Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un Paciente Complicado por yaonita

[Reviews - 175]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola ^^

Lo primero de todo…

¡¡¡Feliz Año Nuevo!!!

Si, ya sé que es pronto todavía pero como ya no escribiré hasta el miércoles, me adelanto XD

Y ahora vamos al lío, nuestros chicos se merecen un poco de diversión ¿No?

Espero que os guste el capítulo ^^

Un beso

Yaonita

13. La carrera.

(Erick)

Dos días tuvieron que pasar para que pudiera volver a ver a Rody, a mis padres no les había gustado mucho que me hubiera saltado las clases particulares y decidieron que tenía que recuperarlas. Además Rody seguía de vacaciones, así que tampoco podía verle durante la rehabilitación.

Por suerte, hoy le vería de nuevo.

Debo confesar que estaba muy emocionado y algo nervioso. Rody no había parado de decir que me tenía algo preparado que me encantaría, y yo no había parado de imaginar que podía ser lo que me tenía preparado.

Mis padres sabían que iba a salir con Rody, pero aún no sabían la relación que habíamos comenzado, de todas maneras estaban encantados con que saliera con él fuera por lo que fuera.

Estaba tan emocionado que, como un tonto, me había pasado horas eligiendo la ropa que me iba a poner, aunque Rody me dijo que fuera con ropa cómoda, pero aún así quería verme guapo.

Una tontería, sobre todo si tenemos en cuenta que yendo en silla de ruedas poco iba a poder lucir mi ropa, pero estaba tan emocionado que parecía una quinceañera en su primera cita.

A veces me avergonzaba de mi mismo.

Sonó el timbre y todo mi cuerpo se tensionó, ya había llegado. Lucila fue a abrir la puerta y dejó pasar a Rody.

- Hola Erick ¿Ya estás listo? – Fueron sus primeras palabras. Le vi con ganas de saludarme con un beso, pero no quería hacerlo delante de Lucila. Por suerte no había nadie más en casa, no quería tener que responder preguntas indiscretas.

- Si, hace un rato que te estaba esperando – Reconocí – Si fueras un caballero no deberías de dejarme esperando – Me burlé.

- He llegado cinco minutos antes de la hora en la que habíamos quedado, la próxima vez llegaré media hora antes – Me la devolvió – Anda, vámonos – Me abrió la puerta para que saliera.

- Adiós Lucila – Me despedí de ella.

- Adiós señorito, páseselo bien – Se despidió ella.

- ¿Señorito? – Rody me miró aguantándose la risa.

- No te rías de mí o cambio de opinión y me quedó en casa – Le amenacé.

- No se enfade conmigo señorito – Comenzó a reírse – Por cierto – Dejó de reír – Estás muy guapo – Se acercó y me dio un beso – He querido hacerlo desde que te vi.

- Me he puesto lo primero que he visto en el armario – Mentí. Un chico jamás debía saber que te esforzabas por estar guapo para él.

- Pues sin duda has acertado – Me ayudó a subir al coche.

- ¿Cómo convenciste a Laura para que te dejara el coche? – Pregunté.

- Le he tenido que dejar mi preciada moto – Comentó molesto – Es una granuja chantajista.

- Veo que te tiene bien pillado – Comencé a reírme ahora yo.

Íbamos en el coche escuchando música, discretamente le eché un ojo a Rody. Aunque iba con ropa cómoda al igual que yo, iba muy guapo. Llevaba unos pantalones tejanos sin cinturón, provocando que se le cayeran dejando ver parte de su ropa interior, y lo que es mejor, parte de su piel. Y en la parte de arriba llevaba una camiseta gris de manga corta que le quedaba como un guante y dejaba ver que no solo era alto, sino que también estaba muy bien dotado. Apunté mentalmente preguntarle si iba al gimnasio, porque si eso era de naturaleza, la naturaleza podía llegar a ser muy injusta. También me deleite con sus numerosos tatuajes, que adornaban su brazo como si fueran una prenda más de vestir, un día tendría que preguntarle lo que significaban cada uno de ellos.

- ¿Qué estás mirando con tanto interés? – Me sobresalté al darme cuenta de que Rody me había pillado observándole.

- No, nada – Me hice el tonto, no era el momento de hablar de sus tatuajes – Sólo me preguntaba a donde me llevabas.

- Es una sorpresa – Sonrió – Primero iremos a un sitio y luego iremos a cenar.

- ¿No puedes darme una pista? – Necesitaba saciar mi curiosidad.

- Llegaremos en diez minutos – Fue lo único que me dijo.

