El martes no me encontré en ningún momento con Jongin o Sehun. Si, no compré mis chocolates si es lo que preguntan. Me la pasé aferrado a Jongdae durante clases y fui a ver la tutoría de Baekhyun a Chanyeol en la Facultad de Actuación. Recibí un par de mensajes de Jongin preguntando si nos veríamos, pero decidí ignorarlos.
En general, estuve evitando a Jongin.
Es temprano para estar en el instituto, pero que opción tengo? Salí más temprano que Jongdae y Baekhyun para evitar sus sermones sobre la presencia de Jongin. Porque, creo que ya saben, hoy tenemos ensayo. Y por eso estoy aquí, aburrido, solo, enfrente de los espejos de la planta baja del edificio de Danza.
Pongo mi iPod en los altavoces portatiles que siempre cargo conmigo. Para reducir aburrimiento me pongo a bailar Overdose. Entonces, mientras bailo tranquilo, recuerdo la noche que estuvimos Jongin y yo en el escenario. La sensación de formar un buen equipo me envuelve mientras me dejo llevar con la música, y así me hace sonreír hasta que termina la canción. Suspiro con los ojos cerrados, intentando dejar la sonrisa tonta que tengo en los labios, y no es hasta que oigo unos aplausos que logro quitarla.
Me volteo lentamente para encarar a Jongin.
-Se te ha pegado la naturalidad en el baile, Soo.- Dice sonriéndome inocente.
-Influencia tuya, supongo.- Me encojo de hombros.
-Black Pearl?- Pregunta mientras se acerca a mi iPod a cambiar la canción.
-Claro~-
...Una hora después...
Mi estómago ruge con fuerza. Pido a Jongin un descanso y, a paso rápido, voy a comprarme bocadillos dulces en el puesto de Sehun. Allí los encuentro a él y Luhan hablando animadamente. Me acerco a pedir dos chocolates y tres cupcakes de vainilla.
-Gracias~- Digo cuando ya he pagado y Sehun me entrega el par de chocolates y una caja con cuatro cupcakes. -Yo pedí tres...-
-El otro es de mi parte para Kai. Al muy necio no le gusta comer en las mañanas.- Dice Sehun bufando.
-Además, creemos que querrías compartir con él~ Para... No desayunar solo.- Sonríe Luhan.
-Bueno, de hecho tengo suficiente hambre como para comerme todos los cupcakes mientras lo veo practicando sus pasos... Pero tienen razon, compartiré con él.- Asiento con la cabeza y Sehun detiene mi regreso al edificio.
-Me contó lo que sucedió. Kyungsoo, debo advertirte que, a pesar de que Jongin suele ser de los que permiten tener sexo sin compromiso, cuando el siente algo, lo siente de verdad. Me contó que se te confesó, pero que no le respondiste.- Dice Sehun serio.
-Se me confesó?- Intento recordar la escena, pero no obtengo nada.
-Sí. Estoy seguro de que cree que fue un error acostarse contigo porque solo lo sentiste como sexo, cuando el sintió algo más, y eso no es su estilo. O ambos lo sienten como sexo, o ambos sienten algo más. A pesar de todo lo playboy que se pueda ver, asi como yo,- Hace una pausa señalandose teniendo como resultado una carcajada de Luhan. -Es humano, y tiene sentimientos. No lo malogres más de lo que está, ya tuvo suficiente con los hermanos de su padre...-
-Yo, eh... Entiendo, lo tendré en mente...- Salgo practicamente corriendo de allí huyendo de las resonantes palabras de Sehun.
¿Ocurrió algo con los tíos de Jongin?
Llego mas tranquilo a la planta baja de Danza, encontrando a Jongin absorto en sus movimientos y Minho preparándose para empezar su ensayo, solo, porque Kibum no ha llegado. Me acerco hasta él para saludarlo.
-Buenos días~- Digo sonriendo leve.
-Buenos días Do. Como estás?- Sonríe y nuevamente su sonrisa deslumbra tanto que me deja casi ciego.
-Bien~ Kibum no llega aún?-
-Oh, sí. Viene en unos minutos, fue a Canto a llevar no se que cosa a no se quien.- Dice sin darle importancia, pero su rostro muestra disgusto.
-Uy~ Huelo un poco de, no se, celos quizá?- Bromeo, pero por la cara que pone Minho no es broma para él. -Uh oh.-
-Puedo confiarte el secreto?- Yo asiento. -Me gusta Kibum. No se si es algo más, pero se que me gusta, y me gustaría tener a mi lado todo el tiempo. Pero es que él... Agh, siempre se la pasa con ese chico, Jonghyun...-
-Kim Jonghyun? El de tercer año? No sabía que era cercano a Kibum...- Susurro para mí.
-Casi ni me presta atención en los ensayos. Apenas y he podido enseñarle el primer verso del baile.-
-Bueno... No tengo consejos para darte. Lo siento amigo.- Pongo mi mano en su hombro en señal de disculpa. Sin obtener respuesta, le doy su espacio.
