Park Chanyeol, hijo único del matrimonio entre Kim Yoona y Park In Sung. La familia Park vivía en un pequeño pueblo en Kansas, EEUU, en una acogedora casa de dos pisos con un jardín bien cuidado y un garaje lo suficientemente amplio como para que entrara la caminoneta Ford 150 de los años setenta de su padre.
La cuestión es que ahora mismo mientras comían pollo al horno y tomaban un muy delicioso jugo de mora, sus padres no podían evitar soltar suspiros, y su madre, bueno su madre estaba hecha un mar de lagrimas ya que su “angelito” se iba a marchar a la gran manzana para estudiar en la universidad, ya que habia obtenido una beca para estudiar administración en productos agrícolas y asi en un futuro trabajar en “Big Corn” la mas grande compañía agricultora de los estados unidos de américa.
Y asi, entre arreglar maletas, soportar los llantos y lamentos de sus padres y despedirse de los pocos y raros vecinos que tenia. Ya se econtraba abordando el bus que lo llevaría hasta el pueblo mas cercano en donde abordaría un avión hasta nueva york.
En el vuelo le habia parecido que la gente le miraba con cierta curiosidad y el supuso que se debía a que era demasiado atento y amable con la gente, y pensó “ Y que puedo hacer yo?” después de todo sus padres siempre le habían enseñado a ser amable y a ayudar al prójimo.
Una vez que llegó al aeropuerto su amigo de la infancia, Jongin le habia ido a recibir, después de bromear sobre temas un poco pervertidos, pudieron darse cuenta de que no habían cambiado mucho, ya que su pelirojizo amigo seguían siendo el mujeriego y bromista de siempre.
Estaban en el central park, y mientras Chanyeol le contaba todo acerca de su viaje a Jongin, este ultimo se dedicaba a coquetear y a piropear a cada chica que pasaba corriendo, y en su mayoría recibiendo los números de estas o bien un beso “express”.
-Hey! Me estas escuchando?- preguntó con un puchero el alto.
-No, y ya sabes que te pones demasiado pesado cuando cuentas tus “aventuras”.- el moreno dijo haciendo énfasis en lo ultimo.
-No seas malo, además- hizo un gesto con la mano- me siento nervioso! Y no conozco nada sobre el estilo de vida de esta ciudad.
-mira juguemos algo, de todas las chicas que están en este parque con cuales te acostarias?-
-Oye yo no soy como tu, , haber hay alguien aquí con quien no te acostarías?
Su amigo se lo puso a pensar un poco, para después apuntar disimuladamente a un chico.
-Jongin ese es un chico, un hombre sabes?
-Y que? Está bueno, pero está ebrio y apuesto a que es asi normalmente, un alcohólico! Además creí que eras gay.
-Lo soy pero…..
-pero nada, haber dime hay alguien aquí que te llame la atención?
-Mejor dime que debo hacer para adaptarme un poco a vivir aquí!
-Bueno- Jongin le pasó un brazo sobre los hombros, mientras se sentaban en un banco- deberías empezar por aprender como coger el metro, sabes? Es lo básico, y además en la casa necesitamos algo de comida, asi… que querido amigo puedes ir a comprar algo y nos vemos en la casa
El alto iba a replicar, mas bien a protestar, pero antes de que se diera cuenta, su amigo ya se habia ido, con una chica.
-Vaya- suspiró- No puede ser tan malo… verdad? –
Y asi fue como se dirigió a la parada mas cercana, después de todo no habia sido difícil. Estaba parado esperando, mientras pudo notar que a mas o menos dos metros de donde el estaba un chico bajito, de tez blanca, cabello castaño y ojos rasgados estaba discutiendo con otro tipo.
-Hey! Que no ves que el anciano no puede mantenerse en pie?- gritó el castaño, y Chanyeol lo miró divertido, pues a pesar de que el mas bajito intentaba ayudar al anciano, habían formas mas “educadas” de hacerlo.-
El otro sujeto salió del asiento, cediéndoselo al anciano, mientras se alejaba murmurando lo loco y raro que era aquel muchacho, aunque después diciendo que era guapo.
-De nada- dijo el bajito al anciano y al no obtener respuesta gritó- genial! Le doy un puto asiento y ni me agradece? Que le den viejo feo!-
Aquel muchacho empezó a caminar directo a la baranda, empezando a cantar y a decir incoherencias. De pronto se dio cuenta que el tren ya estaba llegando y aquel chico seguía colgando de ahí como si nada.
