La luna se encontraba en su punto más alto, Kai sólo la observaba desde el balcón del despacho de Seijuurou.
Todo en su mente se encontraba revuelto al igual que la maraña de sentimientos que se acumulaban amenzando con explotar.
Pero lo más importante es que Zero estaba nuevamente con él y, con aquel pensamiento recalcado; cerró sus ojos por la paz que le inundaba con sólo recordar aquello.
Minutos atrás...
La fiesta había empezado cuando todo el Clan se había reunido en espera del actual líder de la clase nocturna, Kai se mantenía alejado de sus protegidos sin evitar observarlos de reojo.
Y sorprendentemente cuando Kuran Kaname apareció con sus nobles en actitud defensiva, todos los del Clan de la nueva clase nocturna rodearon al joven y el pequeño que debían proteger.
Kaname Kuran te apreciaría que respetaras a mi madre y mi pequeño hermano... - bisbiseo Seijuurou frunciendo ligeramente el ceño ante el atrevimiento de aquellos nobles por mirar mal a los ya mencionados.
Kai al darse cuenta miró de forma pesada a los nobles que bajaron la mirada notablemente intimidados por la escalofriante sensación que sintieron al tener la invernal mirada azulina del demonio.
Lamento haber sido tan descortes sólo no esperábamos percibir vuestra aura tan diferente a la nuestra... - se disculpó Kaname aceptando el error que los impertinentes de sus nobles habían cometido.
Sei-nii no quiero estar aquí - susurró el pequeño Ao mientras pequeñas lágrimas surcaban el borde de sus mejillas.
Kai... Por favor lleva a mi hermano a pasear - ordenó con tono calmado limpiando las lágrimas de su pequeño Ao.
Kai observó al pequeño quién al verle sonrió con dulzura para luego elevar sus manos en petición de ser llevado en brazos.
Vayamos a jugar Kai-chan - pidió ya en brazos del mencionado quién para sopresa de todos sonrió asistiendo para marcharse con el pequeño.
Bueno... Finalmente me presentaré - dijo con tono parco el joven - mi nombre es Seijuurou el líder del Clan que mantiene su línea consanguinea demoníaca pura descendiente de Satanás, primer rey de las tinieblas - finalizó mientras miraba con indiferencia al Clan Kuran.
Aquel Clan desapareció cuando los cazadores rebeldes iniciaron la masacre de los vampiros sangre pura - susurró Shizuka.
Nos hemos mantenido a salvo en Rusia ya que la prioridad en aquel entonces era velar por el bienestar de mi madre - comentó observando a Shizuka quien bajo la mirada tratando de contener las lágrimas.
¿Vuestro Clan no posee nombre? - inquirió curiosa Yuki quién se encontraba tomada de la mano con Akira.
Ya que nuestra descendencia realmente no es de la tierra y somos denominados demonios, no vemos en la necesidad de identificarnos... Nuestros nombres fue un regalo de parte de nuestro señor- comentó lo último con tono reticente.
Seijuurou se enderezó para tomar gentilmente a Zess de la mano mientras le sonreía con mucha ternura- ¿bailas la primera pieza conmigo madre? - inquirió.
Por su puesto - aceptó el hermoso y misterioso joven.
Los nobles de la familia Kuran realizaron una reverencia de disculpa mientras Zess observaba con serenidad aquel acto.
El aura de Zess era increíblemente atractiva, era oscura pero poseia una envolvente sensación de confort que te nublaba la mente.
Si nos disculpan, nos retiraremos al salón para disfrutar de la celebración - comentó Zess con tono suave y delicado.
Fue escoltado por sus acompañantes junto a Seijuurou.
La clase nocturna se quedó embobada e incluso Kaname y Shizuka observaban al líder junto a su madre.
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Kai se dejaba guiar por el pequeño Ao, tener su dulce aura era muy reconfortante.
Kai-chan me alegro que estés sonriendo - comentó el pequeño mirando con amabilidad al mayor, Kai sabía que su amo estaba de regreso pero de forma diferente.
Se postró de rodillas y asintió, el pequeño Ao se quedó frente a él.
Repentinamente Ao se desvaneció y al levantar la mirada El color de su mirada había cambiado junto a su expresión.
El pequeño se acercó y abrazo a Kai - Se que a sido muy duro para ti Kai, pero gracias por haberme esperado - susurró sintiendo al mayor relajarse.
¿podrías seguir siendo mi guardián Kai? - inquirió acunando entre sus manos el rostro del mayor.
Toda mi vida Zero - susurró solemnemente.
Tuve tanto miedo Kai - confesó temblando.
Tu alma está fragmentada - comentó Kai al recordar a Zess y la sensación que le producía. - he fallado - sentenció.
No es así... Yo tomé esta decisión, soy mis memorias y mi alma materializadas, puedo usar a Ao para no perder la cordura, Zess es el portador de mis memorias... mi complemento y probablemente abría muerto de no ser por Seijuurou - dijo con un susurro quedito.
