La audiencia comenzó a gritar cuando el presentador anuncio al dueto de raperos. RapMonster y Suga fueron los nombres que exclamo, la audiencia enloqueció aun mas.
Seok Jin podía ver las múltiples luces parpadeando traspasar la cortina que separaba el bar de la sala donde se preparaban los raperos y también donde el estaba. Se encontraba sentado en el único mueble que había, con su hijo en brazos dandole la mamila.
Ante la mirada que le había puesto NamJoon no pudo decirle que no y dejo que se fuera detrás de su compañero (al parecer) al escenario.
Una mezcla de sonidos bastante fuertes llenaron los oídos del pelinegro, que lo hizo despertar de sus pensamientos. Pronto aquella voz ronca y bastante peculiar, la cual conocía y la misma que lo intimidaba se escucho en un volumen bastante elevando que Jin pudo sentir escalofríos. Los sintió por un buen rato pues el rapero realmente sabia lo que hacia y cada palabra que pronunciaba encajaba perfecto a la mezcla de sonidos.
SeokJin estaba encantado con el talento del rubio, le gustaba lo que escuchaba. El sabia de eso y sabia que lo que hacia NamJoon era bueno. También pudo escuchar la otra voz, la cual no reconocía pero sabia que era del chico pelirrojo que antes le hablo al moreno; le pareció bueno también pero la voz de NamJoon lo había dejado sin palabras. Se escuchaba muy diferente de cuando le hablaba pero aun así le causaba escalofríos y hasta podía sentirse extraño sin verle el rostro.
Trago grueso en el momento que la voz de su esposo comenzó a rapear en una rapidez sobrenatural que lo dejo perplejo y emocionado. Era increíble la facilidad de pronunciación que tenia y las rimas que a su parecer eran perfectas.
Dicen que los raperos son buenos besando. Recordó aquello que Hana le había dicho una vez y lo carcomieron las ganas de ver cada expresión que hacia. Pero joder, como se ponía a pensar en eso.
Sacudió la cabeza en negación y pudo escuchar de nuevo a la audiencia. La presentación había terminado.
Retiro la mamila de Suk y lo puso en posición para que repitiera. Por que realmente lo hacia.
Pronto unas voces mezcladas cruzaron la cortina. Los raperos estrella habían bajado del escenario. NamJoon se seco el sudor con una toalla y con un poco de adrenalina se acerco a su familia.
El pelinegro no le dirigió la mirada y solo se concentro en los eructos de Suk. El rubio no sabia que decir pero sentía la necesidad de hacerlo. Se quedo un rato en silencio mirándolo de reojo hasta que hablo, después de que su bebé robot dejara escapar un eructo.
-A eructado bien- dijo, pero Jin solo se quedo en silencio. -Gracias- dejo salir el moreno.
El pelinegro lo miro de reojo y asintió -No hay de que- le dijo.
Después de eso, otro eterno silencio se apoderó de la situación.
Suga quien estaba también ahí los miraba sin entender. ¿Porque actuaban como tontos? Era obvio que tenían tensión pero más bien tensión sexual o algo de atracción, no entendía lo ñoño que actuaban. Aunque hablando de tensión, quería hablar con Jimin ahora que lo veía tan indiferente. No estaba sonriendo y lleno de energía como aquella vez. Debía saber porque.
De pronto el tono de llamada del celular de Seok Jin sonó. Lo saco de su bolsillo delantero de su pantalón y pudo observar el nombre del contacto. “Kookie”.
-¿Qué pasa?- contesto el pelinegro, un poco intimidado por las miradas que lo veían.
-¿Dónde te metiste hyung? Acabo de ver la presentación de RapMon, ¿no estabas con el?-
-Estoy de tras del escenario-
-¿Estas con el?-
-Si-
-Vamos para allá, tienes que presentármelo Hyung- hablo un emocionado Kook.
Ya no le dio la oportunidad de oponerse, el menor colgó al momento. Hizo una mueca y volvió a guardar su celular.
-N-no sabia que te gustaba venir, nunca te he visto por aquí- hablo el moreno. Tenia que sacar platica de alguna forma ¿no?
Bingo. Había captado la atención de Jin. Los ojos color avellana se encontraron con los suyos.
-Realmente no me agrada tanto, solo vine a acompañar a unos amigos- respondió sencillo.
NamJoon sabia bien quienes. -Oh, ya veo. Pensé que te gustaba la música, la mayoría de las personas vienen por lo que se presenta- se atrevió a comentar.
-No es mi género favorito pero me agrada-
Valla, el rubio nunca se imaginó que le agradara el Hip-hop a Seok Jin. Eso le gustaba.
