Miro, aquellas fotos, que me traen a la mente recuerdos, de los días que juntos estábamos, me siento lentamente en el suelo e invoco esos pensamientos que un tiempo cerré.
Oigo la puerta de mi habitación ser abierta y alguien entra con lentitud, siento su mirada pero yo no volteo a ver a quien entro, conozco sus pasos y se quien es, su voz me lo confirma cuando me hablaba.
-Que haces Yugi?- La pregunta de todas las veces que me viene a ver
-veo, las conversaciones y fotos que tuvimos- Le respondo con una sonrisa triste- si que era un inmaduro-
-En ocasiones era al revés, lo extrañas?-Me pregunta
-Si, si lo extraño, Atem lucho por mí, siempre que lo rechazaba, era alguien que me daba lo que otros no, pero nunca lo logre ver- cierro mis ojos, mientras imagino su sonrisa traviesa
-Pero tienes ahora a Yami- Me recuerda a mi nueva relación
-Tienes razón, pero para el soy su primera relación, y no sabe cómo actuar- Sonrió al comparar a ambos
- Pero..- Interrumpo lo que dirá
-Lo sé para Atem también fui su primer novio, es solo que…- Dejo mi respuesta a medias
-Solo qué?- Me ínsita a seguir
-Uno me daba amor y a pesar de todo el daño que le hice siempre estuvo a mi lado, como mi sombra, y el otro, lo rata de hacer pero al ser como es solo me daña-
-Ahora lo entiendes?- me pregunta con ironía
- Si, ahora lo entiendo, es lo mismo que le hice a Atem- Sonrío ante la ironía del Karma
-Pero aun así te amo hasta el último momento, y Yami está dispuesto a darte lo mismo-
-Yami… sabes él es diferente pero a la vez tan igual…a Atem-Tomo una pausa, comparando en mi mente a ambos
- Si, dime por qué?- Oigo como se sienta mi acompañante
-El era cálido y yo frio, ahora las cosas cambiaron el es frio y yo cálido, no crees que es algo tonto?-Divago entre mis recuerdos
-Tal vez, pero no respondiste mi pregunta- Lo sabia no me dejaría libre
Yami, es frio, pero intenta cambiar por ni, Atem era cálido y me quiso volver igual, ambos luchan de diferente manera pero siempre con el mismo objetivo…Yo-
-Si ambos son iguales, te aman, bueno uno te amo el otro aun lo hace pero no sabe como demostrarlo- Escucho atentamente lo que dice mi acompañante
-Yami me ha lastimado y duele mucho, pero quiero darle la oportunidad de aprender de sus errores, y de Atem siempre lo llevare en mi corazón, como mi Caballero, siempre lo recordé a pesar de que ya no está en este mundo- Sonrío lentamente
-has crecido Yugi- Me sonrojo ante ese comentario
-No, no he crecido, solo he aprendido del amor-Sonrío
-Si es verdad, me tengo que ir, fue agradable hablar contigo nuevamente- Miro como se levanta
-Gracias por oírme, mi fiel confidente- Sonrío y agradezco su compañía
-No agradezcas, siempre vendré cuando lo necesites- Me mira sonriente
-Si, Yami llegara a romperme el corazón vendrías por mi?- la miro detenidamente, su vestimenta negra y sus ojos del mis color, su piel blanca y esa aura que sale de ella
-Claro, yo como la soledad estoy para ayudarte a reflexionar- Y sale ante esas palabras
La soledad…aquella que siempre me acompaño y ahora se a alejado un poco de mi, esperare a ver los resultados de la decisión que tome, apago la tableta y tomo mi celular, lentamente marco el numero que es primero en mis contactos, espero lentamente hasta que oigo la voz del otro lado de la bocina…
-Hola, Yami…- sonrió ante su nombre…
FIN