Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

~Syncretism~ por Even Von Shield

[Reviews - 42]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Capítulo II

Las flores de cerezo que brillan a la luz de la luna…

Una noche entraste a mi habitación para despertarme, yo enfadado lo hizo preguntándote el motivo de la visita nocturna

-Quiero enseñarte algo- susurraste porque mi madre estaba dormida justo a mi lado y al parecer no querías despertarla

-Enséñamelo mañana- te dije y me volví a recostar, pero tú seguiste insistiendo. Al final lograste sacarme de la cama. Ambos nos escabullimos por los pasillos, me llevaste al jardín- Ciel ¿Qué hacemos aquí?- me callaste sonriendo de manera juguetona, tomaste mi mano para jalarme, me llevaste justo a donde estaba el árbol de flor de cerezo, me quede sorprendido por lo que veía, las flores, que aún eran capullos, brillaban con la suave luz de la luna. Un brillo rosado, místico, quede fascinado

-Hermoso ¿Verdad?- tú también estabas fascinado. En ese momento no sé qué me tenía más fascinado, el árbol o tu inocente sonrisa-Cuando las flores están a punto de florecer, en la obscuridad, contra la luz de la luna brillan ¿Lo sabias?

-No pero ahora si- deje de mirar el árbol para mirarte a ti, de un momento a otro tu sonrisa se borró, me preocupe, pero antes de que pudiera preguntarte la razón tu hablaste

-Mi mamá me dijo… antes de morir que veríamos esto juntos- Ah, era eso, con cariño acaricie tu mejilla, tú te sonrojaste, eras tan adorable…- Así que… como ella no está aquí… quise ver esto contigo- ¿Por qué con unas simples palabras podías hacerme muy feliz? ¿Por qué…?

-Ciel cuando seamos grandes vamos a casarnos…- me miraste sorprendido, luego sonreíste y asentiste- Entonces hasta que seamos grandes, cada año hay que ver las flores de cerezo brillar

-¿Es una promesa?- estiraste tu dedo meñique, de inmediato lo entrelace con el mío

-Es una promesa- nos dimos un beso, dulce y tierno…

Desde ese día espere con ansias el siguiente año para ver las flores de cerezo brillar pero…

En diciembre, justo en tu cumpleaños, tu padre falleció. Fue una terrible desgracia, que te afecto demasiado. Esa hermosa sonrisa que tanto amaba desapareció de tu rostro, trate de animarte pero no pude…

Desde ese día nos empezamos a distanciar más… y más…

A los diez años tú te convertiste en el nuevo líder del Clan, un clan del cual no sabía nada. En un parpadeo tú te convertiste en un adulto, y esos cuatro años que nos llevábamos de diferencia se convirtieron en diez… veinte… treinta…

De pronto fuiste tan inalcanzable para mí...

Los sirvientes se empezaron a marchar, para ellos, que llevaban trabajando en esa mansión desde que tu padre era un niño, la muerte de tu padre fue muy dolorosa. Cada día les era más difícil servirte…   

Tú dejaste que se marcharan, no te importo en lo absoluto. Al final la única persona que quedo en la mansión fue mi madre, yo la ayudaba con los quehaceres, que eran bastantes. Terminábamos exhaustos pero a mí no me importaba, de alguna manera te estaba ayudando y eso me hacía feliz. Pero mi madre tampoco soporto el dolor, Vincent, el hombre que la había ayudado estaba muerto, la única forma de devolverle ese favor era sirviéndote, pero cada vez que te veía, veía a Vincent y eso con el tiempo le afecto, tanto que cada vez que te veía rompía en llanto 

-Lo siento, lo siento tanto… no puedo soportarlo- miraste a mi madre con comprensión

-No tiene que quedarse aquí…- mi madre te miro llorando, se disculpó un millón de veces para después empacar

-Nos iremos Sebastián, empaca tus cosas…- a pesar de que casi ni nos hablábamos yo no podía dejarte, no iba a dejarte- Sebastián

-Madre yo me quedare aquí- mi madre estaba sorprendida- Me quedare con Ciel- ella al principio se negó pero después…

-Son muy unidos ¿verdad?- asentí, quizá no tanto como antes pero seguíamos siendo unidos- Esta bien… cuídate… escríbeme… tonto…- mi madre me abrazo, me beso. Termino de empacar y se marcho

