las arrojo Suga antes de que llegara hasta el.
-Voy contigo- le dijo Hope yéndose de tras de el.
-Yo también-
-No, tu no NamJoon- detuvo el paso para ver al moreno.
-Qué demonios Yoongi, ¿Por qué no?- cuestiono desesperado por la situación y lo único que pensaba era en ver al de ojos avellana.
-Mira, Jimin me llamo llorando. No sé que le paso pero me pidió que no te aparezcas. Por el bien de los dos- hablo con autoridad para que el rubio entendiera.
-No me jodas- puso una de sus manos en su frente en gesto de frustración. Ahora se sentía más culpable.
-Te mantenemos al tanto- dijo Hope por ultimo antes de subirse al auto junto a Suga y marcharse. Dejando a Namjoon con un fuerte dolor en el pecho e inmensas ganas de darse un tiro.
No pudo sentirse más culpable. Se resignó y volvió a la sala, dejando caer su cuerpo en el sillón más grande.
Maldijo un par de veces y se tragó la angustia derramando un par de lágrimas.
Las llantas del auto rechinaron cuando Yoongi freno bruscamente frente a ellos, que hasta Ho Seok se fue para delante en su asiento de copiloto. Ambos se bajaron de a una y abrieron ambas puertas traseras del auto.
SeokJin estaba gritando muy fuerte mientras Kook y Taehyung luchaban por mantenerlo quieto, pues de vez en cuando lanzaba patadas. Suga pudo percatarse que el novio de su amigo tenía rasguños en los brazos y les ayudo a subirlo al auto.
-Que no tenga las manos libres- grito Kook a su amigo quien lo sostenía de sus extremidades.
-Cuidado con la cabeza- hablo el pelicastaño más bajo protegiendo la nuca del pelinegro cuando lo metían al carro.
-Ve por el otro lado Hobie y tómalo de los pies- le dijo a su novio que en seguida rodeo el auto para así meterlo por completo.
Jungkook quien entro primero al auto, se quedó en medio. Taehyung y Ho Seok a cada extremo. Tae tomándolo de las manos bloqueándoselas completamente y Hope de los pies haciendo lo mismo. Practicante lo llevaban sobre sus piernas. El pelinegro menor se encargaba de hablarle para que reaccionara y no se quedara en trance.
Jimin se subió en el asiento de copiloto seguido de Yoongi, quien arranco una vez que cerró su puerta. Condujo hasta el hospital donde trabajaba la mamá de NamJoon, pues además de ser el único que se le ocurrió; además estaba cerca y sabía cómo llegar más rápido.
Suga parqueo el auto en el estacionamiento y Jimin salió primero para pedir ayuda a los paramédicos y bajar a Jin del auto. Al pasar del camino, el pelinegro se fue perdiendo que ya no respondía a los llamados y los ojos se le iban. La última vez que Kook lo había visto así fue cuando termino internado por primera vez.
Los paramédicos lo cargaron y lo subieron a una camilla para llevarlo a urgencias. Los demás permanecieron en la sala de espera.
Jimin busco consuelo en los brazos de su novio, Taehyung y Ho Seok se mantenían en la recepción dando datos del pelinegro y Kook estaba sentado apartado de la pareja. Apenas se habían recuperado de la adrenalina por la que pasaron.
-Ya no llores- le hablo Suga al castaño quien posaba su rostro en su hombro. Lo tomo de las mejillas y le limpio unas cuantas lágrimas con sus pulgares.
-Hace años que no le pasaba. No quiero que recaiga- dijo sorbiéndose la nariz. El rapero solo le asintió y lo volvió a abrazar.
No tenía idea de la gravedad que tenía el que Seok Jin sufriera una crisis nerviosa, pero el ver llorar a Jimin, podía entender. Incluso Taehyung se había roto en llanto apenas pisó el hospital. El único que no lo hizo fue Kook, solo daba miradas frías y sus ojos se veían tristes. Lo volteo a ver cuando pensó en él, y ahí seguía. Sentado, con la mirada perdida desde hace rato.
La pareja que estaba en recepción, se acercó a los demás cuando terminaron.
-Lo darán de alta en un rato. Podemos pasar a verlo- hablo Taehyung quien iba de la mano con el rapero castaño.
Jimin y Jungkook se pusieron de pie de inmediato. Y así una enfermara los guio al cuarto de emergencias.
Al entrar, el pelinegro estaba sentado en la camilla conectado desde la vena de su mano al medicamente que seguramente era el tranquilizante que le habían puesto. Los menos se acercaron caminando lento hasta el. El pelinegro menor se sentó junto a él en la camilla cuando este le hizo señas dándole a entender que podía. Los otros dos se mantuvieron de pie frente a el. Hasta ahorita ninguno hablo.
-No le digan a mi madre- dijo dedicándoles su cansada mirada.
-Ya he escuchado eso antes- hablo JungKook clavándole la mirada con sus oscuros ojos a su hyung. El mayor lo volteo a ver y en seguida pudo ver en los ojos del otro las tristes escenas de cuando sufría crisis nerviosas y siempre le pedía a sus pequeños amigos que le guardaran el secreto (como él lo llamaba).