Se iba a matar!
Rápidamente caminó y lo cogió de la cintura jalándolo , provocando que el otro perdiera el equilibrio, y Chanyeol por refljo lo sostuvo antes de que se diera de cara contra el suelo.
Una vez que el chico se pudo mantener por si mismo dijo un –gracias- casi inaudible. Solamente para después alzar el rostro y quedarse viéndolo fijamente, mientras su cara perdia todo color.
-Oye ten mas cuidado, pudistes… haber muerto.
Pero el castaño seguía mirándolo de pronto alzó una mano y le acarició la mejilla, antes de desmayarse el alto creyó haber oído al pequeño muchacho llamarle “Ratoncito”.
No sabia que hacer, obviamente como todo niño bueno lo sostuvo y lo llevó a la banca ahora vacia donde minutos antes habia visto discutir al niño que tenia en brazos.
¿Qué hago?
Se preguntaba, y antes de responderse se fijó en el tren que ya habia llegado, dejando al mas bajo acostado se dirigió a abordar el tren, pero una mano lo detuvo.
-Q-que sucede- preguntó nervioso.
-Bil..lle..tera-
-que has dicho?-
-Billetera!- le gritó.
El mas alto recogió la billetera que se habia caído y se la dio al mas bajo. Una vez que vió al mas bajo acomodarse la billetera en su bolsillo, sonrió sin saber por qué lo hacía.
Entró al tren rápidamente mirando como aquel muchacho se quedaba ahí, recostado e indefenso. Sabía que habían miles de posibilidades como que le asaltaran, lo drogaran, abusaran de el, o que incluso le saquen los órganos! Y fue ahí que pidió que parara al chofer.
Se encontró nuevamente parado frente a aquel chico de piel blanca y labios rojizos. Lo cogió en brazos, el chico era bastante liviano, pero apestaba a wiski mezclado con vainilla y frambuesas. Lo cogió como a un koala.
Saliendo de la estación no sabia exactamente que hacer, estaba desesperado.
Y si lo confundían con un pervertido?
O un violador?
Negándose a subir a un taxi por miedo, se dirigió hacia un tipo con una carrosa donde habían dos caballos blancos listos para dar marcha.
-Hey amigo, llévame aquí, por favor- dijo el alto mientras subia con el chico en brazos.
-No está muerto ¿cierto?.- preguntó el muchacho.
-No jajaja claro que no, él, él, es mi novio y bueno se ha pasado de copas- sonrió nervioso antes de acomodar al pequeño castaño.
En el trayecto, Chanyeol se dedicó a contemplar al pequeño ser que cargaba en su regazo. Se fijó en lo suave y tersa que era la piel del castaño, sus pestañas que acariciaban las mejillas ligeramente sonrojadas debido al frio, su pequeña nariz que estaba también roja, y aunque el muchacho estaba usando una beanie color vino pudo notar que su cabello era suave y lacio, y esto ultimo le pareció tierno, pues el muchacho tenia el flequillo casi hasta los ojos, tapando la frente, aunque con el viento las finas hebras danzaban a un compas casi embriagante.
Cuando llegaron, y después de pagar se dirigió con el muchacho, iba a entrar pero entonces recordó que vivía en una residencia para unversitarios y que no podía ir simplemente con un muchacho claramente menor, desmayado y pálido. Asi que decidió finalmente ir por las escaleras de emergencias.
A medio camino se detuvo, no es que el muchacho fuera pesado, a decir verdad era tal vez demasiado delgado, pero subir diez pisos con una carga de cuarenta y cinco kilos no era nada fácil, sin embargo se halló forma de hacerlo, al llegar observó a su amigo viendo porno gay mientras comía pollo frito con arroz. Golpeó la ventana.
La cara que habia puesto el moreno fue “épica” y se hubiera hechado a reir histéricamente de no ser por que tenia a un muchacho en sus brazos. El pelirrojo le ayudó a entrar al castaño, una vez dentro lo recostaron en el sofá.
-Pero que mierda Chanyeol! Te dije que fueras a comprar, no que secuestraras a esta monada!- gritó susurrando Jongin.
