Capítulo 17
-¡no! ¡No! ¡No! ¡Y no!, ¡no pienso quedarme callado esta vez! ¡Tenemos que ir a la policía y…! – deidara se cayó al recibir una patada por debajo de la mesa de parte de kiba, este le señalo con la mirada a la punta de la mesa, el menor de aquella reunión que se había organizado, estaba con la cabeza gacha, mordiéndose el labio levemente, para naruto eso era muy difícil, menma era su hermano, y aunque le dolía lo que había hecho, le dolía mucho la idea de verlo detrás de una reja, en cuanto pudo calmarse, kakashi no dudo en llamar a los dos restantes en esa habitación, ambos estaban ocupados, pero la sola mención del rubio, los hizo llegar de inmediato, deidara fue el primero en reaccionar, llorando por el mal recuerdo que le causaba la sola mención de menma, y kiba solo se mantenía con el ceño fruncido
-¿para que recordar un hecho que paso hace tanto? La policía cerro el caso hace rato – dijo kiba, intentando que la presencia de menma no interfiriera en la vida de ninguno de ellos
-ustedes saben muy bien, el dolor que causa la muerte de un ser querido, todo este tiempo… me he sentido mal con esa familia, no la conocemos, ni nos preocupamos por hacerlo, pero fuimos nosotros quien le provocamos este dolor
-¡no es así! ¡Nosotros no provocamos nada! ¡Si empezamos por ahí, esa familia también nos lo provoco!
-¡cállate kiba! – le grito deidara
-¡esa chica fue la culpable de la muerte de ino! ¡Solo porque estás enamorado de ella, ¿quieres hacer como si no pasara nada?!
-cálmate kiba – naruto intentaba calmar a kiba, quien se había alterado
-¡¿estás diciendo que ella se lo merecía?! ¡Nunca supimos si todo eso fue cierto! Jamás pudimos saberlo, aunque haya sido verdad, yo nunca le desearía a una persona, lo que menma ha hecho
- dime una cosa deidara, aun después de muerta, ¿la sigues amando tan tontamente?
-¡ya basta los dos! NO LOS LLAME PARA QUE SE PUSIERAN A DISCUTIR – el grito de kakashi los hizo tomar asiento a ambos – no tengo idea de que es mejor en este momento, tampoco me interesa, menma volvió, no podemos meterlo a un avión y echarlo como la última vez, el volvió por su cuenta, y dejo en claro que se ira por su cuenta, no tenemos ni idea de que ha venido a hacer aquí, lo único que ha dicho de que le tomara un tiempo, y que no quiere que nos metamos en su camino, lo mejor sería dejarlo estar, él se ira, pero no queríamos que su presencia los tomara por sorpresa, y si, entiendo tus palabras y tu dolor deidara, los entendí hace un tiempo, pero había sido demasiado tarde, todos habíamos estado de acuerdo con lo que menma quería hacer, pero creo que si alguien debería entregarlo ese sería naruto, nosotros no tenemos por qué tomar esa decisión
-yo… en verdad no sé si quiero hacerlo – soltó al fin naruto – discúlpame deidara, pero menma sigue siendo mi hermano, y el verlo tras unas rejas, el solo imaginarlo me causa dolor – intentaba contener sus lágrimas – solo quiero que se valla, yo tampoco lo he perdonado, pero prefiero hacer como si él nunca ha existido – deidara asintió, poniéndose de pie, y tomando sus cosas
-si eso era todo, yo me retiro, le dije a itachi que me esperara en mi casa, seguro a esta ahí, nos vemos – deidara no espero contestación, se retiró dejando a los tres ahí sentados, naruto seguía soltando sus lágrimas, kiba solo estaba molesto por la actitud del artista, y kakashi, solo esperaba que esto no los separaba, naruto los necesitaba a todos en ese momento
-deidara no habla con razonamiento – se quejó kiba
-escuchas tus palabras cuando sales de tu boca, deidara es el único que habla con razonamiento, pero la razón no entra mucho aquí, aun cuando nosotros tres sabemos que es lo correcto, no podemos hacerlo, porque lo correcto lastima demasiado – su mirada se centró en naruto, que intentaba secarse las lágrimas – tu confiabas en hinata ¿no?
