Jeonghan mordió su labio sintiendo el deseo a flor de piel, era cierto que no le agradaba Scoups al 100%, pero tenía un cuerpo de infarto y se aseguraba una buena noche a su lado. El morocho había deseado tener esa fina silueta entre sus brazos desde que lo vio, pero esa noche se sentía diferente
Ya no era ese ángel del cual se había obsesionado y creado tan retorcido plan para llevárselo a la cama, sino que comenzaba a ser calculador y frío, a pesar de que su cuerpo pedía a gritos entrar en el del cantante, no podía engañar por siempre a su corazón, él necesitaba sentirse amado, y muy en el fondo sabía que con Jeonghan no conseguiría ni un cuarto de eso.
Lo tomó con delicadeza de su fina cintura y lo besó, cumpliendo con las reglas de su tarjeta, al principió supo fingir el amor y la pasión que requiria aquello, pero no lo aguanto por mucho, se separó de los bellos labios del ángel y fue a buscar una bata en su baño, cubriendo con esta al rubio –cúbrete, te vas a resfriar- le sonrió de manera triste
Jeonghan al ver el cambio brusco en el ánimo de su líder no pude evitar preocuparse –estás bien?? Sucedió algo en el café?- le preguntó levantándole el rostro a lo que el morocho negó –ohh!!! No te gusto verdad?- le preguntó enfadándose un poco, por la cabeza del rubio pasaban tantas groserías para aquel momento pero prefirió guardárselas. Scoups lo había molestado tanto para llegar a ese momento que realmente no cabía en su cabeza que sucedía
-no, no, no… me encantas, eres hermoso, cualquier hombre estaría dispuesto a matarme por estar en mi lugar y en este momento, pero … yo no necesito esto en mi vida- le respondió sorprendiendo a ambos por las palabras del rapero –en el pasado he utilizado a cualquier mujer que se cruzaba en mi camino, y creí que con un hombre encontraría la satisfacción que tanto busqué y nunca encontré… pero hoy mientras los demás hablaban de sus relaciones en el café… me sentí tan desdichado … yo no anhelo más placeres vacíos… yo necesito amor, deseo con toda mi alma sentir por primera vez amor- le susurró
-Jeonghan … sé que no te caigo bien del todo, y siento que estás cediendo a esto por el bendito juego y no porque realmente lo quieras, y sí acepto la propuesta que me estás dando, retrocederé todos los escalones que quise avanzar desde el café hasta aquí… perdóname, pero no tengo ni tendré tiempo para ti- terminó dejando un gran silencio en la habitación
-wooow- dijo Jeonghan caminado hasta la puerta de la habitación para apoyar su cabeza en la madera –osea que me preparé mentalmente desde anoche al vicio? Eres molesto- le dijo haciéndolo reír. Se acercó a su líder y le dio un tierno beso en la mejilla –gracias – le sonrió para luego abrazarlo, Scoups aún se encontraba en shock, se imaginaba que el rubio le iba a hacer alto escándalo, o se iba a reír de él… pero se encontraba abrazándolo de manera reconfortable, trasmitiéndole algún tipo de amor por primera vez.
-gracias por entender- le sonrió pellizcándole una mejilla, el ángel sonrió y agarró la tarjeta que estaba en la mesa de luz y la rompió –hagamos de cuenta que esto nunca pasó- le sugirió el menor -de acuerdo- sonrió Scoups. –me iré así descansas- agregó el rubio, pero el mayor lo detuvo – descansa tú, yo iré a ver televisión- le sonrió, ya que ambos compartían habitación era lógico que, por lo menos aquella noche durmieran separados –Scoups… no vayas a molestar a Wonwoo- lo señaló de manera acusatoria –por más que lo hiciera, no se levantará- le respondió saliendo de la habitación. Caminó en silencio hasta llegar a la sala encontrando todo más que oscuro y silencioso, abrió la heladera y se sirvió un vaso de agua
-eres un idiota- susurró apoyando su cabeza sobre la superficie de la pared. Se quedó un rato allí hasta que escuchó un fuerte ruido seguido de un gruñido –lpm estos idiotas que dejan las cosas por todos lados- gruñó alguien. Scoups sonrió al reconocer el tono de voz y las palabrotas
El compositor prendió la luz llevándose un gran susto al encontrar a Scoups allí, -que demonios ¿SCOUPS QUIERES MATARME? – le gritó sosteniendo su pecho, el rapero sonrió dejando el vaso sobre la mesada. Al no obtener respuesta del mayor, el de cabello rosa se preocupó -¿quieres hablar?- le preguntó llevándolo hasta el sofá
Una vez que se sentaron, Scoups no sabía cómo comenzar aquello, sí existía alguien a quien el morocho tenía terror de que lo juzgue, ese era Woozi, ya que era su amigo y colega con quien hacía prácticamente todo… y que él de cabellos rosas ya no lo respetara tanto como lo hacía… provocaba que su azúcar bajara a cero -¿hyun, sucede algo?- le preguntó al ver la cara de desconcierto del mayor –no pude hacerlo- le susurró
Los ojos del más chico se agrandaron no creyendo lo que escuchaba, el morocho habló por prácticamente cuatro años sobre sus ganas de tener a Jeonghan y a decir verdad era el responsable de que su corazón se convirtiera en una roca -¿qué sucedió? recuerdo que siempre esperaste por este momento- le preguntó sintiendo como la capa dura de su corazón temblaba.
