Yifan comienza a despertar, es tan hermoso cuando recién se levanta, sus cabellos todos alborotados y sus labios hinchados por el sueño, es simplemente perfecto.
-YiXing ¿Qué es esto?
-¿Qué no lo ves amor? Estas atado a mi cama.
-¡Eso lo se idiota! ¿Por qué estoy aquí?
Comienza a sonar desesperado, pero eso no significa que pueda hablarme de ese modo, no cuando he organizado una gran fiesta para él ya mañana es noche buena, pasaremos las fiestas juntos, y siempre después de eso. Subo a la cama y comienzo a gatear entre sus piernas abiertas, él está amarrado de pies y manos a la cama, aun viste sus ropas, pero eso no será por mucho tiempo.
-Amor, no tienes por qué tratarme así, de modo que si lo sigues haciendo, no puedo garantizarte que saldrás bien de esta.
-¿Por qué haces esto?
-Bueno, veamos, resulta que cuando me abandonaste, que por cierto ¡ERES UN JODIDO CABRÓN IDIOTA!
-No tienes por qué golpearme YiXing, podemos solucionar esto como personas civilizadas.
-¡CIBILIZADAS MIS PELOTAS! Hubieras pensado en eso antes de dejarme una jodida carta diciendo que encontraste un modelito nuevo que te chupa las pelotas mucho mejor que yo, eso no se hace, pero en fin, eso no importa, ya está hecho ¿O no?
-¿Qué te paso YiXing?
-Tu me pasaste Yifan, pero ¿Qué no ves que estoy perfectamente?
-Nada de eso xing, tu nunca fuiste un violento, y mírate ahora, atándome y abofeteándome.
-Mira Yifan, yo estoy perfectamente, y ya mejor cállate, que quiero que me folles bien duro hoy.
-Nada de eso YiXing, no me voy a callar y menos tendré sexo contigo.
-Ohhh, si lo harás, sé que aun puedes excitarte con solo verme, te conozco cariño, no te he dado 6 años de mi vida en vano, por cierto, al momento en que logre ponerte más duro que una piedra iré a traerte una sorpresita amor.
Tras decirle eso, de mi bolsillo trasero extraje un pequeño paño color rojo que se lo iba a colocar en forma de mordaza en la boca, pero no sin antes robarle un profundo beso, de esos que son bien necesitados, todo diente y luenga, antes de separarme de sus sabrosos labios que no respondieron casi al toque de los míos, succione su labio inferior para luego agarrarlo con los dientes y ejerciendo una leve presión que fue en aumento hasta el punto donde soltó un quejido de dolor, al sentir un sabor metálico me separe de Yifan para ver, como de su labio emanaba una no tan sutil línea de sangre, le coloque la mordaza y baje de la cama.
A su lado había colocado un pequeño reproductor de música, lo encendí y al tiempo comenzó a sonar una música erótica, de esas que pasan en los clubs nudistas, y bajo la atenta mirada del tipo tirado en la cama, me di la vuelta y comencé a mover lentamente las caderas al compás de la música, era simplemente imnotizante, ante los movimientos sexys me quite la primer prenda, mis zapatos, luego le siguió mi remera y seguido mi pantalón, quede únicamente en boxers.
A pesar de haber puesto resistencia, la mirada que me dirigía el hombre tendido en la cama denotaba lujuria, lujuria en estado puro, pero aún no está en el punto en que yo quería que se encontrara.
fui al costado de la cama, en la mesita de noche se encontraba una tijera, tome estas en mi mano y me posicione al lado de Yifan, primero corte la mordaza, no dijo nada, solo soltó un pequeño quejido, luego con la otra mano libre fui acariciando lentamente su marcado pecho hasta llegar al dobladillo final de la prenda, posicione la tijera y comencé a desgarrar el fino material hasta llegar al final cerca del cuello de este, Yifan se sorprendió por la destreza con la que corte su vestimenta, luego pase a hacer lo mismo con sus pantalones, dejándolo en boxers al igual que yo. Dejando las tijeras a un lado, me cole a la cama y me posicione a horcajadas sobre los muslos del alto, ante esto él soltó un gemido, lo estaba logrando, lleve mis manos a su chato vientre y dando suaves caricias fui subiendo hasta llegar a su rostro para de ese modo poder tomar sus labios junto a los míos, esta vez si correspondió a mis besos, nos besamos con fuerza, pasión y deseo, acercando aún más mi cuerpo al de él, logre que nuestros miembros se rozaran creando una deliciosa fricción que logro sacar un ronco gemido de la garganta de Yifan, ante esto baje una de mis manos por su pecho acariciando su abdomen en el paso y sin separar nuestros labios del pasional beso, llegue a su miembro.
Palpe su extensión por encima de la prenda y pude percibir como ya estaba logrando mi cometido, había logrado que se pusiera tan duro que quisiera rogarme, y como aun no llegaba a esa parte, presioné con fuerza la base de su pene haciendo que este gimiera con fuerza sobre mi boca, aun con mi mano sobre la tela empecé un vaivén lento que hacía que Yifan gimiera en mi boca, en el momento que nos separamos para tomar un poco de aire, él dijo las palabras que quería oír.
-YiXing, déjamefollarte.
-Eso quería oír amor, déjame voy por el lubricante y vuelvo.