SeokJin le sostuvo la mirada unos cuantos segundos, después lo acerco a él para que posara su rostro en su hombro y así abrazarlo.
-Todo va a estar bien. Estoy bien- le dijo bajito cuando ya estaba en sus brazos. Y fue la gota que derramo el vaso para que este soltara lágrimas. Se las llevaba aguantando tanto que sintió doler su pecho cuando comenzó a llorar.
Se quedaron en silencio por un rato, solo escuchando los sollozos del pelinegro menor. SeokJin le acariciaba el cabello consolándolo. Parecía que había vuelto en el tiempo y ahí estaba de nuevo, en el hospital, consolando a sus jóvenes amigos que lloraban por su sufrimiento.
Suspiro. -Perdón chicos- se disculpó sin dejar de abrazar al menor.
-Sabes que no fue una crisis cualquiera. Venimos a terminar en el hospital, hyung- hablo por primera vez Taehyung.
-Ese imbécil volvió, y los golpeo. No pude controlarme- respondió clavándole su mirada llena de enojo al recordar aquello.
-Sí, combinado con que te saliste llorando de la casa de NamJoon hyung- marco su ceja mirándole con los ojos más abiertos buscando el porqué.
El mayor bufo por su mirada y se la sostuvo por un momento antes de responder. –Por el maldito miedo de volver a caer en lo mismo. Por eso- respondió con la misma rabia de antes.
-Pero si estabas tan bien-
-Me acosté con el- dijo apenas termino de hablar Taehyung. Los demás se quedaron en shook que hasta JungKook salió de su abrazo para clavarle la mirada aun con los ojos llorosos. –Se suponía que debía hacer lo correcto y volví a caer- volvió a hablar. Su voz se volvía mas ronca y sus lágrimas se acumulaban. -¿Saben que es lo peor?... que por estar borracho, no soy capaz de recordarlo bien-
Los menores se quedaron sin habla, con los rostros serios mientras se veían serios los unos a los otros. Comprendían el sentimiento del pelinegro, era comprensible. Tenía miedo de cometer el mismo error y no recibir nada a cambio de una pareja. Ya una vez se cansó de dar y no recibir nada. Sus inseguridades sobre ello eran altas. Era tan fácil gustar de alguien, lo difícil es esperar lo mismo de esa persona. Si bien, nunca terminas de conocer a una persona; y aun que NamJoon no parecía ser esa clase de persona, no podía arriesgarse y entregar su amor por completo. No otra vez.
-Deberías hablar con el- hablo Jimin. SeokJin le dirigió la mirada. –Te pedía disculpas antes de que te marcharas-
-Me da tanta vergüenza y enojo a la vez. Si lo veo a los ojos de nuevo, recordare lo de anoche y me odiare más-
-Tendrás que hacerlo en algún momento hyung- le dijo el de facciones de conejo.
***
-Mierda, olvide llamarle a RM- dijo de repente Hope sacando su celular lo más rápido que pudo. Como lo pensó, estaba abarrotado de mensajes y llamadas perdidas del moreno.
-¿A qué hora fue la última llamada que te hizo?- pregunto el rapero blanquecino volteándolo a ver, pues estaban sentados en las bancas del hospital.
-Hmm...hace 15 minutos- respondió después de checar su historial. -¿Por qué?-
-Ya debe de estar por llegar. Debe saber que lo trajimos aquí- dijo sin mucho interés. Era obvio que el moreno no era tan paciente en esas cosas.
-¿Debería ser bueno o malo?- cuestiono girando un poco su cabeza.
-No lo sé, pero ya no lo podemos detener. Además, no podemos estar todo el tiempo evitando que se vean-
-Y aquí viene Romeo- dijo Ho Seok al percatarse de que el rapero del que hablaban iba entrando por la puerta del hospital.
-Gracias por avisarme- hablo con sarcasmo y se posó frente a sus amigos.
-Apenas y me acorde, sorry NamJoon- respondió Hope mostrándole una risa arrepentida.
-Mientras me ahogaba solo en la preocupación y culpa- se quejó.
-Tampoco la pasamos tan bien aquí- hablo por primera vez Suga clavándole la mirada al recién llegado.
Bufo, tenía razón pero estaba tan estresado. -¿Qué tan grave es?- cuestiono por no seguir con el tema.
-Le dio una crisis nerviosa, al parecer muy fuerte- dijo Ho Seok mientras se enderezaba en su lugar.
-Me siento tan mierda- soltó y se sentó junto a sus amigos recargando su cabeza en la pared.
-Si te hace sentir mejor, no tienes la culpa del todo- hablo Yoongi cerrando los ojos, intentando soltar el estrés de anteriormente.
El moreno se sentó correctamente en la banca y frunció el ceño en gesto de confusión. -¿De que hablas?-
-Le empezó a dar la crisis apenas le dijeron que el pendejo de su ex estuvo en la fiesta de Hope-
El rubio se quedó callado y se detuvo a pensar, ¿Qué tanto pudo sufrir SeokJin en esa relación?
