La familia Vongola, la mafia más poderosa e importante de todo el bajo mundo, liderada aun por la Novena Generación, Nono o también conocido como Timoteo Di Vongola, actual jefe, se encuentra ahora en su acogedora mansión, más específicamente en la sala de juntas. Donde discutía con el Guardián de la Tormenta de la que pronto seria la Décima Generación Vongola y el Mejor Asesino del Mundo.
-No puede quedar libre.- Hablo un peli plata, de ojos jade, con el ceño fruncido lo cual no era extraño en el debido a su carácter explosivo, además de tener un cigarrillo en sus labios. Vestía un traje negro; Gokudera Hayato es su nombre, que ahora se encontraba sentado a lado derecho de Nono, esperando su nueva misión.
-Eso lo sé, Hayato-kun. – le respondió de manera amable el hombre de mayor de mayor edad de la sala, representado en su cabello canoso y en sus ojos castaños que reflejan sabiduría y calidez. – Pero aunque sé que es peligroso no encontramos manera de acorralarlo, siempre anda un paso delante de nosotros.
-Nono – hablo el pelinegro de traje Armani negro, camisa naranja y corbata negra, que siempre llevaba una feroda ocultando su mirada, además de poseer una sensuales patillas rizadas, irresistibles para cualquier mujer (Y uno que otro hombre también). En este caso se encontraba totalmente serio, aunque no lo demostrara, es demasiado orgulloso y ególatra para admitirlo. – No puede aplazarlo mas, hay que darle caza no hay otra manera, ya ha matado demasiada gente tanto aliados como enemigos... No se sabe de qué lado esta.
-Reborn – retomo la palabra Timoteo – No entiendo porque tanta tu insistencia... No deberías verte amenazado por ese asesino no? O acaso estas molesto porque se te escapo? – interrogo, a sabiendas de que tenía razón, después de todo su Hiper-intuicion Vongola se lo decía. Al ver que el pelinegro no respondía se le escapo una sonrisa, definitivamente no soporta que su objetivo escape. "Pero que orgulloso" pensó.
-Nono, estoy de acuerdo con Reborn-san, ya es hora de ponerle fin, no podemos permitirnos más bajas en nuestros aliados. Permítanos por favor a nosotros, los próximos guardianes encargarnos de él. – Hablo Gokudera poniendo énfasis en que era su deber como guardián.
-Lo sé, lo tengo presente y estoy de acuerdo, esa será su nueva misión... Mas no lo maten, captúrenlo tráiganlo, me gustaría conocerlo... - "O más bien volverlo a ver" pensó con tristeza. – Reborn, confió en que encontraras su escondite y te adelantaras a matarlo ¿De acuerdo?
-Tsk, bien – chasqueo la lengua, se veía que la idea no era de su agrado, bueno al menos después podría divertirse torturándolo.
-Hayato-kun, confió en ustedes.
-No se preocupe Nono, no lo defraudaremos.
Con todo dicho, el guardián de la tormenta y el asesino a sueldo salieron de la sala a realizar los preparativos necesarios para llevar a cabo su misión.
Mientras aun en la sala Timoteo solo podía pensar en lo mucho que le dolía que ese asesino que ahora era el objetivo de Reborn fuera su amado nieto.
- FLASH BACK
Con su nieto de visita, Nono Vongola no podía estar más feliz, pero nada dura para siempre, teniendo una junta deja a su hijo, su esposa y su adorado nieto en la mansión seguros, o al menos eso cree.
La junta al fin había terminado y al fin podría regresar a la mansión a pasar tiempo en familia, pero al llegar lo que ve lo deja destrozado pues todo el lugar se halla destruido y desolado. Buscando desesperadamente en todo el lugar solo puede encontrar la imagen de Iemitsu, su hijo, y Nana, su adorada hija política, rodeados de un gran charco de sangre y sin vida alguna. Con el corazón roto solo puede rogar por encontrar a la única familia que le queda, mas no ubica en ningún lado al niño; solo encuentra una carta que le hace hervir la sangre.
