Ocaso del Caballero de la Noche
Capítulo 34: La Broma Asesina Parte Final
En algún lugar de Gótica – 4:50 a.m.
-Sabes, mi querido imitador –exclama Joker, mientras acerca una silla a la camilla –No es nada personal, es solo que mi historia con el Murciélago es antiquísima. Si te hubieras puesto las mallas del Super Mamón no habría pasado tanto drama, pero… Batsi es… como te puedo decir… de mi propiedad. Casi te puedo decir… mi soulmate[1].
Balack, con su pecho descubierto, en carne viva, estaba recostado, con varios tubos pegados a su cuerpo, y un IV con un contenido extraño. En las últimas 3 horas había pasado a la inconsciencia varias veces, pero ahora estaba despierto. Su cuerpo temblaba sin control, mientras el sudor picaba en sus heridas. Sin poder moverse o reaccionar, estaba a merced de lo que quisiera hacer el Joker con él.
-Haciendo memoria… ammm… todo empezó hace muchos años, no sé cuántos exactamente. Yo era… un tipo común, ¿sabes? Casado, con una hermosa mujer, esperando un hijo… sin un dólar encima… oh, que buenos tiempos aquellos, eran casi idílicos…
Gótica – 1992
Imagina, mi muy odiado imitador del Murciélago… la Gótica de la década de los Noventa, tan lúgubre como lo es ahora. En ese tiempo… yo era un joven lleno de futuro… futuro que tu amigo la rata mojada arruinó…
Con tesón terminaba de hacer la cena, sentada en una simple mesa de su viejo apartamento. Sin poco dinero, y con un hijo en espera, la situación era difícil. Pero, aun así, tenía fe en él. Escuchó pasos en el piso de madera, y vio abrirse la puerta.
-¿Bueno? ¿Cómo resultó? ¿Les gustó tu acto? –le pregunta la mujer.
El entra y deja su abrigo a un lado, dejando ver su traje color púrpura con un sombrero que combinaba cabizbajo.
-Bueno… ellos, ummm… dijeron que tal vez me llamarían. No lo sé. Yo… yo me puse nervioso y arruiné la línea.
La mujer bajó la mirada. –Oh.
El inmediatamente fue hacia la mesa, golpeándola con sus palmas e inclinándose a unos centímetros de su rostro, -¿Qué quieres decir con oh?
-No… no quise decir nada…. –le dice con sorpresa.
-Si, lo hiciste. La forma que dijiste oh así.
-Por Jesús, todo lo que dije fue…
-¡Dijiste oh como “Oh, ¿así que no conseguiste un trabajo?!” Como “Oh, ¿cómo vamos a alimentar al bebe?” ¿Crees que no estoy preocupado por ello?... Crees… crees… que no me importa, que es una gran broma para mí o algo así… ¡Cielos, tuve que ir, tuve que ir… y pararme allí… y ¡nadie se rió! Y crees… crees… que yo…
Finalmente agotado, cae en su regazo, en medio del llanto, -¡Oh, Dios… Oh, Dios… lo siento! –le dice atormentado.
-Oh, bebe… -le trata de consolar, mientras él le abraza su vientre con cariño.
-No quise desquitarme contigo. Ya su… sufres suficiente al estar casada con un perdedor.
-Cariño, eso no es…
-Es verdad, no puedo mantenerte… oh Jenny, ¿qué vamos a hacer?
-Todo estará bien… Junior no estará aquí en otros tres meses, y creo que la Sra. Burkiss aplazará la renta un poco… siente pena por mí…
-¡Ella me odia! Sale al pasillo a fruncirme el ceño cada vez que subo las escaleras con su mugroso gato –le dice mientras va a la ventana y ve hacia la lluvia torrencial –Esta casa apenas a arena de gatos y gente vieja. Tengo que sacarte de aquí, antes que el bebé llegue. Solo quiero suficiente dinero para establecernos en un vecindario deciente. Hay chicas en la calle que ganan eso en un fin de semana sin tener que decir una sola broma…
La mujer se ríe, -Cariño, no te preocupes por nada de eso. Te amo, ¿sabes? Con o sin trabajo, eres muy bueno en la cama… y sabes cómo hacerme reír –le dice mientras le extiende la mano con cariño.
Oh, si… Éramos muy felices… vivíamos bien, en nuestro pequeño Reino de Cristal, hacíamos el amor todas las noches… mmmm… aún recuerdo aquellos pechos entre mi nariz, ¡qué delicia de mujer!, pero, sabes, a veces la vida nos hace bromas de mal gusto… a mí me pasó…
En un bar, unas horas después, con varias copas encima, hablaba con un par de “amigos” que había recién conocido en el lugar.
