Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Acosador por accidente por ElleLover

[Reviews - 22]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Cuando Hiro se despertó y fue otra vez a esa psicóloga con la que le había ayudado a evitar sus mentiras, empezó a estar cansado de todo aquello:

 

-        Mira, seré completamente sincero, sin rodeos: hay una  persona que está totalmente en su mundo. Y me ignora. Duele. Sé que le gusto, pero por alguna estúpida razón no quiere estar conmigo. Y… yo quiero acercarme a ella, y poco a poco lo he ido haciendo, pero no sé lo que quiere, ni qué quiere que haga… nada fluye o sucede como desearía. Y me emparanoyo y… me pone de mala leche.

La mujer suspiró.

-        Debes olvidarla, pues. ¿Acaso no te está haciendo un “mal”?

-        No: no me da la gana. Y no es ella, es él: es un hombre.

-        ¿Ah, y él… es también…?

-        Sí. A él también le atraen los hombres. De hecho, sé que le atraigo yo. Pero, no sé ya qué más hacer. Me duele verle así, tanto… que… No sé…

Presionó sus puños.

-        Me hace odiarme a mí mismo… pensando que soy una especie de acosador o de débil obsesionado. Me hace sentirme mal, sí… pero en el fondo no es su culpa.

La psicóloga empezó a apuntar cosas en su libreta, pero Hiro no estaba para perder tiempo.

-        No apunte, dímelo. Sin rodeos. Si se equivoca o no está segura, es igual. Estoy harto de verla escribiendo cosas sobre mí y que no me las diga. Deja de apuntar, dímelo…

La psicóloga le sonrió, intentando tranquilizarle, pero solo le hizo sentirse más nervioso.

-        Traspasas tu obsesión compulsión hace lo que más quieres. Antes necesitabas las mentiras para llamar la atención de alguien especial. Ese alguien especial parece saber, de algún modo, que eres una molestia, a pesar de que… te quiere. Solo que no puede seguir tu paso. Tu… “enfermedad obsesiva” y autodestructiva. Tampoco quiere decírtelo, porque tiene miedo… de que la tomes luego con él.

El peliblanco se quedó traumatizado.

-        ¿¡No me quiere!?

-        Tal vez tendrías más posibilidades si… te medicaras un tiempo contra estos pensamientos obsesivos hacia él. Si te centraras en otras cosas, pero fueras manteniendo una relación sana con él: luego confiaría en ti.

Hiroshi estaba en blanco. Desmotivado.

-        Él tampoco es un ejemplo de persona madura. Pero creo que juntos podríamos…

-        Entonces dependeríais el uno del otro. Y no quiere que tú dependas de sus problemas, ni quiere que tú les pases los tuyos. Tal vez, solo está esperando el momento oportuno. Lo mejor que puedes hacer es… estar tranquilo, feliz. Incluso podrías alejarte una temporada de él.

-        ¡Ya lo hice! Y sigue… ignorándome. Cada vez que me ve me trata como si tan solo fuera un amigo, cuando sé que si… si…- empezó a llorar- ¿Me ve como una carga?

-        Háblalo con él. Tan solo digo que las personas con una velocidad de pensamiento tan grande como la tuya. Y tan… ehm, apasionadas… pueden cansar a cierto tipo de personas que…

Empezó a llorar.

-        No: yo sé que se lo pasa bien conmigo.

-        ¿Cómo lo sabes…?

-        Lo noto… Porque me fijo en cada detalle, porque me preocupo por saberlo, y me preocupo para no hacerle preocupar de más… sobre lo mucho que se preocupa y…

La psicóloga dio una palmada.

-        Basta. Debes parar esto. ¿Qué más te gusta? Sal con otra gente. ¿Hay otro tipo de personas que…?

-        Sí, pero no son él… Hay un chico que está colado por mí, está estudiando medicina, lo conocí cuando viajé  y… lo hicimos y … somos como amigos, pero… Si empiezo algo con él, sé que… no sé, aún estaré pensando en Hiroshi-san y…

La psicóloga volvió a dar una palmada.

-        Bórralo de tu mente. Si él no estuviera, ese chico te gustaría? Te verías preparado para una relación? Porque a veces, arriesgarse, puede ayudar a olvidar y tener una perspectiva más…

-        ¿Oye, esto está bien? ¿Decir que deje de querer a quien amo y que me vaya a otro para olvidarlo? No creo que sea algo tan…

La psicóloga sonrió.

-        Puedes seguir viniendo a sesiones. Contarme mil y una obsesiones más sin fin y no obtener resultados porque te resistas a cambiar. Ahora has mejorado tu sintomología patológica a la mentira. Pero lo que ahora te hace mal, es pensar en ese chico… Es esta obsesión hacia él. ¿No crees? Pues haz algo para mantener tu cabeza ocupada. Y pasar tiempo con gente que te gusta o darles una oportunidad para abrir una nueva puerta al amor, puede ser una de esta elección.

El peliblanco se levantó, serio.