-No lo secuestré! Como se te ocurre pensar eso?- Chanyeol se fue a sentar en el sillón frente al bajito.- simplemente se desmayó en el metro, en la estación, y no lo podía dejar ahí!-
-Chanyeol, querido es Nueva York! Por dios esas cosas siempre pasan! Y adivina que?- puso la cara frente a su amigo.
-Q-que?-
-No debes hacer nada! porque si alguien se entera nos denuncian y vamos al bote viejo!-
-Cálmate Jongin nadie me vió, además seguramente será este mismo niño el que nos agradezca por haberle salvado la vida y otras cosas.
Lo ultimo que le dirigió Jongin fue una señal obscena con la mano. Chanyeol rodó los ojos.
A eso de las cinco y media de la tarde un oficial de policía fue a su departamento a arrestarlos, bueno, arrestar a Chanyeol alegando un “intento de secuestro” y el pelinegro no podía creer que en su primer dia en nueva york iba a ir a la cárcel.
Ciertamente pensó que iría a la cárcel. Pero la cuestión es que solamente lo llevaron a la penitenciaria universitaria, y después de recibir la llamada del joven “secuestrado” diciendo que no habia pasado nada y que lo conocía, lo dejaron libre.
-te lo dije Chanyeol! Te dije que nada bueno saldría de esto!
-Ya cálmate Kai, además estoy libre…
-Hey Park! Te estaré vigilando escuchaste?- la voz del oficial gritó en medio del pasillo.
-Ok, esta bien y y y me parece correcto-
-Ya vámonos- dijo Jongin arrastrando a su amigo fuera de aquel lugar.
Al llegar al departamento eran las siete de la noche, ambos se sentaron a ver alguna película de ciencia ficción, mientras comían comida china. De pronto el teléfono de Chanyeol sonó.
-Diga?-
-Quien eres?-
-humm quien eres?-
-Quien eres tu?-
-No lo sé, quien eres tu?
-Soy el chico al que secuestraste. -.
-OH!- Chanyeol dijo con sorpresa. – Como conseguiste mi numero?-
-ah! Eso, seguridad me lo dio con gusto. Por cierto tengo todos tus datos-
Chanyeol se sintió confundido- Entonces para que me preguntas quien soy?- dijo un poco fastidiado.
-No te estoy preguntando quien eres, te estoy preguntando ¿Quién demonios te crees que eres? – el chico al otro lado respondió alzando un poco la voz.
-Sabes que? No, no tengo tiem-
-Te veo en la galería “Frenchiktz” en la sexta y cuarta a las ocho y diez-
-mmm no?-
-Por qué no?
-Porque no te conozco y tengo cosas de la universidad que debo arreglar-
-Si, te veo a las ocho y diez.
Chanyeol no sabia bien por que habia aceptado, lo que si estaba consciente era de que estaba en un taxi yendo precisamente a la galería Frenchkitz.
El lugar era sofisticado y elegante, la exposición era de arte contemporáneo y le agradaba asi que si aquel muchacho lo dejaba plantado igual se quedaría viendo los cuadros.
-Park Chanyeol.-
El alto se giró para ver al dueño de aquella voz que lo habia llamado. Y ahí estaba é.
Vistiendo un sueter color verde militar holgado que dejaba ver sus marcadas clavículas, junto a unos ajustados pantalones azul marino marcando sus delgados y firmes muslos y piernas, y finalmente unos botines café claro. Hermoso se dijo a si mismo.
-Hola
-Buenas noches, les sirvo vino?.- Un muchacho les ofreció.
-Si por favor, yo quiero tinto.- Dijo el castaño. Cogiendo una copa.
-Y usted señor?- le preguntó el mesero a Chanyeol.
-Yo… creo que blanco estaría bien- Entonces vió la copa de vino tinto que el castaño le tendía.- O tinto .
-Y que ocurrió?- preguntó el castaño mientras caminaba hacia un cuadro.
-Pues estaba en el metro, y te vi..
-No te escucho- canturreó el mas bajo.
Chanyeol lo siguió.
-Bueno y después de eso te llevé a mi departamento y te deje descansando hasta que alguien llamó a mi puerta y resultó que era el policía universitario y del resto me abstengo de decirlo.
Aquel castaño se acercó a su oreja, susurrándole al oído- Y quien me asegura que no has hecho nada mas conmigo?- dijo en un tono suave pero sexy (¿).