-Pero descuida, que ya está bien y ahorita lo darán de alta- le dijo Ho Seok jugando con su cabello.
-Tengo que hablar con el-
Apenas dijo eso y SeokJin venia saliendo de una habitación junto a los tres menores. NamJoon pudo verlo desde lejos y sintió su corazón doler. Venia caminando despacio, su rostro se veía triste y cansado y llevaba puesta una bandita en la mano seguramente por el medicamento. Le evito la mirada a toda costa, aun así pudo ver esos ojos avellanas decaídos.
Cuando estuvieron lo suficientemente cerca, Jimin y Taehyung le abrieron paso al rapero para que se acercara al pelinegro, alejándose de él y apartándose lo suficiente con sus respectivos novios para así pudieran hablar. JungKook se quedó plantado a lado de SeokJin deteniéndose frente al moreno. Le clavo la mirada, pero no dijo nada hasta que el pelinegro lo volteo a ver para darle a entender que se podía ir. Observo por última vez a su hyung y después al rapero para después marcharse con los demás. El teñido de rubio no entendió el gesto de Kook, pero le importo poco. Le interesaba hablar con el de ojos avellana solamente.
-¿Estas mejor?- pregunto bajito buscando que lo viera a los ojos. Este solo asintió con el rostro abajo, evitando el contacto visual a toda costa. –Dejaste tu celular- le mostro el aparato con destellos rosas. Este solo lo tomo y dejo salir un pequeño gracias. –No sé cuánto deba pedirte perdón, pero lo seguiré haciendo. Lo siento si te lastime- continuo.
El pelinegro se quedó callado mirando un lugar fijo, que no fuese el moreno claro. No sabía que decirle y sentía tanto enojo y vergüenza.
El moreno suspiro por no recibir respuesta. -¿No piensas dirigirme la mirada tan siquiera?- cuestiono y tomo su barbilla suavemente, que el pelinegro no pudo ocultar sus ojos más y le clavo su mirada.
-Te perdono, si eso es lo que quieres- le respondió con las miradas de ambos fijas la una a la otra, y así por largos segundos.
SeokJin pudo recordar escenas de la noche pasada cuando le miro. Podía recordar besar sus labios y sentir carisias por todo su cuerpo. Una vibra se sintió por todo su cuerpo que lucho por mantener el equilibrio.
-No es todo lo que quiero- hablo de nuevo el moreno. El de ojos avellana paso saliva y no le respondió. –Te quiero a ti-
SeokJin soltó un resoplo inconscientemente que sintió quedarse sin aire. –No empecemos de nuevo- se atrevió a decirle, con toda las fuerzas que tenía; porque después de lo que le dijo pudo sentirse sin voz.
-Hablo en serio Jin. Anoche sentí cosas que creí que no podía y estoy seguro que tú también-
-Ee-estab...- intento justificarse pero el moreno no lo dejo.
-¿Quieres que te diga lo que paso?.... Me dijiste que me extrañabas, que no te gustaba estar separados. Me abrazaste, me pediste que te besara que me sentí tan débil y no pude negártelo. Me pediste que no parara y que me querías- hablaba sin romper sus miradas. Sus corazones se aceleraron y Jin apretó sus labios.
-Se suponía que no debíamos hacerlo- hablo para evitar que siguiera. No podría soportarlo.
-¿Por qué?- SeokJin no le respondió.
-Soy un cobarde NamJoon- hablo después de un corto silencio. –Tengo miedo de sufrir, porque ya sufrí demasiado. Tal vez esté siendo egoísta pensando solo en mí, pero alguien ya me hizo no serlo y no recibí nada- las lágrimas se esparcían por sus mejillas. –Yo quería ir bien esta vez, pero todo salió mal y termine aquí de nuevo. No quiero volver a pasar mis días en un hospital-
-No se por lo que pasaste, pero eso es parte de tu pasado. Quiero estar en tu presente y futuro. Quiero protegerte y estar contigo-
El pelinegro soltó mas lágrimas y se cubrió la boca con una de sus manos sollozando. Tenía tantos sentimientos encontrados.
-Sentí lo mismo, pero ahora me siento más inseguro. No puedo seguir adelante, me siento atascado. No me hables de amor ahora NamJoon, no ahora- le dijo por último y camino derecho limpiándose las lágrimas.
El rapero dejo salir un gran suspiro cerrando sus ojos. Se dio media vuelta y vio cómo se marchaba el de ojos avellana. Ahora su corazón dolía y pudo suponer que había sido roto por primera vez. Apenas y disfrutaba aquel placer de la vida como el amor y ya había salido lastimado. Y es que no todo es color de rosas, y eso se encargó de decírselo el de ojos avellana.
Una pequeña vibración proveniente de su pantalón hizo despertarlo de sus pensamientos. Era su celular notificándole un mensaje nuevo.
JungKook
Veámonos en el parque cerca del instituto a las 6. No faltes hyung.