Ahí estaba yo, un joven de 14 años, en una mansión donde el dueño tenía solo 10 años. Sería difícil pero mientras estuviéramos juntos nada importaría. Subí a tu habitación y toque

-¿Adelante?- ¿Acaso pensabas que yo también me iría? Aún tenía que cumplir una promesa…

Al entrar tus ojos brillaron, se notaba que estabas feliz y eso a mí me hacía feliz. Aun me querías…

-Amo ¿Desea algo?- hice una reverencia, ahora sería tu mayordomo, la idea me divirtió aunque me abrumo

-¿Por qué…?- tu voz se cortó, yo solo te sonreí

-Porque no falta mucho para que las flores de cerezo florezcan- no dijiste nada, solo me miraste sorprendido, tus ojos estaban inundados de lágrimas pero aun así no dejaste que estas se escaparan

-Tráeme un té- a pesar de que querías decir más solo dijiste eso, sí que habías cambiado. Eras otra persona pero ¿Sabes algo? A pesar de que ya no eras ese dulce niño que siempre quise proteger, te seguí amando…

Los años pasaron, tú y yo ya no éramos esos inocentes niños. A tus 15 años ya eras todo un respetable y afamado Lord, la alta sociedad te admirada, algunos te envidiaban pero eras el centro de atención de Londres. Yo con 19 años, seguí siendo tu mayordomo y protector, me volví bueno en el manejo de armas para defenderte de las ratas que traban de eliminarte. Al parecer el Clan que tu padre dirigía, se encargaba de controlar los bajos mundos. Un trabajo peligroso para un jovencito como tu pero aun así hiciste tu mayor esfuerzo para convertirte en alguien que infundiera temor. Lo lograste…

Los quehaceres de la mansión por suerte ya no los realizaba solo, conseguiste sirvientes, inútiles pero fieles y leales. Un cocinero llamado Bard, que siempre quemaba la comida, una sirvienta llamada Meyrin, que siempre rompía las vajillas y un jardinero que parecía ser experto en marchitar flores. Ahora que lo pienso bien, mi trabajo en lugar de disminuir aumento… mi única verdadera ayuda era Tanaka

Un anciano japonés, que fue expulsado de su tierra por un motivo que no conocía, aun así nos llevábamos muy bien porque teníamos una meta en común, protegerte… y arreglar los desastres de ese trio de inútiles…

-Sebastián está listo el desayuno- dijo Tanaka dándome la bandeja en donde estaba el desayuno

-¿No puedes ir tu Tanaka?- le pregunte, no es que no quisiera verte, es que verte me dolía demasiado, me veías con indiferencia, casi con hastió. No podía soportarlo

-No puedo hacer todo el trabajo- tenía razón- Sebastián aunque no lo parezca el joven Ciel le gusta que le lleves el desayuno- si es así créeme que lo ocultabas a la perfección

-Ahora regreso- me molestaba que Tanaka, que había llegado un año después de la muerte de tu padre, fuera tu confidente. Todo se lo contabas a él, dejándome a mí en segundo plano. De mala gana me dirigí a tu habitación, vacía como siempre, camine hacia tu estudio donde pasabas la mayor parte del día, toque y tú me diste el permiso para entrar- Buen día amo- ya no podía llamarte Ciel, porque según tu estaba muy mal visto en la sociedad que un simple mayordomo le hablara con tanta confianza a su amo

-Buen día- siempre trabajando, a veces temía que murieras del cansancio, claro que no te lo decía para evitar conflictos- Deja el desayuno ahí y luego retírate- hizo lo que me dijiste, mire por la ventana del estudio que tenía una perfecta vista del árbol de cerezo, que estaba a punto de florecer…

-Ciel…- llame receloso, me miraste con algo de fastidio

-Te he dicho…- te interrumpí

-Si ya lo sé amo…Las flores de cerezo están a punto de florecer- de inmediato entendiste a que me refería- ¿Quieres verlas brillar?- aunque ya no sonreías tus ojos delataban la emoción que mis palabras te hacían sentir

-Yo…- alguien toco la puerta- Adelante…- entro la sirvienta con un invitado. Suspire decepcionado, un invitado significaba trabajo, trabajo que te dejaría cansado como para ver las flores de cerezo. La mejor hora era a medianoche, demasiado tarde para ti que siempre terminabas dormido a las diez. Hice una reverencia y me retire, obviamente molesto

Me dedique el resto del día a hacer los quehaceres de la casa y tú a tú trabajo. Como siempre no te vi el resto del día… 

Termine los quehaceres a medianoche, justo a tiempo para ver las flores de cerezo. Me senté cerca del árbol admirando ese brillo rosado, deseando que aparecieras para ver juntos las flores brillar.

