POV J-Hope:
Mis ojos estaban empañados mientras rogaba migajas de amor por parte de Jimin.
Me había convertido en un ser miserable, la había cagado, sabía que lo que había hecho estaba mal, sabía que arruinaría una pareja y de todos modos escribí ese mensaje, llamé a Jimin, lo cité. Hice algo malo, pero me sentía mal, me sentía usado.
Desde un principio supe que Jimin quería a Yoongi e igual me metí entre ellos, pues yo siento cosas por Jimin; no intento justificarme, pero sé que lo que acabo de hacer está mal, que no debí ser tan despechado, que no debí hacer nada, que debí dejar a Jimin ser feliz. Como dicen: "si amas a alguien solo quieres ver a esa persona ser feliz". Yo no soy así, yo no puedo verlo feliz junto a alguien que solo lo trata como basura.
Había pasado una semana desde que le envié el mensaje rogándole una última vez. …l nunca contestó y yo volví a insistirle. Lo llamé y él accedió a que nos viéramos en la noche, en la empresa.
Ese era solo el comienzo de mi plan.
No podía pensar con claridad y lo sabía, pero nada me importaba mas que separarlos.
Ya no toleraba verlos sonreírse a escondidas. Llorar cada vez que Jimin se escabulle del cuarto a media noche para hacerle compañía a él en la sala de producción. No lo soporto, mi corazón no lo soporta.
Jin intentó hablar conmigo, supe en ese instante que él sabía lo de Jimin y Yoongi. Me sentí un completo idiota. ¿Quienes más lo sabían? ¿Quien más sabía lo estúpido que me veía?.
Ellos incluso estuvieron juntos los días libres que teníamos, yo sabía todo ello pero aún así esperaba que él no se fuera de mi lado.
Cuando lo besé la ultima vez, por un momento creí que él se quedaría a mi lado, pero no fue así.
…l me pidió disculpas y se marchó.
Ya no podía con todo esto.
+++
Mi teléfono sonó y lo cogí de inmediato. El show apenas comenzaba.
¿En que me había convertido? ¿Quien era realmente?
-¿Si?-. Hablé lo mas bajo que pude. No debía ser escuchado.
Estaba en mi dormitorio. Solo Taehyung estaba dentro durmiendo bajo un montón de mantas.
-…l ya está aquí, ¿le inyectamos o solo usamos lo que acordamos?-. Una reconocida voz sonó del otro lado del móvil.
Tragué saliva. Esto estaba mal por donde lo mires. Pero ya no podía detenerme.
-Lo que acordamos-. Solté decidido.
Sudor corria por mi frente.
-Quiero que se separen, espero ésto sirva, no tolero ver a Yoongi Sunbae con ese enano-. Su voz sonaba maliciosa.
¿El malo era él o yo?
-No le digas enano-. Bufé.
-Como digas, Do Nam, él realmente está interesado en debutar, es muy fácil de manipular, como lo pensamos-. Otra vez utilizaba ese tono petulante.
-¡Que no le toque un pelo o lo mato!, adviertele-. Me exalté.
-Está bien, pero recuerda que él tiene que armar la escena-.
-Tu encárgate de Yoongi y deja que él haga lo suyo, yo estaré luego para Jimin-. Contesté y colgué la llamada.
¿Me estaba equivocando?
El amor es una mierda.
Una mierda que te ata, te incita a cometer error tras error, aún sabiendo que no llegarás a ningún lado sigues buscando equivocarte, en ese tipo de persona te convierte el amor. En lo que soy ahora.
Levanté mi muñeca y miré la hora, 22:35 hs. Solo faltaban unos cuantos minutos y Jimin estaría en la empresa.
Debía ir para allí. Sin ser notado por Yoongi.
Caminé a través de mi oscuro cuarto. No debía hacer ruido por nada del mundo.
Tomé la perilla con una de mis manos.
-¿Por qué haces esto hyung?-. Una gruesa voz me petrificó en el lugar.
Giré apenas mi rostro para poder ver de donde provenía aquella pregunta.
Su rostro estaba decaído. La noticia del escándalo lo había tenido deprimido.
-¿Tae?-. Pregunté en un hilo de voz.
¿Me había escuchado hablar por teléfono?.
-¿Por qué los quieres separar?-. Preguntó y mi corazón se paralizó.
-A ti eso no te importa!-. Exclamé con la voz un tanto temblorosa.
…l sabía lo que iba a hacer. ¿Podía confiar en su silencio?.
-Si me importa!-. Contestó firme.
No podía ver claramente su rostro, pero percibía molestia en su voz.
Me di la vuelta, prendí la luz y lo miré fijamente.
-Solo no te mentas donde nadie te llamo!-. Contesté.
-Estas haciendo mal Hyung!-. Soltó.-Jimin es mi amigo-.
No sabía que contestarle. …l tenía razón, estaba haciendo mal. Pero ya no había marcha atrás.
-Lo hago porque lo amo-. Susurré y desvié mi vista de su rostro.
-Eso no es amor-. Habló.
Apreté mis puños.
-Ya te dije-. Me volví a verlo.-Eso a ti no te importa!, ahora déjame irme!-. Vociferé.
Me di la vuelta y volví a tomar la perilla.