-hace mucho ya no sé qué creer de todo esto, lo único que quiero hacer ahora, es descansar – kakashi asintió, dejando que fuera a su cuarto para recostarse más tarde seguirían hablando sobre esto
-¿Qué crees que deberíamos hacer? - dijo cuando escucho la puerta cerrarse del cuarto
-no lo sé, aunque yo también creo que la cárcel sería lo mejor, naruto no lo resistiría, apenas se recuperó de que menma matara a esa chica
-cuando pienso en eso, solo puedo preguntarme, si menma en verdad es el culpable
-¿de qué hablas? Claro que lo es
-lo digo, porque menma no hizo algo que no pensáramos hacer
-¡eso no es verdad! – kakashi se calló al recordad la presencia de naruto en el otro cuarto, intentando clamar su voz – cuando menma nos metió en esto, la idea nunca fue matarla, jamás se dijo eso, y mucho menos violarla, nosotros nos arrepentimos con el tiempo, decidimos salirnos, fue bueno que lo hiciéramos
-¿acaso ella no se lo merecía? fue la culpable de que ino… ella…- kiba todavía le costaba soltar aquellas palabras
-se matara… no es tan difícil, ino se suicidó, fue su decisión, nadie le arrebató la vida, es muy diferente de lo que menma le hizo
-pero esa chica la orillo a eso, ella fue la culpable de que ino tomara esa decisión, tú lo leíste, ino no los dejo escrito
-ino tenía 15 años, ¿acaso nos tomamos la molestia de ver si eso era verdad? – kiba se calló porque eso era cierto – ahora ya es demasiado tarde para averiguarlo, lo único que podemos hacer, es dejarla en paz – el celular de kakashi comenzó a sonar, recibiendo un mensaje, al parecer la chica había llegado y estaban en camino al club – me iré un momento, te molestaría quedarte, tengo algo de qué hablar cuando llegue – kiba asintió, dirigiéndose al sillón para recostarse
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Deidara llegaba a su casa con el ceño fruncido, al parecer itachi no había llegado, cerró la puerta de un portazo y decidió dejar caer las lágrimas que contenía desde que había dejado la casa de kakashi, se encamino despacio a su cuarto, sin importarle que itachi estuviera a punto de llevar, se encamino hacia su armario, tomando lo único valioso que tenía, tomo entre sus manos las cajas, mientras una que otra lagrima caía de sus ojos, se odiaba en ese momento, se odiaba por no haber sido más valiente cuando pudo salvarla, de no haber podido enfrentar a menma en ese momento, de no haberlo entregado, de ser tan débil ante la presencia de naruto, porque todo había sido por él, todo su dolor se debía a que no pudo hacer nada, nada que lastimara a su pequeño primo, tomo la foto de hinata en sus manos – lo siento… en verdad lo siento… no quería matarte, no era mi intención hacerlo, perdóname hinata….
-¿Qué? – Deidara miro sorprendido la presencia de itachi desde la puerta, observándolo con los ojos abiertos- ¿Qué fue lo que dijiste?
-yo…- deidara solo escondió la foto tras su espalda, intentando ponerse de pie -¿Qué haces aquí?
-¿Qué fue lo que dijiste hace un momento? – Deidara vio miedo en los ojos de itachi, un miedo que no entendía de que era, intento acercarse, pero el pelinegro retrocedió – dijiste que la mataste, ¿la mataste?
