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Take a sip of my secret potion (I'll make you fall in love) por BurnOurGlories

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
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Notas del capitulo:

Perdón por la demora y aquí les traigo el segundo capítulo!!!

No sé cuantós capítulos sean pero planeo que esta primer arco no sea muy largo.

Gracias por sus reviews~

Disfruten!!!

 

 

 

1st Spell: Of first impressions and innocent crushes.

 

Kim Jongin terminó de bailar al tiempo que la música también acababa. Aterrizó suavemente sobre el piso de madera realizando una ágil pirueta. Abrió sus ojos con lentitud. Lentamente su cerebro volvía a conectarse con la realidad, saliendo del estado de trance en el que se encontraba.

 

Pestañeó varias veces antes de lograr finalmente enfocarse en el salón de danza. Lo primero que miró a través del espejo fue a un niño que lo observaba con ojos como platos desde la puerta de la estancia. Jongin sonrió de lado. Que lo miraran como aquel niño no era nada nuevo para él.

 

Un primer vistazo al niño y ya supo cómo etiquetarlo: «geek otaku de biblioteca». Jongin frunció los labios. De todas las personas que podrían observarlo ¿realmente este chico era el que tenía que hacerlo? El muchacho llevaba ropa holgada sobre su delgada figura, haciéndolo verse más pequeño de lo que realmente era. Cabellos rubios casi blancos caían desordenadamente sobre el rostro, ocultando los ojos. Sin embargo, ni las platinadas hebras eran capaces de ocultar la gruesa (y horrorosa) montura cuadrada de sus lentes. Seguramente era de primer año.

 

El bailarín bufó, girando rápidamente y encarando al intruso quien dio un pequeño salto al verse descubierto.

 

—H-Hola— murmuró el niño, fijando la vista en el piso mientras se removía notablemente incómodo. Jongin estaba dispuesto a ignorarlo cuando el joven alzó el rostro, sonriéndole con calidez, exclamando— ¡Eso fue muy hermoso!

 

Observó ojos somnolientos tras unas gafas de montura cuadrada, los orbes eran de un tono peculiar parecían ser negros pero brillaban con destellos violetas. El muchacho tampoco era atractivo al verlo una segunda vez pero algo acerca de los extraños ojos junto a la piel extremadamente pálida que hizo a Jongin detenerse.

 

—Gracias— respondió Jongin sin sonreír.

 

El niño lo miraba con emoción juntando sus manos en pequeños puños frente a su pecho. Jongin suspiró. Un fanboy más. Él ya tenía demasiado, no necesitaba uno más y menos aún alguien como ese chico.

 

—Mi nombre es Oh Sehun y hoy es mi primer día en esta escuela—anunció el más bajo casi dando saltitos de felicidad. Jongin apretó los labios.

 

— ¡Qué bueno! —siseó en una mueca— Soy Kim Jongin y voy retrasado a clase.

 

Se apresuró a salir del salón de danza, dejando atrás al otro. Nadie debía verlo siendo amigable con alguien como Sehun, su reputación caería hasta el piso.

 

A Kim Jongin no le gustaban los perdedores.

 

~*~

 

A Park Chanyeol siempre le habían gustado las mañanas. Fue una mañana exactamente hace dos años en las que conoció a Do Kyungsoo. Recordaba aquel día cómo si hubiese sido ayer. 

 

Estaba sentado conversando con sus amigos al final del aula cuando el profesor entró pidiendo a todos volver a sus asientos. Chanyeol se sentó en su pupitre al final juntó a la ventana, mirando aburrido a través de ella el panorama. Escuchaba al profesor como si estuviera lejos y estaba ya próximo a quedarse dormido cuando lo escuchó por primera vez.

 

—Buenos días, mi nombre es Do Kyungsoo y espero que podamos ser buenos amigos— dijo él sus labios sonrientes formaban un corazón.

 

En aquel entonces el Kyungsoo de catorce años lucía completamente diferente al de hoy en día. Durante esos días el menor siempre usaba ropas holgadas, tenía el cabello despeinado y escondías sus ojos azules tras lentes. Su apariencia destartalada le pareció a Chanyeol sumamente adorable.

 

Una mañana durante un tardío verano, Chanyeol tuvo su primer flechazo.

