En Japón desde la antigüedad las festividades y tradiciones son de vital importancia para todos sus habitantes, es por ello que cada fecha importante del calendario es recibida con grandes eventos para conmemorarlas y así poder compartirla con amigos o familiares.
Por eso la preparatoria Seirin como cada año comenzaba a organizar las diversas actividades que se realizarían en el evento más esperado del año “HALLOWEEN”, donde los alumnos pueden realizar las más locas y divertidas actividades sin restricciones de los profesores, pero para poder preparar este evento que será abierto a todo público es necesario que cada uno de los club presente su proyecto y así realizar los arreglos pertinente.
Estando a 3 días del gran festival, los miembros del equipo de basquetbol se reúnen en el gimnasio con un propósito diferente al de cada día, esta vez estaban reunidos para exponer sus ideas sobre que podrían realizar en el evento, cada uno tenía la obligación de aportar una idea y entre las mejores se votaría cual sería la indicada para representarlos.
Rk: Bueno chicos, como dije la semana pasada, hoy tenían que traer sus propuestas –Se sentó en una silla mientras era rodeada por los jugadores que tomaron lugar en el suelo– ¿Quién quiere comenzar a hablar?
Todos se miraron y el primero en alzar la mano fue Teppei, quien se levantó y comenzó a explicar su idea.
Tp: He pensado que podríamos realizar una casa embrujada –Se entusiasmaba al decirlo– Es un clásico de estas fiestas, sin duda no fallaría –Miraba que sus compañeros prestaban atención– os disfrazarías de los monstruos para asustar a nuestros clientes y usaríamos el gimnasio para montar la casa, cada uno tendría que ayudar con las decoraciones será divertido si cooperamos entre todos –Sus compañeros escucharon en silencio pero un suspiro del cuatro ojo lo hizo terminar con la siguiente frase– Sin duda los clásicos son los mejores.
Hg: ¿Que eres un niño, idiota? –Se arregló los lentes y dijo con una expresión de molestia– Esas cosas las realizas en la guardería Kiyoshi, además solo con mirarte en vez de asustar se reirían, es una pésima idea.
Tp: ¿Queee? –Miro a Hyuga– Entonces veamos cuál es tu idea brillante Hyuga.
Rk: Cálmense –Aplaudió para parar la riña infantil típica de esos dos– Es una idea valida, todos tienen que escuchar con silencio –Se levantó y anoto en la pizarra la idea de Teppei– Ok, seguimos con Hyuga.
Hg: Sin duda tendríamos que hacer una prueba de valor –Todos lo miraron levantando una ceja– podemos dividir el gimnasio preparando distintas secciones, además de la parte externa haciendo más emocionante el trayecto –Se levantó– Al terminar una lucha entre los típicos peleadores de los tiempos antiguos convertidos en zombie sería lo mejor.
Tp: Hugg¡¡ ¿Y dices que mi idea era mala? Maniaco de los samurái –Vio como lo miraba con reproche– Eso es una idea peor que la mía.
Hg: ¿Que dices maldito? –Se adelantó hacia el corazón de hierro– Por lo menos no doy ideas de parvulario.
La pelea típica comenzó nuevamente, la intervención de sus compañeros y un golpe cortesía de la entrenadora paro el enfrentamiento, se dirigió a la pizarra y anoto la idea dada.
Rk: Ok, tenemos una casa embrujada y una prueba de valor –Decía con el plumón en la boca– Mas ideas, siguiente.
Los chicos siguieron dando sus ideas, Izuki prosigue para darle paso a sus demás compañeros, mientras daba todas sus ideas la pizarra se fue llenando, llegó el turno de Kagami que estaba abrazado de su sombra discretamente, sus compañeros los miraban pero ya estaban acostumbrados a su relación así que les dio lo mismo.
Kg: Bueno –Se enderezo un poco– En Estados Unidos pude apreciar varios juegos para estas fechas, uno de los más exitosos eran los cafés de monstruos, podemos hacer ganancias y asustar a las personas, sería bueno ¿no? –Varios quedaron interesados por la idea del pelicolor.
La idea fue anotada y Kuroko prosiguió con su idea, está la había sacado de una película de terror que vio el otro día, sus compañeros sabían que este estilo era el favorito del peliceleste, sobre todo kagami conocía bien esto ya que muchas ocasiones se quedó con su sombra a mitad de la noche viendo las películas que este traía ocasionándole más de un susto al Pelicolor, pero el tigre aguantaba ya que sabía que más tarde se vengaría de una dulce manera.
La lluvia de ideas terminaron y comenzaron la votación, la elegida fue sin duda el café de monstruos, pero no sería todo se acomodó a la idea de Kuroko de hacer un café con retos donde los perdedores deberían escoger, entre verdad o travesuras donde cualquier cosa era aceptada sin reclamos.
Con la propuesta aceptada cada miembro comenzó a preparar los elementos a utilizar en el evento, cada uno de los integrantes estaba cooperando por lo que se dividieron las tareas para hacer el trabajo más fácil.
Al día siguiente, con las tareas ya repartidas cada uno se encargó de su parte, Kagami y Kuroko eran responsables de los trajes por lo que fueron al centro a comprarlos, Hyuga y Teppei se encargaban de la comida que servirían ese día, Furihata y Izuki se encargarían de los panfletos y carteles para promocionar el local y los demás se encargarían de los decorados a utilizar en el gimnasio.