-¡no! ¡Itachi no es lo que piensas! Yo no… yo nunca le haría daño a nadie
-pero lo acabas de decir, lo dijiste hace un momento – la vos de itachi sonaba algo pagada, no quería creer lo que acaba de escuchar
-pero yo no… escúchame itachi, esto es un mal entendido, déjame que te lo esplique…- itachi observo a deidara, sus ojos estaban rojos, y pudo apreciar la foto de su hermana en su mano, itachi quería confiar en deidara, pero sus palabras se repetían en su cabeza, sabía que había cometido un error, se había enamorado muy rápido, confiando ciegamente en el rubio artista
-tengo que irme, no puedo escuchar tu explicación – itachi salió de ahí, no podía escucharlo ahora, si deidara le mentía, él le creería como un idiota, él lo había escuchado, deidara no se había dado cuenta de su presencia, el preocupado lo siguió hasta el cuarto, no pensó que escucharía tal confesión del rubio, al salir a prisa, choco con alguien en la entrada, disculpándose rápidamente – disculpa naruto-kun – fue lo que le dijo para marcharse rápidamente – el pelinegro lo miro algo extrañado
-¡itachi espera! – deidara salió corriendo detrás de él, pero paro en ceso al ver quien se encontraba en su puerta –tu…
-¿Qué haces tú aquí? – pregunto extrañado menma
-¡vete! ¡Vete de aquí! ¡No sé a qué has venido a molestarme! ¡Pero vete de inmediato!
-tu no vas a echarme, esta es mi casa, te guste o no, es mi casa – le dijo con enojo por ser recibido así
-¡claro que no! ¡Esta es mi casa! ¡La compre en cuanto tú te fuiste! ¡No tienes ningún derecho aquí! – le grito con furia deidara, la presencia de menma le había hecho olvidar que estaba persiguiendo itachi, desquitando toda su furia contra el
-¿Qué? – Menma tomo de la camisa a deidara sujetándolo con fuerza - yo aún vivo, naruto no tenía derecho a venderla sin mi autorización – dijo con furia
-¿y cómo iba a hacerlo? Eres un prófugo, estas molesto, ¿quieres recuperarla? – Vos de deidara se escuchaba con burla – entonces ve, ve a la policía, y levemos esto a la justicia, hay muchas cosas que me gustaría decir – menma lo empujo, tirándolo al suelo
-¿Qué se podía explicar de una zorra como tú? , no quiero nada, dame las cosas de ino, es lo único que he venido a buscar, pensé que me enfrentaría al idiota de tu primo, pero me la pusieron más fácil, pelear con una mujer no es nada – menma esquivo rápidamente el puño de deidara, tomando su brazo fuertemente, comenzó a doblarlo, asiéndole doler – tengo prisa, así que lo pediré amablemente, dame, las cosas, de ino – deidara mordía fuertemente su labio, aguantando el dolor para no soltar ningún quejido
-¿y crees que te las daré así como así? – menma seguía haciendo precio, intentando que deidara gritara, pero no lo hizo, vio el brazo de su primo, si continuaba le dejaría un gran moretón, lo tomo con brusquedad apartándolo de la puerta, metiéndose como si nada en la que era su hogar -¡¿Qué que es que estas asiendo?! ¡Vete de mi casa o llamare a la policía!
-¡no lo hiciste hace un año, no lo aras ahora- fue la simple respuesta de menma, entro a la habitación que era de ino, esperaba encontrarla como la había dejado, sus peluches, su cama, sus poster, pero no era así, esa habitación color azul, ahora era un asqueroso color mostaza para menma, y una cama simple –malditos… malditos… - no podía creer como habían podido deshacerse de las cosas de ino, salió del cuarto hecho una furia, encaminando al otro cuarto, las cosas de ino debían estar por algún lado, se metió al cuarto de deidara, el más grande, ese era su cuarto, su color azul, ahora era un especie de morado, miro la mesita de luz, ahí estaba la foto de todos, sus primos, e ino, solo que él estaba recortado, apretó sus puños al verlo, se dio vuelta, encontrando en el suelo la caja que deidara había dejado en el suelo, junto a la foto de hinata, miro con furia la foto, acercándose a abrir la caja, su ceño se frunció más al ver el contenido de esa caja, tomo las fotos, comenzando a romperlas con sus manos
-¡¿Qué mierda estas asiendo?! – deidara entro alterado, intentando sacarle la caja de las manos
-¡no! ¡¿Tú que mierda haces?! ¡¿Cómo puedes tenerla a ella aquí?!