-Verán… verán, tengo que probarme a mí mismo, como esposo y ¡cómo padre!... digo, yo… bueno, no estaba haciendo este tipo de cosas si… si no fuera algo importante –decía con la voz ya afectada por la bebida. –Es como empecé… como asistente de laboratorio, ¿verdad? Era un trabajo real… un buen trabajo real… así que… ¿qué hice?... renuncié para ser comediante, estaba tan seguro… tan seguro… que tenía talento. Pero… ja, bueno… ¡mírenme! Creo que mis talentos no se extendieron en esa dirección –dice mientras toma otro trago.
-Oye, cabrón, relájate –le dice uno de sus acompañantes.
-Lo siento… lo siento… usualmente no bebo… es sólo… si están seguros que podremos escapar con esa cosa y que nadie que conozco se involucre…
-No te preocupes –le dice el otro sujeto –mi amigo, nos ocuparemos de ti.
-Necesitamos tu ayuda para entrar a esa planta química donde trabajaste –le dice el otro mientras le mete un camarón jumbo en la boca.
El compañero saca un maletín y lo abre, -Así que, para garantizar absolutamente que nadie te conecte con el robo… estarás vistiendo esto –le dice mientras le enseña un casco rojo.
Él se siente confundido en ese momento, -¿Vistiendo?... pe… pero… no hay orificios para los ojos… nos seré capaz de ver…
-Hay dos lentes de visión rojos puestos dentro.
-Yo… yo no sé… esa máscara… ¿no es igual a la que Red Hood usó cuando asaltó esa compañía el mes pasado? Salió en las noticias…
- ¡Despierta! No hay “Red Hood”, son solo un montón de tipos que usan esa máscara en cada golpe diferente que se hace.
- ¡Cierto! No importa quien este debajo de la capucha, solo acordamos dejar que nuestro más precioso miembro de la Mafia lo vistiera por ummm… anonimato adicional.
- ¡Claro! El más precioso miembro ahora eres tú, hombre.
Algo de este plan no le gustaba al alcoholizado hombre. Su mano temblaba, así que agarró su vaso con las dos manos, -Ahhh… miren… realmente, no lo sé… esa planta química es tan sombría y fea… eso es en parte por qué renuncié.
-Pero dijiste que tiene mínima seguridad, hombre.
-Escucha –le dice el otro mientras se mete un camarón en la boca - ¿quieres… mmmm…. ¿criar a tu hijo en la pobreza?
-No, no, claro que no… tienen razón… digo, es solo por esta vez, después me podré cambiar de vecindario y empezar una vida propia…
- ¡Esa es la actitud! Entonces, ¿el próximo viernes a las once de la noche?
-Claro… claro… ¿por qué no? Jajajajajaja… el viernes será… y después, el sábado en la mañana, seré rico… no puedo imaginarlo… mi vida va a cambiar completamente… nada va a ser lo mismo… nunca de nuevo…
Después de una hora, Wally paró frente a la bahía de Gótica. Era inútil, no conocía la ciudad, ni a la gente. Los únicos que conocían este extraño mundo que era Ciudad Gótica eran sus amigos, y ahora el Bat Squad estaba fuera de la jugada. Entonces, una idea le cruzó por su mente, y fue a toda prisa a la Mansión Wayne.
Alfred estaba por salir, cuando una brisa entró por la puerta de la mansión. El velocista estaba frente a él agitado. –Qué bueno que te encuentro Alfred, necesito tu ayuda.
El anciano lo observó incómodo, -Joven West, ¿qué hace aquí? ¿El joven Dick está bien?
-Lo está atendiendo Alcor, no te preocupes. Escucha, estoy buscando a Balack, y necesito tu ayuda. Tú has estado detrás de los movimientos de Batman por años, conoces está ciudad a la perfección, necesito que me guíes, como lo haces con él.
Alfred arruga la frente y le habla con seriedad, -Donde esté el señor Balack, usted encontrará también a Joker. ¿Está dispuesto a hacer lo necesario para enfrentarlo y detenerlo?
Wally sabía a qué iba esa pregunta, -Haré lo que sea necesario para detenerlo de una vez por todas.
-Sígueme –finalmente le indica, mientras deja su abrigo y su paraguas. Ambos se encaminan a la baticueva con el objetivo de terminar con la pesadilla del Joker.
Salón de la Justicia – 5:35 a.m.
Jason y Tim esperaban cada uno en una habitación aparte, luego de haber sido estabilizados en la Atalaya. Desde el vidrio, Leslie observaba a Jason, que estaba dormido. En ese momento, una mujer se acercó –Buenos días –le saluda Dinah. -¿Cómo siguen?
La anciana suspira, -Por suerte, Tim solo tenía un par de vértebras fuera de sitio aparte de la fractura en su pierna. Ya las acomodaron y ahora está descansando. Estará varios días en cama, pero se repondrá. No parece haber daño permanente en los ojos de Jason. Alcor está trabajando en un tratamiento para sus cicatrices. Y Dick está respondiendo bien, esperan que despierte en algunas horas.
La rubia suspiró aliviada. –Bueno, ahora deberemos tener a Jason vigilado. No puede volver a escaparse de esa forma.
