Curioso ¿no? La primera vez en sus tres años de noviazgo que llegaba temprano y era para ponerle fin. Baekhyun reviso por enésima vez su celular, desbloqueándolo solo porque si, sin motivo alguno deslizándose entre las aplicaciones, esperaba encontrar en alguna de ellas, algo que lo distrajera… 2:54, los segundos parecía estar congelados y a la vez sentía que pasaban demasiado rápido. El tintineo de la campana de la entrada elevo su vista, temeroso, buscando si aquel que acaba de ingresar era él. Nuevamente no lo era.
Se debatía entre las ganas de que por algún extraño motivo Chanyeol por primera vez desde que tenía memoria no llegará a una cita y así posponer su ruptura un poco más y el deseo de que llegará lo más pronto posible para terminar esto de una buena vez.
2:57 y la molesta campanita volvió a tintinear, una señora con demasiados chales entro, suspiró de alivio y cuando iba a hacerlo de frustración lo vio, a su novio-pronto-a-ser-ex, cerrando cuidadosamente la puerta de cristal, aunque era innecesario, pensó conteniendo una risita.
Antes de que pudiera asimilarlo ahí estaba él, Chanyeol dándole una sonrisa llena de dientes y disculpándose por haber llegado tarde, aunque en realidad llego dos minutos antes, pero él no lo sabía puesto que ‘Debía ser ridículamente tarde para que su Baek lo estuviera esperando’.
Ya no había vuelta atrás, mientras Chanyeol seguía hablando sin cesar de ciclistas invadiendo el paso peatonal y cuerdas de guitarra rotas, volvió a repetirse los motivos por los que debía hacer lo que haría. La imagen de una pequeña rubia paso por su mente, sus dudas e inseguridades, las ganas de intentar algo de nuevo, de avanzar un poco más y sabía que el alto solo lo estaba limitando.
“… entonces Baek, ya llevamos más de tres años y puede que suene un poco apresurado...” su torpe y apresurado hablar fue interrumpido por la suave voz de su pequeño aún novio.
“Chanyeol” Su voz se tornó más firme, había meditado la idea durante semanas y era hora de avanzar. “éste es nuestro hasta aquí”
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Todo estaba terminado. ¿Era lo que él quería? Si, ¿Por qué entonces se sentía tan vacío? ¿Por qué cuando Chanyeol solo agacho la cabeza y asintió, algo se rompió dentro de él? Baekhyun acaso estaba esperando que Chanyeol se negará a terminar lo suyo, que suplicará o al menos pidiera una explicación.
“Bueno, Baek, debo irme, ten un buen día” el sonido de la voz gruesa de su ahora ex novio nunca antes le había sonado tan seca e indiferente, ni siquiera cuando se conocieron o cuando discutían, dejándolo congelado en su asiento sin siquiera levantar la vista.
Un escalofrío lo recorrió, quería decir algo, despedirse al menos, pero para cuando logró reaccionar solo fue capaz de ver la ancha espalda de Chanyeol abandonando el local.
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Dos semanas pasaron y Chanyeol debía saber al menos el motivo, no quería preguntárselo directamente, sabía que Baekhyun le vendría con palabras bonitas y solo le daría vueltas al asunto sin dejarle nada claro, los rumores corrían sim embargo, y no le gustaba lo que decían. Ni una solo llamada o intento de contactarlo, sabían bien que si había sido su hasta aquí, pero no quería reconocerlo.
Una excusa, eso era lo que necesitaba, junto las cosas de Baek, unas prendas olvidadas, cartas y notas, siempre tan cursi, algunos regalos e incluso colocó el pendiente que nunca le entregó. Esa era su excusa, su última oportunidad.
Al llegar y tocar nadie le abrió, tal vez, solo tal vez, fue a la tienda, no tardará en llegar se dijo, pero el recepcionista fue claro, había salido hace un par de horas, tal vez a una cita. Eso dolió, pero se negaba a creerlo. No podía quedarse ahí, solo le entrego al amable señor que había aplastado sus esperanzas la bolsa. Su última oportunidad, aún podía funcionar.
Pero al salir del edificio se topó con la realidad, su respuesta estaba frente a él. Toda esperanza murió y lo entendió todo. Paso frente a ellos e ignoro la suplicante voz que dijo su nombre como queriendo explicarle la escena que había presenciado.
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Dos semanas de frenarse hacer esa llamada, dos semanas intentando algo diferente, no todo fue tan malo, ella era demasiado agradable, nuevas experiencias, había pasado tres años con Chanyeol, había olvidado lo bien que se sentía sostener una delicada mano femenina, pero aún había algo que faltaba, algo que no encajaba.
Una cita que posiblemente terminaría en sexo, lo supo cuando se dirigían hacía su departamento, eso era lo que quería ¿no? Para eso había terminado con su buen novio de tres años, para probar cosas nuevas.
O tal vez solo fue un idiota.
La alta figura que salió de su edificio y le lanzo una gélida mirada, se lo confirmo, solo era un idiota, miles de sentimientos burbujeaban por salir de él. Solo habían pasado dos semanas pero la necesidad de estar entre sus brazos, de abrazarlo, implorarle perdón y besar de nuevo sus labios, regresar a hace dos semanas, retroceder el tiempo o solamente hacer como si nunca hubiera pasado.
Un suave “Chanyeol” dejo sus labios, pero su ex novio solo lo paso de largo. Ese día no termino en sexo con ella, ni siquiera fue capaz de volver a tocarla. La bolsa que recibió del recepcionista junto con la nota dentro solo lo destrozo un poco más, si era un idiota, de los más grandes idiotas.