-Cuando estés llorando por lo que hiciste, vuelve a mi, yo estaré para ti Hyung-. Su voz sonaba calma.
¿Llorar? ¿Yo?, Ya no lo haría mas. Jimin volvería a mi, no tenía sentido el derramar mas lágrimas.
Por unos segundos me quedé en el lugar.
-No lloraré así que no me esperes-. Contesté.
Giré la perilla y sin darme la vuelta en ningún momento, me marché del lugar.
+++
Era de mañana. Había llegado al hotel donde acordamos llevar a cabo parte de nuestro plan.
Jimin ya estaba donde tenía que estar. Dae Woong había llamado a Yoongi, mintiéndole y éstos venían en camino.
Todo iba como lo habíamos acordado. Pero algo no andaba del todo bien.
Mi pecho dolía por una extraña e inexplicable razón.
Mi mente no paraba de pensar las palabras de Taehyung. ¿y si él tenía razón? ¿y si después me arrepentía? ¿y si no conseguía mas que dolor al ocasionar semejante caos?.
Fui hasta el baño público del hotel. Estaba sudando. Mis manos temblaban.
Levanté mi vista y vi mi reflejo.
¿Donde se fue mi felicidad? ¿Por que mi rostro no puede sonreír? ¿Por qué si estoy haciendo lo que tanto deseo no estoy feliz?
Ya no había marcha atrás.
Salí del baño luego de secar mi rostro y manos.
Perdón.
¿Debía decir esa palabra? ¿Debía pedir disculpas?
Estaba en el pasillo. Cerca de la habitación.
Escuché gritos y me sobresalté.
Mi corazón dolió.
¿Que hice? ¿Por qué lo hice?
"-Lo hago porque lo amo-.
-Eso no es amor-."
Tenía razón. …l tenía razón.
Yoongi pasó corriendo sin siquiera notar mi presencia. Dae Woong lo seguía. Todo estaba hecho.
Me sentía una mierda.
Caminé hasta el cuarto de hotel.
Do Nam estaba junto a Jimin.
-¡¡¡VETE!!! HIJO DE PUTA!-. Jimin tenía sus ojos rojos.
Do Nam chocó mi hombro y se marchó con sus ropas en las manos.
Yo estaba observando desde el marco de la puerta como Jimin jalaba sus cabellos.
Yo había logrado ésto. Yo había hecho llorar a Jimin de ese modo.
¿Esto es amor?
No, no lo es. No se siente como si lo fuera, no se siente para nada bien.
Su cuerpo estaba desnudo. las Sábanas apenas lo cubrían.
-¿J...Jimin?-. Pregunté apenas audible.
…l levantó apenas la vista. Mi corazón se estrujó.
El hijo de puta de aquí soy yo.
-Me...-. Su voz apenas podía escapar de sus labios, él estaba llorando. Quería acercarme, pero mis pies no se movían.-...Me drogaron...yo..no recuerdo...¿que sucedió?-. Sus ojos suplicaban por una explicación. Una explicación que no podía darle.-Yo...estaba esperándote y luego...no recuerdo y ahora....-. Su voz volvió a quebrar.-…l ya no confiará en mi...sus ojos, él me odia Hoseok, Yoongi hyung me odia...yo lo sé-. Volvió a tomar su rostro entre sus manos.
¿Por qué si sabía que esto pasaría duele tanto? ¿Por qué?
-Lo siento...-. Susurré.
Mi lágrimas comenzaron a escapar.
-Realmente lo siento...-. No podía seguir aquí.
Necesitaba correr, irme lejos, desaparecer si es posible.
"-Cuando estés llorando por lo que hiciste, vuelve a mi, yo estaré para ti Hyung- "
Mis pies me llevaron a un lugar, al lugar al que mi mente quería ir.
Abrí la puerta. Lo observé. Mis lágrimas no paraban de caer.
-Hice mal...-. Sollocé.
…l estaba sobre la cama, sentado.
Me sonrió y extendió sus brazos hacia los costados.
-Ven-. Habló.
Caminé en su dirección sin dudar.
Caí en sus brazos.
-Hice mal Tae...hice mal...-.
-Lo sé...-.
Susurró en mi cabeza. Sus brazos rodeaban mi cuerpo. …l acariciaba mi cabello.
Mi cuerpo temblaba. Dolía.
Cometí un error. Un gran error. De nada me había servido, yo no estaba feliz con esto.
-Soy una mala persona... soy una completa y gran mierda-. Sorbía mi nariz mientras largaba esas palabras, el hombro de Taehyung estaba bañado en lágrimas.
-No lo eres-. Susurró.
Me separó de su cuerpo y me miró fijamente.
-Solo cometiste un error, ahora te arrepientes....eso está bien, tu no eres una mala persona-. Tomó mi rostro entre sus manos y con sus pulgares quitó mis lagrimas.
Era cálido.
Se acercó a mis labios y los rozó.
Mis ojos se abrieron de par en par. Pero a él no le importó mi reacción. Volvió a acercarse. Un pequeño beso nos unió. Uno el cual dejé que depositara sobre mis labios.
Llevé mis manos a su rostro.
Cerré mis ojos. Quería besarlo, realmente quería hacerlo.
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