 

La mañana de hoy era cálida, las últimos trazas de lo que quedaba del verano poco a poco desvaneciéndose. Chanyeol tocaba las cuerdas de su guitarra dentro del aula de música mientras Kyungsoo, Baekhyun y Jongdae practicaban armonías.

 

Parecía ser que la música era lo único en común que Chanyeol y Kyungsoo tenían. No tenían mucho en común por lo cual el mayor siempre atesoraba las clases de música. Mientras tocaba miraba a Kyungsoo fruncir el ceño mientras golpeaba a Baekhyun en la cabeza con una flauta. Kyungsoo era algo cruel pero era adorable cien veces más.

 

Estaba acostumbrado a la indiferencia de Kyungsoo pero Chanyeol siendo Chanyeol hacía todo lo posible en llamar la atención del menor aunque eso le hiciera ganarse unos cuantos golpes. Rió por lo bajo pero al parecer fue demasiado alto ya que el pelinegro le lanzó una mirada asesina. Chanyeol amplió su sonrisa. ¡Oh sí! Era un masoquista.

 

Un micrófono se estrelló extrañamente sobre un ojo de su cara. Chanyeol soltó un quejido frotándose el lugar lastimado mientras hacía un puchero. Kyungsoo le dio la espalda.

 

Era obvio que aquel el menor no le lanzó el micrófono, los separaba una distancia considerable. De no haber sabido qué realmente era Kyungsoo aquello habría dejado a Chanyeol perplejo. El mayor sabía que el pelinegro era un brujo.

 

Los seres mágicos no necesariamente ocultaban sus verdaderas identidades, los humanos y la magia vivían en armonía desde hace cientos de años. Era muy simple el saber quién es un ser mágico y quién no ya que los primeros ocultaban su verdadera apariencia hasta que sus respectivos cuerpos podían ya dominar conscientemente la  magia que poseía. En el caso de los brujos la mayoría de edad llegaba a los dieciséis.

 

Chanyeol esbozó una pequeña sonrisa mientras escuchaba a Kyungsoo cantar. Habían pasado dos años desde que lo conoció y su primer flechazo naturalmente se había transformado en amor.

 

Kyungsoo podría no notarlo todavía pero este nuevo año, su cuarto y último año en la preparatoria, Chanyeol, haría lo posible para hacer que el brujo lo amara también.  

 

~*~

 

La preparatoria para el gran y maravilloso Byun Baekhyun era aburrida. Sin embargo el castaño pretendía hacer que su cuarto y último año fuera el más sensacional de todos. Sólo había un problema, no sabía cómo hacerlo.

 

Su novio Kim Jongdae lo miraba atentamente. Ambos estaban sentados en la cafetería de la prepa, Baekhyun esperando su próxima víctima mientras que Jongdae se limitaba a observar las extrañas expresiones que surcaban el rostro de su novio. Nunca era aburrido ser la pareja de Byun Baekhyun, Jongdae rió por lo bajo.

 

El brujo de ojos verdes frunció el ceño al ver a su novio reír ¿Qué era tan gracioso? Jongdae amplió su sonrisa. Baekhyun lucía aún más lindo cuando se enojaba.

 

Fue entonces cuando dos personas más se sentaron en la mesa que la pareja compartía. Baekhyun reluctantemente puso su atención en ellos y no se arrepintió. Junto a Kyungsoo (quien no le llamaba la atención porque lo veía siempre) estaba un muchacho delgado, con los cabellos platinados despeinados y gruesas gafas de montura cuadrada. En un instante supo lo qué aquel chico era y también de quien se trataba. Su amigo pelinegro le había hablado varias veces acerca de su dongsaeng de la capital, un tal Oh Sehun con el que había crecido. Debía tratarse de él.

 

Frunciendo el ceño Kyungsoo los presentó.

 

—Este es mi dongsaeng que vino desde la ciudad capital de Feu, Oh Sehun— dijo. El muchacho hizo una venia hacia ellos— Sehunnie se quedará durante un tiempo aquí.  

 

— ¡Así que tú eres Sehun! —Exclamó Baekhyun emocionado antes de inclinarse, tomar la mano de Sehun y sacudirla fuertemente— Yo soy Baekhyun y este de aquí a lado…— murmuró pegando un codazo a su pareja— Es mi novio Jongdae.