Tal y como lo pedí, el me rogo, ahora era momento que la sorpresa se lleve a cabo, no por nada alquile este lugar si no iba a cumplir con mi cometido. En la ZiTao, uff, una completo mariquita que tiene cuerpo grande de balde, si ni pudo aguantar la pequeña paliza que le di, solo logre hacer que su tabique nasal se quebrara y su labio superior se hinchara, nada grave, quizá este sollozando de esa manera por haberle quitado su dedo meñique, si, debe ser por eso.
Tomo las manijas de la silla y comienzo a moverla, sobre el regazo del chico se encuentra un pote de vaselina que deje especialmente preparado para este momento, salgo de la habitación y voy a donde se encuentra mi hombre excitado, al momento de ingresar y cuando mi fanfan ve al mocoso, su rostro cambia drásticamente, si, esa era la expresión que estaba esperando, coloco al chico a escasos metros de la cama, en un lugar donde pueda apreciar bien el espectáculo y acariciando su rostro hablo.
-Amor, mira lo que me encontré por allí.
-¿Qué le hiciste YiXing? Eres un monstro.
-No te confundas Yifan, monstro seré cuando termine con él, agradece que aún lo encuentras casi entero.
-¿Cómo eso de casi entero? ¿Qué carajos piensas hacer?
-Eso es lo de menos, ahora continuemos en lo que estábamos, aun me queda quitarte los calzoncillos.
-No estábamos en nada, no tendré sexo contigo ¡¡Estás loco!!
-Dices eso ahora, pero veras que terminas gimiendo mi nombre ¡Ya deja de llorar ZiTao! Ya pareces un verdadero maricon.
-No le digas eso YiXing, él no tienen nada que ver en esto.
-Ahórratelo quieres, que como digas algo más le arranco el otro dedo.
Ambos me miraron asustados, Tao sabía que era capaz de hacerlo y por el mutismo de Yifan este también lo creía así.
Volví a subir a horcajadas sobre el cuerpo de mi novio, y con tijeras en mano quite la última prenda que le quedaba y también la mía, me aproxime a besarlo pero este corrió el rostro evitando así que lo haga, me enfurecí y golpee su rostro, una mejilla colorada fue el resultado, intente besarlo nuevamente y esta vez se mostró más cooperativo, yo me estaba excitando con todo esto, mi pene estaba precisando de atención, algo que no le podía dar, no aun.
Bajo la atenta mirada del menor tome entre mi mano el pene de Yifan, este aún continuaba duro, y ante el tacto se estremeció, pero no hizo sonido alguno, supongo que no querrá gemir para su novio, no cuando yo estoy presente, mientras lo masturbaba baje mi rostro hacia sus pectorales y con mi lengua toque el suave pezón rosáceo que se endureció casi instantáneamente, lo tome entre mis labios y comencé a succionarlo una vez satisfecho, fui hacia el otro y una vez estuvo en mi poder pude oír como Yifan soltaba un gemido, también pude sentir como se estremecía, su orgasmo estaba cerca, pare los movimientos y apreté la base de su pene evitando que se pueda correr, soltó un quejido de dolor, aún es muy temprano para que pueda gozar de su tan preciado orgasmo.
Tomando el pote de lubricante enterré en el, tres de mis dedos logrando cubrirlos por completo y poco a poco fui acercando mis dígitos hacia mi entrada, sin pudor o gota alguna de vergüenza hacia los dos pared de ojos que me observaban, introduje el primer digito en mi interior, propinando un leve quejido, hacía mucho no metía nada dentro mío, con un suave vaivén y ya acostumbrado a la primer intromisión, introduje otro de mis dígitos soltando un pequeño gemido, comencé a dilatarme y llevando mis dedos hacia donde llegaran pude tocar mi próstata gritando de placer, estaba tan excitado que no me importo estar del todo dilatado solo saque mis dedos de adentro de mis entrañas y tomando más del viscoso líquido, coloque una generosa cantidad sobre la dura virilidad mi fanfan, este al sentir la fría consistencia en su sensible pene, gimió.
Sin aguantar un segundo más tome en mi mano el gran falo y acercándolo a mi entrada lo posicione para auto penetrarme, fui sentándome muy lentamente mientras me sostenía del pectoral de mi amante, todo ante la atenta mirada del chico en la silla de ruedas que ya había dejado de sollozar, al dirigir mi mirada hacia él en el momento que toda la extensión llego a su final y yo me encontraba sentado y bien empalado, lo mire, el muy pendejo estaba duro de la excitación, tan enfermo como yo.
Una vez me he acostumbrado, comencé a subir lentamente sacándome casi por completo el gran falo y volviéndome a sentar de golpe, ambos gemimos, así seguí, meneando las caderas de arriba hacia abajo, junto a Yifan gimiendo y gritando a cada momento que tocaba mi próstata, por mi parte yo agarre mi olvidado pene y fui masturbándome a cada embestida que daba, no mucho después ambos terminamos viniéndonos, Yifan tirando su caliente semilla en mi interior y yo, manchando mi mano y su abdomen, ambos gritando nuestros nombre, bese sus labios una vez más y sacándolo de mi interior, me tumbe a dormir a su lado, sin importarme limpiarme o a él, pero lo que si debía hacer era dormir al menor, por lo que a duras penas baje de la cama y camine hacia el armario y sacando de allí una jeringa y un potecito con un líquido transparente dentro, coloque la medida correspondiente y acercándome a Tao, se la inyecte en el brazo, cayo dormido al poco tiempo, ya mañana vería que hago con él, de momento solo quiero descansar abrazado a mi amor una última vez.