Y efectivamente, diez minutos más tarde estábamos aparcando delante de un circuito de velocidad ¿Un circuito de velocidad?

- ¿Un circuito de velocidad? – Pregunté en voz alta lo que me preguntaba en mi interior. Rody ya me había sacado del coche e íbamos camino a la entrada del circuito.

- ¿No habías venido nunca? – Pues no, nunca había estado en un circuito de velocidad.

- Nunca – Comenté – ¿Y a qué hemos venido?

- A hacer carreras – Fueron sus palabras, yo le miré completamente pasmado.

- Ya sé que voy en dos ruedas, pero dudo mucho que pueda correr en un circuito de velocidad con mi silla de ruedas – No entendía nada.

- Que gracioso – Comenzó a reírse, en realidad yo no había querido hacerme el gracioso, lo decía en serio – No vas a correr en tu silla de ruedas, vamos a pilotar un kart.

- Ahora el gracioso has sido tú – Comencé a reírme ahora yo – ¿Cómo quieres que conduzca un Kart si ni siquiera puedo caminar? Y eso sin tener en cuenta que no tengo carnet de conducir.

- Para conducir un kart no hace falta carnet de conducir, es muy fácil, solo tienes el acelerador a tu derecha y el freno a tu izquierda, no tiene marchas ni nada de eso – Comenzó a explicar – Y solo estaremos tú y yo haciendo carreras, así que no vas a tener problemas.

- Te has olvidado del punto más importante – Le miré con incredulidad – No puedo mover mis piernas pedazo de mastodonte.

- Renacuajo, si puedes mover tus piernas, lo que te falta es fortalecerlas y esta será una forma de que pasándotelo bien vayas ganando fuerza en tus piernas – Me sonrió con superioridad.

- No me puedo creer que hasta en nuestras salidas aproveches para hacerme terapia – Suspiré resignado – ¿Y si te digo que no quiero? – Puse morritos.

- Esta salida la tenía prevista cuando me dejaste plantado, me hace mucha ilusión hacerlo contigo, va a ser muy divertido Erick créeme – Intentó convencerme – Vamos a intentarlo y si realmente eres incapaz de hacerlo, nos iremos.

- No sé Rody – No tenía muchas ganas, pero se le veía tan emocionado con la idea que me daba pena negarme.

- Vamos renacuajo, te prometo que nos lo pasaremos bien – Se agachó y me dio un piquito.

- Me metes en unos líos – Murmuré en protesta, pero aceptando sus planes. Pude ver como sonreía al darse cuenta de que me había convencido.

Entramos al circuito y un chico joven y bastante guapo se acercó de inmediato a nosotros, abrazando a Rody completamente emocionado. Tenía unos bonitos ojos azules que destacaban aún más con su pelo teñido del mismo color, pelo peinado de una forma realmente extraña, con puntas por todos lados. Llevaba ropa motera, es decir con mucho cuero, era bastante alto, quizás un metro ochenta, y era delgado aunque no tanto como yo.

- ¡Rody, cuánto tiempo sin verte! – ¿Quién era ese chico para abrazar a mí novio así?

- Hola Speed, me alegró de verte tan bien – A Rody también se le veía emocionado – Te presento a Erick, mi novio, Erick él es Speed un amigo.

- Y antiguo paciente – Sonrió él – Encantado de conocerte Erick. Sabes, de no ser por tu novio yo no hubiera vuelto a caminar nunca.

- Me das meritos que no merezco Speed, tarde o temprano hubieras vuelto a caminar no fue gracias a mí – Le quitó importancia Rody.

- De eso nada, otros fisioterapeutas me dijeron que nunca volvería a caminar como antes, que tendría que llevar unas muletas toda la vida, pero tú conseguiste que me recuperara por completo – Se le veía muy agradecido con Rody – Además de que me ayudaste a soportar el dolor, nunca te estaré lo suficientemente agradecido.

- Para mí es suficiente con verte tan feliz – Sonrió Rody – Por cierto ¿Donde está Elektra? – ¿Elektra? Vaya nombres más raros

- Está revisando los karts, tenían que estar perfectos para vosotros – Comentó él.

- Ya me has dado a mí el trucado ¿Verdad? – Bromeó Rody.

- Nosotros no tenemos coches trucados – Comentó indignado – Para ganar a tu novio tendrás que ser mejor que él campeón – Comenzó a reírse al tiempo que le daba golpecitos en la espalda a Rody.

- Rody, que alegría verte – Una chica muy guapa, rubia con mechas verdes, unos ojos miel muy bonitos y un cuerpo diez, se lanzó a los brazos de Rody provocándome unos celos increíbles. Si las miradas mataran ya estaría muerta, la habría matado con mis ojos láser.

