Leo
Era increíble como el tiempo pasaba tan rápido, era como ayer cuando mis dos amores nacieron, cada día yo era mas feliz con ellos. Los amaba demasiado, era mi vida, bueno ellos y Ken.
Luego de que ambos nacieran, continuamos juntos luchando por salir adelante, Ken a pesar de todo quiere a mis dos hijos, siempre los consiente y cuida. Bueno el caso es que Alex nos dijo que nos quedáramos con él, cosa que aceptamos mientras encontrábamos un lugar en el cual vivir, nosotros estábamos muy agradecidos con él, tanto que se convirtió en el padrino de mis dos bebés.
Bueno sobre VIXX no hay mucho que decir, cuando mis bebés cumplieron seis meses volvimos con un mini-album, aunque no nos presentabamos como antes. Durante ese tiempo encontramos con Ken una casa hermosa, pero decidimos esperar a finalizar las promociones para mudarnos.
Así lo hicimos yo era tan feliz allí, Minseok y Kyungsoo esos eran los nombres de mis hijos, Kyungsoo era una mezcla mía y de Ken, era bastante adorable con esos ojos. Mientras que Minseok era igual a Seungho, con sus mismas mejillas me parecía de lo mas adorable.
Cuando cumplieron dos años, VIXX sacó un último álbum, uno de despedida, aquellos fueron unos momentos duros pero hermosos, acerca de Hongbin nunca se dijo nada solo que había dejado VIXX, no quisimos que se hiciera público que estaba en la cárcel. En nuestro último concierto todos lloramos, las fans igual pero no era un adiós, porque nosotros éramos a pesar de todo una familia y estaríamos juntos.
Yo luego de aquello me dediqué a mis pequeños, a cuidarlos y quererlos, aunque cuando comenzaron a ir al Jardín yo empecé a trabajar con los chicos que tenían mi mismo sueño en Jellyfish, era gracioso regañarlos por no cuidarse o por no llegar a las notas, tambien a veces hacía una que otra presentación junto a Ken o en algún musical. Ken en cambio siguió como solista, le iba bastante bien, a veces nos presentabamos juntos, también siguió su carrera como actor y yo era su mayor fan, de eso estaba seguro.
N trabajaba junto conmigo en Jellyfish trabajando en el área de baile, también colaboraba con algunos artistas y le iba bastante bien, claro que tuvo que dejarlo en el momento en que quedó embarazado de Jongin, su segundo hijo, siempre lo molestabamos por que salió del mismo color de piel que N y por ello nos llevábamos sus quejas y reclamos. Ravi también siguió como solista, colaborando con Ken algunas veces y yendo a Jellyfish. Ellos vivían bien en una casa prácticamente al lado de la nuestra, cortesía de N alegando que la familia debía estar junta, por ello nuestros hijos eran bastantes unidos, Lucy y Jongin, que le decíamos Kai, eran unos niños demasiado adorables.
Por otro lado estaba Hyuk, él se hizo cargo de Dylan y luego de que Hongbin fuese condenado Hyuk se enteró que estaba esperando un bebé de Hongbin, fue un golpe bastante duro para él, el pequeño Luhan era la perfecta combinación de ambos. Hyuk comenzó a trabajar en las empresas que tenía Dylan y sacó su título en economía y negocios, vivía a unas cuadras de nosotros. …l amaba a sus dos hijos, a la pequeña Dylan y a Luhan, me sorprendió bastante como salió solo adelante, en ningún momento lo dejamos solo y cuando tenía reuniones yo o N cuidabamos a los pequeños, eramos una gran y hermosa familia.
Por otro lado Hongbin no sabía de Luhan, Hyuk nos prohibió decirle y el único que mantenía un contacto con él era Ravi, pero nunca nos hablaba de ello ni si quiera a N, tampoco es que nosotros preguntáramos. Y de Seungho, lo único que supimos que había muerto en el incendio, aunque tenía una sensación rara al respecto pero solo debían ser imaginaciones mías.
—Buenos días amor—sentí sus brazos rodear mi cintura y sonreí ante ello—huele realmente delicioso—me dijo y yo detuve todo movimiento girandome hacia él, dejando el desayuno a un lado.
—Buenos días cariño—le dije pasando mis brazos por su cuello y darle un beso oyendo varios pasos hacia nosotros.
—Iughhh no hagan eso—dijo Kyungsoo, adelante de su hermano haciendo una mueca, me separé de Ken y vi como se dirigía a la mesa mientras yo llevaba las cosas con Ken, notando como Minseok iba en silencio a su lugar.
