crecer por Kurumiedo

Viendo nuestro encuentro de lejos

Debo decir que tal vez... desde un inicio no eras para mí.

Miraba de lejos sus lanzamientos... tan ridículamente altos... tan ridículamente perfectos.
En su pecho el odio tan intenso lo sentía menguar... por algo más calido y fuerte.
Es un absurdo; se decía constantemente.
Pero aquellos sentimientos no cambiaban... bueno, sin contar que solo crecían.
Era frustrante que queriendo odiarte, no lo hiciera... mis sentimientos por ti eran todo lo contrario.
Comencé a tratar de conocerte, saber que te gustaba y acercarme a ti.
Es tan irónico.
Al acercarme a ti tuve cuantas razones me preguntarán para quererte, miles.
La más importante: estabas solo.
Te quise desde el primer momento.
Te quise desde que supe que estabas solo.
Desde que me enteré de lo que paso con la Kiseki no Sedai.
Desde que te conocí.
Pero tú me alejabas.
No me querías cerca... siempre levantabas una muralla infranqueable, y todos los esfuerzos que hacia se destruían en segundos.
Me costo tanto que me aceptaras como amigo.
Supe que confiabas en mí en la técnica que desarrollamos para el partido contra Akashi, pero eso era solo como un jugador.
¿que podia hacer para que me consideraras como tu amigo... o algo más?

Hasta ahora solo he recibido dos muestras de que confías un poco en mí.
-que me dejes llevarte en la carretilla.
-nuestra técnica.
¿pero... me consideras tu amigo?
Eso pienso siempre... y no me gusta la respuesta.
Al admitirlo hoy, me doy cuenta que cuando me iba a dar por vencido sucedio lo del partido contra Rakuzan.
Lo deje al azar; al destino.
Si perdia te dejaria tranquilo.
Perdimos.
Pero te acercarte a mi... y al final nos besamos.

-nuestra técnica.

¿pero... me consideras tu amigo?
Eso pienso siempre... y no me gusta la respuesta.
Al admitirlo hoy, me doy cuenta que cuando me iba a dar por vencido sucedio lo del partido contra Rakuzan.
Lo deje al azar; al destino.
Si perdia te dejaria tranquilo.
Perdimos.
Pero te acercarte a mi... y al final nos besamos.

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Viendo nuestro encuentro de lejos
Debo decir que tal vez... desde un inicio no eras para mí.

Miraba de lejos sus lanzamientos... tan ridículamente altos... tan ridículamente perfectos.
En su pecho el odio tan intenso lo sentía menguar... por algo más calido y fuerte.
Es un absurdo; se decía constantemente.
Pero aquellos sentimientos no cambiaban... bueno, sin contar que solo crecían.
Era frustrante que queriendo odiarte, no lo hiciera... mis sentimientos por ti eran todo lo contrario.
Comencé a tratar de conocerte, saber que te gustaba y acercarme a ti.
Es tan irónico.
Al acercarme a ti tuve cuantas razones me preguntarán para quererte, miles.
La más importante: estabas solo.
Te quise desde el primer momento.
Te quise desde que supe que estabas solo.
Desde que me enteré de lo que paso con la Kiseki no Sedai.
Desde que te conocí.
Pero tú me alejabas.
No me querías cerca... siempre levantabas una muralla infranqueable, y todos los esfuerzos que hacia se destruían en segundos.
Me costo tanto que me aceptaras como amigo.
Supe que confiabas en mí en la técnica que desarrollamos para el partido contra Akashi, pero eso era solo como un jugador.
¿que podia hacer para que me consideraras como tu amigo... o algo más?

Hasta ahora solo he recibido dos muestras de que confías un poco en mí.
-que me dejes llevarte en la carretilla.
-nuestra técnica.
¿pero... me consideras tu amigo?
Eso pienso siempre... y no me gusta la respuesta.
Al admitirlo hoy, me doy cuenta que cuando me iba a dar por vencido sucedio lo del partido contra Rakuzan.
Lo deje al azar; al destino.
Si perdia te dejaria tranquilo.
Perdimos.
Pero te acercarte a mi... y al final nos besamos.