Leslie vuelve a ver a Canario curiosa, -Dígame algo, ¿qué planean hacer con Jason?
Dinah sin entender la vuelve a ver extrañada, -Bueno… él debe responder por lo que hizo hace un año.
-¿Y cómo pretenden que responda, si Jason Todd está muerto para el mundo?
-Doctora, entiendo que usted sea cercana a él, pero…
-No, usted no está entendiendo. ¿Están conscientes que entregar a Jason a las autoridades provocará una serie de preguntas que no podrán contestar? A él se le hizo una autopsia, se le declaró muerto y se le enterró, y después de cinco años, aparece de la nada. ¿Dónde estuvo todos estos años? Eso, sin mencionar que se disfrazó de Red Hood para matar a Joker y Batman, asesinando a varios criminales a su paso. La gente se sorprenderá al saber que el hijo muerto de Bruce Wayne revivió y se convirtió en un criminal. Y entonces, las miradas se dirigirán a la Mansión Wayne, específicamente hacia Bruce. La gente sospechara, y al final, los más inteligentes atarán cabos, así como los enemigos de Batman. Toda la leyenda del Caballero de la Noche caerá a pedazos.
Dinah se queda pensativa, -Bueno, es solo una conjetura, no podemos asegurar…
-Una conjetura, claro… ¿estarían dispuestos a arriesgarse entonces, por creer que es solo una especulación? Entregar a Jason, llevará a la destrucción de Batman, pero, sobre todo, a la de Bruce Wayne. Piénselo.
Entre tanto, Joker seguía con su historia, la cual era una tortura constante para Balack. Amarrado a una camilla, con dos IV conectados a su cuerpo, lleno de quemaduras en su pecho, piernas y brazos, seguía a merced del psicópata.
-Era una oportunidad de oro… ¿cómo le dicen? ¡Oh si, una gran oferta laboral, con un excelente plan de retiro! Y el trabajo era más que sencillo, pero… las cosas no siempre funcionan como pensamos, y la vida bromea con nosotros… a mí me pasó, ¡a todos nos pasa!… Entramos, pero la policía nos esperaba… esos aguafiestas. Mataron a mis colegas… así que hice la jugada más inteligente que se me ocurrió… Corrí, lo más que me permitía las piernas, pero la policía me tenía rodeado en esa maldita planta. Subí por las escaleras, hasta una plataforma, cuando encontré a una policía, intentó apuntarme, pero la golpeé, tomé su arma y la puse en su cabeza. Todo iba bien, hasta que ese maldito policía quiso negociar conmigo. Así que le apunté a él, y cuando disparé… ahí estaba él, entre el polizonte y yo. La bala reboto en su pecho… se veía mmmm… tan sensual jajajajaja. Aún no iba con su ridículo traje de rata, pero era él. Completamente de negro, con su mirada fría. Dejé a la mujer y corrí. Él me iba persiguiendo, mientras los polibrutos nos disparaban… Pero tropecé y apenas pudo sujetarme para no caer dos pisos abajo. Entonces vi sus ojos. Fue como… una conexión. Él no quería que cayera, luchaba por no dejarme ir. Fue en ese momento que sentí que ese hombre y yo estaríamos vinculados para siempre. Fue… casi una experiencia erótica, ¿sabes? Podía ver su esfuerzo por respirar, su desesperación por no dejarme ir, se me para de solo recordarlo… ufff… Pero bueno, no tuvo mucha fuerza, o yo no tuve tanta suerte, caí en un contenedor con químicos, y fue así que salió este hermoso y sensual espécimen masculino jajajajajajaja.
Balack, completamente inmóvil, sentía náuseas al escuchar su tétrica historia. La sonrisa maquiavélica del payaso, cambio de pronto a una extraña expresión.
-Por eso cuando lo vi caer al suelo en la televisión–le sigue hablando, haciendo un puchero –me sentí tan preocupado. Y supe que estaba enfermo… no, el alien no pudo hacerle daño pensé, es muy cobarde y pusilánime… no, está mal, ¿no es así? ¿Batsi Bats está enfermo? ¿Por eso andas volando con sus mallas? ¡Contéstame! –le grita el bipolar hombre, cambiando su expresión triste a una con ira.
Balack, sin saber por qué, empezó a mover sus labios.
-El esfuerzo es inútil No-Batman, el suero te obligará a cumplir mis órdenes, dime, ¿está enfermo? –le vuelve a repetir, esta vez con una cara demoniaca y una sonrisa escalofriante.
-Ammmm…. Siiiii…
Joker brinca de su silla, - ¡Lo sabía! ¡Lo sabía! ¿Ves? Él y yo tenemos una conexión. Y ahora, dime, ¿dónde está? Necesita de mí, debo cuidarlo… él no puede morir así, sin mí…
Una lágrima corrió por la mejilla del desvalido héroe, mientras luchaba por no decirle nada al maniaco.
-¡Joker! –se escucha una voz grave. -¿Por qué no me llamaste? ¡Te dije que cualquier avance sobre la captura de Batman me informaras! –le grita Vandal al entrar al sitio.
