ÿþCaminaban juntos Aomine y Kagami después de un duro partido amistoso. En el trayecto decidieron ir al Majin Burger donde cada uno comió una docena de hamburguesas, después, decidieron ir al departamento del As de Serin a jugar videojuegos.
Al entrar al departamento encontraron en la sala una caja grande color blanca; fácilmente podía caber una persona allí. Arriba de la caja había un sobre del mismo color que decía:
"Disfruten su regalo"
Atte: El equipo de Serin y Too.
Kagami puso sus dos manos en cada esquina de la caja y comenzó a sacudirla, estaba pesada, quiere decir que algo había adentro pero ¿Qué? Se alejó un poco con la mirada pensativa. Atrás de él venía Aomine con una soda en mano.
-Oye Bakagami ¿Qué es eso?-pregunto el moreno mientras se situaba del otro lado de la caja e imitaba la acción de Kagami-.Hay algo adentro.
Comenzaron a buscar la forma de poder abrirla pero no encontraron nada solo dos agujeros a cada lado de la caja, eran pequeños para que solo sus brazos entraran. Se miraron interrogante mente y con duda por parte de Kagami metieron sus brazos. Habia algo adentro pero aun no sabían que era exactamente; comenzaron a tocarlo sintiendo entre sus dedos pedazos de tela.
-Tiene ropa-informo Aomine.
-Y esta grande. Casi como una persona.
Kagami tocaba una extensión grande que terminaba con algo húmedo. Por una extraña razón un calor sofocante comenzaba asentirse en la habitación. Aomine toca lo que parecía cabello, un cabello muy sedoso y largo; siguio bajando un poco más y sintió la tibia piel de aquel extraño regalo. Era muy suave casi como la seda. Con algo de dificultad desabotono algo hasta llegar a toparse con la mano de Kagami que masajeaba algo.
-¿Qué estas tocando?-pregunto aomine.
-No lo sé.
Aomine volvió desde el inicio recorriendo con la yema de sus dedos el camino hasta que sintió unos botoncitos calientitos que comenzaba a pellizcar. Un gemido inundo por un instante la sala, Kagami volteo a ver a Aomine para ver si no había sido él.
-Yo no fui Bakagami.
-Nadie dijo que eras tú, estúpido. Provino de la caja.
-¿Sera un oso? Un oso con un pelaje muy sedoso-propuso Aomine se siguió con su labor.
-Un oso que gime-Kagami lo veía como si fuera la idea más estúpida que se le habría ocurrido en toda su vida.
Siguieron curioseando un poco más. Aomine sintió que sus dedos entraban a una cavidad húmeda y caliente, comenzó a jugar con algo tibio que se movía causándole placer. Por otra parte, Kagami dejo aquella extensión después que un líquido caliente manchara su mano.
-Oye Aomine ¿qué crees que sea?-Kagami le mostro su mano manchada de blanco.
-Hum... no lo sé pruébalo, tal vez sea dulce-Aomine volvió a meter su mano.
Kagami se quedó viendo fijamente aquella sustancia espesa que se le hacía familiar, saco un poco su lengua para probar.
-¿Qué tal?
-Sabe a amargo pero con un toque de dulce.
-¿Dónde tocaste para conseguirlo? Quiero probar.
-Pues... solo tocaba algo caliente y de pronto salió. Mira déjame te guio.
Kagami metio su mano y sujeto la de Aomine y la guio hasta ese lugar. Aomine imito a Kagami masajeando aquella zona mientras que Kagami descubría aquellos botoncitos donde pellizcaba.
El mismo gemido se volvió a escuchar cuando la mano de Aomine se manchó de aquel "dulce". Aomine y Kagami se volvieron a mirar esta vez sorprendidos y con un gran sonrojo, tenían los mismos pensamientos: Había una persona allí adentro.
-A... aomine hay... una persona allí adentro-Kagami retrocedió.
-La pregunta es quien.
De pronto la caja comenzó a moverse y la tapa de arriba fue abierta dejando ver una melena color azul.
-¡Tetsuya!-gritaron los dos.
Kuroko tenía la camisa de la escuela desabrochada y sus pezones se encontraban rojos al igual que sus mejillas. No tenían que ser adivinos para ver que Tetsu no salía de la caja, le habían quitado los pantalones junto con el bóxer.