- Elektra, estás tan guapa como siempre – Ya me encargaría yo después de cantarle las cuarenta a “mi novio”.

- Elektra, será mejor que te alejes de Rody si no quieres que su novio te arranqué la cabeza a mordiscos – Comenzó a reírse el tal Speed.

- Ohhh, lo siento – Se disculpó algo ruborizada – Me emocioné demasiado, tú debes de ser Erick ¿Verdad? –Se acercó a mí presentándose.

- Si – Reconocí aún algo sorprendido.

- Yo soy Elektra, la novia de este cabeza hueca – Señaló a Speed – Y quiero mucho a Rody porque me devolvió a mi chico – Se abrazó a Speed y comenzó a darle besitos.

- Ya te lo explicaré todo después Erick – Intervino Rody.

- Ya os tengo los karts preparados, id a cambiaros os esperamos fuera – Comentó Elektra – Rody, para tu novio tendrá que ser un mono de niño, los de adulto no creo que le vayan bien – Definitivamente, esta chica me caía fatal.

- No te preocupes Elektra, yo me encargo – Rody me empujó en la silla hasta los vestuarios antes de que yo pudiera soltarle nada a la fresca esa.

- ¿Se puede saber de que los conoces? – Le pregunté cuando ya estábamos a solas – Ella me cae fatal.

- Elektra es una chica estupenda, el único problema que tiene es que no filtra, dice todo lo que piensa – Se rió – Pero cuando la conozcas bien seguro que te cae de maravilla.

- Me ha llamado enano – Protesté furioso.

- Y yo te llamo renacuajo ¿Qué más da? – Comenzó a reírse – Que seas bajito no quiere decir que no seas un chico guapo, a mí me parece que estas muy bueno.

- Pero soy tu novio, tú puedes llamarme renacuajo, pero deberías defenderme de los demás – Seguí protestando – ¿Tenemos que ponernos esos monos? – Eran horribles.

- Si, se ponen encima de la ropa para no estropearla – Comentó – Te ayudaré a ponerte el tuyo.

- ¿Aún no me has dicho como los conociste? – Rody había comenzado a ponerse su mono, luego me pondría el mío.

- Verás… Speed tuvo un accidente muy grave en una carrera de karts – Comenzó a explicar – Ellos se dedican profesionalmente a eso, de ahí sus nombres. Quedó en silla de ruedas, y después de un montón de operaciones comenzó con la rehabilitación conmigo. Elektra siempre venía con él a las sesiones y así nos hicimos amigos.

- ¿Siempre acabas haciéndote amigo de tus pacientes? – Pregunté algo indignado. Estaba empezando a comprender que Rody tenía demasiados amigos gracias a su trabajo.

- No siempre, pero a veces es imposible no hacerlo – Me sonrió – Son muchas horas juntos, y si la persona en concreto es muy sociable, es imposible no encariñarse.

- ¿Es cierto que eres tan bueno? – Todo el mundo decía que Rody era muy bueno en su trabajo.

- Me gusta aplicar nuevas técnicas, investigo y pruebo cosas nuevas. La verdad es que el hospital me da bastante carta blanca en eso. A veces consigo mejorías que otros no – Dijo orgulloso – Pero es simplemente porque yo me lo tomo en serio y otros simplemente se lo toman como un trabajo. Yo sé lo que cuesta hacer rehabilitación, lo que se siente, por eso me pongo en el lugar del paciente e intento hacer todo lo posible por ayudarlo.

- Como siempre un buen samaritano – Me burlé, aunque ahora empezaba a sentirme orgulloso de mi novio.

- Debo reconocer que sí, tengo complejo de buen samaritano – Se rió.

- Supongo que el hecho de que los pacientes te aprecien tanto, incluso una vez acabado el tratamiento, es todo un cumplido para ti – Murmuré.

- Es lo único que necesito para saber que estoy haciendo bien mi trabajo y sentirme orgulloso de ello – Comentó emocionado.

- ¿Siempre supiste que querías ser fisioterapeuta? – Pregunté con curiosidad.

- Quería hacer algo con lo que pudiera ayudar a la gente, pensé en ser médico pero no soporto la sangre – Puso una cara de asco – Entonces tuve una experiencia personal que hizo que me decidiera por la fisioterapia.

- ¿Qué experiencia? – Seguí preguntando.

- Mejor eso lo dejamos para otro día, ya nos estarán esperando fuera – Mientras charlábamos Rody me había ayudado a ponerme el mono y ahora ya estábamos ambos preparados – ¿Estás listo para ser derrotado por el gran Rody?