El payaso arruga la cara, -Ahora no fenómeno, que el imitador está por decirme dónde está mi Batman.
Vandal se acerca a la camilla. Arruga la cara al ver la calidad de heridas. Alrededor, se encontraban toda clase de artefactos para torturar. Como nota mental, dejo claro siempre tener ojos en la espalda con ese tipo.
-Entonces… ¿es cierto? ¿Este hombre no es Batman?
-No, al parecer Batsi anda enfermillo de la barriga, así que habrá que hacerle una visita. Y bien, habla Baticopia, ¿dónde está?
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Después de entregarle un comunicador a Flash, Alfred encendió el monitor. Wally se sorprendió al ver al anciano triangulando diferentes ubicaciones de Gótica. En una esquina de la pantalla gigante, varias imágenes de cámaras en distintos sitios de la ciudad estaban encendidas. Abrió una nueva ventana, introdujo una clave, y luego digitó el nombre Joker. La imagen del maniaco apareció en una esquina de la misma, y el programa empezó a revisar las grabaciones de las últimas 18 horas buscándolo.
-Esto probablemente tardará unos minutos, ahora, voy con usted –dice Alfred, al ponerse de pie. Toma un expediente y se lo entrega a Flash. –Este, señor West, es el perfil criminal de Joker.
Wally lo abre y en cuestión de segundos lo lee completo. –Es bueno saber que con usted no se pierde mucho tiempo –le dice el anciano en forma sarcástica.
-Ahora, lo más importante que debe saber del Joker, es que tiene la cualidad de anticipar los movimientos de su adversario. Por eso, estoy casi seguro que a estas alturas, ya debe saber que el Batman que tiene no es el verdadero.
-Eso no es bueno.
-No, no lo es. Como pudo leer en ese archivo, Joker está obsesionado con Batman, y probablemente, lo buscaré, no sin antes castigar al joven Balack.
-Debo buscarlo antes que lo mate.
-Oh no señor West, no lo asesinará. Lo dejará vivo, pero no sin antes hacerle un terrible daño.
-Bien, podré contenerlo fácilmente con mi velocidad.
Alfred sonríe, -Señor West, aprenderá con esta experiencia que no se puede tener certeza de nada con ese hombre. Le aseguro que al ver que varios héroes estuvieron en el centro, tendrá un plan de contingencia para cada uno de ustedes. Si quiere detenerlo, debe pensar fuera de la caja.
-¿Fuera de la caja?
-Sí, hacer lo que comúnmente no haría, tomarlo por sorpresa. Usted es muy hábil, pero he visto que es muy predecible. No puede darse ese lujo ahora. Analice sus opciones, tal y como lo haría el señor Bruce.
En ese momento, se activa un aviso en el monitor. –Bien, tengo una imagen de Joker de hace unas 3 horas. Complejo Gótico.
Flash deja el expediente en la mesa. –Una cosa más Alfred, si Joker quiere averiguar dónde está Batman, ¿él podría hacer que Balack hable?
-Joker cuenta con muchas formas de hacer hablar a sus víctimas, desde las más terribles torturas hasta el uso de drogas. Sí, probablemente ya deben estar en camino con sus secuaces. Pero no se preocupe, me encargaré que no se acerque al señor Bruce. Usted, busque a Balack, esa debe ser su prioridad.
Metrópolis – 5:40 a.m.
Desde un edificio cercano, Pregunta, junto a Wonder Woman y el Linterna John Stewart esperaban.
-No hay movimiento –les decía Pregunta con sus binoculares.
Con su anillo revisó las señales de calor del edificio. –Está vacío, a excepción de algunos guardas.
-Entremos –indica Wonder Woman.
Después de unos minutos, ingresan sin ser detectados al edificio del grupo New Earth Inc.
-¿Qué es exactamente lo que estamos buscando? –pregunta Diana indecisa. –Este no es la forma en que habitualmente trabajamos.
-Lo sé, ustedes van directo y golpean –le responde Pregunta –pero para este tipo de investigaciones, hay que ser sutil señorita.
Pregunta camina más adelante, dejando a John con Diana –Este tipo es todavía más espeluznante que Batman – murmura John a la Amazona.
Ella sonríe y sigue. Pregunta con agilidad, abre la puerta de la oficina principal y entra. Los otros dos lo siguen, y ven como él va de inmediato a la computadora. Diana se aproxima a él, mientras John revisa la oficina.
Rápidamente, Pregunta empieza a revisar el computador. –Debe tener los archivos encriptados. No soy tan ágil como Batman pero…
-Creo saber quién está detrás de todo esto –le interrumpe John.
Los dos vuelven a ver un enorme cuadro en una pared. Pregunta no llega a entender, pero Diana aprieta los puños al ver la imagen de Vandal Savage colgando.
Hal llega a Gótica. Sin tener forma de cómo comunicarse con Wally, se siente impotente.
