POV Jimin:
Estaba bajo él.
Su sonrisa lasciva era mi perdición. Su pálida piel rozando la mía, sus ojos clavados en mis labios, su cercanía, la manera tan descarada en la que tocaba cada rincón de mi cuerpo.
Lo extrañaba tanto.
-Quitame la ropa-. Susurré y la idea hizo que alzara las cejas.
-No tienes ni siquiera que pedirlo, lo haría de todos modos-.Habló tan cerca de mis labios como le fue posible.
Sin besarme, solo volviéndome loco.
Pasó su mano derecha por mis costados hasta adentrarla en la única prenda que traía puesta.
Sexy. Esa era la palabra que lo definía en su totalidad.
Comenzó a besar mi cuello. Lento, suave, como saboreando cada milímetro de mi piel.
Me encantaba esto.
Amaba esto.
Fue bajando por mi cuerpo, depositando besos por todo mi torso.
Estaba llegando al elástico del bóxer y con sus dos manos tomó el borde de éstos y los jaló hacia abajo dejando a la intemperie mi excitación.
Cerré mis párpados lentamente inundado de un placer indescriptible.
Tomó mi hombría entre una de sus manos y suavemente comenzó a mover su agarre desde arriba hacia abajo.
Amo esto.
-¿Te gusta?-. Susurró expulsando aire sobre mi piel expuesta.
Me erizaban sus palabras.
Hacía temblar cada parte de mi cuerpo.
-Lo amo-. Solté y sentí como besaba mi piel.
Humedad recorrió mi masculinidad y abrí completamente mis ojos.
¿Que era esto?.
Me apoyé en mis codos y pude ver claramente como Yoongi sacaba su deliciosa lengua para pasarla lentamente por toda la longitud de mi miembro.
No lo reprimí y gemí.
Pude ver su torpeza y concentración al hacer tal cosa, pero no importo, sus movimientos erráticos eran aún mas placenteros que el de un profesional.
Levantó la vista y clavó sus pupilas en las mías.
-¿Te gusta esto?-. Preguntó un poco preocupado.
-Me encanta Yoongi-.Contesté lascivo y pasé la lengua por mis labios.
-Mierda Jiminnie...si me dices así te follaré sin juego previo-. Habló lamiendo nuevamente.
Cerré mis párpados.
Sabía que le ponía de sobremanera el que lo llamara por su nombre.
-Yoongi...-. Susurré.-Hazme el amor-. Terminé por decir.
Rápidamente alejó su boca de mi intimidad y me asusté.
Abrí mis ojos y lo tenía a centímetros de mi rostro.
-Creí que hace tiempo hacíamos el amor-. Murmuró.
Mi corazón saltó emocionado.
No digas estas cosas Yoongi hyung, por favor, si sigues así...
Besó mis labios sin dejarme responder.
Primero uno y luego el otro.
Su lengua se adentró a mi boca, ambas lenguas batallaban.
Llevé mis manos a su espalda y tomé el borde de su pantalón intentando jalarlo hacia abajo.
…l sonrió en mis labios.
-¿Tienes prisa?-. Preguntó.
-La tengo-. Respondí.
Se extendió manteniéndose erguido por sus rodillas y desabrochó los botones de su pantalón, para luego salir de la cama y tirarlo abajo junto con su ropa interior.
-Ya me estaba apretando como la mierda-. Se quejó con una sonrisa, sus ojos pasearon por mi cuerpo y por un instante me sentí expuesto.
-No me mires así-. Hablé.
-Me estoy deleitando, déjame hacerlo-. Respondió.
Maldita sea, Yoongi y sus formas de volverme un tomate. No es como si antes no me hubiera visto de este modo. Pero hoy era distinto, su mirada era muy hambrienta.
Se dio la vuelta completamente desnudo y me atreví a mirar sin descaro su trasero.
-Hyung, si sigues demorando, yo te follaré-. Hablé y apreté mis labios.
Se dio la vuelta con una ceja alzada y me mostró el pequeño frasco que traía en sus manos.
Sonreí.
Se acercó hasta mi y separó mis piernas, colocándose entre medio de ambas.
Nuestros ojos estaban conectados y solo eso bastaba para que no pensara en lo frío de aquel líquido sobre mi entrada.
Sentí su presión en contra de mi cuerpo y cerré fuertemente mis ojos. Había incluso olvidado por completo lo que dolía hacerlo con él.
Lentamente fue entrando en mi.
-Mírame-.Su ronca y demandante voz hizo que abriera mis ojos.
…l me observaba mientras se hundía completamente en mi.
Estaba apoyado con cada uno de sus codos a mis lados.