-Es precioso- masculle para distraerme

-Lo se…- te mire sorprendido, ahí estabas mirando el árbol con fascinación, esa mirada que tenías cuando éramos niños  

-¿Qué hace aquí amo?- te pregunte, no pude evitarlo estaba muy sorprendido. Por tu trabajo terminabas exhausto y por eso no podías ver las flores brillar. Era lo mismo todo los años entonces ¿Por qué…?

-Quería ver esto junto a ti- te sonrojaste e hiciste que yo también me sonrojara. Aun tenías esa habilidad de hacerme sonrojar con simples palabras – Sebastián…

-¿Si amo?- estaba muy feliz pero no quería que lo notaras, me daba vergüenza que me vieras sonriendo de esa manera

-Dime Ciel- te mire, quede atónito, estabas sonriendo por fin veía de nuevo tu sonrisa. Como había extrañado esa sonrisa que tanto amaba

-Ciel…- acaricie tu rostro sonriendo de manera tan amplia que dolía- Cuando seamos grandes tú y yo nos casaremos…- te sonrojaste completamente

-Eso es imposible… tu y yo somos hombres… y…- dijiste con nerviosismo pero mis palabras te hacían feliz, tus ojos te delataban

- Hasta entonces, cada año hay que ver como las flores de cerezo brillan- pegue mi frente con la tuya, me costó porque eras muy pequeño, pero no importo solo quería estar cerca de ti, lo más cerca posible

-¿Es una promesa?- murmuraste estirando tímidamente tu dedo meñique

Esa pequeña acción me hizo tan feliz, tan feliz que creí que iba a llorar. En estos años lo único que podía pensar era que me odiabas, pero al parecer no era así

-Es una promesa- entrelace tu dedo con el mío para luego plantarte un beso, profundo y apasionado, que no dudaste en corresponder. Aun me querías

Pude sentir como de nuevo regresábamos a ser Ciel y Sebastián. Esos niños que prometieron estar siempre juntos…

¿Cómo pude olvidar que en este mundo nada es eterno? ¿Cómo pude pensar que después de esto tú y yo seriamos felices por siempre justo como en los cuentos?

Después de ese hermoso momento todo empezó a ir en mal a peor…

 

 

Notas finales:

Hola :3 Se que esperaban actualizacion de Winter roses pero tengo el conocido bloqueo de escritor D: Sepan disculparme, no durara mucho espero D: Ejem pero mientras tanto les traigo un nuevo capitulo de este fic :3 Les gusto? Es un poco mas largo que el anterior asi que espero no aburrirlas. Se acerca el drama asi que vayan preparando los pañuelos TTwTT lo digo en serio. Este fic solo tendra 5 capitulos, asi de corta sera la historia -w- Le dare un final feliz asi que traten de no matarme... Ya sabran porque~ Ejem espero de verdad que les guste el capitulo... 

Ahora me tomare el tiempo para agradecerles a todas esas personitas que comentaron en el capitulo anterior: 

Isa, mi hermanita CAMIL, Adriana_Velazquez254, Rosalyn, Ciel-Sakura, Gloria M D, Meyagatha, Homicidal_Queen1, Katie Phantomhive Muchisimas gracias por comentar :3 Sus bellisimos reviews son los que me animan a continuar escribiendo. Les regalo unas galletitas besos y abrazos -w- Muchas gracias de verdad <3 

Ejem Se que esperan Winter Roses pero como dije estoy bloqueada en ese fic, al parecer estar enferma me quito la inspiracion TT.TT sepan disculparme, hare lo posible para superar mi crisis Asi que paciencia por favor -w- Aun asi prometo actualizar pronto este fic -> Even Von Shield 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).