-Jordan –le saluda una voz conocida.
-¿J’onn? ¿Qué haces aquí? –le pregunta al ver al marciano bajar hacia él.
-Localizando a Balack y al Joker. ¿Y tú? Pensé que descansarías.
El castaño suspira, -Estoy preocupado por Flash. Sé que estuvo en el Salón de la Justicia con Nightwing y luego desapareció. No responde a su comunicador ni a su celular, y pedí que triangularan su ubicación, y su última posición fue aquí, en Gótica.
-Eso solo puede significar que Flash está buscando a Joker por su cuenta.
-¿Quiénes más están aquí?
-Hawkgirl está al otro lado de la ciudad, y sé que Cazadora y Zatanna están también por su cuenta.
-Necesito encontrar a Wally J’onn. Es muy impulsivo y no quedó en buenas condiciones después de esa reunión.
El marciano entiende, y utiliza sus poderes para poder ubicarlo. Esquiva los pensamientos de los millones que viven en Gótica, hasta dar con él. Pero, otra señal mental lo preocupa.
-Sé dónde está, pero hay algo más grave que la Liga debe atender a la brevedad.
Alfred subió a la habitación de Bruce con dos maletines. El millonario seguía dormido y ajeno a lo que sucedía. Alfred se acercó a la ventana, y desde ahí, vio movimiento de vehículos aproximándose. Sacó un control de su bolsillo. –Código rojo, Pennyworth, password BT002.
En ese momento, las alarmas se encienden en la mansión, haciendo que el médico y el enfermero que dormían en otra habitación se despierten. El muro de la propiedad se electrifica, y una cúpula de energía a un par de metros aparece. Ventanas y puertas de la mansión se cubren con acero y una luz tenue aparece en todas las habitaciones. Alfred aproxima un maletín al escritorio, lo abre y saca una laptop. Al encenderla, aparece las imágenes de seguridad de toda la propiedad. Varios vehículos llegan y de ellos, salen individuos que Alfred conocía por fotografías.
-Muaaaa…. ¿estás seguro que es aquí? –pregunta Pingüino indeciso.
Doble Cara sale detrás suyo. –Savage dijo que era aquí.
-Y exactamente qué haremos. ¿Nos traemos al millonario y ya?
-Por supuesto pajarraquín –le responde Harley, con un bate en su mano. –Será pan comido. Mi jefecito ordenó traerlo sin un rasguño recuerden.
-Bien, pero no dijo nada del resto, ¿no? –pregunta Pingüino.
-Ni siquiera lo mencionó –dice Doble Cara con una sonrisa, mientras decenas de sus secuaces salen armados.
En la habitación de Bruce, Alfred suspira. Saca del otro maletín, dos armas pequeñas, además de un rifle de alto impacto. Se aproxima a la cama y coloca en la oreja de Bruce, su comunicador de la Liga, para, de ser necesario, transportarlo a la Atalaya. Acerca la silla y toma asiento, con el rifle en su regazo. –Descuide, pase lo que pase, usted estará a salvo amo Bruce.
-Tienes que apresurarte Pregunta –le insiste John al ver a su compañero trabajar.
-El encriptado es muy complejo, pero… listo.
Al tener acceso a los archivos de Savage, revisa con cuidado, pero algo le llama la atención.
-Diana, no entiendo, ¿Vandal Savage no estaba en detención?
-Es lo que se suponía. Pero de eso ya 6 años.
-Tuvo el tiempo suficiente para crear un plan, aunque, aun no entiendo que busca.
-Señores, será mejor que vean esto.
Ambos se acercan y ven la pantalla. -¿Qué estamos viendo? –le increpa John
-La descripción sobre el compuesto que fue utilizado en Superman.
-Era kriptonita roja ¿no?
-No soy un químico, Wonder Woman, pero creo que fue más que kriptonita lo que entró al organismo de Superman.
En la guarida de Joker, Savage esperaba impaciente, por los gritos de Balack. Finalmente, el payaso toma un descanso de su ajetreado trabajo. –Y dime, anciano, ¿cuál es tu verdadero plan?
-¿Disculpa?
-No me creas tan idiota como los otros. Hay algo más que no nos quieres decir, ¿qué es?
El inmortal sonríe, -Planeo destruir a la Liga de la Justicia, empezando por su cimiento más fuerte.
En ese momento, las alarmas encienden.
-Creo que tenemos visitas –dice Joker con una sonrisa.
Flash entra al lugar. El Complejo estaba compuesto por tres edificios semi abandonados, así que un subterráneo conectado a las vías de Gótica, pero que había dejado de ser funcional hacía ya algunos años. Camina por el lugar, sin observar algún movimiento. –Alfred ya llegué… ¿Alfred?
-¡Flash! –le llama Hal que finalmente da con él. Desciende frente al velocista quien lo recibe con cara de pocos amigos.
-¿Cómo me encontraste?
-J’onn me echó una mano. ¿Qué pretendes hacer? –le pregunta el castaño al caminar hacia él.
