Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

THE CHOICE por Libi lulu

[Reviews - 108]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Bueno este nuevo Fic esta en progreso, pero es algo que ya habia empezado hace tiempo, pero ahora estoy inspirada, mi Fic "El tirano y la estrella" me ha traido comentarios que en realidad me animan mucho a seguir adelante con mis historias, y aun que aun no logro conseguir los reviews y lectores que perdi en "Sacrificio" al borrar la historia por error, espero que en verdad mis lectores la sigan nuevamente. 

 

Bueno sin mas... les dejo el prologo..

-Joder!- Joder-

-Himuro Tatsuya, por los cargos de Homicidio premeditado y  asalto a mano armada, se le condena a cadena perpetua-

-Imposible…eso es…im…posible- La rubia estallo en llanto, no podía controlarlo, todo eso le parecía un sueño, una pesadilla, un castigo de dios o del mismísimo diablo. No estaba muy segura que habrían hecho ellos 2 para que el Karma se la cargara contra ellos.

*Joder debe ser una broma*

 

Himuro no se podía creer lo que le estaba pasando, hace tan solo 3 días que le habían acusado injustamente, no pensó que las cosas fuesen a terminar así.

 

-FLASH BACK-

 

Había salido a comprar algunas cosas para su esposa, al parecer la regla le había llegado de improviso en una ida al baño, y en ese momento se dio cuenta que los suministros de toallas femeninas se habían terminado.

 

Se dibujo una sonrisa en el rostro, más bien una ligera carcajada, que no paso desapercibida para los transeúntes que paseaban por la calle que daba al autoservicio.

 

Era de noche, más bien de madrugada y hacia un poco de frio afuera, se recordó mentalmente llegar a su casa y prepararse un buen chocolate caliente.

 

Llego al establecimiento, y saludo al muchacho en la caja, muchacho que ya conocía de más, un muchacho alegre y simpático que siempre le recibía con una sonrisa en el rostro.

 

-Himu-chan! que haces aquí a esta hora?- Decía el rubio, dejando unas cajas a un lado para ir a saludarle.

 

A Himuro le llenaba de ternura ese muchacho, había algo en el, tal vez la manera en la que dejaba de hacer, lo que estuviera haciendo, solo para ir a saludarle, o la manera en la que se sonrojaba cuando le pasaba la mano por el cabello, no sabía que era exactamente pero había algo en el que le alegraba el día.

 

-Vengo, por unas cosas para mi esposa!-

 

-Claro, claro, bueno lo dejo tengo que … - El chico apunto a la caja, donde ya había una persona esperando por ser atendido.

 

-Y Ryo?, no está contigo hoy?- Pregunto Himuro algo curioso, ya que el turno nocturno es peligroso y siempre habían 2 personas en la tienda a esas horas.

 

-Está tomando una siesta, dijo que estaba muy cansado por qué había pasado todo el día con su novio.-

 

El chico se encogió de hombros, con una expresión tan inocente que era imposible no reírse en su cara, pero Himuro tomo todo el autocontrol de su cuerpo y solo asintió, para seguir su camino por el autoservicio, buscando las benditas toallas sanitarias.

 

--

-Apúrate y saca todo de la caja!-  Esa voz autoritaria, y amenazadora hizo que Himuro asomara su cabeza por uno de los pasillos, para tener acceso visual a la caja, donde estaba Kotaro, nervioso e intentando abrir la caja registradora, que se negaba a ceder.

 

El asaltante tenía poca paciencia, y los nervios de Kotaro hacía que sus manos no le respondieran como debiera.

 

Se acerco Sigilosamente, sin que nadie le viera.

 

-Apúrate o disparo…no tengo tiempo suficiente, como para perderlo contigo, así que o la abres o te mato!-

 

El chico encapuchado, seguía amenazando al pobre de Kotaro, que en vez de hacer las cosas mejor, solo empeoraba su temblor y por ende se hacía más torpe a la hora de intentar abrir la dichosa caja registradora.

 

Himuro temía por Kotaro, y por el mismo. Pero ahora el que estaba en peligro era el pequeño rubio, con lo asustado que estaba, era seguro que no lograría abrir la caja, y por lo ansioso que se veía el asaltante, era seguro que había consumido alguna droga y no dudaba que el dinero del asalto, lo quisiese para seguir con su vicio.

 

-Joder! es suficiente!-

 

El asaltante perdió la paciencia, y Himuro pudo escuchar cómo se preparaba el arma para disparar, cuando gracias a la adrenalina no lo pensó 2 veces, y sin saber cómo llego justo tras el asaltante.

 

-Que demonio…-

 

El asaltante logro voltearse e intentar disparar a Himuro, pero el moreno es tan hábil, casi imperceptible, que logro tomar la pistola antes de que lo hiciera, pero Ryo salió corriendo por el susto del impacto, y un disparo más, una bala perdida le dio a Kotaro en el lado izquierdo de la cabeza, dejándolo inconsciente inmediatamente y haciendo que Ryo se desmayara en el instante en que vio la sangre brotar del lado derecho de la cabeza de su amigo.

 

-KOTARO!-

 

Himuro grito con desesperación, quería correr y tomar a su amigo en brazos, pero, ese no era el momento, aun estaba su vida en juego…

 

-Bastardoo! sueltalaa!- El asaltante estaba nervioso, y un criminal con arma en mano  y siendo acorralado, es sumamente peligroso.

 

Himuro también estaba asustado, que hacer?, el muchacho seguía disparando al aire, por el forcejeo, afortunadamente ya no había nadie en la tienda, y Himuro solo rezaba por que alguien escuchara el disturbio y llamara a la policía.

 

Himuro intentaba quitarle el arma, logro invertir la posición del arma que había estado apuntando hacia su lado, y un disparo mas se soltó de la pistola.

 

En ese momento el tiempo se detuvo un momento, para después retomar carrera, pero esta vez en  cámara lenta, los ojos del encapuchado se fijaron en los de él y vio lentamente como esos ojos negros se apagaban, su mirada se perdía, y un montón de liquido rojo se deslizaba por la comisura de sus labios.

 

Himuro lo sintió deslizarse por su cuerpo hasta quedar en el suelo, lo observo un par de minutos, hasta que se dio cuenta que sus amigos estaban inconscientes.

 

Se acerco y reviso los signos vitales de ambos, y se dio cuenta que los de Kotaro se apagaban, casi eran impredecibles.

 

Saco su celular e intento llamar a la policía, pero llego justo cuando se puso el auricular en el oído.

 

-LEVANTE LAS MANOS!-

 

Entraron gritando, y apuntándole. No entendía muy bien como se dieron las cosas, pero ahora estaba boca abajo y siendo esposado.

 

FIN FLASHBACK

 

 

 

 --to be continue--

Notas finales:

ENJOY AND SHARE n.n


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).