Sin querer sonrío de lado. El pelinegro no entendió el motivo pero de igual forma sonrió levemente. NamJoon sintió una punzada en el estómago.
Una voz diciendo Jin Hyung interrumpió su pacifica conexión. Eran los amigos do los que hablaba Jin.
El pelinegro dejo a su hijo recostado en el campo que lo separaba de NamJoon y se puso de pie al tener a los dos antes mencionados en frente. El moreno hizo lo mismo.
El rapero pelirrojo miro a Jimin. Este lo evito a toda costa. YoonGi suspiro y se fue de ahí.
JungKook miro apurado a su hyung. Como le ponía a presentárselo, pero ya que.
-Ah, NamJoon el es JungKook- los presento.
El rapero le sonrió y ambos la chocaron con los puños. Kook estaba realmente emocionado.
-Y el Jimin- continuo Jin. El castaño igual las choco con el rapero.
-Hyung, eres muy bueno. De los mejores que se presentan- alabo de inmediato el pelinegro menor.
NamJoon se sintió un poco avergonzado por los cumplidos del menor. -Gracias- le dijo muy sonriente.
-En serio Hyung, le pateas el trasero a todos-
Y así continuo un rato. JungKook bombardeaba al rubio con palabras el cual ya ni sabia cuantas veces le había dicho “gracias”; Y Seok Jin quería taparle la boca al pelinegro con cinta.
Jimin salió de ahí dos minutos después de escuchar como hablaba tanto el menor. Se dirigió a la barra para tomar algo, ya que Jin no lo veía. Estaba a punto de beber su cerveza cuando cierto pelirrojo se sentó a lado suyo y pidió de igual forma una cerveza.
-A tu amigo no le gustara verte beber- dijo el rapero.
El menor lo miro de reojo pero no le respondió.
-¿Qué te pasa Jimin?- le pregunto mas desesperado y buscando verlo a los ojos.
-Oh bueno, al menos te acuerdas de como me llamo- soltó el pelicastaño antes de beber su cerveza.
-No veo porque no lo recordaría-
-Pues cuando nos conocimos muy apenas hablamos y en el instituto somos como desconocidos-
-Tal vez no me creas pero no tenia ni idea que estudiabas ahí y desde que nos conocimos… no he dejado de pensar en ti-
Jimin trago grueso y lo volteo a ver. – Y justo ahora no estoy borracho-
Sus miradas siguieron conectadas por un buen rato.
***
JungKook había quedado contento después de que su rapero favorito le haya pasado su número y algunas canciones que había grabado. NamJoon juraba que le había puesto de nombre en el contacto RapMon con un corazón, el niño era extraño aun que no le molestaba pues le gustaba su música y le había estado diciendo cuanto lo idolatraba por casi una hora o al menos eso escuchaba porque su mirada estaba fija en Seok Jin mientras cuidaba de su hijo, no había hablado mucho ese rato.
-Bueno, gusto en conocerte JungKook. Tengo que irme a casa, hoy el bebé es mi responsabilidad- Se despedía mientras se ponía de pie y estiraba sus brazos a con Jin para que le diera al bebé. Este se le quedo viendo sin acceder.
-Te acompaño- le dijo poniéndose de pie frente a el y tomando con una mano la pañalera para después dársela.
-Descuida, estaré bien- le dijo el rubio.
-Tu si pero el bebé esta a tu cargo. Te ensañare a que hacer para que no llore como hace un rato- le dijo fulminándolo con la mirada. –También deberías irte Kook, ya es tarde-
-Si, buscare a Jimin para irnos. Nos vemos mañana, adiós RapMon hyung- se despidió y salió antes que ellos a buscar a Jimin.
-¿Vives muy lejos?- le pregunto el pelinegro al rapero.
-A cinco cuadras para ser exacto, llegamos en 10 minutos- le respondió y se colgó la pañalera. Ambos salieron por la puerta trasera.
***
Y ahí estaban de nuevo, todo era como la vez pasada, en el mismo lugar, la misma posición y posiblemente la misma hora, solo que ahora ninguno estaba borracho y estaban 100 porciento conscientes de lo que estaban haciendo.
El pelicastaño estaba contra la pared trasera del bar siendo besado por el pelirrojo. Lo tenía bien sujetado de la cintura introduciendo cada vez más su lengua en la boca del menor y este permitiéndole el paso.
Jimin creyó que no volvería a suceder pero Suga tenía algo que no podía contra ello y caía de inmediato y por dios, los besos del rapero eran llevarlo al cielo y querer quedarse ahí siempre.
Al parecer el rapero bajaba la guardia con el menor. Era calmado y cariñoso, cosa que no mostraba mucho ni con sus amigos mas cercanos. Alguien había caído redondito al amor?..