-¡basta…basta! – deidara pedía entre llanto que menma dejara sus cosas, este no le hizo caso, rompiendo uno por unos los recuerdos que deidara tenía de hinata - ¡menma!
-¡no tienes las cosas de ino! ¡Pero la de esta maldita sí! ¡Porque no dices de una vez que la ayudaste a matarla! – deidara se quedó en el suelo, observando los pedazos de las cartas que hinata le había escrito, las imágenes que tenia de ella, menma no había dejado ninguna, menma camino hacia la salida, a deidara no le importó asegurarse en que se fuera y no se llevara nada, no le importaba nada de eso ahora, lo único que podía hacer era llorar, llorar porque no le quedaban ningún recuerdo de la persona que tanto amo
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En la residencia sabakuno, sai se encontraba acompañando a gaara a su casa, se habían cansado de caminar, comenzaba a anochecer
-no era necesario que vinieras, se cuidarme solo – le dijo cuando estaban cerca de la entrada
-eso ya lo sé, solo quería hacerlo
-bueno, creo que me iré, nos vemos mañana, temari quiere ir a visitar a mikoto muy temprano mañana– gaara se despidió con un amague de mano, encaminándose a su entrada, pero fue detenido por sai, quien lo tomo del brazo
-en realidad, ¿podríamos hablar? – gaara asintió, sin saber a qué se debía la urgencia de sai – gaara yo… creo que no soy muy obvio cuando hablo contigo, o por mi carácter solo me tomas como una molestia, pero yo… - sai lo sentía muy difícil, había salido mucho mejor en su cabeza cuando se lo imagino, pensó que sería más sencillo
-tu…- quiso ayudarle gaara, pero sai no se animaba a contestar, trago saliva, gaara se sintió algo nervioso, no entendía porque pero esperaba que sai continuara con sus palabras, quiso mirar a sai, pero la imagen de itachi detrás del llamo su atención, venia en su dirección, y pudo ver claramente como tenía los ojos rojos- ¿itachi?
-tú me gustas gaara – sai miro confundido a gaara, ¿Por qué decía el nombre de su primo en ese momento?, gaara miro confundido sai, se arrepentía de hablar en ese momento, porque no había escuchado las palabras de sai, le hubiera gustado preguntar que le había dicho, pero el rostro itachi parecía tan afligido, y al parecer pensaba marcharse al verlo hablar con sai
-discúlpame sai – le dijo por dejarlo hablar solo, caminando en direcciona alcanzar a itachi, sai lo observo, viendo como gaara perseguía a su primo a lo lejos, debió esperar que lo rechazara, el mismo sabía que había sido muy pronto para declararse, tenía una pequeña sospecha, de que gaara seguía enamorado de itachi, pero confirmarlo así, en verdad le dolía, coloco su sonrisa falsa, nadie tenía que saber que había sido un idiota, al pensar que el cariño de gaara iba más allá que su amistad
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-¡itachi!, ¡itachi! ¡Detente ahí comadreja de pacotilla! – gaara grito con todas sus fuerzas, haciendo que itachi se detuviera a unos metros- ¿Por qué te fuiste así? Es más ¿porque me hiciste correr todo este camino? – lee reprocho algo agitado
-disculpa, no quería interrumpirte con sai, yo…solo traía mis problemas – gaara pudo observar como los ojos de itachi estaban rojos, había estado llorando, y debía ser muy grave para que lo viniera a buscar
-¿le ha ocurrido algo a sasuke?
