Esa mañana Gastón no entendía a que se debía el buen humor de todos sus compañeros, sentía que se burlaban de él, pero no entendía él porque, hasta que entró a su oficina y se encontró con todas las fotos que le había sacado esa chica la noche anterior y se dio cuenta que era el payaso oficial de la empresa.
- ¿Te divertiste anoche?- pregunto Bella a sus espaldas- te metiste con la mujer equivocada, la próxima vez ten más cuidado-
Bella dejó a Gastón lleno de odio y se marchó, sabía que se había desatado una guerra y que Gastón ya estaba pensando en su venganza.
- Bella, permiso- entro Tom a la oficina de su jefa- te traje los lineamientos que habíamos visto con Bill, para que los revises-
- No, no, no….todo sigue igual, yo estoy al tanto de todo, porque él me contó, así que no te preocupes, el que yo esté aquí es como si Bill estuviera-
- Perfecto, pero de todas formas revísalo y también quería decirte que hoy estuviste muy bien con Gastón-
- Yo no tuve nada que ver con esas fotos- no le tenía la confianza suficiente para contarle de sus andanzas.
- Bueno igual, que bueno que te impusiste, porque aquí las mujeres están relegadas a segundo plano-
- Como debe ser- ellas jamás podrán ocupar una posición jerárquica era lo que Bill siempre decía.
- ¿A qué te refieres con eso?-
- Que…como….como debe ser de difícil-
- De todas formas quería decirte que te apoyo-
- Gracias, igual cuando Bill venga, yo me fui- levantó su brazo simulando un cohete- desaparecí-
Bill sabía que esa mañana tenía que retomar las riendas de la empresa. Convocó a una reunión a la que la mayoría asistió a regañadientes, a leguas se notaba que no les agradaba ni un poco: las mujeres estaban ardidas porque apenas llegaba y ya se creía la dueña de todo y Gastón la detestaba a muerte por quitarle lo que él más ansiaba, sin embargo había alguien; la única persona que valoraba la forma en que manejaba las cosas Bella: Tom.
- La ultima cosa para cerrar, Teo es el nuevo Gerente Comercial- eso inició el murmullo colectivo- así que les guste o no van a tener que seguir sus órdenes y recuerden vamos a seguir los lineamientos de Bill, Bill es nuestro norte-
La llegada de Natalia, la hija de Aguirre fue una gran sorpresa. Apenas vio a Tom le tomó un gusto especial. Tom era un joven guapo y eso Natalia lo noto enseguida…este muchacho no se le iba a escapar de las manos.
A veces no alcanza con tener un buen plan, también hay que tener buenos aliados y eso por experiencia lo sabía Gastón, el aliarse con Vicky -la contadora de la empresa que era la versión femenina del subdirector- le iba a traer réditos insospechables.
- Llego a la cabina agotada, cansada- se quejaba Grace del acoso de su ex novio- y viene a increparme a preguntarme que hago y que no hago-
- No sé de qué te sorprendes chata, si los hombres somos así, somos brutos, no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos-
- Claro, como con Romina-
- No me hagas acordar de esa bruja porque juro que te mato a ti, porque a ella no la encuentro- se le acababa de virar el hígado de solo acordarse- no sabes el día tan horrible que tuve en la oficina-
- ¿Qué pasó?-
- Todos son unos imbéciles, que se la pasan viéndome, que me toquetean…-
- ¿Y Tomás?....-
- Normal, es buena gente- se encogió de hombros- a mí no me caía bien, para nada… y a él tampoco le caía bien-
- Claro, a ti a Bill no le caía bien, pero a Bella- preguntó algo insinuante.
- No sé, aunque Gastón también anda de buena gente- arrugo la frente por lo repulsivo que le resultaba- de todas formas ¿quién le cree a ese hipócrita?-
La interesante conversación fue interrumpida por el timbre, Bella fue a ver quién era; extraña fue su sorpresa al encontrarse con Tom del otro lado de la puerta.
- Hola-
- ¿Qué haces aquí?- jamás se imaginó que él podría ir a visitarla, si cuando era Bill nunca había ido.
- Te traje esta carpeta que te olvidaste en la oficina- eran los lineamientos de la revista.
- Ah, muchas gracias, no te hubieras molestado, hubieras mandado una moto de la oficina-
- Sí, lo que pasa es que tu casa me queda de paso y por eso vine a dejártelos-
- Gracias, pero…ehm… ¿te gustaría pasar?-
- Claro- Tom ni corto ni perezoso, en parte uno de los propósitos de ir con la carpeta era pasar tiempo con Bella- así, que este es el departamento de William Kaulitz- vio los alrededores era bastante ostentoso.