—Pero campeón cuando grande tu harás lo mismo—le dijo Ken revolviendo los cabellos de DO, así le deciamos a Kyungsoo de cariño. Me giré hacia Minseok y de verdad sus personalidades contradictorias, DO era bastante alegre y expresivo, en ese aspecto se parecía muchísimo a Ken, pero cuando se enojaba podía ocasionar la tercera guerra mundial, en cambio Minseok él era mas como yo, era tímido y reservado, solo sonreía cuando nos íbamos a tomar un helado los dos o cuando su hermano lo hacía reír, pero más no y me preocupaba un poco.
—Minnie cariño, ¿sucede algo?—le pregunté mientras veía como se tomaba su leche, él negó con su cabeza y miró hacia otra parte, por ahora no insistiría más, podía sentir la mirada de Ken sobre Minseok y como esta luego se posó en mi.
—¿Seguro Minnie?—le preguntó esta vez Ken y mi bebé solo le vio y dejó la leche allí para subir corriendo a su cuarto, me estaba preocupando por mi bebé, observé a Ken y él estaba igual que yo.
—Iré a ver que le sucede—dije antes de ir arriba, Minseok era mucho mas a pegado a mi que con Ken, eso siempre pasaba, Ken había intentado hablar con él, pero Minnie siempre venía a mi cuando algo pasaba, lo entendía porque yo era su omma pero sabía que aunque su padre biológico no fuera Ken, él era su padre y se preocupaba y le amaba, y quería que la relación de ambos mejorase.
A medida que subía las escaleras podía oír sus sollozos, se me partía el alma de oírle. Caminé lentamente a su habitación y me asomé por la puerta que estaba entreabierta, allí estaba mi pequeño abrazando su peluche fuertemente mientras estaba sentado en el suelo, avancé hasta quedar frente a él y lo miré, el detuvo un poco sus sollozos y me vio.
—¿Puedo sentarme contigo?—le pregunté y él asintió por lo que me acomode a su lado y le abracé mientras el seguía llorando y yo le acariciaba su espalda, esperando a que se calamase, sabía que me diría lo que le sucedía pero no quería presionarle.
—Appa...no me quiere—dijo aun hipando separándose de mi viéndome con sus ojitos llenos de lágrimas —¡El prefiere a Kuyngsoo!—dijo volviendo a llorar fuertemente y yo lo abracé y estreché contra mi pecho.
—¿Amor de donde sacaste eso?—le pregunté bastante preocupado y sorprendido de que pensara aquello—Tu appa los quiere a ambos a los dos por igual —dije acariciándole sus cabellos.
—Es que...appa siempre felicita a Kuyngsoo y lo abraza y le dice que es un gran hijo—dijo cuando ya se calmó, separándose de mi con un leve puchero.
—Pero amor, tu appa te ama, ¿acaso se te olvida que siempre que le dices que quieres algo el te lo trae? O cuando llegó a tu presentación todo mojado luego de que el auto se estropeara, tu appa se fue corriendo bajo la lluvia para verte—le dije limpiando sus lágrimas para luego darle un beso en su frente.
—Tienes razón...—murmuró y en ese momento vi a Ken en la puerta quien me preguntaba con la mirada si podía entrar, suponía que había escuchado todo aquello.
—Heyy pequeño, no me gusta verte llorar, además siempre le dices a tu omma y a mi nada—dijo Ken con un puchero y Minseok le vio y se rió y me abrazó aun más.
—Es porque omma me llevará a tomar un helado—dijo mirándome mientras me hacía ojitos y yo terminé asintiendo.
—Bueno, mientras ustedes van por ese helado yo iré a dejar a Kuyngsoo a las clases de canto, con cuidado—me dijo antes de acercarse y darme un beso.
—Ustedes igual vayan con cuidado—dije y él asintió saliendo de la pieza y luego miré a Minseok travieso—¿vamos por esos helados?—le pregunté y él me sintió y asintió feliz.
Tomé la mano de mi pequeño y comenzamos a caminar hacia la heladería que estaba a tan solo unas cuadras. Minseok se parecía mucho a su padre, físicamente claro, me recordaba mucho a Seungho pero era tan mono, al igual que Kuyngsoo, no podía decirles que no a nada.
Al llegar a la heladería le dije a mi bebé que se sentara en una de las mesas del local mientras iba a comprar los helados, mientras estaba en eso pedí uno de chocolate para mi bebé y otro de vainilla para mi, esperé a que me los entregaran y cuando me di vuelta no vi a Minseok.