El pelirrojo suspira, cambiando su expresión, -Es mi culpa que Dick y los otros estén heridos, debo detener al Joker y salvar a Balack.
-Wally, estás mal. ¿No entendiste nada? No puedes hacer este tipo de cosas tu solo, debes contar con nosotros.
-¡No entiendes Hal! ¡Pudieron morir por mi culpa, igual que…!
La voz de Flash se entrecorta y no termina la oración. Adivinando lo que pasaba por su mente, Hal pone las manos en sus hombros, -Lo de Barry no fue tu culpa Wally.
-Si yo te hubiese obedecido aquella vez, cuando me ordenaste quedarme en la cueva con Robin. Pero no, fui con Dick y por salvarme mi tío…
Wally baja la cabeza, al recordar ese día. Hal siente un nudo en la garganta, pero debía hablarle.
-Escucha… Barry estaba consciente de los riesgos, al igual que Superman, Batman y yo, incluso ahora tú y los demás que visten un traje para proteger a las personas. Por mucho tiempo me culpé por no haberlo sacado antes que el vórtice detonara, pero entendí gracias a un buen amigo que no fue así, que el único culpable fue Zoom. Solo él. Y ahora, tú debes entenderlo también. Necesito que lo hagas.
Wally se queda pensativo, así que Hal suspira. -Ahora, concentrémonos en esto, ¿te parece? –le dice tratando de sonreír. -¿Por qué aquí?
-Pennyworth tuvo imagen del Joker en este lugar hace unas horas, aunque no vio a Balack. ¿Sólo estás tú?
-Sí, varios estaban en Gótica, otros con el tema de Superman y la mayoría patrullando –le dice escuetamente para no alarmarlo en demasía. –Con nosotros dos tendrá que bastar.
Caminan unos cuantos metros y observan el sitio. Con su anillo revisa rastros términos en los edificios –Nada. ¿Estás seguro que…?
-El subterráneo–le interrumpe Wally. –Lo recuerdo, alguna vez vine aquí con Dick como Kid Flash. Hay un subterráneo abandonado aquí. La entrada es por el ala este de aquel edificio.
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Después de varios minutos, Alfred vio que la primera barrera de contención había sido rota. Mientras los villanos intentaban superar los diferentes círculos de seguridad, escuchaba desde el cuarto de Bruce el llamado del médico y enfermero que estaban encerrados y seguros en la habitación contigua, nerviosos por lo que ocurría.
Afuera, el primer grupo, dirigido hábilmente por Harley, había llegado a la mansión. –Nunca dejes tu bazuca en casa –decía risueña, mientras apuntaba hacia la puerta principal. Disparó y el proyectil logró doblar el metal, dejando una abertura.
-Bien chicos, buscamos a un playboy millonario de buen ver. Cuando lo encuentren, lo sacan intacto, a cualquier otro, lo matan.
Los hombres, vestidos con arrapos de circo estrafalarios entraron, seguidos por la rubia arlequín, pero justo cuando iba a entrar, un rayo impacto en ella y la hizo volar unos metros hacia la zona verde.
-¡¿Quién demonios hizo eso?! –gritó mientras volvía a ver. Frente a ella, Zatanna sonreía mientras levitaba con cuidado hasta posarse sobre los escalones que daban a la mansión. –Así que tú eres la puta del Joker.
La rubia resopló una hebra de su cabello rubio y sonrío, -La puta oficial querrás decir.
La hechicera volteó los ojos y lanzó un conjuro sobre ella, pero la rubia le lanza una muñeca de trapo, que explota cerca de su rostro, soltando un gas desorienta a Zatanna. De inmediato, Harley se lanza contra ella, y ambas mujeres inician una lucha cuerpo a cuerpo, estando aún la maga tratando de centrar su atención.
Dentro de la mansión, los hombres de Harley, son embestidos por las armas que son desplegadas en la mansión. En ese momento, se les une los hombres del Pingüino que, al igual que ellos, intentan infructuosamente de acabar con ellas. El villano de baja estatura esquiva los disparos y comienza a subir por los escalones al segundo piso, pero una cuerda sujeta sus tobillos y cae pesadamente varios escalones. Al llegar al suelo y voltear su vista, aprecia a una mujer de pelo negro, vestida de cuero y con máscara. –A dónde crees que vas pajarraco –le dice Cazadora.
En ese momento, los secuaces del Pingüino van hacia ella, haciendo que ésta les de batalla. Entre cuatro intentan someterla, pero la hábil mujer los golpea y azota sus cuerpos contra el piso de madera fina. El Pingüino se suelta de su amarre, toma su paraguas y lanza una flecha envenenada hacia la mujer, pero un cuerpo se materializa frente a ella y detiene la flecha. El enano criminal huye en ese momento al ver la figura de J’onn.