- ¿Te gusta?-
- Sí, esta bonito, tiene buen gusto-
- Acomódate, estas en tú casa y de nuevo gracias por traerme la carpeta-
- No te preocupes-
- Hola- llegó Grace que veía interesada el repentino flirteo entre ese par.
- Ah, mira te presento a Grace, una amiga-
- Grace, ¿qué tal?, no te había visto- claro si estaba concentrado en Bella- tú eres la de la radio, que gusto conocerte en persona-
- ¡Ah!- dijo Bella asombrada al ver las fotos de la carpeta- oye gracias…¡que bruto! ¿cómo me fui a olvida esto?- Bella ojeaba la carpeta sentada en el sillón con las piernas bien abiertas y una de ellas flexionada dejando todo al descubierto debido a que vestía con la pantaloneta que usaba Bill para dormir- me salvaste la vida…oye gracias- seguía embelesado con las fotos de chicas en diminutos bikinis-
Grace veía la escena desesperada, se dio cuenta que Tom le veía las piernas muy interesado, en vano con señas trataba de decirle que se sentara como una mujer decente, pero las muchachas semidesnudas eran lo único que primaba la atención de Bella.
- Huele rico- dijo Tom intentando quitarle la vista de encima.
- Ah, es Grace que está cocinando-
- No, cocinado no- la locutora vio la oportunidad perfecta para decirle a Bella que cierre las piernas- solo estoy recalentando-
- No le creas, Grace cocina de campeonato, no sabes, te vas a morir cuando pruebes su comida-
- No exageres- dijo Grace molesta al darse cuenta que Tom seguía viéndole las piernas- tampoco cocino tan rico- tomó un cojín y se lo puso entre las piernas a Bella para taparla.
Tal acción dejó a todos muy incomodos, Tom no sabía en dónde meterse, esperaba que la tierra le tragara vivo, en cambio Bella se dio cuenta de la forma en como estaba sentada y también de como la había estado viendo el fotógrafo.
- Eh…bueno- Tom no sabía que decir- yo…yo me voy-
- Te…te acompaño- Bella quería huir de los reproches de su amiga por no ser femenina.
- Bella- intentó detenerla Grace- no puedes salir así, estas semidesnuda-
- Tranquila Grace, lo voy a acompañar-
Bajaron las escaleras hasta la puerta del edificio en donde vivía.
- Gracias en verdad por traerme los papeles, pero no tenías que venir hasta acá-
- No es nada, igual perdón por haber interrumpido-
- No, no, no, todo bien, no interrumpiste nada-
- ¿Sabes?, yo también tengo una camiseta igual a la tuya- se sentía menos incomodo ahora.
- Ah, mira que bueno, la compre en Calvin Klein-
- Ehm…ya me voy- intento darle un beso en la mejilla y Bella se apartó, al darse cuenta de que actuaba como idiota ella mismo le dio el beso en la mejilla.
Algo empezaba a cambiar en Bella, es decir en Bill; si antes como hombre a Tom no lo podía ver, ahora como mujer empezaba a verlo.
- Te digo una cosa- Grace seguía enojada- este chico es un desubicado, venir a una casa sin avisar, de noche… sin llamar por teléfono- seguía despotricando contra Tom.
- Grace ya…- estaba cansándose de la perorata
- No, Grace nada…sentado ahí sin poder controlar la baba, pero de que me quejo, así son todos los hombres-
- No sé, puede ser- no le estaba prestando mucha atención.
- Como que no sabes y tú también no te hagas el idiota, sentado con las piernas bien abiertas-
- ¿Qué yo qué?- esto le estaba fastidiando bastante.
- Que no te hagas el idiota, tu ahí tan campante diciendo pasa, siéntate, con las piernas abiertas mostrándole todo, era como una invitación…pasen y vean-
- ¿Y que querías que hiciera? Lo invite a pasar porque vino hasta mi casa tarde y me trajo unos papeles- odiaba cuando su amiga se ponía insoportable.
- Claro, claro, claro, mira lo único que te puedo decir es que tienes que controlarte, porque eso es una invitación al acoso-
- ¿Sabes qué?, me estás haciendo una escena de celos-
- ¡No seas ridículo Bill! …. ¿de qué voy a estar celosa? -
- No sé, dime tú ¿te gusta Tomás o te gusto yo?-
- Mejor me voy con mis postres- cogió su comida y comenzó a caminar hasta su cuarto- porque tu estas agresivo y así no puedo comer-
- ¡Grace! ¿a dónde vas?... ¿Por qué siempre haces lo mismo? ¡Claro, mujer tenías que ser!-