Capítulo 6: Paseo por Italia
—¡¡SUELTAME MALDITO MASTODONTE!! — todo el mundo veía el alboroto que causaba Edward, bueno, tenía una buena razón, que llegue Xanxus de la nada, te cargara en su hombro cual saco de papas y Tsuna tan solo les siguiera era raro
—Silencio Kusaga—gruño Xanxus, Tsuna negaba con la cabeza
—MALDITA SEA TSUNA AYUDAME QUE TENGO QUE…
—Te vas a formar una arruga gigante en la frente de tanto leer con el ceño fruncido y yo soltare raíces en esa oficina, no está mal salir de vez en cuando
—¡¿QUE?!
Y así término donde está ahora, sentado en ese auto con Xanxus al frente y Tsuna al lado con una sonrisita nerviosa. Xanxus se le quedaba de una manera tan penetrante e intimidante que se empezaba a sentir intimidado
—¿Puedo hacer algo por ti? —pregunto algo nervioso, Xanxus soltó una risota, la cual espanto a Edward
—Él es así, además creo que él está afectando el poco consumismo de alcohol—dijo riendo. Edward tomo el vaso de agua que había por ahí y lo transmuto en vino
—Toma, y deja de mirarme—dijo dándole la botella llena de vino la cual Xanxus no tardo en tomar—Por que vinimos con él y no con cualquier otro de tus guardianes? —interrogo
—Gokudera está haciendo mi papeleo—dijo riendo, recordando el pequeño engaño a su pobre guardián—Hibari y Reborn fueron con sus esposas, Yamamoto acompaña a Gokudera, Lambo esta con I-Pin y no creo que quieras llevar a todos lados cuando se ponen fastidiosos, Mukuro debe estar por ahí con Chrome y Ryohei debe estar entrenando—explicaba con serenidad
—¿Hibari y Reborn están casados? —pregunto arrugando la frente
—Sí, la esposa de Hibari es igual que él, es capaz de tumbarte de un solo golpe, se llama Izanami y la esposa de Reborn es más o menos de tu tamaño, cabello rosa y ojos plateados llamada Eri, quizás algún día las conozcas, son muy simpáticas… el problema son sus esposos que las celan hasta del aire
—Ya no quiero saber más— esa información le era algo rara, no se imaginaba a esos dos casados, menos como un buen marido, de seguro las dos eran unas asesinas o algo por el estilo, al parecer su duda era demasiado visible
—Izanami es una asesina profesional, como una rival para Reborn, su apodo es “Bayonetta” y Eri… realmente no sé,… la primera vez creí que era alguien secuestrada—admitió
—¿Y a dónde vamos?
—Primero a comer. Luego iremos al parque de diversiones que inauguraron por ahí, también deberíamos ir a comprar ropa y lo que quieras
—Tengo que comprar más whiski —dijo Xanxus como si nada
—Bueno…lo que sea, ya llegamos
De mas esta decir que la pasaron bien, las partes más divertidas según Edward eran ver a la gente asustada por hacer molestara a Xanxus y este les apuntaba. Transmutar algunas cosas para asustar gente, básicamente comportarse como un niño otra vez
Compraron ropa que fuera más común, ya que ir a un parque con un traje de vestir y ropa de asesino no era la mejor idea, además Edward necesitaba más ropa. Al final quedo Tsuna con un pantalón rojo vino, una camisa blanca algo holgada, corbata del mismo color que el pantalón y un sueter corte V color gris
Xanxus por otro lado tenía una camisa casi beige, abierta, un chaleco color vino tinto, un pantalón negro y botas y por ultimo Edward un pantalón negro holgado de varios bolsillos, una camisa gris con el símbolo de Flamel en ella y una chaqueta blanca con rojo. Listo el tema de la ropa, se montaron en el lujoso auto y se dirigieron hacia allá
—Sin el abrigo no pareces un mastodonte—dijo Edward sin ninguna vergüenza
—En cambio tú te ves más enano con esa ropa—Tsuna ya esperaba la bomba. Edward se le guindo a Xanxus el cual no supo reaccionar
— ¡¿A QUIEN EL ESTAS DICIENDO ENANO?! ¡¡YO NO SOY PEQUEÑO SOLO QUE EL MUNDO ES ASQUEROSAMENTE GRANDE!!
Y así fue como Edward Elric logro asustar a Xanxus di Vongola. Quitando este hecho llegaron al parque encontrando ciertas sorpresitas que no esperaron, aunque Edward estaba más pendiente de ver todo
—¿No se supone que estaban en la mansión?—pregunto Tsuna de brazos cruzado a Gokudera y Yamamoto, los cuales solo rieron nerviosamente
—Es que ya termine su trabajo, no le faltaba casi nada—rio Gokudera, de forma muy nerviosa
—Kusaga…—gruño Xanxus viendo a Squalo, Bel y Fran, aunque Lussuria también estaba, se retorcía como lombriz viendo a Edward
—Usted no nos prohibió salir ni nada—fue lo único que dijo el peli plata
—Quiero ir a la montaña rusa—dijo Edward cortando las discusiones entre subordinados, eso y que también ya iba a mitad de camino, sobre todo porque iba adelantado y con la gente que había en el parque de seguro lo perdían demasiado fácil –por ser tan enanito-
—¡¡Espera Edward!! — Tsuna salió casi corriendo tras el rubio que ya iba más lejos, que a pesar de tener las piernas pequeñas
—No recuerdo haber visto nada así en Ametris—decía Edward fascinado con todo, tan ido estaba que no se daba cuenta de lo infantil que parecía
—Entonces supongo que no hay parques de agua, centros de video-juegos…tienes que pasear más seguido antes de irte—dijo con cierta amargura
—Si es contigo de guía con gusta—le sonrió con cierta inocencia dejando un tanto pasmado a Tsuna—Ahora… ¿Nos subimos?