—¡Minseok!—grité acercándome a la mesa donde había quedado mi hijo, comencé a buscarlo con la mirada pero maldita sea no lo veía.
Sentía mi respiración agitada y un miedo horrible, no podía creer aquello, esto no estaba pasando, no podía perder a mi hijo, ¡¿cómo fui tan irresponsable?!
—¡MINSEOK! ¡MINNIE!—gritaba ya afuera del local, buscándolo con la mirada, no había mucha gente caminando y todos se me quedaban mirando.
En ese momento le vi, al otro lado de la calle sentado en uno de los columpios, había alguien frente a él y Minnie tenía algo entre sus manos, rápidamente crucé la calle.
—¡Minseok!—grité cuando ya lo había hecho y vi a la persona que estaba frente a mi hijo decirle algo para luego despedirse e irse, no logré ver quien era. Minseok me veía confundido y yo me acerqué a él y lo abracé, aun estaba con los helados en mi mano pero tuve cuidado de no mancharle, necesitaba tenerle entre mis brazos—Dios Minnie no me vuelvas a asustar asi, ¿qué te dije acerca de seguir y hablar con extraños?—le dije separándome de él viendo como tenía la cabeza agachada.
—Lo siento omma—dijo bajito y en ese momento caí en cuenta que tenía un peluche en sus manos.
—¿Y eso Minseok?—señale el peluche—¿quién era la persona que estaba contigo?—le pregunté y el me vio con un puchero.
—Solo si no le dices a nadie—me dijo y yo me quedé bastante sorprendido, no me estaba gustando esto.
—Esta bien—
—…l es mi amigo—dijo asintiendo y yo lo miré extrañado—él siempre me ayuda, la vez que me perdí en el centro comercial o cuando estaba triste en el jardín, siempre me ayuda, ¿no te parece bonito?—me preguntó mostrándome el peluche y yo asenti—me lo dio por mi cumpleaños, me dijo que no debía de andar por ahí ni alejarme de mi omma, que se iba a preocupar, peor yo le dije que estaba bien y que para quien era el peluche y me lo dio—dijo bastante feliz mi hijo, cosa que me sorprendió y me hizo sentir bien pero aun así me preocupaba esa persona.
—Esta muy lindo, pero no te vuelvas a ir así como así, si quieres ir a un lado me avisas y vamos juntos, por cierto Minnie, ¿esa persona sabes algo de ella?—le pregunté y el frunció el ceño.
—¡Es mi amigo!—me dijo y yo supe que no me diría nada más, tendría que hablar de esto con Ken.
—Esta bien, toma tu helado y vamos a casa—le dije sonriéndole y él se bajó y nos fuimos tomados de la mano, mientras el cargaba su peluche, tomandonos nuestros helados.
Al llegar a casa Minnie subió corriendo a su cuarto, aunque el ya estaba por cumplir los 5 le encantaban los peluches, no le gustaban los superheroes ni nada, solo sus peluches y el fútbol. Por otro lado Kyungsoo era en cierta forma mas independiente que Minseok, eso se debía a sus personalidades Minseok necesitaba a alguien que le animara, en cambio Kyungsoo el dolo hacía todo y ayudaba a su hermano, pero aun así Kyungsoo era fanático de pororo y no me perdonaba si no lo veíamos.
—Amor ya llegamos—dijo Ken con una sonrisa que se borró al verme, debía yo de verme bastante preocupado —Kyungsoo sube a la habitación de tu hermano—dijo y Kyungsoo solo asintió y subió, Ken se acercó a mi y me abrazó, ambos nos acomodamos ene el sofá—¿Qué sucedió?—
—Hoy cuando fuimos por los helados, dejé a Minnie en una mesa y fui a comprarlos, cuando volví él ya no estaba, comencé a buscarlo y lo vi en el parque que está frente a la heladería, pero estaba conversando con alguien—dije y el estaba frunciendo el ceño.
—¿Con quién estaba hablando?—me preguntó y yo negué.
—No lo se, simplemente se fue, cuando le pregunté a Minnie quien era dijo que era un amigo que siempre lo ayudaba y le dio un peluche por su cumpleaños—dije preocupado y Ken suspiró.
—Quizás solo te estas preocupando demás, puede ser alguien que trabajase en el jardín —dijo Ken y yo lo miré y asenti—solo hay que tener cuidado y ver si Minnie y esa persona se vuelven a ver—me dijo y yo asentí , me dio un corto beso en mis labios y me sentí en algo mas tranquilo, pero tenía un mal presentimiento.
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