"Te gusto mi regalo? Apuesto a que sí, lindo nieto por cierto, me lo quedo no te importa no? Ahora es mío y vaya que me voy a divertir"
Nono no puede hacer más que enfurecerse, arruga la nota y manda a sus mejores hombres y no descansara hasta encontrarlo.
Pasaron 5 años donde no encontraba pista alguna, más una pista mal cubierta fue su salvación, encontró la base enemiga, la asalto junto a sus guardianes mas solo hallo la blanca nieve ahora roja carmesí por la sangre de los miles de cuerpos mutilados y desfigurado, solo podía pensar quien habría hecho semejante masacre después se ocuparía de eso primero su nieto.
No encuentra su rastro pero ve las cámaras que hay por todo el lugar, pese a su estado logro rescatar una cinta la de los últimos días de esa base. Al verlas se terminó de partir su corazón, pues en esas cintas veía a su nieto el cual lloraba, gritaba e imploraba porque lo dejaran en paz, sufría tanto siendo torturado y violado hasta el cansancio; pero en la última parte aparece su pequeño niño mando a todos aquellos hombres con una sonrisa macabra. Pero antes de salir voltea a ver la cámara, aun con su flequillo tapando sus ojos, sonríe de manera inocente. ( Un ángel siendo un demonio)
"Me volveré el mejor asesino y no permitiré que me lastimen, todos pagaran. Los pecadores deben morir, no tienen derecho de vivir."
- FIN FLAHS BACK
Y aun ahora después de otros 5 años de lo ocurrido en aquel lugar, con su nieto siendo ahora un joven de 15 años, se ha convertido en un asesino a la par de Reborn, y eso era decir mucho, pero al ser parecido a él ahora era un ser muy peligroso, y aunque quería evitar tener que mandar a capturarlo u otra cosa sabía que llegaría el momento.
No podía evitarlo por más tiempo, ahora que mando a ese grupo que lleva a los mejores estrategas y asesinos, solo espera que puedan traerlo sin mayor inconveniente, es lo mejor para él y para los demás, se dice y quiere creerlo.
Tal vez cuando lo vea y sea capaz de reconocerlo, hacer que se calme, puedan platicar y si él lo desea ayudarle a curar esas enormes heridas que sabe que aunque paso ya tiempo siguen abiertas como el primer día. Curara esas heridas que no debería tener alguien de tan puro corazón como lo es su nieto o lo fue.
Solo desea con toda su alma, que su nieto aun este dentro de ese asesino, que masacra a todo aquel sin dudar ni temblar, con pulso firme y sin dudas. Todo un asesino, sin corazón... espera equivocarse.
- EN OTRO LUGAR
Un rubio de ojos azules, con traje militar y su tan confiable rifle entra a un bar del bajo mundo, se acerca a la barra y ve a su ahora cliente, Reborn, su eterno rival, pide un trago y se dispone a sentarse y a proceder con su trabajo.
-Tengo la información que pediste-kora.
- Dámela.- es lo único que dice, esta apurado no ve la hora de llegar a la acción, su sangre hierve en la busca de un buen desafío y está impaciente, además de que la muletilla "kora" del rubio no ayudaba mucho que digamos a bajar su ansia.
- Ah no, así no, todo tiene un precio-kora. – Toma su tequila y bebe un trago, después se dispone a hablar. – Y esta clase de información es la más valiosa-kora. – Voltea a ver al pelinegro que solo mira al frente.- ¿Qué me darás por ella-kora?
-Dejarte con vida.- la forma en la que lo dijo eran tan seca y a la vez tan fría...
Que al ojiazul solo le puedo recorrer un escalofrió por toda su espalda, no estaba bromeando, demonios, pensó, porque tuvo que encontrar a Reborn cuando esta de mal humor, bendita sea su suerte.
