Cho Kyuhyun lleva tres años de casamiento con Do Kyungsoo, es feliz y lo ama pero últimamente siente su vida un tanto vacía de emociones y con tal de tenerlo ha llegado al punto de tener ciertos encuentros con su secretario desde hace seis meses. Cree tenerlo todo bajo control manteniendo complacidos a su esposo y a su amante pero con lo que no cuenta es que su esposo lo sabe todo.
Llega agotado a su casa después de un “”agotador día de trabajo”, lleva consigo un bonito ramo de flores; es la rutina de siempre después de una sesión de sexo con su secretario Sungmin lleva un regalito para su marido y luego lo “atiende” para mantener a todo el mundo contento.
Entra a la casa…
- Hola amor, ya llegue – dice mientras se quita los zapatos y deja sus llaves en la mesita al lado de la puerta – te traje un obsequio – comenta mientras va a la cocina desanudando su corbata, siempre encuentra a Kyungsoo ahí pero hoy no fue así, extrañado sube hasta la habitación pero la encuentra a obscuras; enciende la luz y a simple vista todo está igual pero no es así, en el lado de la cama que le corresponde a Kyungsoo falta su portarretratos favorito con la foto de su boda. Pero lo que más llama su atención es aquel sobre blanco en medio de la cama; va hacia él y la abre.
De repente siente su cuerpo débil y cae sentado sobre el somier que comparte con Kyungsoo.
Hola Kyuhyun, como te darás cuenta no estoy en casa y la razón es simple; me voy. Lo sé todo, se lo tuyo con tu secretario, de seguro te preguntaras desde cuándo; y la respuesta es desde siempre, lo supe aquel día que llegaste a casa, oliendo a tabaco, perfume barato, y con marcas en tu espalda, no sabía con quién pero me lo hiciste saber una semana después, cuando fui a “sorprenderte” a tu trabajo, como todos me conocen me dejaron pasar sin más y entonces te vi, con él sobre tu escritorio.
¿Cómo pudiste hacerme eso? Yo te amaba, deje todo por ti y por nuestro amor, te lo di todo ¿acaso no fue suficiente para ti?
Y los recuerdos vienen a él…
Cuando se conocieron él no era nada y Kyungsoo lo tenía todo, ambos se habían enamorado el al otro casi a primera vista en aquel bar, las cosas se fueron dando de a poco hasta que Kyuhyun decidió confesarle sus sentimientos en la puerta del colegio de riquillos al que Kyungsoo iba, el acepto aun cuando todos sus compañeros empezaron a murmurar a su alrededor.
Mantuvieron su relación en secreto por meses hasta que sus padres lo descubrieron, los amigos del menor se lo habían contado, intentaron de todo para separarlos guardaespaldas las 24 hs del día, barrotes en las ventanas, cámaras de seguridad en su habitación, le confiscaron el celular e incluso comprometieron a Kyungsoo con otro chico. Pero Kyuhyun era astuto, siempre encontraba la forma de verse con su menor y pasar un momento a solas con él para demostrarle lo mucho que lo amaba y que nada podría con ellos.
Poco a poco los esfuerzos de sus padres y amigos se hicieron polvo cuando la pareja decidió escapar, con la ayuda del hermano mayor de Kyungsoo, SeungSoo, lo lograron. El menor había ido a despedirse de sus amigos pero solo se encontró con puertas cerradas y rechazo. Aun así huyeron de la zona rica y acomodada que Kyungsoo tenía para ir a vivir con su amado en una casa humilde pero bonita a las afueras de Busan; eran felices juntos, pasaron dificultades pero las superaron estando unidos.
¿En qué fue que te falle? Me gustaría saberlo, siempre estuve contigo apoyándote y dándote todo cuanto pude, ¿acaso ese fue mi error? ¿Darlo todo por ti? Ahora sé que nunca fuiste mío en realidad, sabía que en algún momento llegaría a significar nada en tu vida, aun cuando me negaste mil y un veces que eso jamás pasaría, ¿Por qué hiciste eso conmigo? ¿Por qué me diste alas si después ibas a quitármelas y dejar que cayera solo al vacío?
Lo que más me duele es que a pesar de todo lo que has hecho conmigo aún te amo, por más que lo intente no puedo odiarte; tal vez sea estúpido pero me aferro a la idea de que lo nuestro en algún momento fue real, aun cuando tú lo amas a él, oí que se lo decías el día de nuestro aniversario, ese día que decidiste acostarte con él en nuestra cama; mientras yo lloraba del otro lado de la puerta, ni siquiera escuchaste mis sollozos cuando le dijiste esas palabras que antes me las decías a mi cuando estábamos juntos…
Algo dentro de Kyuhyun se rompió al leer aquello, tal vez era su corazón o todo su ser, lo único que sabe es que de repente siente su cuerpo vacío y sin vida, ¿durante todo este tiempo hizo sufrir a Kyungsoo? ¿Por seis meses se ha guardado todo ese dolor solo por estar junto a él?