—Vamos…—dijo de forma nerviosa, no era de sus atracciones favoritas
Más que una salida para pasear parecía una cita, porque ahora iban solo ellos dos, robando cosas al zar, Tsuna vio que Edward tenía muy buena puntería, así como Edward descubrió que Tsuna era muy bueno en juegos de azar y adivinanza. Debido a la victoria de Tsuna les regalaron un peluche enorme
—Es…IGUALITO A ALPHONSE—empezó a reír Edward, el peluche era una armadura enorme, con una carita adorable, era prácticamente la misma armadura en la que vivió su hermano por tantos años
—Casualidades de la vida, ¿no lo crees? —dijo dándole el peluche
—Hey, está bien que quieras enamorarme y todo, pero no soy una chica—rio
—Entiendo que pienses eso, sin embargo esto te hará sentir que tu hermano está aquí, ¿no te parece? —pregunto, Edward se puso algo colorado, cosa que disimulo abrazando el enorme peluche
Siguieron caminando un rato, viendo los puestos, las luces y algunos juegos en los que podrían montarse, sin embargo Edward fijo su vista en algo que no estaba dentro del parque, sino en la calle contraria. Una iglesia
—¿Quieres ir? —pregunto Tsuna al verle tan… ¿interesado? en la iglesia
—No…solo pensaba en algo… nada importante
—… ¿Quieres montarte en la noria?
—Claro
Después de esperar unos minutos en la fila, ambos se montaron en la noria, Edward veía todo con cierta ilusión, a Tsuna le recordaba cuando llego a Italia, que veía todo con una fascinación impresionante. Cuando se veía la iglesia Edward volvió a fijar la vista en ella
—¿Hay algo de especial en las iglesias? Otra vez te has quedado viendo
—Solo pensaba…Que tanta gente que ora pero que sin embargo a ha roto las reglas de Dios… No todo es como lo pintan Dios no acepta a la gente que rompe sus reglas…. No acepta pecadores
—¿Cómo puedes estar seguro de que no perdona? —Pregunto Tsuna— Uno nunca sabe si algo es verdad o no hasta verlo con sus propios ojos
—Soy un pecador, no he muerto para seguir sufriendo—dijo con completa seguridad— Además quiero que pienses… al máximo de su potencial
—Me hizo sentir más vivo pero… El arriesgar mi vida, usar toda mi fuerza me hace temer el que moriré haciéndolo y dejare a mi familia sola—respondió con una sonrisa, bajo la atenta y pasmado mirada de Edward. No lo había visto desde ese ángulo, soltó una risita
—Eso es porque los seres humanos somos débiles, seres que morirán algún día y por eso queremos vivir al máximo y luchar, solo cuando lo hagamos nos volveremos fuertes
Empezaron a verse unos enormes y hermosos fuegos artificiales, de múltiples colores. Edward se pasó al lado de Tsuna y se recostó de su hombro para ver el espectáculo, pues la noria se había detenido para admirarlo, no había quedado en la sima, pero si tenían una buena vista
—Supongo que…No hay real apuro en volver—le murmuro. Tsuna sonrió y le beso la frente
—0—0—0—0—0—
—¿Cómo vas con eso Al? —pregunto la rubia, Alphonse estaba haciendo un enorme circulo en el suelo de tierra que había sin ocupar cerca de la casa. El rubio se levantó, haciendo pensar que tendría unos 10 u 11 años apenas, cuando ya de seguro tendría unos 17 o 18
—Winry me preguntaste lo mismo hace media hora—gimoteo el rubio, más que molesto por la insistencia
—Msh, no hace falta que te pongas así, solo estoy emocionada
—Aún no sabemos si funcionara, así que calmate—le regaño
Desde que volvió a su cuerpo –aunque este era de niño lamentablemente- empezó a buscar manera de devolver a su hermano, sabía todo lo que había pasado así que descarto la piedra filosofal, adema son sabia como transportarse a otro mundo. Sin embargo de la nada habían aparecido todos los militares que conocía
Armstrong –que casi le destruía su cuerpecito- Riza, Havoc, Mira Armstrong y Mustang, este fue el que más le sorprendió, por su muy fastidioso interés en su hermano –al cual protegería de nuevo de ser necesario y si lo lograba claro está- además de eso estaban Scar, Izumi y Ling Yao
—Con esto…podremos ir a ese mundo y traerlo de vuelta, podre estar con él por fin—decía ciertamente emocionado, desesperado, iría al mismo fin del mundo y daría su cuerpo de nuevo con tal de tener a su hermano de regreso— Mañana estará listo…y podremos viajar por la puerta…
Sin embargo y sin que lo viera estaban más personas, esperando a que el Elric menor completara el círculo y poder ir por el Elric mayor
—Padre estará muy feliz de que volvamos tan pronto con el—decía Lust, cruzada de brazos, metida entre los arboles
—Che, esto de buscar al enano no me motiva demasiado— decía Envy, restándole importancia al asunto
—Tengo…hambre…—lloriqueo Gula, con pequeñas lagrimitas y Lust le acaricio la cabeza
—En ese mundo podrás comer lo que quieras, solo tienes que esperar un poco mas—aseguro Lust—Y Envy… quizás te permita jugar con el
—Oh~ no lo había pensado~ Jugar con el Enano de nuevo será muy divertido…pero ¿dónde esta Creed?
—Sabes que anda de rebelde, de seguro ira con ellos—dijo como si nada—Mañana nos iremos de aquí