-Toma, ya me largo-kora. – termina su tequila y huye, prefiere correr que arriesgarse a hacer enojar más al asesino y no vivir para contarlo.
-Eres listo Coronello, hiciste bien. – dice ahora solo el asesino mientras ve el folder con la información de la localización de su ahora presa.
Bajo la sombra de su feroda sonare sádicamente. Esto será divertido!
-REGRESANDO A LA MASION VONGOLA (más específicamente en el salón principal)
El guardián de la tormenta, ha reunido a los demás guardianes, pero al llegar al lugar citado se ha dado cuenta de que cada uno está en su mundo y/o peleando entre sí.
-Oigan – grita irritado el peli plata –Friki del Beisbol – se dirige a un pelinegro de tés morena y ojos ámbar, que viste de traje portando una espada en su espalda, siempre con su imborrable sonrisa, ex beisbolista y el guardián de la lluvia. – Vaca estúpida – llama a un pelinegro de pelo rizado, de ojos verdes, adicto a los dulces de uva, siempre portando una camisa con estampado de vaca. El guardián del rayo. – Cabeza de césped. – ahora llama a un peliblanco de ojos grises, de traje, con vendajes en sus manos. Un ex-boxeador y el guardián del sol. – Ilusionista de cuarta – dice a un peli morado, de ojos heterocromaticos, el derecho rojo y el izquierdo azul, de peinado similar a una piña. Ex-preso de Vindice (prisión de máxima seguridad de la mafia). El guardián de la niebla. – Friki de las peleas – por ultimo nombra a un pelinegro de tés pálida de ojos azul metalizados, ex-presidente del Comité Disciplinario de Namimori-Japon, siempre con cara de "Herbívoro, te morderé hasta la muerte", pero el peli plata acostumbrado ya a esas miradas ni les para; también conocido como el guardián de la nube.- Tenemos misión, vamos a capturar a "ese" asesino.
Eso es más que suficiente para todos, colocandose de acuerdo y aceptar. Todos deseosos de conocer a "ese" asesino por motivos diferentes.
-Ma ma, calma Gokudera.- dice relajado Yamamoto Takeshi, alias Friki el beisbol, pero su mirada cambia y su aura tranquila también, ahora es serio – Ya era hora.
-Hmp. – "dice" Hibari Kyoya, alias Friki de las peleas. – Solo no se metan en mi camino, sino los morderé hasta la muerte. – dijo y se retira solo recoge el folder con la información de la misión.
-Kfufu, interesante. – y desaparece en la neblina, Rokudo Mukuro, alias Ilusionista de cuarta.
-Yare, yare. Que se le hace. – contesta con evidente aburrimiento, o al menos lo aparenta, Bovino Lambo, alias vaca estúpida.
-Esto será EXTREMO! – grito/hablo Sasagawa Ryohei, alias cabeza de césped. – Cuando partimos cabeza de pulpo.
-No me grites cabeza de césped.- responde una enfurecida tormenta, respira hondo y responde. – partimos en breve.
Y apareciendo de la misma nada, sale Reborn con una sonrisa que no presagia nada bueno, solo dolor.
-Tengo su ubicación, en 30 min, ni más ni menos.
Y como vino se fue, tenía que pensar en la mejor forma de torturar a su presa y no podía esperar.
-Ya oyeron a Reborn-san, muévanse.- hablo Gokudera.
Los que quedaron en la sala se retiran para prepararse, pues dentro de poco salen, sin saber lo que les espera en verdad.
- VOLVIENDO CON NONO
No puede evitar suspirar, mientras ve a los chicos y a Reborn partir.
-Como reaccionaran al saber que eres mi nieto... - susurra al viento, siendo su único testigo.
Les desea lo mejor y que vuelvan pronto, no se arrepiente de su decisión pues ya está tomada o al menos eso quiere pensar.
-Ya no hay vuelta atrás, los engranajes se mueven, después de años, se mueven por primera vez, otra vez.
Solo le queda esperar...