Todo en él ahora le causa asco, se odia a si mismo por la basura en la que se convirtió, recuerda las veces que estuvo con Sungmin pensando en su esposo, por eso los regalos, de alguna manera intentaba compensar sus faltas con obsequios y cosas vanas en un vago intento de expiar sus culpas, esos “te amo” que salían de sus labios le sabían a hiel cada vez que los decía a Sungmin porque siempre pensaba en su esposo cuando salían de su boca.
Kyungsoo había dejado todo por él, un simple chico que no tenía en que caerse muerto pero que llego a ser alguien por el apoyo y la fuerza que recibió de su pareja. Pudo lograr terminar sus estudios en base a los sacrificio del que era su esposo, porque él lo ayudo cuando no entendía nada, él se quedó en casa a ocuparse del hogar mientras el salía a trabajar de medio tiempo y estudiar a la vez porque no quería que Kyungsoo se esforzara en nada, él quería ser su sustento y el otro acepto aun cuando él sabía no le agradaba para nada ser un “mantenido”, pero accedió a ello solo por complacerlo.
Los recuerdos de su primera vez con Kyungsoo, el casamiento de ambos que sencillamente hicieron con el primer salario decente que Kyuhyun gano cuando le contrataron en aquella empresa en la que con mucho esfuerzo llego como gerente general, puesto con el que gano el dinero suficiente para comprar una casa merecedora de su amado y con el que pudo pagar la merecida luna de miel que según él el menor merecía. La muerte de los padres de Kyungsoo a la cual se le negó la entrada al velatorio y el sufrimiento de este al no poder despedirse de ellos, para luego rematar con el recuerdo de su infidelidad… todas esas memorias llegan a él como balde de agua fría…
Intente mejorar para ti, cambiando mi aspecto o tratando de ser más osado en la cama, pero con el tiempo entendí que nada de eso era suficiente para ti, sabiendo que yo no podía hacer más nada, aun así lo intente, trate de todo por retenerte a mi lado pero cada vez me parecías más inalcanzable. Entonces lo supe, entendí que ya no eras mío y que debía dejarte ir por más que me doliera porque no era justo, no lo era si solamente yo era quien sufría procurando por salvar nuestra relación.
Es por eso que me voy Kyuhyun, te dejo el camino libre para que sea feliz con quien tú quieras, ya no seré un ancla en tu vida, ahora eres libre…
No te molestes en buscarme…
Adiós Kyuhyun
Las lágrimas bañan los ojos del que acaba de terminar de leer aquella carta, y sin prestar atención a la última frase escrita sale corriendo de la habitación para bajar hasta la sala, ponerse sus zapatos y salir a buscar a la única persona que siempre ha amado y que por idiota está perdiendo. Lo necesita, solo necesita a él y ahora más que nunca lo sabe, se ha comportado como un auténtico imbécil haciendo sufrir a la única persona que siempre ocupo todo el lugar que hay en su corazón, da por sentado que tal vez es demasiado tarde pero quiere arreglar las cosas, debe intentarlo aunque sea.
Termina de ponerse su calzado y abre la puerta de su vacía casa solo para encontrarse con un policía allí parado, lleva prisa pero se detiene al escuchar un…
- ¿Es usted familiar de Do Kyungsoo? – por parte del uniformado
- Soy su esposo – responde el, pero esas palabras le salen amargas al imaginar que tal vez ya no lo es.
- Lamento se portador de malas noticias… - entonces su mundo y esperanzas se hacen trizas ante sus pies… las palabras accidente y fallecimiento del joven Do lo destruyen; haciendo que caiga de rodillas al pavimento derramando más lágrimas de las que creía poder.
Aquella situación no hace feliz al oficial pero es parte de su trabajo y debe hacer esto…
- Necesito que venga conmigo a reconocer el cuerpo – Kyuhyun solloza con fuerza, pero se levanta y va con el oficial hasta donde el cuerpo de su marido lo espera.
Kyuhyun se encuentra en el hospital en una habitación fría y lúgubre donde solo están el, el oficial y una camilla cubierta con una sábana esperando por ser descubierta.
- ¿Está listo? – pregunta el uniformado a lo que el otro solo atina a asentir, la sábana es removida y las lágrimas y el dolor se hacen presentes en Kyuhyun una vez más al reconocer el rostro de su amado.
- Es el…es mi esposo – dice el hombre acercándose a la camilla para tomar la fría mano del que yace frente a él. Sin importarle nada abraza el frio cuerpo y llora con más fuerza aun, el oficial ante tan desgarradora escena pone una mano en el hombro de aquel que sufre en un intento por confortarlo.
Se quedan así unos minutos hasta que alguien irrumpe en la habitación, ambos levantan la vista solo para encontrarse con una enfermera.
- Disculpe que interrumpa pero me pidió que le avisara si había alguna novedad…logramos salvarlo señor – dice la mujer mirando a Kyuhyun – salvamos a su hijo…