-no, no que yo sepa – gaara miro los ojos de itachi, debía ser algo muy duro para que itachi viniera a verlo a él, solo un ves lo vio así, tan quebrado, luchando con todas sus fuerzas para que sus lágrimas no salieran, solo lo había visto así en el funeral de hinata, y solo porque lo encontró en su cuarto itachi jamás dejaría que alguien más lo viera en ese estado, ni siquiera sasuke, por eso había ido con él, gaara lo sabía, itachi lo necesitaba en ese momento
-si quieres privacidad, podemos pedir una habitación de hotel – gaara no espero respuesta, después de todo no era la primera vez que lo hacían, cuando el quien quería hablar, por todo lo que había pasado en su familia, gaara había pedido a itachi la privacidad de una habitación, donde pudiera descargar todo, nunca pasaba nada, jamás pasaba más de una simple consolación, y no le importaba nada lo que pensaran los demás, él sabía lo que hacía, y no tenía que darles explicaciones a nadie, ambos se encaminaron, al lugar más cercanos que encontraran, dejando a un pelinegro algo asombrado, había seguido a gaara, pensando que tal vez sacaba conclusiones equivocadas, pero la invitación de gaara había sido bastante obvia, no necesitaba nada más para saber que solo perdía el tiempo con gaara, lo mejor sería hacer como que nada paso , hacer como si jamás se hubiera declarado, y hacer como si gaara solo fuera lo que era en un principio, solo un amigo de la familia, decidió dar marcha a otras en su caminar, y dirigir a su hogar, con la sonrisa falsa que muchas veces había practicado
…
-¿te has vuelto loco?- Karin se asombró por las palabras de shino
-no, quiero que vuelvas a la casa, temari te extraña, y te aseguro que gaara y yashamaru también
-no lo entiendes shino, yo no puedo volver, yo, en verdad que ya no sé con qué cara poder mirar a gaara, estoy acá encerrada, con el miedo de que en algún momento pueda encontrármelo
-pero no puedes alejarte de tu familia, crees que el mejor camino es huir, pero no es así, tienes que enfrentarte, aun con lo duro que puede ser, sé que gaara no te odia, si está dolido, pero no te odia, eso puedo asegurártelo
-¿y sasuke? ¿Cómo se tomara si regreso?
-sabes que aprecio mucho a mikoto, por haberlos cuidado, y también me trataron muy bien, pero en verdad no puedo decirte que me importa mucho su opinión en esto, deben estar muy dolidos, pero si no quieren verte, que no lo hagan, pero no creo que nos den la espalda por aceptarte nuevamente, eres nuestra hermana, y sé que si fuera al revés ellos aceptarían a hina…- shino se detuvo al ver la cara de su hermana entristecerse nuevamente
-ni siquiera pude disculparme, en verdad la consideraba mi hermana, en verdad nos porque la trate así, no quería hacerlo, ni decirle lo que le dije, yo… en verdad quería disculparme con ella
-conociéndola, estoy seguro de que te perdono hace tiempo ella no era de las personas que guardaban rencor, y mikoto-san tampoco lo es, estoy seguro, de que te volverán a aceptar, con el tiempo, cuando sepan que de verdad estas arrepentida, porque lo estás ¿no?
-claro que si, en verdad me encantaría volver a verlos, y que mi hijo, tuviera una verdadera familia – dijo con una sonrisa, las palabras de shino le estaban dando esperanzas a Karin, al pensar en recuperar algo que ya daba por perdido
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Kakashi había llegado, viendo como su amigo azuma se encontraba esperándolo en la entrada, junto con la chica que trabajaría con él, no parecía tener más de 23, usaba ropa muy holgada, que apenas dejaba ver su cuerpo, le extraño ya que esa clase de chicas no solían vestir así, miro el rostro de azuma, estaba algo seria, miro más atentamente la ropa de la chica, rio al darse cuenta de que lleva ropa de su amigo “así que tiene preferencia” aunque le extraño el hecho de que azuma la trajera a trabajar si sentía algo por la chica, intento ignorar todo aquello mientras se presentaba a la chica