 

El susodicho se encogió de dolor pero saludó a Sehun atentamente.

 

— ¡Eres tan lindo! — admiraba Baekhyun, mientras se trepaba en la mesa para poder alcanzar los cabellos del rubio y jugar con ellos. Sehun bajó aún más la cabeza, pronunciando un suave, gracias.

 

—Ya déjalo Baek, lo vas a asustar. — insistió Jongdae alejando al mayor del pobre chico.

 

—Aunque…— susurró el castaño— Te verías aún más lindo sin esos lentes— Sehun alzó la vista y unos ojos violetas brillantes lo miraron confundido— Es una lástima que no puedas quitártelos— Baekhyun le guiñó un ojo al atónito muchacho.

 

— ¿T-Tú también eres…?

 

El brujo de ojos verdes asintió, esbozando una enorme sonrisa.

 

Kyungsoo ignoraba a todos comiendo diligentemente de su plato, parecía estar de muy mal humor. Baekhyun lo sopesó unos instantes hasta llegar a la única conclusión que siempre traía lo peor de Kyungsoo. Park Chanyeol, mejor conocido como el hiperactivo gigante de cuarto año.

 

¡Oh esto era grave! Kyungsoo parecía estar a punto de explotar. No sería que, gracias a la mala suerte, Park Chanyeol y él eran…

 

— ¿Soo Hyung, pasa algo? — preguntó inocentemente Sehun.

 

«Terrible equivocación» pensó Baek. Pero para su sorpresa, al parecer el pelinegro le tenía al rubio una enorme paciencia. Fingiendo una sonrisa Soo negó con la cabeza.

 

—No es nada, Hunnie— aseguró— Solo hay personas molestas— murmuró por lo bajo con un tono algo agresivo.

 

Sehun que al parecer sabía cómo tratar a un malhumorado Kyungsoo, se encogió ligeramente de hombros y desvió la vista a su plato.

 

Baek observó a al brujo de ojos azules, concluyendo que en efecto sí, los hados de la mala suerte se había alineado. ¡Park Chanyeol y Do Kyungsoo eran compañeros de clase! El tiempo de las desgracias estaba por venir. El castaño, sin embargo, sonrió con malicia. Sus días de diversión finalmente habían llegado.

 

El castaño desvió la vista hacia la izquierda, dos mesas más allá de la suya, donde un alto muchacho con los cabellos castaños rizados miraba hacia ellos, más específicamente hacia un pelinegro que usualmente fruncía el ceño.

 

No había que ser demasiado inteligente para saber por qué Chanyeol molestaba tanto al brujo de ojos azules. Sin embargo, era parte de la personalidad de Kyungsoo ser demasiado denso como para darse cuenta de las intenciones del más alto. Sumándole la poca capacidad que tenía el pelinegro para ser sincero con él mismo, aquel romance estaba destinado al fracaso. Pero, no había de que preocuparse, Byun Baekhyun haría que todo terminara en color de rosa. Era un experto en cuestiones del amor y si no le creían, su novio podía testificar a su favor.

 

Sus ojos se iluminaron y miró a su novio con una enorme sonrisa en el rostro. Jongdae lo comprendió al instante, negando con la cabeza intentando ahogar una carcajada.

 

Byun Baekhyun había encontrado su misión para este año escolar.

 

~*~

 

Las tardes eran aburridas en su casa por lo que usualmente Jongin las pasaba en la casa de algún amigo. Aquella tarde había decidido pasarla en la casa de Chanyeol. No es que particularmente fuera  cercano con él pero el gigante era el dueño de una televisión UHD de ochenta pulgadas más la última consola de video juegos que había en el mercado. ¿Así que por qué no aprovechar su amabilidad al ser invitado?

 

Había estado  sentado en la sala del gigante por más de dos horas, cansado abandonó el control junto a Chanyeol y anunció que iría a acostarse en la habitación del mayor un momento. El castaño distraído por el juego tan sólo asintió sin prestarle mucha atención.

 

Jongin subió por las escaleras hacia la habitación de Chanyeol, cerró la puerta y antes de lanzarse a la cama para echar una siesta, un movimiento en la esquina de sus ojos llamó su atención.

