[En la calle]
Luego de pasar por la plaza en la que kid dio solo una vuelta porque casi le roban, y tuvo que escapar fue a parar a una feria que inauguró la ciudad.
(-cualquiera se hace hombre con un arma en la mano, demonios-) aun kid seguía pensando en lo que paso, igual ya había golpeado a uno porque lo molesto por su pelo rojizo, pero vinieron más, de 6 y la cosa se puso peor.
Buscando en su campera de color gris, quería hallar el móvil pero no lo encontró, para su mala suerte, empezaba a llover de nuevo, por culpa del clima tuvo que entrar a un bar.
Cuando entro, vio que había una riña, pero al no darle importancia le pidió al cantinero una ronda, beber en la tarde no hacía nada malo, eso si debia como gastar 2 horas más para ir a su trabajo, se había hecho tarde ya. Borrachos siendo arrojados por cualquier lado, la risa de los demás haciendo burla seguía en pie.
-¡voy a matarlos a todos! giles!!- gritaba un rubio violentamente hacia todos los que miraban, -¡y a ti también pelirrojo! ¡No he acabado contigo en la facultad!- decía más convencido.
Escupió totalmente lo que estaba ingiriendo tranquilamente kid, no porque tenga miedo sino que ahora él también estaba envuelto en otra pelea sin su voluntad, lo tomo por sorpresa eso sí.
Voltio la cara con el ceño fruncido para ver quien le daba esa venganza, pero al fijarse que era un flacucho solo se giró de nuevo a la barra, ni le dio importancia. –¿Me da 2 más de esto?- decía kid al cantinero
-bueno- respondió el cantinero.
-¡¡¡oyeee!!!- entonces otros se abalanzaron encima del rubio, el cual este los mando por los aires, con patadas muy rápidas, casi ni podían notarlo y ya estaban por el suelo. Era muy ágil, con respecto a los atacantes, más porque estaba sobrio, los demás no lo estaban.
La pelea se puso más seria porque al cantinero le estaba preocupando que se rompían las mesas con la caída de los que seguían al rubio
-deténganse por favor- decía a medias con miedo y sugiriendo a los demás. Un borracho quiso golpearlo pero antes de que intervenga el pelirrojo, el rubio le embarro su zapato en su cara, fue más como una patada voladora.
-si vas a pelear hazlo en otro lado imbécil- decía aun tomando su bebida kid, el rubio no hizo más que fruncir más su ceño, largarse de ahí por la puerta aun molesto, no sin otros que los siguieron afuera.
Se escuchaban gritos y golpizas afuera del bar, pero siempre pasaba estas cosas cuando caía la noche
-muchas gracias – dijo asentando su cabeza al pelirrojo
-lo único que debes hacer, es agarrar el dinero de los borrachos caídos así pagan lo que dañaron jejeje- se fue riéndose, pero no sin antes pagar las copas.
Del otro lado de la puerta, apenas salió el pelirrojo vio a un mal herido rubio que aun seguía en pie, los demás huyeron cuando vieron que de su zapado salía mucha sangre, se había puesto muy serio ya…además de que tenía una navaja en la punto del mismo (zapato).
-¿realmente querías matarlos, jejeje que rudo- decía con una esbozante sonrisa, y se asentaba sobre una pared
-¿no ibas a venir por mí también?- decía con más burla que antes
-¡callate! Llegaste tarde, pero voy a …- diciendo eso estaba acercándose, pero callo de cara al suelo. (-me das lastima quien quiera que seas..-)
-dame tu celular- decía el pelirrojo sin ganas
-encima que estoy indefenso ¿¿¡¡quieres robarme??!!- decía el rubio más alterado sin poder casi moverse
-ahggg…abandono de persona…uhhhg- diciendo eso el rubio se dio cuenta de aquello, le entrego su celular que estaba en su bolsillo.
-llamo al hospital le dijo de su emergencia, le dijeron que aguarde con el lastimado- ahí le cortaron y el pelirrojo quiso lamentarse por hacer aquello, tener que esperar a la ambulancia es un jodido problema ya que tardan mucho para eso el ya san…
Un golpe dio en su cabeza, un choque mental, un recuerdo que lo sintió en carne viva.
Algo que jamás olvidare, no dejare que pase de nuevo. No otra vez…
-¿ahhhgg que haces?- decía el rubio enojándose más porque estaba siendo cargado por el pelirrojo
-cállate, solo cállate ¿bien?- no estaba pensando kid ya, solo estaba en otro trance más, podía recordar como si esto estuviera pasando en el pasado mismo, lo que no hizo, lo que dejo de lado, tenía la culpa, no lo tenía pero el mismo se la echaba.
Rápidamente agarro un taxi, para llevarlo al hospital por su cuenta, sus acciones podrían haber sido innecesarias pero no, no podía dejar de estar en el trance en el que se había metido ya.
Corrió sin más cuando bajo del auto para dirigirse a urgencias y…
-kid…- dijo el rubio al sorprenderse que una gota le había caído en la cara.
