_mama me contarías un cuento.
_pero es tarde y tengo sueño.
_solo una no importa si es corta… tus historia siempre son lindas.
_bueno que te parece esta es una de mis favoritas…
Se dice que hace muchos años en las profundidades de un bosque vivía un hombre solitario, amargado, triste y sin expresión, bueno eso dicen los aldeanos que Vivian en el pueblo, uno en especifico cambio todo eso, lo volvió alegre, sociable y en su rostro no se volvió a ver la tristeza esta historia se llama…tú me das alegría
_juguemos en el bosque mientras el lobo esta ¿el lobo esta?- el canto de los niños jugando en el bosque al frente de una cabaña un poco vieja.
_....- no se escucho ningún ruido.
_hay sabemos que estas hay ogro- los niños lazaban piedras a la cabaña.
_lárguense- se escucho una voz dentro de la cabaña.
_jaja el lobo está enojado jaja- la puerta se abrió repentinamente haciendo que los niños salieran corriendo de la impresión.
_otra vez- el hombre llegaba puesto un gran saco peludo con capucha que no dejaba ver su rostro era bastante alto y aunque llegaba ese gigantesco saco se notaba que era fuerte y no gordo.
Ese hombre vivía solo en el bosque solo con los animales, que tocaban su puerta y le traían comida, lo único molesto de su vida era el cómo lo trataban los habitantes del pueblo, por eso solo salía por las noches a caminar y a recoger fruta para comer.
Una de esas noches el hombre salió a caminar cerca del lago pero unos gritos que pedían ayuda llamo su atención con rapidez se acerco viendo la escena, un muchacho de ojos castaños y cabellos del mismo color iba a ser abusado por un hombre gordo, barbudo y de apariencia desagradable.
_por favor no… no- lloraba el muchacho forcejeando por que el hombre lo soltara.
_jeje sabes te ves muy lindo cuando lloras- el hombre empezó a besar el cuello del muchacho- ARGH SUELTAME BASTARDO- el gordo es cogido por el hombre quien lo agarro del cuello para lanzarlo lejos.
_aléjate de el… si te vuelvo a ver en mi bosque… no respondo- el gordo feo salió corriendo asustado- oye te encuentras bien.
_s-si muchas gracias… oye espera a dónde vas- el hombre se empezó a alejar caminando por el sendero a su casa- espera al menos dime como te llamas soy hiroki y tu.
_eso no te debe de importar… solo vete si no quieres que alguien más venga por ti- el hombre siguió su camino a su casa.
_jum…jeje ok te veo mañana- hiroki sale corriendo a otra dirección dejando con la palabra en la boca al hombre.
A LA MAÑANA SIGUIENTE
Como todos los días los niños venían a molestarlo con lo del lobo y a tirar piedras a la cabaña pero esa mañana era diferente escucho una voz un poco conocida.
_hey mocosos no les enseñaron modales fuera dejen de molestar- un montón de piedras fueron lazadas a los niños que con lagrimas en los ojos salieron corriendo- oye soy yo hiroki…¿estás ahí?
_que haces aquí- dijo molesto- te dije que no volvieras.
_dijiste eso pero no eres quien para mandarme… y como ayer me rescataste te traje comida ¿la quieres? Es como un agradecimiento- hiroki esperaba quie le abriera la puerta pero nada sucedió- te la dejo enfrente de la puerta…nos vemos.
Cuando sintió que el muchacho estaba lo suficiente mente lejos abrió la puerta para asomarse hiroki ya estaba desapareciendo por el sendero, miro al suelo en donde había una olla con un olor agradable, solo fue un impulso el cogerla y entrarla a la cabaña. Al día siguiente hiroki se acerco a la cabaña a espantar los molestos niños que tiraban piedras a la casa, miro la puerta pero se entristeció al ver la olla frente a la cabaña, con pasos lentos se acerco a cogerla pero la sentía más liviana con curiosidad quito la tapa viendo que dentro habían un pequeño ramo de flores.
_¿te gusto?- hiroki pregunto emocionado por la respuesta.
_si sabía bien… muchas gracias- se escucho la voz dentro de la cabaña.
_me puedes decir tu nombre- pegunto alegre pero en el fondo sabía que no se lo diría.
_soy nowaki- sus ojos se abrieron como platos y con una gran sonrisa se sonrojo.
_bueno nowaki, nos vemos, muchas gracias por las flores las pondré en agua nos vemos- salió corriendo de la emoción sabia el nombre de quien lo había rescatado.