Cuando hubo entrado completamente ambos gemimos. Era caliente, húmedo y un tanto doloroso.
-Muévete-.Susurré sobre sus labios.
…l apoyó su frente en la mía y comenzó a moverse, en un vaivén despacio, sin ningún apuro.
Enredé mis piernas en su cuerpo y lo apreté mas al mio. Quería sentirlo, con todo el significado que esa palabra tuviera.
-Mas rápido Yoongi~-. Gemí.
Su cuerpo comenzó a golpear el mio mas veloz, de una manera más dulcemente placentera; dando justo en ese punto donde la razón no existía para mi y todo se convertía en "Yoongi te amo".
-Allí.....Justo allí~-. Hablé entrecortadamente.
Mi corazón latía demasiado rápido como para poder procesar algo.
Sus gruñidos roncos sobre, ahora, mi cuello, sentía que quemaban mi piel.
Todo él estaba quemándome, llevándome más allá de todo el placer que había conocido antes.
Con Yoongi nunca se sentía igual, siempre algo era distinto, siempre el sentimiento era distinto.
Tocaba una y otra vez ese delicioso punto de placer y yo sentía que estaba ahogando el orgasmo que quería escabullirse entre mis labios con las palabras "te amo".
Sujetó mi rostro para que lo observara mientras entraba y salía en mi.
El sudor se sentía recorrer desde su piel hacia la mía.
-Jiminnie...-. Gimió, me sentía extasiado.
Se hundió mas en mi.-Mierda!-. Volvió a golpearse una vez mas y a apretar mis mejillas.-Te amo Jiminnie-. Casi gritó.-Mierda!-. Volvió a exclamar para luego embestirme fuertemente.
¿Lo había escuchado bien?
Es la tercera vez que lo dice.
Creo que voy a desmayarme del placer y el amor en sus brazos.
Aunque, pensándolo bien, eso no estaría tan mal.
Tomé entre mis manos su rostro.
-Yo también te amo-. Susurré y apreté sus cabellos sintiendo que soltaría todo el orgasmo de una vez por todas.
Se movió erráticamente unas dos veces más y nos bañamos en placer.
Se echó a mi lado y nos cubrió con una manta.
Ambos respirábamos desacompasadamente.
Me removí para observarlo y con mi mano giré su rostro para encontrarme con sus ojos.
-Dilo de nuevo-. Murmuré y desvió su mirada con un ligero sonrojo que claramente no era producto del reciente orgasmo.
-No lo haré-. Respondió esquivando mi mirada.
-Te follaré, cuando me recupere, si no lo haces, y no seré gentil, te lo haré duro-. Solté con una suave sonrisa.
-Follame-. Respondió y volvió sus ojos a los míos con su pícaro brillo.
-Eres un pervertido-. Contesté.
-Vamos Jiminnie, ya me tentaste, ahora follame duro-. Habló y mi miembro comenzaba a despertar nuevamente.
Yoongi y su poder sobre mi.
¿Cuanto tiempo durará?, espero y sea por siempre.
Porque así es mi amor por ti.
+++
POV Suga:
Iba por una taza de café a la cocina. Jimin se había quedado dormido en el cuarto.
¿Que hora era?. Levanté mi reloj 20:00 hs.
No es hora de andar durmiendo.*Dije para mis adentros.
Luego de cargar la taza con café fui hasta nuestro cuarto, con mi humeante elixir entre mis manos.
Entré y noté el bulto entre las sábanas que respiraba acompasadamente.
Dejé a un lado mi infusión, luego de sorber un breve pero delicioso trago.
Caminé hasta donde él estaba.
Lo destapé apenas para poder observar su rostro al dormir.
Se veía tan lindo, tan maduro y fue entonces cuando traje de mi memoria el primer día en que él comenzó con lo que ahora era un fuerte amor.
Todo había sido un juego en sus comienzos, uno el cual odiaba y del cual quería alejarme a toda costa. ¿Yo con otro hombre?, eso era imposible y más aún si ese hombre era mi compañero de grupo.
Si mi yo del pasado me viera ahora ¿Que diría? ¿Sentiría envidia?, yo creo que si.
Tan solo observar como respira y abre apenas sus labios el chiquillo entre las sabanas enamoraría a cualquiera, incluso a mi yo del pasado.
Fui tan negado antes, y ocurrieron tantas cosas que hoy en día parecen lejanas.
-Pasamos por tanto-. Susurré.
Acaricié los mechones chocolate de su cabello, enredando algunos entre mis dedos.
Y mira como estamos ahora. Juntos, caminando tomados de las manos sin importarnos lo que nos digan, lo que piensen de nuestra relación, haciéndole caso a las palabras de Nana.