Despues de aquello se sentaron en unos taburetes de cuero blanco que habían en el lugar.
-Y bien Channie, cuéntame mas sobre tu vida.
-B-bien para empezar no nos conocemos, razón suficiente para no decirte nada sobre mi, y puedes pensar lo que quieras, no me interesa sabes?...umm ahora que lo pienso, ni siquiera se tu nombre.
-Todo esto es por un nombre?
-Me voy.
-Baekhyun…
-Que?.-
-Mi nombre…. Es Byun Baekhyun- el palido muchacho le extendió una mano.
-Humm ok.- Dijo el alto estrechando ligeramente la mano contraria, dándose cuenta instantáneamente que estaba helado y que para ser un chico tenia demasiado fina y suave la piel.
-Has dicho Bacon?-
-Baekhyun, B-a-e-k-h-y-u-n – deletreó el castaño.
El alto simplemente se rió.
-Sabes channie? Conversemos un poco quieres? Es una forma de agradecerte por no haberme robado o violado, incuso peor, haberme dejado tirado en el metro a mi suerte.
Chanyeol no se esperaba aquella confesión, y menos aquel cambio repentino de actitud por parte de Baekhyun.
Conversaron de cosas triviales, como colores, comida, marca de ropa y energizantes naturales, obviamente por cada tema, Baekhyun decidió tomar una copa de vino. Chanyeol lo acompañó en tres, después de eso pudo notar que definitivamente el de ojos dormilones tenia un problema con la bebida, y que no se sabia controlar.
-Bueno, es tarde…. Debería irme- dijo Chanyeol tomando su chaqueta poniéndose de pie.
Cuando ya se habia parado y habia dado tres pasos escucho la voz de Baekhyun.
-Mi novio me dejó…- Chanyeol se giró y notó las lagrimas en los ojos contrarios- simplemente un dia se fue..
Chanyeol obviamente regresó a consolarlo, diciendo palabras y refranes antiguos que seguramente baekhyun no entendería. Una hora pasó, y para ese entonces el mas bajo de los dos ya estaba a punto de colapsar de nuevo, producto de las tres botellas de vino que se habia bebido.
-Bien llamaré a un taxi, debes decirme donde vives.-
-mi … ca..sa?-
-Si tu dirección.-
-No …sé Nueva york?- dijo riendo el mas bajito.
Vale, estaba demasiado borracho y ni siquiera recordaba la dirección, asi que optó por llamar al servicio de domicilios y pedir todas las direcciones de los Byun que existían en Nueva York.
Habian varios.
Una vez que entraron en el taxi Chanyeol sabia que estaba mal, que no habia nada bueno con aquel muchacho, empezando desde el hecho de que era un alcohólico.
Pasaron por un burdel, una farmacia, un bar, dos casas de evangelicos, antes de llegar a la casa de Baekhyun, que resultó siendo un edificio bastante lujoso.
Inmediatamente Chanyeol bajó a preguntar al guardia si por casualidad sabia quien era el chico dormido en el asiento. Solamente para asegurarse de que no lo estaban engañando o quien sabe.
-Si señor, el joven vive aquí.- le dijo el fornido guardia.
-Si, ya y será que me puede decir su nombre solo para estar seguros y eso.-
-Si claro. Es Byun Baekhyun, veinte años, seguramente estará alcoholizado.
Chanyeol supo entonces que efectivamente habían dado con la casa del susodicho. Inmediatamente lo cogió en brazos y le notó un poco caliente.
-Bien señor, yo pagaré el taxi, la familia Byun le agradece.- dijo elegantemente el hombre tomando al chico como princesa.
-No hay de qué…humm está subiéndole la temperatura asi que asegurese de darle algo, no se sentirá bien mañana. –
-No se preocupe, yo me encargaré.
-Entonces adiós.
-Adiós joven, y gracias nuevamente a nombre de la familia Byun.
Chanyeol se fue después de eso, sintiendo sin saber por qué, un poco vacio. Luego tomó otro taxi y fue a casa. Jongin le habia preguntado donde habia estado, y el simplemente habia respondido con un “Hablamos luego, estoy cansado”.
Sinceramente aquella noche durmió pensando en el chico de ojos dormilos y labios rojos.