-fue por culpa de Mingyu- gruñó sorprendiendo al menor – no es lo que piensas, no me mires así… el pendejo no dejó de hablar sobre Wonwoo en toda la noche… se veía tan feliz cuando pronunciaba su nombre, y cuando él le respondía en sus caricias, me sentí tan… miserable- susurró desordenando sus cabellos – descubrí que ya estoy grande para tonteras, necesito alguien que me ame, que me apoye en mis pensamientos, en mi carrera, que esté en mis proyectos de vida… alguien con quien compartir el resto de mi vida… Jeonghan no se quedaría a mi lado ni en un millón de años- susurró terminando con un gran suspiro
-osea que al fin maduraste- concluyó el de cabellos rosas –llámalo así si quieres- rió el rapero recostando su cabeza sobre las piernas del compositor -¿ y qué vas a hacer?- le preguntó acariciando sus oscuros cabellos –supongo que esperar a que un alma bondadosa se apiade de un tarado como yo y quiera compartir un sentimiento – suspiró cerrando sus ojos ante la sensación que el menor le provocaba
-dichoso que tu corazón quiere amar a alguien… el mío se cansó de esperar- durante la charla un pequeño brillo de esperanza se instaló en los ojos de Woozi, brillo que volvió a apagarse al ver que Scoups nunca lo consideraría como candidato –hace frio hyun… me voy a dormir- le avisó levantándose despacio – ten buenas noches – le sonrió tapándose con la frazada que había allí –no irás a tu habitación?- le preguntó el menor deteniéndose en el pasillo –no… dejaré que Jeonghan duerma solo… le daré el espacio que se merece- susurró cerrando sus ojos, escuchando como el menor cerraba la puerta de su habitación y luego la volvía a abrir –duerme conmigo- le susurró apretando los puños con fuerzas sin dejar de mirar sus pies descalzos. Scoups se levantó riéndose de ternura ante la escena
-estás seguro?- le preguntó, normalmente cuando compartían habitación era porque tenían una canción que terminar o temas relacionados con el grupo, como fue armar esa fantástica idea del juego –sí no me acompañas … traeré mi guitarra y correrás la misma suerte que Dokyum- lo amenazó… sintiéndose nervioso, se golpeó mentalmente al descubrir que era un desastre cuando se trataba de relaciones. Scoups se levantó riéndose por lo bajo, acompañando al pequeño a su cuarto
Una vez dentro Scoups se sentó en la cama pero Woozi se quedó parado en la puerta observando a su líder –¿vendrás o tengo que amenazarte también con tu guitarra?- le preguntó divertido. Sacudió su cabeza alejando todo tipo de pensamiento y se acostó al otro lado de la cama.
-hace frío, ven aquí- cerró sus ojos con fuerzas cuando escuchó aquello de su líder a la vez que un fuerte brazo se pasaba por debajo de su cuerpo, se descolocó cuando aquel fuerte brazo lo dio vuelta con tanta facilidad dejándolo sobre el fuerte pecho de su compañero –ahora sí, duerme- agregó dándole un beso en la mejilla
Lo último que haría Woozi era dormir, ya que en el último rincón de su cerebro disfrutaba aquello, aunque sabía muy bien que no se volvería a repetir, la respiración del mayor se volvió pesada indicándole que estaba oficialmente dormido –¿nunca pensaste que quizás yo quiero ser esa alma bondadosa? Yo por ti podría cambiar, no te imaginas cuanto - susurró contra su pecho a la vez que sus lágrimas amenazaban con salir
Lo que no se esperó es que Scoups abriera un ojo a la vez que sonreía, para volver a cerrarlos sin interrumpir la tempestad de pensamientos que tenía su compañero