Pov Alex.
- Deja de jugar Alex siempre bienes me convences, y luego te vas y me dejas con las ganas- se quejó Marcos mientras intercambiaba posiciones- porque no mas acción y menos blablablá- continuo y me quede sorprendido.
- Quieres acción- dije divertido mientras lo rodeaba con mis brazos- explícate ¿Qué tipo de acción?- pregunte con burla viendo como este se mordí el labio avergonzado.
- Eso es trampa, tu sabes a lo que me refiero- masculla con una ceja alzada, sonrió y niego con la cabeza.
- Lo siento Marcos, pero mi mente están pura que no se a lo que te refieres- dije tratando de no dejar escapar ninguna carcajada.
- No me jodas Alex- dice enojado y exasperado, me tapo la boca con mi mano tratando de ocultar esa sonrisa de satisfacción por haberlo perturbado.
- Umm.. solo tienes que decirlo Marcos, no es para tanto- le dije burlón, mientras detallaba su rostro, desde cuando me parecía tan guapo.
- No basta con decir que quiero acerté mío- suelta y siento mis mejillas un poco arder, ya sabía que eso era lo que quería aun así rodeo los ojos y sonreí ampliamente.
- No, no basta- masculle mientras elevaba mis manos colocándola detrás de mi cabeza aun cuando él seguía encima de mí.
- Me estas provocando- puntualizo y yo reí con ganas, negué con la cabeza y lo mire a los ojos intensamente.
- Aun no lo hago, así que deja de dar tantas vueltas y dilo de una vez- murmure esperando su respuesta.
- Sexo Alex, eso es lo que quiero..- soltó mientras me miraba, lo empuje enojado esa no era la respuesta correcta.
- Bien es un trato, si me ayudas tendremos sexo…- dije de la manera más fría que podría soltar, este me miro confundido y algo enojado.
- ¿Y ahora porque me tratas así?- y tiene el descaro de preguntarlo, bufe y me acerque a la puerta.
- No sé a qué te refieres- gruñí mientras le daba una mirada casi asesina, Marcos trago saliva y con cuidado midió sus palabras.
- ¿A dónde vas?- pregunto al ver como abría la puerta, la verdad pensaba quedarme a dormir pero ahora no quería.
- A mi casa- respondí sin ánimos, para luego salir y dejarlo solo en la habitación, comencé a caminar por el pasillo hasta llegar a las escaleras, no estaba de ánimos para nada Marcos simplemente era un idiota.
- Pero ¿porque te vas?, mejor quédate a dormir…- me pidió mientras me tomaba del brazo justo antes de poder llegar a abrir la puerta.
- No quiero- respondí mientras me liberaba de su agarré, este me miro y luego de unos segundos me volvió a tomar del brazo.
- ¿pero qué te pasa? ¿Por qué estas molesto?- me pregunto y sentí como la ira se apoderaba de mí.
- ¡POR NADA Y SUELTAME YA!- le grite empujándolo, era un idiota Marcos lo era, me sentía frustrado, y no pensaba decirle nada, que el viera en lo que se había equivocado.
Sin decir más salí de la casa y comencé a caminar solo por la calle, tenía ganas de llorar y lo único que quería era ahorcar a alguien, preferiblemente que se pareciera mucho a Marcos, suspire pensando en lo infantil que era y en lo estúpido por creer en él, ya no me preocuparía en tratar que las cosas funcionasen, ahora que se jodiera Marcos pensando en qué diablos había hecho mal.
Pov Marcos.
Lo vi salir y me quede estático, era obvio que estaba molesto y no entendía por qué no era como si yo fuera hecho algo malo, es normal que cuando somos novios tengamos ese tipo de relación ¿no? aunque ahora que lo pienso Alex es mi novio porque mi padre nos comprometió, acaso aún cree que no salimos, bueno luego de confesarme yo no se lo pregunte pero era obvio que estábamos juntos ¿cierto?.
Pero no ese no puede ser el problema, que hice nada, de eso estoy seguro es decir; solo le pedí que se acostar conmigo que tiene eso de malo, por favor sabe acaso él lo que he tenido que aguantar para no lanzármele encima y hacerlo mío como dios manda, esto era estúpido porque debía pensar tanto en eso, seguro se fue porque quería estar con su familia.
Si debió ser eso seguro es eso, pero si es eso porque diablos sigo aquí parado como una estatua esperando a que el entre y me diga cuál es su problema, maldito Alex me confunde su actitud porque no simplemente se acerca y me habla y me dice lo que le pasa, seguro le va a hablar a sus amigos tal vez con Sam o… ahora que recuerdo esta Max ese imbécil tal vez se fue con él, seguro van a ir al cine y me mintió creyendo que me tragaría el cuento ese de que se va a quedar en casa de sus papas, pues bien me voy para allá.
Y con esa resolución camino con enojo hacia mi auto dispuesto a ir hacia la casa de Mi novio, ahora me iba a escuchar, no iba a permitir que me montara los cuernos, por eso fue que se enojó seguro, no me soporta tal vez y no le gusto y me mintió cuando dijo eso, joder porque diablos me duele el pecho maldito Alex y sus tonterías.
Salí en mi auto a buscarlo sintiéndome como la mierda, odiaba discutir con él y esta vez no sabía cuál era el maldito problema, aunque la mayoría de las peleas eran causadas por mí, siempre había podido más o menos mediar y escuchar de sus labios lo que le disgustaba en este caso no había sido así.
Con frustración conduje a su casa, y para mi suerte Alex iba a pie así que no fue necesario ir tan lejos para encontrarlo, me pare a su lado en el carro y le pedí que se montara, este se negó varias veces, pero luego de un momento acepto, se sentó el lado del copiloto y se puso el cinturón.
- ¿Por qué estas enfadado conmigo?- le pregunto y este bufa se nota que no quiere hablarme y eso me hace sentir inseguro.
- Ya te dije que no lo estoy- me responde y puedo ver la furia tras sus hermosos ojos, maldigo por un momento por haber hecho lo que sea que haya hecho.
- ¿acaso no te gusto realmente?- pregunte dejando salir mi inseguridad, este me miro y rehuí su mirada, tenía miedo ante su respuesta y no podía evitar reflejarlo, cosa que no quería que viera.
- No…- respondió y sentí como un balde de agua fría me caía encima- ese no es el problema- siguió hablando y quise gritarle por el mugriento susto que me había dado.
- ¿entonces cuál es?- decidí preguntar y este elevo una ceja con una sonrisa en los labios, ya no estaba tan furioso pero sabía que era mejor indagar para no cometer otra vez el error.
- Rebánate los sesos pensándolo…- fue su respuesta, maldije al ver su casa ya no podía tratar de sacarle información- por cierto mientras no sepas que fue lo que hicisteis no iré a dormir contigo en tu casa- me dijo mientras bajaba del auto quise protestar pero este ya se había ido, ni un pinche beso me había dado y eso realmente me deprimía.