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El amor NO tiene remedio [Corazón de melón] por Blue FireWorks

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Notas del capitulo:

¡Hola! 

Feliz navidad atrasado ;( 

Disculpen por no subir antes, no he estado precisamente inspirada :/ 

ESPERO QUE OS GUSTE ♥ 

 

 

El camino desde el instituto hasta la casa de Nath había sido una jodida tortura. Ese silencio ensordecedor dominaba y debía obligarse a respirar adecuadamente. Al llegar, aparcó el coche y se bajaron. El rubio estaba cabizbajo, no era capaz de levantar la cabeza. Entraron en la casa y Francis cerró la puerta.

 

Nathaniel se quedó paralizado en el recibidor, no sabía que debía hacer. Era como si aquella ya no fuera su casa.

 

—Al comedor—le ordenó el padre.

 

Nathaniel no contestó, simplemente le obedeció. Vio a su padre levantar la mano, y cuando estaba esperando el impacto, algo lo impidió.

 

—Francis, detente—era la voz de su madre. El rubio abrió los ojos sorprendido, ¿de verdad era esa su madre? ¿La que siempre hacía la vista gorda?

 

—¡No ves lo que nos ha hecho! ¡Ha corrompido la familia! ¡Se lo merece!—exclamó él y cuando volvió a alzar la mano, su madre se puso delante de él—¡Quítate!

 

—No—respondió ella, obligándolo a bajar en brazo—Puede que no sea el hijo perfecto, pero sigue siendo nuestro hijo. No es para que le levantes la mano de esa manera, ya le has hecho demasiado daño.

 

Nathaniel estaba incrédulo. ¿En serio que era esa su madre?

 

—Ya fue doloroso no tenerlo en casa, basta.

 

Notó la mano de su madre agarrándole el brazo y conduciéndole a la cocina.

 

—¡¿Dé que hablas?! ¿Te has vuelto loca?

 

—No—contestó ella secamente.

 

Él los había seguido hasta la cocina, volvió a acercarse a Nath y su madre volvió a ponerse en medio, pero esta vez el golpe no iba a detenerse. Tuvo que reaccionar rápido y agarrar el brazo de su padre para que este no golpeara a Adélaida.

 

—¿Qué demonios haces?

 

—Algo que tenía que haber hecho desde hace tiempo—contestó sin haber soltado el brazo. La mano libre de su padre hizo un amago de querer golpearle, pero no lo logró ya que Nath lo esquivó.

 

—¿Cómo te atreves a…?—Nathaniel lo interrumpió.

 

—¿Cómo te atreves tú a golpear a tu propio hijo?—dijo en tono de voz desafiante.

 

Francis intentó golpearlo de nuevo, pero el rubio volvió a esquivar el golpe.

 

—¡Ya vale!—exclamó la mujer separándolos antes de que empezaran a pegarse mutuamente.

 

—¡Quítate de delante!—exclamó su esposo.

 

—¡No!—gritó ella—Nathaniel sube a tu habitación, tenemos que hablar. Y tú, Francis, no vayas a interrumpirnos.

 

—¡Tú no eres la que manda!

 

—Y tú tampoco, así que más vale que te relajes, si no quieres perderme a Ámber y a mí también—dijo en tono de voz firme. Ambos subieron las escaleras, entraron a la habitación de Nathaniel y Adélaida cerró la puerta con llave.

 

—Mamá...—musitó aún sorprendido.

 

—Oh, Nath—rompió a llorar y se acercó al chico para abrazarlo—Siento...haber sido tan mala madre…—sollozó—. Te eché tanto de menos, mi niño.

 

Lloró con más fuerza, Nathaniel tan solo pudo corresponder el abrazo de su madre y tratar de tranquilizarla.

 

—Estuve bien.

 

—Ese chico… ¿te trata bien?—preguntó rompiendo el abrazo.

 

El rubio asintió a la cabeza.

 

—Me ha defendido...—musitó—me ha cuidado—continuó—me ha consolado y... es mejor persona de lo que pensaba al principio.