-        Claro… sí, creo que ya tengo mi elección…

******

Una persona con capucha iba por la calle, a pesar del calor, tapada y con gafas. Se dirigió hacia dos hombres que estaban hablando en una cafetería.

-        ¿Hiro?

Por alguna extraña razón, su primo se levantó, interponiéndose, como siempre.

-        ¿Qué pasa, no tuviste suficiente con…? Aagh….

De repente, de su cuello saltó un montón de sangre al haber brillado en el aire un afilado cuchillo. Cuando Hiroshi se dio cuenta de aquella situación solo pudo saltar de odio.

-        ¿¡TE HAS VUELTO LOCO!? ¿¡QUÉ COJONES…?!

-        Lo siento. Te quiero… por eso, debo hacer esto.

La gente empezó a gritar. Y de repente se escuchó un disparo, que fue directo al corazón del muchacho, el cual recordó ese primer beso con ese inocente chico del cual ya no había ni un ápice…

Le miró con un asco profundo.

-        Gilpoll…

Ambos cayeron en el suelo. Pronto unos hombres empezaron a llamar a la policía, que se acercaba. Pero pudo deshacerse de ellos. Cuando estuvo en un callejón sin salida, cansado y con los pies temblando, se dio cuenta de que la sangre que tenía por todas partes no era falsa. Que los gritos y las sirenas de policía tampoco. Que acababa de matar… a dos de las personas que más amaba… y odiaba. Sí… se había vuelto loco. El corazón empezó a dolerle.

Se tiró en el suelo, apuntándose en la boca. Llorando de miedo. Llorando de dolor. No podía permanecer en vida. No podía… Tenía que…

-        Si tan solo… me hubiera… hecho caso yo…

Volvió a colocar la pistola en la boca. Del modo correcto. Shinji… posiblemente, saldría de aquello. Él no era nadie importante. Nunca lo había sido. Nunca había encajado en ningún sitio. Ni bajo el sol, ni en el amor, ni en la familia… ¿Pero por qué no podía disparar el gatillo?

Gritó, desesperadamente, agarrando la pistola con fuerza, para que suciediera lo que sucediera, ese estúpido dolor, vergüenza y sincontrol desapareciera. Estaba harto de todo y de todo el mundo. Estaba harto de sí mismo…  Sí… lo estaba.

PUM

 

*****

 

En el cementerio había habido un montón de personas que no conocía de nada que se pararon hacia la tumba de las víctimas. Un montón de velas y flores . Shinji aún no podía creer que su senpai hubiera hecho algo como aquello.

 

Shinji aún no podía entender cómo no podía hacerlo predicho. ¿Por qué no le dijo nada? ¿Tanto… le quería? ¿Y él qué? ¿Por qué no le había llamado…?

-        ¿Por qué me has apartado de la única meta que me hacía feliz? La de verte sonreír…

Empezó a llorar, desconsolado. No se había atrevido a decirle a su padre. Él no solía mirar las noticias. Y su madre no sabía que conocía a Hiro-kun.

-        ¿Por qué me dejas solo…? Podrías haberme matado a mí también, imbécil.

Le escupió en la tumba. Pero, pronto, cuando iba a irse, empezó a limpiar su tumba con los utensilios que había llevado, especiales, para quitar esos graffitis y esos huevos y mensajes horribles. ¿Quiénes se creían que eran para insultar a su sensei?

Recordó esos momentos en la tienda, cuando le había hecho excitarse y sentir el cielo. Su cálida sonrisa. Su pasión, esa patada.

-        Teníamos que luchar, ¿no te acuerdas…? ¿Mentiste otra vez, eh? Claro, senpai. Siempre lo has hecho, para seguir adelante. Las personas tan puras como tú no pueden vivir en este mundo. No pueden amar.  No importa, comprendo tu dolor…  En cierto modo, me alegro… Descansa en paz, sensei. Deja de sufrir… estés donde estés.

Las lágrimas empezaron a derramarse.

-        Yo viviré por ti. Para que te sientes orgulloso. Ya que decidiste, por consciencia o ignorancia, que viviera, ¿verdad? Muy bien… así lo haré.

Suspiró, como si una parte de él fuera liberada… y muerta. Una parte malvada.

-        Puede que sea lo mejor… No habría aguantado mucho más así. Entiendo tu sufrimiento. Lo entiendo. Fuiste valiente..

Sonrió, psicópatamente.

Claro que sí.

-        Está en nuestra naturaleza… senpai. Hiciste lo que debías hacer. Nadie puede ignorarnos… somos especiales. Sí, lo eras… senpai. ¿Por qué no me viste a mí? Ellos no nos comprenden… Ese imbécil era un puto perdedor. Pero te obsesionaste con él solo por tus ilusiones, por el pasado… todo era una mentira… ¿Por qué no me viste a tiempo? Estabas ciego, ciego… senpai. Pero no es tu culpa… El deseo del amor te venció… No supiste alejarte o entender… te dejaste llevar.

Siguió limpiando.