-hola, mucho gusto, hoy kakashi hatake, gusto en conocerte kurenai – la chica no contesto, no dijo ninguna palabra
-no habla mucho, como te dije, apenas y las está dejando – drogas, era algo de kakashi odia a muerte, la mayoría, por no decir todos, habían empezado así, aun recordaba como encontró a konan drogada a punto de tirarse de un puente, si no era por yahiko, no hubiera salido adelante, era difícil todos lo sabían, mucho autocontrol, mucho furia, mucha ansiedad, por eso era que el cigarrillo era la única droga que permitía, aunque mucho no al consideren así, era las razones por la que tenía tanta seguridad en el club
-de acuerdo, porque no me acompañas, te mostrare el lugar, y donde dormirás – le dijo intentando sonar agradable, pero esta solo miro a azuma viendo como el la acompañaba, comenzaron a adentrarse dentro del edificio, no había mucho que muestras, pasaron por la barra y lo que era la pista de baile, luego los chicos le explicarían bien como serían las cosas de trabajo, se encamino directo a las habitaciones, cruzándose con yahiko y nagato, que venían en su dirección, detrás de ellos sasori y suigetsu – chicos, ella es kurenai, trabajar aquí a partir de hoy, compartirá cuarto con konan
-¿Qué? – kakashi alzo su vista, al reconocer la vos de su amante, iruka lo miraba con os ojos bien abiertos, kakashi no entendía él porque del rostro de iruka ¿acaso no quería verlo? ¿Se sorprendía de verlo tan temprano ahí? Vio su labio timbrar, acercándose a donde él estaba –tu…que, que haces aquí – sintió la espalda de kurenai chocar contra su pecho, la vio retroceder, como si estuviera asustada, ninguno de los presentes entendió nada, mucho menos al ver como iruka se acercaba tomándola bruscamente de los hombros -¡qué haces aquí! ¡¿Qué estás haciendo aquí?! – aunque azuma y kakashi intentaron separarlo de ella, iruka los empujo bruscamente, no entendía que sucedía, y la chica parecía cada vez más asustada
-yo…hermano ¿tu? – ahí lo entendió, entendió la actitud de iruka, era su hermana, la hermana que con tanto orgullo hablaba, la que estudiaba medicina, o cual fuera su carrera, estaba ahí, saliendo de las drogas, y comenzando su trabajo en la prostitución
-¡¿Qué haces aquí?! ¡Tendrías que estar en suna! ¡Tendrías que estar estudiando! ¡Me dijiste que en unos días tenías un parcial importante! ¡Qué haces aquí! ¡CON UN DEMONIO ¿QUE HACES AQUÍ?! –iruka estaba completamente alterado, intentando comprender la realidad de ese asunto, hace una semana tenía el correo de su hermana, diciéndole que había aprobado sus parciales, preparándose para los otros, que su sobrino estaba creciendo cada día mas, su sobrino… como si recién callera en ese pequeño detalle, vio a todos laos, buscando inútilmente la presencia del menor -¿Dónde está? – dijo con vos temblorosa y cortada, nadie entendió nada, solo kakashi lo hacía, mordiéndose el labio de lo evidente, azuma jamás menciono un bebe -¡kurenai! ¡¿Dónde está?!
-lo aborte – fue la única contestación que dijo, o que iruka le permitió decir, todos observaron asombrado como iruka, el amable iruka le había pegado una cachetada, dejándole marcado sus dedos en la mejilla de su hermana, kurenai solo toco su mejilla adolorida, temblando porque su hermano siguiera golpeándola, pero iruka no lo aria, estaba sorprendido de sí mismo por hacerlo, su mano se movió por sí sola, no se había dado cuenta de lo que había hecho, hasta que vio cara de kurenai marcada, nunca, jamás, ni siquiera cuando era chica había tocado ninguno de sus cabellos, y ahora el… sus lágrimas caían, y no se molestó en detenerlas, miro a kakashi, este solo se mordió el labio, “el no, él no fue, él nos ayuda, él nos da una mano , el jamás me aria esto, jamás me aria esto a mi” su miraba volteo al hombre que estaba a su lado, ese que intentaba tomar a kurenai en sus brazos, su ceño se frunció, y la rabia que luchaba por salir emergía bruscamente
