- Si… por que no dejas de estar presente en mi mente… ¿a ti no te pasa esto?
- Yo…- empezó a pronunciar lucia- no se… bueno… a pesar de todo… no he dejado de pensar en ti, pero… pero ya es tarde, se supone que lo que hicimos fue porque de verdad nos gusta esa persona, ya no hay vuelta atrás… y aun me gustaría pasar tiempo contigo… pero… ya estas con Amanda… sin decir que quiero preguntarte muchas cosas- dijo lucia mirando el suelo, Robín la miro y esfumo la distancia que aun las separaba y la abrazo- esto también es tu culpa-
- ¿porque?- pregunto Robín
- Porque… eres tan tu… ¡idiota!- dijo lucia avergonzada- eres tan rara…
- Que encuentro tan lindo… tanto que me da nauseas- exclamo alguien parado justo en la puerta con un cigarro en la boca- no te recordaba así Robín, supongo que te la llevaras a la cama-
En aquel momento robín abrió grandes sus ojos, aquella voz masculina era de alguien conocido por ella, era la única persona al nivel de pelea de Robín, ella no lo había sentido y menos escuchado la puerta abrirse y cerrarse. Me separe de lucia y avance hacia él.
- Pensé que te habían expulsado del colegio y estabas preso- dijo robín confundida
- Así recibes a tu amigo- dijo con una sonrisa irónica
- ¿amigo? Tú me rompiste las costillas cuando recién acababa de empezar a entrenar- exclamo Robín
- tu cara de niña buena me llevo a eso- dijo como si nada, como si fuera lo más común del mundo- tus motivos eran nobles y tu llanto era desquiciante, eres demasiado golpeable- robín frunció el ceño molesta, aquel chico le molestaba
- ¿entonces?… habla Marco- dijo enojada
- tratas a tus mayores así, después de que traigo información valiosa para ti y tu querido hermano- dijo fingiendo estar dolido, pero esa sonrisa que tan odio, esa sonrisa entre burlona y macabra, como si el dolor ajeno en verdad le provocara placer, debía poner en su lista como número uno de prioridades saldar cuenta con el
- ¿qué?- dijo algo impaciente
- Veras… como sabes estuve en la cárcel…- empezó a relatar con una sonrisa que le molestaba a Robín, como si lo que fuera a decir fuera lo más chistoso del mundo- en mi estadía ahí… me encontré con alguien bastante interesante… ¿adivina? No mejor yo te digo, quiero ver tu cara… fue a tu padre y te extraña demasiado… comento que pronto saldría por buen comportamiento, no sé cuándo pero, que pronto los volvería ver- al finalizar empezó a reír, como si la cara de pánico de Robín fuera la comedia más graciosa del mundo, al terminar a reír, le dio una palmada en el hombro yantes de marcharse- espero… que si te lo encuentras darás vuelta todo, te has vuelto fuerte, tienes sangre fría al pelear, me venciste una vez, espero escuchar que eres tú la que le marcara la espalda como tu sello personal, espero con ansias ver como cumples lo que dijiste ese día que te presentaste frente al viejo- dicho esto se marchó
En aquel momento Robín sintió como si le tiraran un balde de agua fría en la cabeza, sus piernas se debilitaron y tuvo que sujetarse de la puerta para no caerse, se llevó la mano a la cabeza mientras sus recuerdos de aquellos días se agolpaban para salir, lucia quien miraba sorprendida, fue donde Robín y le toco el hombro, ahí fue donde Robín volvió a la realidad y se calmó. Fue ahí donde recordó lo que Marco le dijo que recordara.
Inicio del flashback
Su hermano le había mencionado que el entrenaba chicos en defensa personal, luego de lo que presencio hace un mes, la sensación de impotencia, no se lo podía quitar, fue débil, tuvieron que protegerla y el pago por ello fue que su hermano saliera gravemente lastimado, sin decir, que ella también, no pudo evitar que su padre le golpeara y que le quemara la espalda, simplemente se quedó ahí en el suelo llorando miserablemente, mientras que su hermano peleaba para contener a su padre y evitar que el la matara o la siguiera lastimando, su cuerpo no se movía, producto del miedo.