Jongin me mira fulminante, produciendome escalofríos. Le muestro la caja y, en silencio, nos sentamos a comer. O por lo menos el silencio dura hasta cierto momento.
-Jongin...?- Lo llamo, él voltea a verme masticando. -Quisiera preguntarte algo.-
-Que es?- Habla mientras traga y mastica.
-Tu... Yo... Eh... Lo que tuvimos, exactamente, qué fue?- Susurro audible solo para sus oidos.
-Mmm...- Traga lo poco que quedaba en su boca antes de hablar. -Que crees tú qué fue?-
-Eh... No lo se... Sexo?- Hablo tímido, agachando la cabeza.
-Hmm... Ven acá.- Dejando todo en el suelo, Jongin me hala para ir a el baño donde nos encerramos en él. Me pega contra la puerta, acorralándome con sus brazos. -Soo, voy a ser sincero contigo. Yo nunca, jamás, le he quitado la virginidad a nadie, y el haberlo hecho contigo me alegra, porque no ha sido compromiso, pero tampoco algo por salir del paso. Fue algo único. No pretendo ofender o darte cumplidos, pero para ser un virgen de toda la vida, eres demasiado bueno en el sexo. Y honestamente me pongo duro de solo recordar como me cabalgaste.- Hace una pausa para calmarse. -Pero tampoco quiero obligarte a sentirlo de la misma manera única que yo la sentí.-
-Yo... L-lo vi como un... Encuentro... Casual...- Susurro titubeando mientras siento el rostro de Jongin acercándose peligroso. -Un encuentro casualmente especial...-
-Ngh, joder...- Jongin gruñe antes de besarme con fuerza.
Encendido en menos de un minuto, le desabrocho apresuradamente la camiseta a cuadros que tiene, para quitarme mi camisa y juntar nuestros pechos. Mis manos se sostienen a sus espalda mientras las de él se cuelan en mis pantalones por detrás de mi, y pronto empiezan a masajear mis nalgas. Me enrollo con las piernas a él inconscientemente hasta que me deja sobre el lavabo del baño. Una de sus manos se llega hasta debajo de mi boxer, sujetando mi miembro. Yo, obviamente incomodo por la ropa, me bajo el boxer junto a los pantalones aprovechando que Jongin se ha movido para arrodillarse frente al lavabo.
-J-jongin...- Sus manos separan mis muslos y su rostro se acerca a mi entrepierna.
-Lo haré Kyungsoo, quiero hacerlo.-
-Y yo quiero que lo hagas...- Mantengo mi peso en mis manos detrás de la espalda para no caer contra el espejo y hago lo posible para que mis piernas sigan separadas hasta donde Jongin las dejó.
Una de sus manos que previamente masajeaba mi muslo comienza a masturbar mi miembro de forma suave pero manteniendo un ritmo, su boca deja varios chupetones en el otro muslo. Mi voz se quiebra y no puedo articular palabras completas.
-Dilo Soo. Di que quieres que haga...- Susurra antes de morder mi muslo y su mano aprieta suavemente mi miembro.
-Chupa...Ah~... Chúpamela Jongin~~- Suelto en gemido por la mordida.
-Urgh...- Su gruñida me hace estremecer.
Una lamida suave recorre lentamente mi miembro. Mi espalda se arquea y me flaquean las piernas, ahora empiezo a dudar de que pueda mantenerlas abiertas por tanto tiempo. La boca de Jongin succiona un poco el glande originando un gemido que sale de mi boca. Pocos segundos después empieza a chupar con un ritmo constante, ni muy acelerado ni muy retardado.
-Oh Dios mío~~- Gimo. El placer es indescriptible. Bajo la mirada a ver a Jongin encontrándome con la suya fija en mí. Mi vientre se revuelve por la imagen eróticamente placentera de Jongin.
-Soo~...- Susurra besando la longitud de mi pene con uno de sus dedos jugando en mi uretra.
-Ahh~~... Jongin~...- Suspiro jadeando. Vuelve a succionar esta vez con rapidez. No aguanto mucho la grandiosa sensación y dejo que mi miembro estalle dentro de la boca de Jongin.
Me recuesto suavemente del espejo mientras admiro la figura de Jongin levantándose hasta quedarse frente a mí y tomar mis labios con los suyos. Su lengua inmediatamente se cuela y siento un sabor agrio, sabor a mí. Cuando se separa nos limpia y acomoda como es debido, sin escalofríos cada vez que su piel roza la mía, me trae recuerdos de esa noche.
Salimos y nos encontramos con Minho y Kibum que se están besando salvajemente contra un espejo, Minho acorralando a Kibum que casi le quita el pantalon para que lo tome justo ahí. Suelto un quejido de sorpresa, digo, se supone que Kibum no sabía que Minho gustaba de él, o eso entendí yo... Al oirme, ellos se separan para arreglarse veloces y salir casi corriendo del lugar.
Jongin y yo seguimos nuestra práctica más relajados que antes.