Un año, tres meses, cinco días, cuarenta minutos.
Teppei estaba contando los minutos para salir de la universidad y poder ver a su novio, si bien su relación era la más rara de todas -cabe destacar su encuentro en la cancha de baloncesto - , ellos eran inseparables o eso era lo que creía. Si bien con vivir con Makoto es como entregarte al infierno, el pasaría mil infiernos solo por estar a su lado, muy romantico, ¿no? pues sí, nuestro meloso ex jugador de Seirin era así con el morocho, y el otro, con mala gana, le respondía también que lo amaba. Eran una pareja, dispareja.
La campana de la universidad toco, y comenzo a guardar todos sus útiles, vio salir rápidamente Hyuga -quién seguramente iba a buscar a su novio, Reo-. Suspiro, el también quería que al menos, Makoto, lo fuera buscar, aun que sea, una vez.
Pero eso eran cosas muy dificiles.
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Camino siete calles desde la universidad, su reproductor de música soltaba una dulce melodía, algo así como ''bad day'', pero era su canción favoritas en todo el mundo. Camino otras siete cuadras hasta llegar al departamento de su novio, quién lo esperaba en la puerta y esto lo sorprendio, no es que siempre el morocho sonriera -y esta no era la excepción- pero hoy se encontraba particularmente más enojado. Un simple ''pasa'' de mala gana, hizo que toda su medula espinal se sacudiera y que con un tartamudeo entrase a la vivienda
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- ¿como te fue en la universidad, Kiyoshi? - le pregunto, mientras ponía a calentar algo de comida congelada en el microondas, el castaño se quedo mudo, no tenía la necesidad de responderle tal pregunta, por que simplemente estaba en su nube. Un golpe lo hizo aterrizar, mirando confundido a su novio - Te hice una maldita pregunta
- Creo que me fue bien, sinceramente no presto atención en clases - se rasco la nuca, nervioso, ante tal comportamiento
- Ugh, bien, debo hacer esto - Teppei lo mira, con mucha intriga, sin saber de que habla - Kiyoshi, debemos terminar - la quijada del castaño cae un poco más que el subsuelo
- ¿qué? ¿ por qué ?
- simplemente es lo mejor
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Totalmente triste camina bajo el sol, catorce cuadras camina, dobla dos veces,una a la derecha, y otra a la izquirda, camina otras cinco cuadras y sube las escaleras del edificio, toca la puerta y de esta sale Reo con una toalla alrededor de su cuelo, y entiende la situación
Makoto lo ha dejado.
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y aqui estamos, viendo como Teppei llorá por más de dos horas en los brazos de Reo mientras Hyuga busca maneras para matar al pelinegro por haber lastimado a su mejor amigo
- Corazón de acero me decían, je - por primera vez, en las horas que habian pasado, Teppei se habia dignado a hablar y para colmo, fue para burlarse de si mismo, de su patetica relación y situación
- Hey, Kiyo-san, ¿quieras quedarte por está noche con nosotros? Se que a Hyuga no le molesta para nada, ¿verdad? - lo último lo dijo con intensiones de asesinarlo si este se negaba al dejar a su amigo con ellos
- Reo, eres muy amable, pero no quiero molestar
- ¡Estupideses! No molestas, ¿sabes las veces que Sei-chan y Kota-chan se han quedado? - el castaño nego - millones de veces, por una vez que te quedes, no pasará nada
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Deje ir lo que más queria, por su futuro.