El timbre del celular de Jimin sonó causando que se separara de los labios de Yoon Gi. Saco el aparato de su bolsillo trasero y contesto.
-¿Si?- hablo con la voz agitada y con el rapero dándole besos en las mejillas y bajando hasta su cuello.
-¿Dónde estas hyung? Quiero irme a casa y ¿Por qué suenas tan agitado?- hablo del otro lado del teléfono Jungkook.
El pelicastaño tardó en responder mordiéndose el labio para evitar gemir a causa de una mordida en su cuello cortesía del pelirrojo quien sonrió ante su éxito.
-¿Hyung?-
-V-ve tú, ¿si?-
-¿Por qué? Acaso… tu…-
Jimin gimió…
-Sabes que, si iré solo- y colgó con escalofríos.
-¿Hizo mas preguntas?- dijo el mayor dándole un fugaz beso en los labios mientras ponía su celular de vuelta en su pantalón.
-Jin hyung me matara por dejarlo ir solo-
-Valdrá la pena- le sonrió y volvió a besarlo.
***
Se mantuvieron en silencio un buen rato mientras se dirigían a la casa del moreno. Namjoon quería hablar pero se sentía extraño y ver aquel bonito rostro bajo la luz de la luna en silencio le estaba gustando, sería una lástima decir una tontería y arruinarlo. Aun así, tuvo un impulso y rompió aquel incomodo pero hermoso (ante la vista del rubio) silencio.
-Jungkook parece buen chico- fue lo primero que se le ocurrió, perdónenlo.
El pelinegro le dirigió la mirada fugazmente – Si, lo es. Probablemente te acose por Kakao talk pero descuida, es inofensivo- le dijo y sonrió de lado. Namjoon lo imito.
-Responderé a su acoso, después de todo el disfruta lo que hago y eso es significa mucho para mí- hablo el rapero.
Seokjin lo miro de reojo –El tiene razón-
-¿En qué?-
-En decir que eres bueno- dijo mas bajito.
Las cejas de Namjoon se levantaron en asombro. No pudo evitar sonreírle avergonzado. –Gracias- Seokjin le dedico una sonrisa. Namjoon se quedo sin habla y el resto del camino no volvieron a hablar.
Y después de 10 minutos como había dicho RapMon llegaron a su casa. Estando en frente de esta, el moreno saco de su bolsillo del pantalón unas llaves para abrir la puerta.
-¿Vives solo?- pregunto el pelinegro al ver la acción del rapero.
-No, mi madre es enfermera, hoy le toco trabajar tarde y no llega hasta mañana- respondió mientras abría la puerta para después quitarse ambos los zapatos y adentrarse a la casa. –Pasa- le indico para después volver a cerrar la puerta.
Seokjin observo la casa, mientras el moreno encendía todas las luces y colocaba las llaves en el perchero.
-¿Esta dormido?- pregunto el rubio refiriéndose al bebé.
-Si, aun que ya lleva un buen rato puede despertar en cualquier momento ¿Dónde lo recostaras?-
-En mi habitación, está arriba- Se dirigió a las escaleras y detrás suyo el pelinegro.
Estando frente a la puerta de la habitación de Namjoon este la abrió y dejo pasar primero a Jin.
Las paredes eran color azul marino casi cubiertas por posters de raperos que conocía perfectamente. Tenía un escritorio donde estaba su computadora, libros de la universidad y un pizarrón frente a este con papeles pegados en el. Por el otro lado se encontraba un estante de libros y discos, muchos discos. Ahí se dio cuenta lo mucho que le gustaba la música a Namjoon. Aun que lo que lo dejo inquieto fue el aroma que esta tenia, olía a el. Toda la habitación tenía su olor, que hasta pudo sentirse mareado pero a decir verdad, le agradaba.
-Puedes recostarlo en la cama- le dijo el dueño de la habitación.
El pelinegro despertó de sus pensamientos y rápido se dirigió a la cama para recostar a Suk quien no daba señales de despertarse. El rubio dejo la pañalera en la cama de igual forma.
-Iré por el control del aire acondicionado, ahora vuelvo- le aviso antes de salir de la habitación.
El pelinegro observaba toda la habitación. Estaba en la propiedad de Namjoon, mareandose de su olor. Sintió escalofríos.
Se paseó lentamente observando cada cosa de la recamara. Se detuvo en el estante de discos y se sentó en el suelo para verlos de cerca.
Sintió nostalgia al ver que todos los discos los conocía a la perfección. Recordó a su hermano mayor, el le había inculcado esa música desde pequeño. Hace mucho tiempo que se había ido a Japón y realmente lo extrañaba. El había sido el único que lo acompaño en si mala racha en el amor que una vez tuvo.