No lo sabía, seguía en el trance pero no se daba cuenta de que el mismo estaba lanzando unas lágrimas que no paraban de salir, la cara de frustración y angustia seguían en su rostro, no podía cambiarlas.
(-¿Que estoy haciendo?-)
Dijo ya sentado en un asiento, agarrándose la cabeza con las manos, la presión que hacia sus dedos no paraban.
<<tiene sentido que no lo hayan traido aquí antes>>
<<no es tu culpa, fue una bala y le dio en un órgano vital… no había salvación>>
<<eres su amigo y ¡¡¿no lo sabes?!!>>
<<¡kid quiero verlo también!, yo quiero ir con ustedes a verlo>>
Las voces de su cabeza lo enloquecían otra vez, no quiero recordar otra vez estas cosas, pero la culpa sigue llamándome, no puedo hacer nada ya, sus pensamientos hacían que se altere mas.
Se fijó en su reloj y ya faltaba poco para su trabajo nocturno, el rubio ya estaba en una habitación, en cuanto se marchó del hospital dio aviso a sus familiares para que lo acompañen.
¿Y por qué daba esta ayuda nuestro kid? Eso es porque esto mismo le recuerda a una pérdida de un amigo suyo, el cual falleció por no tratarlo rápido, el rubio le hizo recordar a ese amigo…
Salió rápidamente del hospital para irse de una buena vez a su trabajo nocturno, se le iba a hacer un poco tarde pero debia llegar. No quería perder ese laburo, era lo único que los mantenía.
Más tarde –
Cuando salía de madrugada de su trabajo, su celular vibro, el cual se lo había devuelto su amigo killer cuando fue al bar, supuestamente kid se los olvido en su casa.
-¿qué pasa?-
- kuroashi no tiene familiares cerca, podrías cuidarlo por mí- decía la voz de una chica joven
-¿quién eres?-
-su ex –
-¿cómo conseguiste mi celular?-
-lo dejaste anotado en un papel que recién lo agarre…-
(-sabía que debia dejarlo adentro de su cuarto-) pensaba eso el pelirrojo.
A pesar de que no tenía un lugar en donde quedarse para dormir, tuvo que redirigirse de nuevo al hospital, no es como si él estuviera a punto de morirse pero, los daños que tenía advertían de algo grave, que podía o no serlo.
Sin ganas se quedó sentado en la silla de espera cerca de la habitación del rubio, mientras observaba a las enfermeras, era lo único que lo sacaba de su aburrimiento. Después se aburrió de eso y decidió molestar a alguien, así que se dirigió a entrar a la habitación del hospital donde estaba ese rubio.
Cuando entro lo único que fue a ver fue su pulsera, lo único que no sabía de él era su nombre, su apellido si le sonaba mucho, al parecer se incomodaba con cualquiera menos con las damas claro.
-¿qué haces?- dijo el rubio poniendo mala cara cuando tomaron su mano
-solo viendo como te llamas- decía mientras lo leia
-me hubieras pregun.. oye!!- decía casi gritando el rubio –¡esa es mi comida!- siguió diciendo
-mmm no tengo otra cosa que comer, no puedo ni volver a mi cuarto, de seguro sigue follandose a el otro- decía mientras se comía el espagueti del rubio
-…- no respondió nada el que estaba con las vendas
-ah sí me llamo tu ex, dijo que eres terrible como hasta para preocuparse por ti- decía kid mientras arrasaba con los postres también.
-lo entiendo…- dijo más lúgubre el rubio, se le veía sin ganas de nada.
-eres aburrido- decía kid sin retención a nada
-¿te vienes a burlar de mi solamente?- cambio la cara más el rubio a molesta por el comentario del pelirrojo
-¡¡jajajaja das mucha pena!!- seguía riéndose el pelirrojo aun, pero se detuvo cuando el rubio dijo –me diste asco cuando lloraste…- dijo también burlándose el vendado
-…- la cara de kid se volvia en shock de nuevo, (-¿había llorado? ¡¡¿¿¿Cuando???!!- ) si lo hice no se había dado cuenta. El rubio no pudo evitar reírse de la cara que ponía el pelirrojo asi que sin más soltó que –no te preocupes, tú me has salvado el cuello, no contare lo que paso si?- dijo más aliviado pero aun sonriendo
-si lo hace-¡! – Interrumpido por el rubio, -mi nombre es kuroashi Sanji, y no hace falta que me amenaces te doy mi palabra- dijo más serio.
-demonios- eso fue lo único que se pudo escuchar a el pelirrojo al ver que no podía hacer nada para divertirse
Lo cual sanji empezó a reírse mucho, pero luego de un momento paro sus carcajadas. –tú crees que ¿lo hubieras salvado si lo llevabas como me llevaste a mi hoy?- dijo en un tono más preocupado.
-no estoy seguro…pero hubiera hecho el intento- dijo el pelirrojo mirando casi al suelo.