-¡Marciano, ve por Bruce y Alfred! –le indica Helena mientras sigue con sus rivales. Pero antes que el alienígena cumpla su indicación, los hombres de Doble Cara llegan finalmente y van hacia ambos héroes. Mientras tanto, Doble Cara entra, pero no participa en la lucha, va con uno de sus hombres al estudio. Al llegar, el hombre saca de su mochila un artefacto y lo pone en un rincón de la habitación. –Actívala, que detone en 10 minutos –le hace la indicación –Yo iré por nuestro encargo.
-Será difícil –le dice Ray Palmer aka Atom a Wonder Woman –la química no es mi punto fuerte.
-Lo sé Ray, pero necesitamos saber que compuesto está en el organismo de Superman.
Después de descargar todos los archivos, Pregunta, Wonder Woman y Linterna Verde volvieron a la Atalaya. Mientras la amazona seguía con Palmer en el laboratorio, John fue a la sala de control, donde lo esperaba Shayera.
-¿Qué sucede? ¿Dónde están Jordan y J’onn? –pregunta al llegar con Tornado Rojo y la thanagariana.
-Hal no responde a su comunicador, y J’onn está en Gótica con Cazadora y Zatanna. Con los enemigos de Batman sueltos, la ciudad está desprotegida. ¿Hallaron algo?
-Sí, sabemos quién está detrás del ataque a Clark, pero también algo no tan bueno. Acompáñame, Tornado, ¿puedes encargarte de todo aquí?
-Por supuesto, Linterna Verde.
Ambos salen y van directo al elevador. No habían bajado tres pisos, cuando Shayera lo detuvo. El moreno la vuelve a ver sin entender. Ella se voltea y lo ve severamente. -Debes arreglar el asunto con Wally, John.
-Joder, Shayera, no empieces –le dice haciendo un gesto de desdén.
-Él no está bien, John.
-¡Por supuesto que no lo está! ¿Viste lo que hizo?
-Sí, sé que fue muy apresurado, tomó malas decisiones, pero no puedes hacerlo a un lado.
-No lo he hecho a un lado.
-Sí lo hiciste, siempre lo haces John.
El moreno la vuelve a ver con molestia, -Este no es el momento de hablar de eso Shayera.
-Pues lo siento, pero sacaremos tiempo. Lo mismo sucedió con Clark hace años. Te cierras en tu perspectiva y haces a un lado a tus amigos. Pero es diferente ahora, Wally es diferente.
-No voy a reírle sus niñerías, ya es un adulto Shay.
-Un adulto de edad tal vez, pero que le tocó crecer muy rápido.
John se recuesta en la pared, sin mirarla. Ella se acerca y trata de bajar su tono de voz, -Eres su amigo, razona con él.
-Estás hablando con el Linterna Verde equivocado. Quien debe hacerlo es Hal. Además, no puedo ignorar la estupidez que hizo.
-Tú también lo has hecho, al igual que yo y todos nosotros en algún momento cuando se trata de proteger a alguien que amamos.
John la vuelve a ver y asiente. –Entiendo tu punto… yo sé o he sospechado lo mismo que tú. Es por eso que me desquicia que Wally cometa ese tipo de errores, más que pasó precisamente lo que él quería evitar, que… Nightwing saliera herido.
-Bueno, entonces busca cómo acercarte a él de una forma… menos agresiva.
La vuelve a ver con una mueca divertida, -¿Tu, Shayera Hall, guerrera del ejército Thanagariano, precisamente me pides ser menos agresivo?
La pelirroja sonríe y se acerca a él, -Tal vez… me hecho más humana de lo que pensé.
-HawkGirl, Linterna Verde, ¿me copian? –se escucha la voz de Tornado Rojo en el comunicador.
-¿Qué sucede?
-J’onn Jonz acaba de comunicarse a la Atalaya. Dijo ·”Informa a los fundadores, Código A002 Seguridad Comprometida.
Ambos se vuelven a ver. John de inmediato deja que el elevador siga su curso. -¿Ya le informaste a los demás?
-No responde ninguno HawkGirl.
-Tornado, transpórtanos de inmediatos a ambos a la baticueva.
La pelirroja toma con fuerza su mazo, mientras que los ojos de John brillan con un verde esmeralda intenso.
Ambos empiezan a desmaterializarse y en cuestión de segundos llegan a la sombría baticueva. Desde donde están, escuchan ruidos de lucha y ambos, sin dirigirse palabra alguna, van hacia allá.
Entre tanto, varios secuaces del Pingüino impiden que Cazadora auxilie a J’onn, que es atacado con uno de los pirómanos de Doble Cara. Se escucha un estruendo. Una de las puertas se rompe y varios criminales salen volando, mientras Shayera vuela al centro y golpea con fuerza al pirómano. John a nuevas cuentas, hace lo mismo con otros, utilizando su anillo para dejarlos atados con cadenas, justo cuando un nuevo estruendo se escucha y el cuerpo desvanecido de Harley flota en el aire, mientras que Zatanna entra, un poco golpeada, pero satisfecha. Deja a Harley en el piso y se acerca a los otros.