Zero yo...-
Kai por ahora mantendremos a los demás al margen, hemos regresado para atraer a Rido y él... -
Kai al oír aquello sintió su mirada tonarse indigo - esta vez déjame pelear a tú lado -pidió - con ayuda de Seijuurou puedo unir tu alma y cuerpo nuevamente - dijo mirando a los ojos a su amo.
Kai... También contamos con la ayuda de - antes de seguir ambos pudieron sentir miles de presencias extrañas.
Kai tomó en brazos a su pequeño amo y se colocó en posición defensiva.
Kai, debemos ir con Zess y renovar el contrato - indicó suave el menor.
Yo e jurado siempre mi lealtad a ti Zero... Con tu sola presencias de poder liberar las restriciones de mi poder - susurró Kai.
Kai te doy libertad - ordenó con voz firme.
Kai sintió como las marcas de su cuerpo desaparecían y el aura de su poder recorría su cuerpo con libertad, sonrió con maldad y cuando miles de seres deformes se acercaron, con un movimiento rápido acabó con un gran grupo.
De pronto se oyeron unos conocidos disparos que el moreno conocía perfectamente y se dirigió con él menor en brazos al lugar donde se oían los disparos.
Ahí en medio de un gran grupo vio a Takamiya Kaito quién mantenía un arma en mano y una especie de guadaña en la otra matando con perfecta precisión a los enemigos.
Kai... Él también sólo obedeció órdenes mías - detuvo Zero al ver lo que planeaba Kai.
Es hijo de Rido cómo sabes que no te tricionará - replicó con tono enfadado.
Kaito sólo obedecía... aquel día cuando Rido me llevó con "Él"... Kaito se apareció y me dijo que debía darle tiempo para reunir a Seijuurou y los demás, cuando fui derrotado... Kaito cuidó de mí y me protegió de Rido para luego escapar conmigo una vez lejos de la Academia Cross y el pueblo - contó el menor.
Kaito me brindó mucha de su sangre y energía para poder realizar el hechizo con ayuda de Seijuurou, además él - Zero se detuvo y Kai no supo cómo interpretar aquel silencio.
Kaito terminó y se giró a ambos, una cinta cubría sus ojos, su cabellera estaba más larga y cubría parte de la cinta.
Él me dio sus ojos cuando ...- se detuvo- Cuando Asari me arrancó los ojos - finalizó con dolor, Kaito había sido muy temerario para alejar a Rido y a Asari de su familia debido a que él se lo había pedido.
Ni siquiera le importó verse cómo el malo con tal de poder ayudarle.
Se sentía en deuda con él.
Zero-chan no pongas esa cara cada que me miras, no podré ver pero conociéndote puedo imaginar tu expresión - dijo el joven con voz cansada.
Kaito - llamó una voz desde la oscuridad - no debes adelantarte pequeño mocoso - dijo la voz mientras un bruma espesa se formaba en medio de los tres dejando ver a un hombre apuesto de ojos bicolor y larga cabellera entre castaña con puntas oscuras.
Debo dejar el cuerpo de Ao... No quiero causarle daño, mi cuerpo no me permite estar mucho tiempo fuera - Habló Zero.
Kai asintió y cargó al pequeño quien se desvaneció por unos segundos para abrir los ojos confundido.
¿oto-sama? - inquirió al ver a su padre.
Kai le dio el niño a su antiguo compañero Ryujiirou, ambos habían sido grandes generales hasta que fue sellado y su amigo traicionó a Satanás por el amor de un joven descendiente de un linaje de vampiros sangre pura.
Debemos irnos ryujiirou - apresuró Kaito al sentir que se acercaban a ellos.
Ve tú a cuidar del cuerpo de Zero, yo me presentaré a los mocosos insolentes indignos de la protección de nuestro señor - comentó entre dientes el demonio.
¿cómo has terminado sirviendo a Zero? - inquirió Kai.
Èl le salvó la vida a mi esposo y gracias a él Ao pudo nacer - respondió con seriedad.
Zero había llegado con Kaito en un terrible y débil estado, Seijuurou había reconocido a Kaito pues su padre y Zero se habían conocido hace muchos años cuando el joven pelo plata había salvado a su madre quien había salido lastimado por la pelea con unos cazadores. Seijuurou sabía que su padre había jurado tenerle un gran favor al pequeño niño de la Luna.
Cuando su padre vio al pelo plata aquel día, el joven bicolor supo que Ryujiirou estaba muy furioso.
Zero se veía muy débil cosa que no le impidió detectar que Zess nuevamente se hallaba en problemas y era que pasaba por un difícil embarazo.
Kaito recordaba con claridad como Zero había pedido traer a Zess ante él y había dado su sangre al esposo del demonio para que no perdiera al bebé.
