Luego de la fuerte discusión baje con prisa no quería seguir allí, pero a cada paso que daba más inseguro me volvía, choque con el suegro y este me impidió mi partida, lo mire enojado pero la verdad es que estaba asustado.
- Que paso porque te vas- me pregunto serio, mientras me tomaba del ante brazo lo mire inseguro.
- Su hijo me acaba de amenazar con matar a Max- dije enojado y a la vez asustado no quería ver a Marcos, aun que sentía que debía hacer algo.
- Deberías hablar con el- dijo serio lo cual me hizo enojar, lo que no quería hacer era lo que debía hacer- créeme si te lo dijo es porque es capaz de cumplir, yo lo haría- murmuro lo último en voz baja, nervioso me aleje del suegro y me puse a buscar a Marcos tal vez el tenía razón.
Camine por toda la Mansión sin éxito, Marcos no se encontraba en ninguna de las habitaciones, camine hasta llegar a la última puerta que me falta por revisar era un cuarto de juegos, ahí recostado sobre el sillón estaba el imbécil.
- Necesitamos hablar- dije de manera seria, mientras me paraba delante del, este me ignoro y siguió jugando su estúpido juego de carros.
- Yo no tengo nada de qué hablar- murmuro mientras seguía jugando parecía estar aún molesto, por lo sucedido en el instituto.
- Pues yo si- dije mientras me levantaba y le quitaba el estúpido control para que me prestara atención- quiero que me prometas que no le harás nada a Max- susurre firme.
- Espera bienes aquí para defender a ese idiota, lo que me faltaba- gruño con enojo mientras se levantaba.
- No entiendo cuál es tu problema, él es mi amigo y se supone que lo tuyo y lo mío solo es una farsa- dije sintiendo como mis propias palabras me lastimaban.
- Tienes razón, pero es molesto, ahora todo los del puto instituto creen que salgo contigo, yo Marcos, el mejor, el capitán del equipo, el más popular, sabes cómo estas arruinando mi reputación, es decir; mírate eres un ratón de biblioteca un nerd, eres tan poca cosa, como alguien como yo podría salir contigo- mascullaba con enojo cada palabra, que me lastimaba cada vez más- y para peor creen de manera estúpida que me importas, y luego vas tú con tu amiguito a pegarme los tarros frente a todos, no juegues joder- gruño me sentí enojado, furioso y muy lastimado, tal vez decepcionado, claro después de todo lo que creí que eran celos era simplemente orgullo.
- Si me sorprende que crean eso, se nota a diez kilómetros de distancia que yo preferiría aun chico como Max que a un imbécil como tú- dije con voz seria, tratando de ignorar ese picor en mi garganta.
- A parte de nerdo, puta- me dijo furioso mientras me empujaba, no podía seguir así quería que parase- Zorra, Maldita- más y más insultos salían de su boca, cada uno con el propósito de herirme, cerré los ojos con fuerza y en un ataque de furia, con una mano hecha puño le golpee el rostro a Marcos para que se callara.
- Yo…- al ver lo que había hecho quise disculparme, pero las palabras no llegaron a salir cuando Marcos me propino dos fuertes golpes en el estómago hasta tumbarme contra el suelo, me toque el abdomen la zona en la que me había pegado, me dolía y mucho pero no sé porque sentía que otra parte de mi cuerpo era la que se estaba haciendo pedazos- fue un gusto hablar contigo- dije con rencor mientras me levantaba, lo mire a los ojos en ellos pude ver rabia, prepotencia y orgullo, no había remordimiento solo no le importaba, le sonreí de medio lado de manera sarcástica, lo cual lo sorprendió me levante y salí de la habitación, vi que quería detenerme mas no lo hizo.
Baje las escaleras más decidido que nunca, en la sala estaban el suegro hablando con Sebastián, al igual que los gemelos que a los lejos se notaban aburrido, Dani me saludo pero estaba tan molesto que lo ignore, salí de aquella Mansión, al frente estaba la limosina y el hombre que podía llevarme a casa, pero no la use me despedí y me fui caminando, aun cuando el clima estaba amenazando con llover.
Soy un estúpido un ingenuo por creer que realmente le importaba a ese imbécil, es decir; como no me di cuenta que lo único que le interesaba a ese era su maldita popularidad, y acostarse con cualquier persona que tenga pies, claro era demasiado bueno para ser verdad, y quien puede interesarse en el NERD según Marcos, nadie solo un cegatón, es que, sentía tanta rabia, tanta furia y a la vez tanta impotencia por no saber cómo callarle la boca, no es que me interesara la popularidad y tener amigos falsos, es solo que no sé qué hacer.
Me senté en un árbol creo que había llegado a un estúpido parque, ni entiendo que hacia aquí, sería bueno llamar a alguien para calmarme y conversar, mis opciones, Sam, no debe estar con su novio y no quiero molestar, Max, si lo llamo seria como estar dándole esperanzas y no quiero hacerlo maldición que debo hacer.
Me quede solo pensando reflexionando, no quería verlo no deseaba estar más cerca de Marcos, pero si no lo hago el suegro es capaz de matarme, me sentía mal quería llorar, pero mi orgullo me lo impide aun cuando me duela con tanta fuerza la garganta y me ardan los ojos no llorare, no soltare ni una lagrima por ese idiota, que debo hacer, por lo menos no lo veré por la semana que está suspendido, no sé lo que hare cuando lo vea.
- Al fin te encuentro- escuchó una voz a mis espalda me giro para ver de quien se trata solo para encontrarme con….