Ella me susurró la última vez que la vimos "haz feliz a Jimin" y eso creo que estoy intentando hacer hace diez años, ¿verdad? ¿lo estoy logrando Jiminnie? ¿Estoy haciéndote feliz?.
-Mmmhm Yoongi~-. Su voz apenas audible se escabullía entre sus gruesos labios; aquellos que siempre ansiaba devorar.
-Es hora de despertar... Jiminnie... tengo algo que darte-. Musité.
-Mmhmhm-. Una sonrisa apareció en sus labios pero aún mantenía sus ojos cerrados.
-Vamos!, despierta-. Hablé suave y besé su frente.
-¿Que es?-. Preguntaba mientras se desperezaba y abría lentamente sus ojos.
-Quiero que vengas aquí-. Murmuré y lo observé detenidamente, esperando cualquier tipo de reacción de su parte.
-¿Que dices?, ya estoy aquí, ¿de que hablas Yoongi?-. Preguntó sonriendo apenas.
No entendía mi punto y mi corazón comenzaba a palpitar mas de prisa. Creí que sería mas fácil.
-Quiero....-. Desvié mi vista y apreté mi labio inferior, para luego acercarme hasta él y observarlo fijamente.-Quiero que te vengas a vivir conmigo-. Terminé por decir.
-Pero prácticamente estamos viviendo juntos...también pensé que deberíamos vivir en el mismo lugar, estaba por proponerlo también-. Dijo con una sonrisa, parecía tranquilo y a mi me carcomían los nervios, acarició mi mejilla.
Inhalé y exhale. Eso no era todo.
-Me refiero a que...quiero formalizar...Jimin quiero que todo el mundo sepa que eres mio-. Hablé y mordí mi labio, desvié mi mirada.
Si, era un tipo de 34 años que no sabía como hablarle a la persona que amaba. Aún era muy idiota con respecto a esas cosas del amor.
-Yoongi-.Su voz salió rota y dejó mi mejilla, rápidamente lo observé.
Llevó sus dos manos a su boca mientras sus ojos parecían nublarse.
-¿Hablas en serio?-. Escapó de sus labios esa pregunta mientras las lágrimas descendían de sus ojos.
-Hablo en serio-. Contesté y tomé sus mejillas, quitando sus manos, para limpiar sus nacientes lagrimas. -Lo quiero Jimin, quiero que todos lo sepan-. Terminé por decir y besé apenas sus labios.
…l no paraba de llorar y me abrazó tan fuerte que incluso creí que me rompería los huesos.
+++
¿Entonces así era como se sentía? ¿así se sentía amar a otra persona?
En todos los años que he vivido, jamás creí que mi corazón podría pertenecerle a un otro, jamás creí que eso le pasaría a Min Yoongi, pero solo mirenme ahora, miren la cara de estúpido que pongo cada vez que Jimin me sonríe, cada vez que me dice algo bonito, cada vez que se preocupa por mi.
Pero es como dicen, el amor es así, el amor no se elige, solo llega y se apodera de ti. Solo llega para hacerte poner nervioso, desconfigurar tu vida, hacer palpitar tu corazón al punto de creer que vas a morir, llega cuando menos lo esperas y en la forma en que menos esperas que llegue.
Así fue mi amor, llegó cuando creí que lo perdía.
A todos les ocurre de distinto modo, quizás la forma en que me di cuenta que mi corazón se aceleraba por otra persona, no fue la mas adecuada ni la mejor, pero para mi fue única.
La vez que sentí necesidad por primera vez de probar unos labios, la vez que sentí necesidad de tocar su piel, de sentir su aroma, ahí noté lo importante que su persona era para mi.
Ahora sujetaba su mano mientras ambos dábamos el sí.
Desde hoy en adelante eramos uno del otro, desde hoy las cosas cambiaban nuevamente para nosotros.
Hubo mucha gente que nos cerró las puertas, hubo mucho pesar, muchos malos momentos. Pero eso no se compara con estar contigo, porque preferiría mil veces perder a todas las personas que me rodean incluso perder todas mis cosas, si eso significaba tenerte para toda la vida a mi lado.
Acaricié sus nudillos.
-Te amo-. Susurró.
Yo te amo tanto.
-Te amo-. Contesté y sus ojos brillaron.
La hermosa sonrisa de la que me había vuelto esclavo se esbozó en sus labios y mi corazón se sintió cálido.
Este era mi lugar, mi lugar era a tu lado, junto a ti.
Todos aplaudieron, cerramos nuestros ojos y unimos nuestros labios.
Ese fue el sello que marcó un "para siempre", en nuestras vidas.
Porque tu eres mi para siempre y yo seré tu incondicional para siempre, Jiminnie.
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FIN
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