 

El venía a casa de Chanyeol frecuentemente y sabía que la casa de a lado no estaba ocupada. Pues bien, eso había sido hasta antes de las vacaciones de verano. Usualmente Jongin pasaba aquellos días en la casa de su hermana mayor, en la ciudad capital. Por lo que era la primera vez que venía a casa del gigante desde hace dos meses.

 

Las casas en aquel sector eran todas iguales, teniendo la misma distribución siempre. Curioso, se subió a la cama de Chanyeol, tomo unos binoculares tirados sobre ella (¿Quién sabe para que los usaría Chanyeol?… ¿tal vez para acosar a Kyungsoo?) Y miró a través de ellos hacia la habitación frente a él.

 

La estancia estaba algo desordenada y llena de cajas. A penas podía ver por el visillo de las cortinas quién era el dueño de la misma. Una figura se acercó a la ventana abriendo las cortinas. Jongin se inclinó ligeramente para no ser descubierto. Al momento de volver a espiar (según él, solo estaba observando a los nuevos vecinos de Chanyeol) notó una silueta conocida sentada sobre la cama. Era Byun Baekhyun. El moreno enarcó las cejas, confundido. ¿Qué hacía Baekhyun ahí?, ¿acaso se había mudado allí?

 

Entonces notó otras dos siluetas entrar. Do Kyungsoo quien lucía fastidiado (como siempre), jalaba del brazo a otro chico dentro de la estancia. Sabía que el pelinegro vivía cerca de su casa y que Baekhyun no se mudaría de su hogar. Así que el chico junto a Kyungsoo era el nuevo vecino de Chanyeol. No pudo observar quién y cómo era, puesto que había desaparecido por una puerta, seguramente el baño.

 

Jongin se encogió de hombros listo para dejar los binoculares para abandonarse a una siesta cuando una puerta volvió a abrirse, dando paso al muchacho desconocido. Sin poder aguantar la curiosidad, volvió la vista a la habitación frente a él.

 

De no haber sido por el peculiar tono de sus cabellos rubios, Jongin no lo habría reconocido.

 

Oh Sehun miraba su reflejo por un espejo de cuerpo entero, peinando las hebras platinadas con sus dedos mientras conversaba con los otros dos. Las ropas que llevaba no eran holgadas y abrazaban su delgada complexión en una manera angelical. Volteó sonriendo, dejando a Jongin con los ojos como platos. Su rostro estaba compuesto por suaves y dulces líneas. Nariz respingona, mejillas sonrosadas, labios finos pero de un fuerte tono de rosa, la piel pálida parecía brillar con la suave luz del sol que se colaba. Ojos de un violeta brillante miraban con emoción hacia sus amigos. En ese entonces las facciones del rubio no eran tan marcadas, mostrando el dulce y suave rostro de quien no deja todavía la niñez. El muchacho reía despreocupado y totalmente inconsciente de que Jongin lo observaba.

 

Despertó de su ensueño cuando Kyungsoo se movió hacia la ventana. Rápidamente se lanzó sobre la cama de Chanyeol mientras sentía a su corazón latir como loco. Sin saber si se trataba por ver tal angelical imagen o por ser casi descubierto.

 

El Kim Jongin de quince años era un muchacho inmaduro, superficial que se creía invencible y pensaba que era el rey del mundo, sólo por ser uno de los más populares de la preparatoria. Al Kim Jongin de ese entonces solo le importaban las apariencias y el qué dirán.

 

Así que con la inmadurez del caso y con su corazón latiendo a mil por hora, se propuso una nueva conquista para sumarla a su lista de «bellezas con las que he salido».

 

Jongin robaría el corazón de Oh Sehun. Lo haría enamorarse de él y mostraría la verdadera apariencia del rubio a todos sus amigos. Sehun y Jongin serían los reyes de la preparatoria.

 

Poco sabía Jongin que lo que pasaría después cambiaría su vida para siempre. 

 

~*~

 

Notas finales:

Con este cap finalmente he terminado con la introdución de los personajes principales y apartir del siguiente es donde la verdadera historia empieza ya que nuestro querido "Trigger" Baekhyun ha aparecido.

Si algo malo pasa de ahora en adelante culpen a Baekhyun y su complejo de cupido.

Espero les haya gustado!

Reviews son amorr~~

 

xoxo

 


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