 

—¿Es cierto que es tu pareja?

 

Nathaniel tragó saliva nervioso.

 

—Sí.

 

Tardó un par de minutos en responder.

 

—Me alegro—susurró al fin.

 

Nathaniel suspiró aliviado.

 

—Mamá, gracias por intentar defenderme.

 

—No hay de qué, cariño. Debí haberlo hecho desde el principio.

 

—Necesito tu autorización…

 

—¿Qué autorización?

 

—Para poder ir con Castiel. Vamos a trabajar para ahorrar y alquilar un apartamento.

 

—Claro, te ayudaré en todo lo que pueda.

 

—Muchas gracias, mamá—la abrazó aliviado.

 

.

 

.

 

.

 

Lysandro y Armin acordaron hablar cuando se acabasen las clases. Ambos estaban tremendamente nerviosos. Al escuchar el timbre que indicaba el fin de las clases esperaron a que todos salieran del laboratorio.

 

—¿Armin? ¿No sales?—le preguntó su hermano.

 

—Voy a hablar con Lysandro, espérame abajo.

 

—Si tu lo dices—dijo encogiéndose de hombros y saliendo de la sala.

 

—¿D-de qué querías hablar?—cuestionó Armin nervioso.

 

—Sobre…nosotros—dijo—. Me siento un poco mal por lo que le dije a Nina. Sé que tenía que hacerlo, pero…

 

—Te entiendo.

 

Se quedaron en silencio unos minutos.

 

—Hoy tengo que acompañar a Rosa a la tienda, pero puedes ir a verme, ¿vale?

 

Armin asintió con la cabeza. Lysandro se levantó de la silla y se giró para marcharse, pero de pronto dio un tras piés y volvió a darse la vuelta. Se dirigió hacia el chico, agarró su cara y le plantó un leve beso en la mejilla. Tras eso salió.

 

Armin se quedó paralizado. Y seguro que se había sonrojado. Mierda.

 

.

 

.

 

.

 

Alexy vio a Kentin al final del pasillo y se dirigió hacia él. Cuando pudo darse cuenta vio que estaba hablando con Sucrette. Sintió rabia hacia ella. De pronto, Kentin lo vio y lo agarró del brazo.

 

—Estaba contándole a Su' que ya lo habíamos arreglado—dijo con una sonrisa.

 

—¿Ah, sí?—preguntó con algo de sarcasmo en la voz. Mierda, debía controlarse.

 

—Me alegro que ya podáis estar juntos—exclamó ella—Lo siento, chicos. Dake me espera en la salida para ir a comer juntos. Hasta mañana.

 

—Hasta mañana—respondieron al unísono.

 

—¿Contándoselo?

 

—Oh, vamos, no te pongas celosito—dijo enseñándole la lengua.

 

—No estoy celoso.

 

—¡No, que va!—soltó una leve risa y le dio un beso en la nuca—Esto… Alex, creo que tendremos que aplazar nuestra cita de hoy.

 

—¿Qué? ¿Por qué?

 

—Porque creo que hoy tendrás que venir a cenar con mis padres.

 

Alexy lo miró asustado.

 

—Creo que se lo diré hoy. Si te parece bien, claro.

 

—¿E-en serio?

 

—¿No quieres?

 

—Sí, sí. Solo es que me sorprende.

 

—Eres un encanto, es muy probable que te acepten.

 

—Me deberás un favor…

 

—¿Cuál?

 

—Quiero que durmamos juntos otra vez—dijo algo avergonzado.

 

—De acuerdo—contestó con una sonrisa traviesa. 

Notas finales:

¡Gracias por leer! 

¿Se nota mucho que nos viene el lemon Kenxy? :P

Siento que haya sido tan corto, es posible que este sea el último capítulo del año PERO volveré pronto 

Muchas gracias a todas por los comentarios, sin ustedes no tendría sentido escribir esta historia :D

Si puedo subir antes, lo haré ¡ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO! 

 


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