Apretó sus puños y fue a la casa de aquel hombre que le había dicho a su hermano, quedaba cerca de su casa, solo a un par de cuadras, él no la iba a entrenar fácilmente, el no estrenaba chicas, pero estaba decidida a ser la excepción, no se iría de ahí a menos que quisiera entrenarla, al llegar aquel sujeto estaba entrenando a un chico mayor que ella, se acercó y pidió hablar con él.
- Por favor… entréneme- dijo mirándolo
- Olvídalo- dijo sin siquiera mirarla- no entreno mujeres-
- Entréneme- volvió a decir Robín mientras se colocaba de rodillas, coloco sus manos en el suelo, mientras empezaba a derramar lágrimas- por favor, solo usted puede hacerme más fuerte, solo usted puede hacer que pueda quitarme este sentimiento que me carcome-
- Ya te lo dije niña, búscate otro, yo no entreno mujeres- exclamo mirándola- levántate y deja de llorar-
- ¡NO!- grito- no me iré a menos que me entrene, soy débil… tuvieron que protegerme, yo… no pude hacer nada contra el… yo quiero ser alguien que pueda proteger a los que ama… así que por favor se lo suplico ¡ENTRENEME!- volvió a decir Robín mientras lo miraba, sentía un nudo en la garganta que le dolía contener para no romper en aun mas llanto
- Vaya… ya sé quién eres…- exclamo aquel chico que miraba divertido la escena… eres la chica que su padre golpeo… la que le pegaron con un fierro hirviendo… ¿me muestras tu cicatriz? ¿aun te duele?- pregunto el chico entusiasmado, sabía que la había visto en algún sitio, pero no la reconoció de inmediato
- Marco, no te dije que te detuviera sigue haciendo flexiones- sentencio
- Pero…- trato de protestar pero al ver la cara del viejo seria opto por callar y seguir en lo que estaba
- ¿Por qué quieres que yo te entrene? ¿Cuál es tu propósito de esto?-
- Mi hermano lo menciono, usted lo estaba entrenando, escuche como era de intenso en su entrenamiento, quiero tener un entrenamiento igual…- dijo secando sus lágrimas- porque… porque quiero poder ser yo quien lo proteja la próxima vez, quiero ser lo suficientemente fuerte para poder moverme, quiero sacarme este malestar, este dolor, la frustración que tengo, quiero dejar de tener miedo-
- ¿Eres hermana de Brandon?- pregunto aquel hombre luego de un gran silencio
- S-si-
- Escucha… tu hermano me dijo algo parecido y aun que yo no entreno mujeres, creo que are una excepción contigo, pero… nada de gracias ni nada, tu entrenamiento será extremo y si veo que te quedas atrás ya no seguiré entrenándote ¿entendido?
- Si- dijo sonriendo Robín
- Mañana a las 6 am empezamos, en este punto- le dijo
- Te estas volviendo blando viejo- exclamo aquel chico- te está brotando un corazón-
- Cállate y dame 200 flexiones más-
Fin del flashback
Debía contarle a su hermano de inmediato, ¿Por qué ahora? Cuando lo apresaron le dieron 20 años, por que salía tan temprano, ni siquiera había cumplido la mitad de su condena. Se sentía indefensa, sentía que aún tenía momentos para prepararse, pero esto rompió su esquema, su plan. Aunque no buscaba venganza, no quería que ese hombre se le acercara.
- ¿Robín?- pregunto lucia
- Yo… yo tengo que irme- dijo al fin
- ¿paso algo?- dijo preocupada- estas temblando- al escuchar aquello robín miro sus manos y se dio cuenta que se había calmado
- Maldición…- dijo robín, en un acto de desesperación lucia abrazo a robín para tratar de que se calmara- el vendrá por mí- dijo robín separándose una vez que logro calmarse
- ¿Tu padre?- se atrevió a preguntar
- Si, deberías alejarte de mí, si él te conoce te lastimara- dijo mirando la puerta- tengo que irme… hablaremos otro día- se marchó rápidamente
Lucia se había quedado preocupada, con todo lo que había pasado, otra vez su conversación había quedado inconclusa y peor, se había sumado otra cosa y era mucho peor. Sentía miedo, pero sabía que su miedo no era comparado con el que sentía Robín, ella fue la que más sufrió con todo, desearía poder ayudarla, pero no sabía cómo, lo único que podía ofrecerle era su apoya, pero aquello era nada.