Soltó un gran suspiro y tomo uno de los discos. Eminem without me. De sus favoritos.
El rubio volvió a la habitación con el control del aire en mano, lo encendió y lo dejo en su escritorio para después acercarse al pelinegro que al parecer no se había percatado de el.
-Ese es muy bueno- dijo Namjoon mientras se sentaba junto a Seokjin. Este se sorprendido de la repentina voz del rubio.
-Lo es, es de mis favoritos- le respondió.
-De los míos también. Tienes buen gusto-
-Crecí con esta música, a mi hermano le encantaba. Cuando era niño me paseaba por mi casa escuchando a Eminem, Epik High, Jay-Z…- decía Jin mientras veía los demás discos.
-Nunca lo habría imaginado de ti- se atrevió a decir el moreno.
El pelinegro soltó una risilla. –Las apariencias engañan- le respondió clavándole la mirada.
Sus miradas se mantuvieron. Namjoon sentía que había muerto y que un ángel lo veía. Demonios tenía que anotar eso para sus letras.
Seokjin tosió falsamente desviando su mirada. –Supongo que los coleccionas-
El moreno volvió a sus cinco sentidos. -Sí, ahora los más antiguos son difíciles de conseguir-
-Cuando era pequeño estaban en todas las tiendas. Recuerdo que mi hermano ahorraba sus domingos para comprarlos- una sonrisa nostálgica se le dibujo en el rostro.
-En ese entonces yo lo gastaba en caramelos- dijo riéndose. Seokjin lo imito.
-¿Cuándo empezó tu gusto por el hip-hop?- le pregunto con mas confianza.
-Desde la secundaria. En ese entonces Epick High sonaba por todas partes. Me inspiraba mucho en sus canciones para hacer las mías-
-Te escuche en el bar, tus letras son buenas. Tienes vocación para esto- le dijo. Ahora hacían más contacto visual y eso a Namjoon le empezaba a gustar.
-Gracias, aun que necesito mejorar mi rapidez en algunas partes- le dijo tratando de no ser tan presumido.
-¿De qué hablas? Eres muy bueno en esas partes, si lo dices por tu compañero el pelirrojo, si, el lo hace más rápido pero tú tienes precisión y pronunciación además que lo encajas perfecto en el ritmo-
El moreno se quedó sorprendido con los ojos por salírseles. Como demonios sabia tanto de esto. El pelinegro cada vez lo sorprendía mas. Es una caja de sorpresas este chico.
Seokjin bajo el rostro avergonzado y con las mejillas calientes al ver la expresión de Namjoon.
-Amm… g-gracias. Aunque Suga es realmente bueno también-
SeokJin volvió su mirada a el cuando menciono aquel nombre. -¿El pelirrojo es Suga?-
-Si, ¿lo conoces?-
El pelinegro se quedó pensando un momento. –Pues ahora si. Me lo mencionaron unos amigos- le respondió.
-¿Jimin?-
Seokjin lo volvió a mirar intrigado. -¿Cómo sabes?-
-Suga me conto de el-
-¿Están saliendo?-
-No creo, aun-
El contrario se quedo callado pensando en lo que le había dicho el pelicastaño de lo que había pasado con ese tal Suga.
-Si te preocupa Jimin descuida, Suga es buen tipo, un poco amargado pero a como lo vi, en serio le gusta tu amigo. Mira que me lo negó y eso es una señal-
-Eso espero, Jimin es muy sentimental y a veces muy ingenuo. Que estoy diciendo, el ya no tiene 5 años. Ese niño últimamente trae las hormonas muy alborotadas- Jin había pensado en voz alta. De nuevo las mejillas se le pusieron calientes.
Al rubio se le dibujo una sonrisa. Se vio tan tierno hablando así.
Los ojos de este captaron una pestaña por la mejilla del pelinegro y como acto reflejo acerco su mano para quitarla. Sus miradas se conectaron, otra vez.
–T-tienes las mejillas calientes- le dijo aun sin dejar de tocarlo.
SeokJin se apartó de inmediato y se puso de pie. –Bueno, solo asegúrate de que el bebé se mantenga dormido y si llora cámbiale el pañal. Nos vemos mañana- dijo nervioso.
-¿Te pasa algo?- pregunto mientras buscaba acercársele. Jin lo evito.
-No, nada. Ya me voy- Y con pasos apresurados salió de la habitación y de tras suyo el rapero.
-Espera, te acompaño-
-No, descuida. Cuida al bebé. Hasta mañana-
SeokJin salió de la casa dejando a un NamJoon confundido aunque a la vez contento por el contacto cercano que tuvieron.