- Ya veremos quién derrota a quien –Me hice el duro.

Salimos de los vestuarios ya completamente preparados para las carreras, Speed y Elektra nos esperaban con una sonrisa y un par de cascos, ante todo seguridad, dijeron al unísono.

Rody me cogió en brazos y me ayudó a montarme en un bonito kart de color rojo con un rayo pintado de color dorado, era como los de las películas.

- Tú saldrás en la pole, tómalo como un regalo – Se rió Rody – Y recuerda, derecha acelerador, izquierda frenos, y esto redondo de aquí delante es el volante que como verás se gira así – Se estaba burlando de mí, ya le enseñaría yo de lo que era capaz.

- Quien ríe último ríe mejor – Sonreí con malicia. No tenía muy claro si iba a poder presionar con la suficiente fuerza los pedales, pero haría todo lo posible por ganar a ese arrogante.

- Ahora en serio – Se acercó a mí para abrazarme – Ten cuidado, ante todo asegúrate de que puedas apretar el freno, si no puedes lo dejamos, prueba ahora – Me susurró al oído. Hice la prueba, sin aún separarme del abrazo de Rody y con el coche parado, y aunque me costaba un poco si podía apretar los pedales – Perfecto, si te cansas simplemente para.

Tras darme un piquito, fue hasta su kart el cual estaba justo detrás del mío, el suyo era negro con franjas rojas. Aunque sabía que solo era un juego, estaba bastante nervioso, no sabía si podría mantener el acelerador pisado o frenar en caso de ser necesario, pero tampoco quería ir demasiado lento, tengo mi orgullo y no voy a dejar ganar a creído de Rody.

- Son diez vueltas, el que cruce primero la línea de meta después de las diez vueltas gana – Speed se había colocado delante de nosotros con una bandera de cuadros blancos y negros como en las carreras, él se encargaría de dar la salida.

- ¿Lo de la bandera no tendría que hacerlo Elektra? – Preguntó entre risas Rody – En las películas siempre es una tía buenorra la que da la salida.

- Ni loco dejo que mi chica se ponga delante de dos locos como vosotros, tendréis que conformaros conmigo – Protestó Speed – ¿Preparados? – Rody y yo dijimos que si al mismo tiempo – Tres, dos, uno, fuera – Bajó la bandera y se apartó a un lado para que comenzáramos la carrera.

Arranqué el kart lo más rápido posible, sorprendentemente mis piernas me estaban respondiendo bastante bien. Tenía a Rody pegado a mi culo, nunca mejor dicho, intentando adelantarme pero no le iba a dejar. Yo iba de un lado a otro de la pista para que no tuviera sitio para adelantarme.

- No seas tramposo, eso no se vale – Me gritó desde su kart.

- En la guerra y el amor todo se vale – Se la devolví.

Pero en un momento de despiste, casi al final de la primera vuelta, Rody me adelantó por un hueco que dejé, ahora lo tenía delante.

- Las trampas no te servirán de nada – Volvió a gritar – Tendrás que apretar el acelerador – Eso era lo que Rody quería, que apretara el acelerador y así fortaleciera mis piernas.

Fui durante bastante tiempo detrás de Rody, pisaba el acelerador y a duras penas podía ponerme a su estela, al menos no dejé que se escapara demasiado. Cuando Rody frenó en una curva, aproveché para adelantarle por fuera.

- Vuelvo a ir primero – Grité yo ahora – ¿No te molesta que te gane un chico que va en silla de ruedas? – Bromeé.

- Aún no ha acabado la carrera, no cantes victoria antes de tiempo – Gritó él.

Así estuvimos durante toda la carrera, adelantándonos mutuamente y gritándonos cosas para picarnos, debo confesar que me lo estaba pasando muy bien.

Cuando solo faltaba una vuelta para acabar, iba detrás de Rody, mis piernas ya estaban completamente adoloridas pero tenía que dar un último empujón.

En la última vuelta antes de la meta, apreté el acelerador con todas mis fuerzas y le adelanté, justo a la salida de la curva, entrando primero en meta.

Había ganado.

- Gane, gane, gane, soy el mejor – Comencé a gritar con alegría – Soy el campeón, el “Number one” de la pista, el invencible.

- No te hagas el gallito que me has ganado por los pelos – Gruñó Rody.

- ¿Por los pelos? – Pregunté con burla – Te he dado una paliza, solo has podido ver mi estela todo el rato, soy el mejor – Fanfarroneé.

- Pido la revancha – Rody ya se había bajado de su kart y venía a ayudarme a mí a salir del mío.