Las neuronas de ambos jugadores comenzaron hacer clic al descubrir que el dulce era en verdad el semen de Kuroko al igual que aquel gemido que los excito.
-Hola-fue lo único que dijo.
-¿Qué haces adentro de la caja?-pregunto Aomine.
-Yo...-el sonrojo que tenía en las mejillas se hizo notar más.
-¿Te metieron en esa caja en contra de tu voluntad? Tetsu-pregunto Kagami serio.
-Yo...-lagrimas comenzaban acumularse en sus ojos azules. Sentía tana pena al verse en esa situación-. Yo... yo solo quería darles un regalo a mis novios por haber ganado contra el equipo de Haizaki-susurro.
Hace más de un año que Aomine y Kagami se habían dado cuenta sobre sus sentimientos hacia la pequeña sombra, creando una rivalidad que por poco manda a Kuroko al hospital al entrar en una depresión al notar que ninguno de los dos lo trataba como antes. Al enterarse de eso, Aomine y kagami decidieron contarle la verdad sobre sus actitudes y confesarse a su amigo; grande fue sus sorpresa que este estaba enamorado de los dos y que no podía escoger solo uno. Así decidieron formar una relación de tres con ciertas reglas para no salir peleados, la primera era: no hacer llorar a Tetsu, una regla que estaba rompiendo en ese instante.
Kuroko ocultaba su rostro entre sus manos. Se había vuelto una persona muy sensible por sus novios que lo trataban de una manera tan romántica que no podía estar todo el tiempo con su cara de Póker. Con las manos temblorosas comenzó a ponerse su ropa para salir de allí pero fue detenido por dos brazos que lo sacaron de la caja para abrazarlo.
Jalaba un poco su camisa para poder ocultar sus partes íntimas.
-Lo lamentamos, Tetsu-dijo Aomine.
-No queríamos hacerte llorar.
-Te amamos-dijeron ambos besando cada quien por sus lado sus mejillas.
-Yo también los amo.
-Creo que hay que terminar con lo que empezamos ¿No lo crees Daiki?
-Pienso lo mismo Taiga.
Una sonrisa traviesa florecía en sus rostros. Aomine cargo a Tetsu y los tres juntos caminaron hacia la habitación del tigre. Kagami se acostó primero luego Aomine puso arriba de él a Tetsu.
Buscaba desesperadamente los labios de su novio mientras este le quitaba su camiseta con tanta ansiedad. Aomine le besaba la espalda y de vez en cuando la mordía dejando algunas marcas. No era la primera ni la última vez que tiene relación los tres juntos, para hacerlo menos complicado, Aomine y Kagami se turnar para ver quien llenaría a tetsu. Hoy era el turno del moreno. Tetsu se separó de Kagami en busca de oxigeno luego le dio le espalda para sentarse en su estómago y comenzó a besar a Aomine que comenzaba a masajear su miembro ya despierto.
EL acto siguió hasta que ya se encontraban los tres parados con Aomine de tras de tetsu y Kagami al frente. Los agiles dedos de Aomine dilataban la entrada de Kuroko que gemía contra los labios del pellirrojo.
-Da... ah Daki rápido-pidió Kuroko al correrse por tercera vez entre las manos de Kagami.
-Sujétalo bien, Taiga.
Agarro su miembro y lo guio hasta la entrada de kuroko que lo esperaba ansioso, una vez adentro, comenzó a moverse lentamente deleitándose con la estreches. Con torpes caminaron hasta la orilla de la cama, Kagami se sentó y Kuroko-siendo todavía penetrado- comenzó hacerle sexo oral. Una estocada más basta para que Aomine se viniera dentro de tetsu, tetsu en el piso y Kagami en su boca.
Al día siguiente se reunieron el equipo de Serin y Too para un partido amistoso. Iban entrando Aomine y Kagami tomando de la mano a Kuroko que caminaba con dificultad.
-Lo lamento entrenadora, no poder jugar-dijo apenado.
Riko miraba furiosamente a Kagami y Aomine por haber dejado invalido a Tetsu.
-¡Kagami! ¡Aomine!-grito.
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