-¡es tu culpa! ¡¿Qué le hiciste?! ¡¿Con pudiste traerla aquí?! – muchas palabras orientes salían de la boca de iruka palabras que muchos de los de ahí pensaban que el dulce castaño no conocía, iruka se lanzó golpeando el pecho de azuma, alejándolo de su hermana, echándole la culpa de todo, de su dolor, de sufrimiento, él tenía la culpa de todo, de que su hermana estuviera ahí, de ella le hubiera mentido, de que jamás conocería a su sobrino, - ¡suéltenme! ¡Suéltenme! – decía al sentir como lo tomaban de los hombros, sus lágrimas seguían cayendo, quería desquitarse, quería golpear a ese sujeto hasta que todo su dolor desapareciera
-calma…cálmate iruka – intento decirle kakashi, prefería que iruka se desquitara con él, que lo golpeara a él, kakashi no se tomó la molestia de investigar a la chica, solo recibió el correo de azuma, pidiéndole un espacio, y no dudo en dárselo, atrajo a iruka contra su pecho, las manos del castaño apretaban fuertemente la camiseta de kakashi, mientras su llanto seguía, fue desgarrador para muchos que conocían al castaño, verlo llorar de ese modo, era la primera vez que veían a iruka así, y sabían que sea lo que estuviera pasando, aquello estaba destrozando a iruka
-sácame de aquí…solo sácame de aquí – susurro contra el pecho del ataque y este no lo dudo, y lo más cercano, era la habitación del castaño, sin pedir permiso, solo encaminándose ahí, camino con iruka, mientras lo demás solo se quedaron ahí, viendo todo sin saber que hacer realmente, escucharon el leve llanto de la chica, mientras azuma, le decía algo de que debían irse, pero al parecer la chica no estaba del todo de acuerdo
-podrían… decime donde encuentro mi habitación – les pregunto, aunque todos se quedaron callados, sin saber que decir realmente
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Sasuke llego a su casa furioso, estaba tan cerca, tan cerca de descubrir algo importante, ¿Cómo demonios se le venía a quedar sin batería?, se sentía un idiota, como no se le ocurrió eso, lo único que pudo descubrir, era que naruto no tuvo nada que ver, era lo único que por momento le alegraba, pero le enfurecía pensar que estuviera encubriendo algo tan serio, pero su única pregunta en ese momento era ¿Quién? ¿Kakashi? ¿Kiba? ¿Deidara? no lo entendía, y no comprendía que motivo o razón tenían, que relación tenía con su hermana, para hacer lo que le hicieron, un amor no correspondido era lo único que lo acercaba a deidara, pero ¿kakashi? ¿Kiba? ¿Podía descartarlos tan rápido?, según gaara kiba estaba de viaje, cuando o de hinata sucedió, ¿y si no había actuado solo? ¿Y si solo era una coartada? ¿Cómo podía estar tan seguro de que así había sido?, no tenía los métodos necesarios para saberlo y tampoco podía exigirle a kiba un comprobante de esa coartada, era imposible, ¿y kakashi? Kakashi no tenía nada en su contra, su único crimen que precia tener era dedicarse a un prostíbulo, no tenía prueba alguna de que tuviera algo que ver con el crimen de su hermana, pero tampoco como si tuviera una coartada , ¿cómo podía ponerlo a kakashi?, y ahí volvía de nueva cuenta, no tenía las herramientas necesarias para comprobar nada de sus hipótesis, solo tenía eso, hipótesis, cosas que él solo había averiguado, y deducido, necesitaba ayuda, necesitaba a alguien que sepa de esto necesitaba
-la policía, la necesitamos – sasuke se dio vuelta, como si itachi viniera leyendo su mente antes de entrar sorprendido a sasuke, y sai que se encontraba en ese momento, sasuke pensó que itachi jamar querría aquello, que no se arriesgaría a que mikoto volviera a pasar por lo mismo otra vez, que quisiera revivir un fantasma que su madre ya había superado – quiero reabrir el caso de hinata, quiero conseguir las pruebas necesarias para reabrirlo – detrás de itachi entraba gaara, ambos muy serios, decididos, y sasuke lo comprendió, fuera lo que hubiera pasado, itachi y gaara estaban decididos a terminar con todo eso de una vez, eso solo era el inicio, el inicio de lo que sería en verdad el fin de todo eso
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