Todos comenzaron a trabajar en sus respectivas tareas para terminar lo más pronto posible, mientras tanto en el centro de la ciudad Kagami y Kuroko paseaban entre las tiendas para elegir los disfraces para utilizar en el café, era un agradable momento para ambos ya que con tantas actividades no tenían tiempo para pasar juntos.
Luz y sombra desde que ganaron la Winter Cup comenzaron una relación formal, ya que el deseo que estaba latente entre ellos se hizo más fuerte haciendo que no pasada desapercibido, cosa que a sus compañeros les traía sin cuidado porque lo venían venir, pasaron por una tienda enorme en la que entraron para ver si algo le llamaba la atención, este sin duda fue el caso ya que en pocos minutos Kuroko regreso con un traje de lobo rojo que se lo extendió a Kagami mientras decía:
Kr: Kagami-kun, pruébate este –Desvió un poco la mirada mientras su luz tomaba el disfraz.
Kg: Ehh¡¡¡ ¿Para qué? –Lo miraba sonrojarse levemente, kagami con el tiempo podía saber muchas cosas de su sombra con solo mirarlo.
Kr: Solo hazlo –Le extendió el traje y lo obligo a entrar en una cabina.
Kagami sonreía mientras cumplía con la petición de su linda sombra, se colocó el disfraz y vio que le quedaba perfecto, Kuroko sabía cuál era su talla y este sin duda era perfecto para el tigre, se le ocurrió una idea, miro los alrededores en busca de alguna cámara y no había nada, sonrió con malicia ante el pensamiento, escucho a su sombra que esperaba impaciente que terminara de probárselo.
Kr: ¿Kagami-kun, estás listo? –Decía con un dejo de ansiedad.
Kg: Mmmm casi, ¿Me puedes ayudar con el cierre por favor? –Pregunto inocentemente el tigre.
Kr: Esta bien –Corrió la cortina un poco– Con permiso –El tigre vio como asomo la mano y de un tirón lo hizo entrar, encerrándolo en la pared mientras decía sensualmente en su oído.
Kg: Pero que apetitoso conejo tengo delante – Mordió la oreja de su chico que se sonrojaba ante la acción de su tigre.
Kr: ¿P..pero que haces, Kagami-kun? –Trato de apartarlo pero fue sometido con un repentino beso que rompió sus defensas, Kuroko respondió a ese beso demandante abriéndose a su novio, se separaron para respirar cuando el aire se esfumo de sus pulmones.
Kg: Comerme a mi lindo conejo, soy un lobo muy hambriento – Kagami se acercó y mordió el cuello de su sombra haciendo que soltara un débil gemido– ¿No querías que fuera un lobo? –Beso sus mejillas sonrojadas.
Kr: N..no era por eso –Se apartó sonrojado tratando de salir de la cabina, pero fue detenido por su novio– Basta –Se giró soltándose mientras decía– Eso lo puedes hacer en la noche- Salió rápidamente antes que se dieran cuenta de la escena, Kagami sonrió ante la promesa de una noche de pasión.
Después de salir de la cabina, Kagami fue a comprar el disfraz cuando vio un lindo disfraz de conejo este era de un hermoso azul, sin que su novio se diera cuenta también lo compro ya que tenía pensado un uso muy divertido para él.
Salieron de la tienda para seguir mirando ya que solo faltaba el disfraz del Hyuga, miraron los escaparates pero no encontraron algo del estilo del capitán, cuando se giraron para salir de la tienda cuando de pronto Kagami vio que su sombra fue derribada por un destello amarillo.
Nn: KUROKOCCHI –Se abrazaba a su sombra– QUE FELIZ ESTOY DE VERTE¡¡¡.
Kr: Kise-kun –Se trató de levantar cosa que el rubio hizo por los dos– ¿Pero qué haces aquí? –Pregunto mientras se limpiaba la ropa.
Ks: Estaba terminando una sesión de fotos, cuando vi a Kagamicchi y a ti –Saludo al pelicolor con un gesto– justo termine mi trabajo ¿Y ustedes que hacen?
Kagami se encargó de explicarles la situación, cuando el rubio se enteró del evento que pasaría en su escuela dijo emocionado.
Ks: ¿En serio?, que divertido –Se giró para ver a Kagami– Iré seguro, que emoción.
Kg: ¿P.pero en tu escuela no realizaran nada? –Levanto una ceja.
Ks: Naa lo mismo de siempre, no necesitan de mi ayuda por lo que iré seguro –Dictamino con una sonrisa en su rostro, saco su celular y comenzó a anotar en su agenda el evento– Invitare a algunos amigos para que me acompañen –Dijo con una extraña sonrisa– No puedo esperar – Dicho esto el rubio les ayudo a encontrar el disfraz faltante, una vez listo los acompaño para cargar las bolsas que solos no hubieran podido cargar.
Se despidieron en la entrada de la escuela agradeciendo al rubio por su ayuda.
Una vez terminado kise se dirigió a la estación llamando al primer invitado para acompañarlo. El teléfono marcaba hasta que respondió en el 4 tono.
Ks: Hola, Aominecchi, soy Kise te tengo una invitación.
Continuará