Todos los días fueron iguales los niños llegaban a molestar la cabaña y llegaba hiroki a alejarlos, cada vez que iba a verlo dejaba comida o alguna prenda de ropa demasiado grande para que a nowaki le quedara, como agradecimiento siempre le daba flores o algún tipo de fruta que los animales le llevaban, pero sus conversaciones no pasaban de un *gracias* *nos vemos* oh *un llegue* hiroki quería conocer más al hombre que se ocultaba en la cabaña, había pasado una semana pero nunca ha logrado verle el rostro o llegar a una conversación más larga.
_nowaki llegue…- esperaba una respuesta, pero nunca llego miro la olla del día anterior una sonrisa cruzo por sus labios, su mirada se torno triste al sentir la olla pesada- nowaki porque no comiste.
_mira la olla- con tristeza miro la olla notando que esta estába llena pero no de su comida si no una hecha por nowaki- no sé si sepa bien pero lo hice con esfuerzo- hiroki se lleno mas de alegría y se sentó afrente de la puerta.
_bueno yo comeré la tuya si tu comes mi comida- la puerta se abrió despacio, hiroki movió su cabeza para ver su rostro pero no lo vio la capucha que llevaba puesta no le daba la vista que quería.
_ ¿puedo sentarme al lado tuyo?- pregunto nowaki, hiroki sin pensarlo le dio espacio para que se sentara al lado de él- gracias… hiroki- era la primera vez que lo llamaba por su nombre.
_no es nada…- con un gran respiro tomo valor- nowaki me gustaría ver tu rostro… ¿puedo?- nowaki voltio para mirarlo.
_no creo que tenga buen aspecto- hiroki respondió que no le importaba- está bien- con lentitud se quito la capucha que tenia puesta dejando asombrado a hiroki, sus cabellos eran negros azulados no tan largos ni tan cortos, sus ojos eran azules parecían que eran dos gemas que adornaba su rostro uno sereno y amable que le daba tranquilidad- pasa algo.
_n-no no jaja bueno no pensé que te vieran tan bien siempre pensé que cuando te quitaras la capucha serias un hombre de barba con ojeras de tres metros jaja pero es todo lo contrario eres muy apuesto sabes- hiroki se sonrojo y miro a nowaki para sonreírle.
_tu también- dijo nowaki.
_yo también ¿Qué?- pregunto con curiosidad.
_tú también eres lindo cuando sonríes y me saludas todas la mañanas, me alegra el día- nowaki cogió valor para decir algo que de seguro no era correcto y menos si apenas se estaban conociendo- hiroki te gustaría salir conmigo.
Hiroki solo le sonrió y se abalanzo a abrazarlo tiernamente repitiendo varias veces la palabra *si*. Los días pasaron y se sentían bien el tan solo estar los dos juntos, decidieron vivir juntos pero no en la misma cabaña, decidieron ir a vivir al pueblo, al principio las cosas no estaban bien ya que las personas del pueblo lo trataban de mala persona simplemente por no conocerlo o como lo describían los niños a sus padres, pero con ayuda de hiroki demostró que no era una mala persona y se gano la confianza del pueblo en solo una semana con su sonrisa las amables palabras y la ayuda que brindaba a cualquier persona que la necesitara.
Los días los meses y hasta la estaciones pasaron, y con unas miradas y sonrisas tiernas decidieron formar una unión que los mantendría juntos y les recordaría lo mucho que se querían, funciono saltaban de alegría lloraban de felicidad y se abrazaron con amor, nueve meses pasaron y de ese amor salió una pequeña niña de ojos azules cabellos castaños con una sonrisa tierna la llamaron…
_como la llamaron como dime mama- la pequeña preguntaba ansiosa.
_hum… no me acuerdo- respondió sonriente.
_no es justo al menos dime que paso con nowaki y hiroki dime que paso dime- la pequeña zarandeaba a la persona que le contaba el cuento hasta que la puerta se abrió- ¡PAPA¡ papi.
_hola mi pequeña hana, ¿Qué haces despierta a estas horas es muy tarde?- le besa la frente.
_mama me contaba un cuento muy bonito y bueno no me quiere decir cómo se llama la pequeña que tuvieron nowaki y hiroki- la pequeña tenía cara de puchero.
_hiro-san dile jaja.
_nowaki por favor déjala con el suspenso además la historia segué sin terminar si le digo un final seria mentira- dijo un castaño con una sonrisa.
_tienes razón- le besa la frente- hana te gustaría conocer la cabaña donde se conocieron- la pequeña empieza a saltar de alegría- te la mostrare mañana si te acuestas a dormir- la pequeña sale corriendo al cuarto.
_estoy durmiendo.
_nowaki te amo.
_y yo mas a ti mi hiro-san.
FIN ^. ^