- Cuando quieras, aunque el resultado no cambiara –Comenté orgulloso.

Fuimos de nuevo a los vestuarios para quitarnos el mono que nos habíamos puesto, Speed y Elektra nos habían dicho que lo habíamos hecho muy bien, que podíamos ser pilotos profesionales si quisiéramos, yo sabía que exageraban pero me sentía feliz.

Me lo había pasado muy bien y durante el tiempo que duró la carrera, dejé mi mente en blanco, no pensé en nada. Fuera problemas, fuera preocupaciones, solo Rody y yo disfrutando de la pista. Ahora sentía temblar mis piernas como si fueran gelatina por el esfuerzo realizado, pero me daba igual.

Le dije a Rody que me gustaría repetir, y él me prometió que pronto volveríamos.

(Rody)

Ya estábamos cambiados y preparados para irnos, a Erick se le veía contento y feliz y yo me sentía satisfecho por haber conseguido lo que me proponía.

Mi idea había sido que Erick reforzara sus piernas al tiempo que se lo pasaba bien, y que mejor que una carrera de karts para que eso pasara.

Speed siempre me había ofrecido ir a su circuito para disfrutar de las carreras, pero hasta ahora no había encontrado con quien ir, pero con Erick sabía que nos lo pasaríamos bien.

Al ser la primera vez para los dos le pedí a Speed que nos dejara solos, pero para la próxima íbamos a hacer una carrera de dos parejas, ellos contra nosotros.

- ¿Qué tal Rody? – Me preguntó Speed cuando fui a devolverle los cascos. Elektra estaba a su lado y Erick me esperaba un poco alejado.

- Ha sido muy divertido, gracias por dejarme venir chicos – Les agradecí el que me hubieran invitado al circuito.

- Sabes que puedes venir siempre que quieras – Comentó Elektra – De hecho la próxima vez ya sabes que nos debes una carrera.

- Eso está hecho – Me lo había pasado muy bien, sin ninguna duda repetiría.

- Se te ve enamorado de ese chico – Una sonrisa burlona adornaba la cara de Elektra.

- ¿Tú crees? – ¿Tanto se me notaba? – Llevamos poco tiempo juntos pero la verdad es que me siento especial con él.

- Se nota que hay química entre vosotros – Comentó ahora Speed – Y créeme yo sé de lo que hablo.

- Parece un chico estupendo, un poco enano para ti pero es muy mono, espero que lo vuestro vaya bien – Comentó Elektra, como se notaba que no había conocido al Erick gruñón.

- Hasta le dejaste ganar, eso es que te gusta mucho – Empezó a reírse Speed.

- Shhh, que no te oiga – Susurré – ¿Cómo sabes que le dejé ganar?

- Porque llevo tiempo en esto Rody, frenabas cuando iba a adelantarte – Sonrió.

- Necesita confianza en sí mismo para recuperarse, solo lo hice por eso –Me justifiqué.

- Si claro, solo por eso – Sonrió burlona Elektra.

- Será mejor que me vaya, Erick me espera y si le dejo mucho rato plantado se va a enfadar – Me despedí de ellos – Y no sabéis como se pone cuando se enfada.

- Anda, ve con tu novio – Sonrió Speed – Vuelve pronto.

- Si, vuelve pronto Rody – Se despidió Elektra.

Yo volví con Erick que me esperaba ya preparado para irnos, me miró como recriminándome que le hubiera dejado solo tanto rato pero ignoré su recriminación.

Me había dado cuenta de que incluso me gustaba el Erick gruñón, realmente me estaba enganchando mucho a él.

Ahora lo llevaría a cenar a un chiringuito que había en la playa y desde donde se podía ver un hermoso atardecer, desgraciadamente tenía que llevarlo pronto a casa, pero iba a aprovechar al máximo el tiempo que tenía con él.

Quería que Erick se enamorara de mí lo antes posible, porque acababa de descubrir que yo estaba enamorado de él hasta la medula y no iba a soportar un desengaño amoroso. Quería que Erick fuera el definitivo no uno más.

***
Notas finales:

Me parece que hacen una buena pareja ¿No? ^^

Se lo han pasado pipa con la carrera, los dos son muy competitivos, pero evidentemente Rody tenía que dejarle ganar es demasiado bueno XD

Y han aparecido dos nuevos personajes, amigos de Rody ¿Qué os han parecido?

Como siempre agradecer sus reviews a Yuko, Cry Baby, JimmyNovak, Anónima truncada y PelucheTaiwan ^^

Un beso

Yaonita


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).