-Que buena repasada te dieron hechicera –le dice Cazadora divertida.
-Me fue mejor que a esa ramera.
-¿Dónde está Bruce? –pregunta la pelirroja mientras ayuda a J’onn a levantarse. El marciano busca telepáticamente por toda la mansión. –No quedan más enemigos en la mansión. Alfred está encerrado con Batman en el segundo piso.
Todos suben de inmediato. El lugar había quedado completamente destrozado. Al llegar a la puerta, los grandes escudos de metal se desactivan, haciendo que el médico y enfermero salgan asustados. Todos entran a la habitación, y ven a Alfred guardando las armas en el maletín.
-¿Estás bien Al? –le pregunta Helena al acercarse.
-Por suerte ustedes llegaron a tiempo. No pudieron llegar al maestro Bruce.
Zatanna se acerca a su amigo. Siente que su corazón se descabraja al verlo en peor estado que hacía unos días. Toma con cariño su mano y se sienta a la orilla de la cama.
-No pueden quedarse aquí Alfred –le dice John –la mansión ya no es segura para ninguno de ustedes.
-Lo sé, señor Stewart.
Cazadora se acerca a Zatanna y sonríe, -Aún en ese estado, sigue viéndose muy apuesto.
La hechicera se limpia una lágrima solitaria que había caído por su mejilla y se pone de pie. –Gracias por haber venido a ayudar Helena.
-Nunca me perdería una buena pelea, además, se lo debo a Batman.
Después de haber sorteado varias trampas, por alrededor de dos kilómetros, Flash y Linterna llegan a una puerta semi abierta, rodeada de viejos escombros. Al entrar y caminar algunos metros ven luz.
-Flash, pase lo que pase, no te separes de mí, ¿entendido?
El pelirrojo asiente y entran. En el sitio, había toda clase de herramientas de tortura, pero lo que hace que Flash reaccione, es el cuerpo de Balack, inconsciente en la camilla. Los dos van hacia él, y quedan sorprendidos al ver el estado del clon.
-Debemos llevarlo ahora –le dice Hal. –Atalaya… Atalaya responde –insiste Hal sin éxito.
-Parece que hay problema con la señal, tendremos que sacarlo y comunicarnos desde el exterior –le dice Flash mientras suelta en cuestión de segundos al hombre.
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En ese momento, un helicóptero despega en un lugar alejado del complejo, mientras que Vandal y Joker, cada uno con sus propios planes, inician la operación.
-Mi querido Harvey, ¿pudiste con el encargo que te hice? –pregunta Joker por teléfono.
-No… apenas… apenas pude escapar… llegó la Liga… maldita sea payaso, ¿quién es ese hombre? ¿Por qué era tan importante llevárnoslo?
-¿Y dejaste mi obsequio al menos? –le pregunta molesto.
-Sí… detonará en… cualquier momento… -le dice Doble Cara agitado mientras huye del lugar.
El payaso saca un activador de su bolso morado con estampado verde y juega al tin marín mientras decide si encender el interruptor o no. Mientras que Vandal, por otra línea da la indicación a uno de sus subalternos. –Es hora, manda el mensaje.
Desde un lugar alejado de Metrópolis, el desconocido va hacia un panel de control y enciende un dispositivo sonoro, imperceptible para el oído humano, pero con tal potencia, que surcó varios kilómetros, hasta que el super oído de un durmiente Clark lo detectó. De inmediato el kriptoniano se levanta de la cama, con la mirada perdida.
-Está hecho señor.
-…Yo no fui… fue teté… pégale, pégale que ella… ¡Fue! –exclama el payaso con una sonora carcajada, mientras presiona el interruptor.
En ese momento se oye un estruendo en el subterráneo que hace que los cimientos del mismo se debiliten. Flash, que llevaba a Balack sobre su hombro vuelve a ver a Hall. Antes que alguno pueda reaccionar, toneladas de concreto y acero caen sobre ellos.
Casi simultáneamente, la bomba en la mansión detona. El impacto sorprende a todos los que estaban en la habitación. Zatanna cae sobre el cuerpo de Bruce, mientras que el resto caen al piso. La hechicera sostiene a Bruce, quien poco a poco va abriendo los ojos desorientados. Antes que alguno fuera capaz de hacer alguna cosa, el piso colapsa y caen todos al vacío, en medio de escombros y fuego.
Mientras tanto, Wonder Woman va hacia la sala de control después que Ray había encontrado cuál era el químico desconocido -¿Dónde están los demás, Tornado? –le pregunta con ansiedad y angustia.
Justo entonces, entra una comunicación. –A… ¿Atalaya? –pregunta Capitán Átomo débil.
-¿Nathan? Soy Wonder Woman, ¿qué sucede?
-Es… Superman… huyó… -le dice el hombre débilmente. La base estaba semi destruida, mientras que Superman cruzaba el país, con los ojos llenos de ira, en dirección a Metrópolis.
[1] Soulmate: alma gemela