Mientras tanto robín había llegado a su salón, había agarrado sus cosas y se había marchado del colegio en dirección a su casa, saco su teléfono y llamo a su hermano, para que se fuera rápido a la casa, se le notaba nerviosa, caminaba de un lado a otro dentro de la casa. Después de casi una hora su hermano llego.
- ¿Qué paso? ¿estás bien?- pregunto preocupado
- El saldrá- decidió irse sin rodeos
- ¿qué?- pregunto asombrado- imposible aun no cumple la mitad de su condena es imposible que salga- dijo mirando a su hermana
- Esta vez… será diferente- dijo robín mirando seriamente a su hermano- te lo prometo-
- Robín… por favor… no hagas nada estúpido… no busques venganza… por favor… no manches tus manos- advirtió Brandon abrazando a su hermana
- Descuida…- respondió su abrazo- no lo are, solo digo… que esta vez podremos defendernos del sí trata de lastimarnos de nuevo-
- Lo se… si sale ira a nuestra antigua casa, él no sabe nos mudamos, tal vez le sea imposible salir de ahí y si lo llega no nos encontrara-
- Si… tal vez… - dijo poco convencida Robín, solo ella sabía lo que era capaz de llegar a ser su padre, realmente su hermano nunca llego a dimensionar a lo que el llego.
Su celular había empezado a sonar era lucia, lo más probable era que estuviera preocupada, no debió haberla dejado así, solo que la situación la supero bastante pero ya se sentía mejor, aun ni siquiera había solucionado el tema de Amanda y lucia, todo era tan complejo, a veces deseaba tener una figura materna para hablar de esas cosas, aunque su hermano era padre y madre, seguía siendo su hermano y era hombre, habían cosas que simplemente la dejaban emocionalmente traumada cuando hablaba con él.
- Hoy vendrá…- trato de decir su hermano
- Ok, no digas más- lo interrumpió- creo que iré con Aarón, por favor si lo van a hacer avísame es raro ver gemir a mi profesora- bueno no precisamente raro, pero se entiende, es raro que ella ahora este con mi hermano, aún no he hablado con ella, tal vez lo haga hoy cuando venga, de paso también le pregunto otras cosas
- lo siento- dijo Brandon avergonzado
Robín reviso su celular de nuevo y tenía dos llamadas perdidas ambas eran de lucia, también tenía mensajes y estos eran de Amanda, que molesto era recibir tanta atención.
A la llagada de su maestra, ambos estaban en la cocina tomando un café, estaba recibiendo un interrogatorio de parte de su hermano, hace apenas cinco minutos se había enterado que había terminado con lucia, le pregunto ¿por qué? ¿Qué hiciste? ¿Si pensaba volver con ella?, también lucia se llevó halagos por parte de él, que era una buena chica, que no debería dejarla ir y ese tipo de cosas, yo no quería meterlo más en mis cosas así que no respondí mucho.
Sentí que su llegada era como un tiempo fuera para mí, mi hermano se puso feliz de verla y la empezó a atender, como si fuera una reina, yo los miraba de lejos sonriendo, en verdad hacen una buena pareja, pero si su maestra trataba de lastimarlo, ella entraría en acción y la demandaría. Luego de al menos media hora su hermano salió a comprarle algo a ella y aproveche para quedarme a solas con ella y saldar mi interrogatorio y otras cosas.