-        ¿Ahora a quien voy a acosar, eh? Nadie puede compararse a ti.

Pensó en ese estúpido de Hiroshi: una persona débil. Que nunca da nada claro.

-        Ah, claro… odio ese tipo de personas. Las que se mienten a sí mismas: tú, al menos, sabías que las personas que usan las mentiras para mentirse a si mismas son patéticas, ¿Verdad? Tú veías el miedo de Hiroshi. Pero tú no mentías por miedo… Sino porque era divertido. Esa era la diferencia entre tú y Hiroshi. Tú eras un psicópata… él, un farsante. Yo era tu querido destino… ¿por qué…? ¿Qué podría haber hecho…?

Rió, intentando pensar lo que le diría.

-        “Nada”. Cierto. Bueno, pues… Me he cansado de acosar. Voy a pasar a la acción, por ti… mi querido sensei. Este tipo de personas que dan a mal entender a los demás, con su estúpida debilidad que confunden con poderío. Son… patéticas.

Rió, pensando ya en imitar a su sempai, usando un cuchillo.

-        ¿A él con una pistola, verdad? No te atreviste ni siquiera a mancillarlo con tus propias manos. Tu estúpido farsante, ahí, desde un altar… para no ver sus errores. Pero seguro que te decepcionó, al final, ¿verdad? Seguro que te miró con desprecio, ¿eh?

Sonrió.

-        Yo no: y estaría encantado, senpai… Esa es la diferencia entre él y yo. Pero yo voy a tocarlos y mancillarlos… Esos hombres estúpidos que juegan a ser lo que no son.

Se sintió mareado, aún con las lágrimas en su cara. Costaba de quitar esa  maldita pintura.

-        Los primeros serán esos malditos gamberros que han hecho esto. – “como si fuera un accidente”.

 

“Luego, seguiré el patrón que hubiera querido mi senpai.

¿Cuando tardarán en atraparme? Cómo saldré en los diarios?

¿Sospecharán de un modélico estudiante de medicina?”.

 

Será interesante.

 

Notas finales:

 

:D ....

 

xDDDD ahora empiezo a entender al escrito de juego de tronos. Una vez matas a un personaje, no es tan difícil matar unos cuantos más, no? A pesar de cojerles cariño... la historia te lo pide...

 

Shinji: esto me convierte en el protagonista, ahora...

Hiro: COMO HE PODIDO VOLVERME UN PUTO ASESINO DE LA NOCHE A LA MAÑANA, EEEEEH!?

Hiroshi:... pues porque lo eres. Mientes, me persigues, me besas sin mi permiso. 

Takumi: ... **demasiado enfadado para verbalizar algo**

 

Shinji: ... mi senpai hizo bien... 

Hiro: YO NO QUIERO QUE MATES, SHINJI!? QUÉ COÑO TE INVENTAS?! Ha sido un momento de dolor y de... yo que sé, sí que estaba furioso pero, pero... aaarg, sí...  ODIO ESTE PUTO MUNDO. NUNCA ME HA GUSTADO.

 

Hiroshi: pero se supone que me amabas, cabrón...

Hiro: PERO NO A MÍ!!

Takumi: podrías haberme dejado vivo, NO?!

Hiro: No. Porque me utilizaste de pequeño, confundiendo mi mente con tu mirada de pérfido pedófilo... Evidentemente contaba mentiras, si sentía tu estúpida y sexual mirada a...

Takumi: no puedes culpar a nadie más qe a ti mismo... Hiro. 

Hiroshi: es injusto...

Hiro: joder, pedías a gritos que te mataran, porque no eras capaz de hacerlo tú mismo. Ha sido un acto de amor... Hiroshi-kun...

Hiroshi: quizás tienes razón...

Takumi: Y YO QUÉ!? 

Hiroshi: el castigo por esas veces que me hiciste ponerme el osito... y...

Takumi: ESTÁIS LOCOS. 

 

Shinji: tú te lo buscaste, Takumi... eres tan culpable como ellos: podías haberte apartado a tiempo, pero no lo hiciste. 

 

Takumi: SÍ, CLARO, AHORA ES CULPA MÍA ESTAR RODEADO DE PSICÓPATAS ASESINOS EN SERIE. Bueno, ya no... porque estoy muerto, claro. Joder... mi puta vida, vaya mierda ha sido. Yo, que aún quería formar una familia y ser el mejor de los padres y que todo elmundo dijera: "oh, qué trabajador y masculino es tu padre" y yo le diría a mis hijos: "algún día, si te esfuerzas, llegarás lejos, como yo"... 

 

Shinji: Tú estás bien muerto... no me caís bien. ¿Cómo pudiste jugar sexualmente con mi senpai? Te odio... Si me hubiera enterado, te mataría. 

 

Ellelover :D ajajaja...

 

Feliz... regreso!? ^o^ ... cuando pueda, 3a parte de Hell Butterfly xDDDDDDDDDDDDDDDDD

 

LO SIENTO, SOY CRUEL


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).