- Al fin podemos hablar tranquilas- dije mirándola sin moverme
- Si, aunque ya habíamos tocado este tema-
- Si pero el tema no incluía a mi hermano- dijo
- Cierto, no sabía que era tu hermano pero…- se acercó a ella y coloco su mano en mi cabeza- debía haberlo sabido, tienen una personalidad parecida, sin decir que ambos son igual de atentos…- sonrió mientras acariciaba la cabeza de su alumna, esto provoco que robín frunciera el ceño sonrojada
- Si vas a estar con él solo tengo dos peticiones que hacerte- dijo
- Te escucho- respondió
- No le cuentes lo nuestro y no lo lastimes, de lo contrario el director del colegio tendrá que saber que te metiste con una alumna, ¿entendido?- sentencio robín
- Está bien, tan poco pensaba decirle lo que vivimos a menos que tu estuvieras de acuerdo, cuando te vi por primeras vez ese día que tu hermano me invito, casi me da un ataque, pensé que dirías algo inapropiado, pero antepusiste todo, tus preguntas, tus advertencias por él, eres una buena hermana-
- No le hagas daño o lo lamentaras, aunque sé que está claro pero lo diré de todos modos, nuestros encuentros acabaron para siempre-
- Lo sé, pero si quieres hablar de cualquier cosa o necesitas algo no dudes en buscarme- le guiño el ojo la maestra
- Ahora que lo mencionas, si me puedes ayudar en algo- dijo robín
- es de lucia y Amanda ¿verdad?- pregunto
- Si-
- Te escucho-
- Estoy confundida… veras a mí me ha gustado Amanda desde que la vi por primera vez y a veces ella ha dado indicios de que también le gusto, pero cuando estuve con lucia, llegue a sentir algo parecido a lo que sentía por Amanda, pero ahora Amanda dijo que sentía lo mismo que yo y que terminaría con Nathaniel, incluso nos besamos pero no me siento feliz, de hecho me siento agobiada y a veces lucia se me vienen a la mente… realmente no sé qué hacer… - explico Robín
- Ya veo… creo saber que paso…- dijo pensando- a ti te gusta lucia… ya no Amanda, antes de que me debatas déjame explicarte por qué llegue a eso… primero conociste lo bueno de Amanda y eso fue lo que te gusto, pero la esperaste mucho tiempo y al final te termino decepcionando, ahora sientes solo amistad por ella, pero con lucia fue distinto, primero le conociste lo malo y el convivir tanto en lo malo terminaste al final viendo lo bueno, te gusto lo bueno de lucia y también lo malo, solo que ahora te diste cuenta o más bien aún no quieres admitir, ahora las cosas se complicaron, a ambas les va a costar admitir que se gustan o te va a costar conquistarla, después de todo sé que es diferente a Amanda, por eso te abruma el cariño que ahora Amanda te da, ¿recuerdas mucho a Lucia?- pregunto a lo que Robín asintió algo avergonzada- es porque en el fondo tu cuerpo extraña el cariño que te daba lucia, ustedes son algo opuestas por lo que se deben complementar bastante bien, deben tener opiniones distintas, eso la hace más interesante para ti, que tu amiga, ustedes se parecen mucho, me refiero a Amanda y a ti-
- Yo no soy tonta- rebatió Robín
- No lo eres pero… hay cosas en lo que son iguales, deben tener gustos similares-
- No, solo en series y otras cosas- rebatió aunque entendió el punto
- Si comparas todo lo que te digo, Lucia gana, por así decirlo, te gusta lucia si es que no estas enamorada de ella- finalizo
- Imposible que me guste- negó Robín- ella es manipuladora, en el fondo de su corazón ella es mala, yo digo negro y ella dice blanco, nuestra crianza es distinta- trato de debatir Robín, no quería admitir aquello, tal vez solo estaba confundida, encantada con lo que no podía tener
- Ella no es una chica fácil Robín, por eso te interesa más- dijo su maestra- créeme te hubieras desencantado si ella se hubiera arrojado a tus brazos desde el primer momento, sé que sabes esto-
- Tal vez- dijo
- Incluso tu perro lo sabe- se rio su maestra
- ¿Cómo sabes?- pregunto confundida y asombrada
- Tu hermano me conto, me conto muchas cosas de su hermana menor y de lo genial que haya conseguido una novia distinta y que la complemente-
- Que bocón- se limitó a decir Robín, en aquel momento entra su hermano
- Él está orgulloso de ti- dijo con sinceridad- te quiere mucho-
- Lo sé, gracias por la conversación y por responder mis dudas- agradeció robín, se dispuso a marcharse a su cuarto para pensar en lo que le habían dicho y tratar de aclarar ese mar de confusiones que tenía y así después hablarlo con Lucia y zanjar todo