Luego de ello Zero cayó en un profundo sueño.
Ryujiirou había jurado lealtad absoluta a Zero desde aquel momento y a él se le sumó todo el Clan.
Zero podía conectar de alguna forma con Zess y Ao. Mediante ambos había hecho muchas cosas pero se medía al conectarse ya que los cuerpos de ambos antes mencionados no soportaban la conciencia o lazo que Zero creaba.
Habían tratado de dar su sangre para que Zero despertara pero un día el mismo albino les había revelado que sólo la sangre de Kai lo despertaría ya que tenían un contrato que lo hacía respetar siempre las cláusulas impuestas.
Prepararé todo para el regreso de nuestro señor - anunció Kaito - tú pon al tanto a los demás sobre lo que hemos descubierto respecto a Rido y Asari - indicó dirigiéndose al demonio bicolor.
Ryujiirou asintió y los tres esperaron a que los demás aparecieran cosa que no demoró pues el primero en aparecer fue Seijuurou junto a Zess.
Están atacando la Academia... Al parecer buscan a Zero - comentó el chico - e enviado a los demás y puedo de ducir que Kaito está en camino para cuidar de Zero - dijo mientras a lo lejos de oían disparos y golpes.
Debemos poner a salvo a Ao y Zess - ordenó Ryujiirou - lleva a tu hermano y tú madre con Zero - ordenó a su hijo para luego mirar a Kai - querido amigo se que no pude ayudarte pero te pido que me ayudes a mantener a salvo a mi familia - pidió al moreno.
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Shizuka y sus hijos peleaban en contra de las criaturas mientras que los nobles del círculo interno(a excepción de Aidou y su pequeño) protegían que las bestias no se infiltraran en la zona diurna.
Kaname estaba ayudando a eliminar a un gran grupo, Yuuki también ayudaba en lo que podía.
Cross y Yagari se habían puesto serios así que mataban a diestra y siniestra a las criaturas que amenazaban su hogar.
Kaname había terminado ya de eliminar al gran grupo así que con una astilla de la corteza terrestre eliminó a una bestia que amenzaba a su hermana.
El de ojos borgoña escaneo el lugar con la mirada y se percató que la nueva clase nocturna se había esfumado.
Su pecho punzó con una sensación poco familiar.
Éstas bien Onii-sama - inquirió preocupada Yuki al ver a su hermano un poco distraído.
Estoy bien Yuuki - respondió sereno.
Cuando al parecer cesaron los ataques pudieron sentir que en el ala nocturna la singular presencia de la nueva clase estaba reunida.
Tal vez estén protegiendo al pequeño y su madre... Ellos de alguna forma poseían algo muy diferente a los demás - susurró Cross con una extraña familiaridad retumbamdo en su pecho.
Kaname notó que Shizuka se veía acongojada, la mujer le observó y luego desapareció entre el bosque.
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En alguna parte de Kioto se hallaba en un salón un hombre de cabellera cobriza en medio de muchas mujeres, el hombre bebía de una de las tantas mujeres detrozando su cuello para luego tirarla a un lado como si fuera un muñeco.
Rido... Has localizado ya a Zero - dijo un pequeña voz entrando al lugar.
Por quien me tomas - inquirió con notable sarcasmo.
Por alguien que dejó escapar a su hijo con mi prisionero - discrepó un pequeño.
Ese pequeño mocoso pagará por ello, te lo aseguro - prometió frunciendo un poco el ceño al recordar como había confiado en el traidor.
Te adrvetí que nos traicionaría pero estabas tan confiado - dijo el pequeño con malicia.
Bien... Espero que guardes tu buen humor para cuando tengas que volver a lidiar con tus queridos amiguitos con el cuerpo de un niño - comentó Rido con diversión.
De que hablas - exigió saber al mayor.
Hay un demonio sirviente de Zero que se a liberado y hace unos días mientras seguía la presencia de Zero me encontré con un muy querido amigo tuyo - dijo Rido sin mucho interés.
El pequeño se acercó a Rido y mordió su muñeca para ver sus recuerdos.
Ya veo... Esto me trae tanta nostalgia - susurró con acidez el niño - quien diría que tendríamos nuevamente que vernos las caras- susurró antes de salir del salón pues la vista del lugar era desagradable.
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Amida-Nyorai
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Kai- llamó una voz sacándolo de su estupor.
Kaito... Deberías estar descansando - dijo con voz suave... Sentía una gran admiración al gesto del castaño.
Tú... - bufó Kaito inclinando el rostro provocando que largos mechones se esparcieran a su rostro; tenía claramente una mueca de insatisfacción en el rostro - no esperaba que tu actitud cambiara al saber la historia detrás de mis actos y esto - dijo con voz divertida y apagada mientras tocaba el vendaje que cubría su rostro.
No seas idiota, te e agradecido así que no pienses lo contrario - discrepó el más alto - aunque debo admitir que ... - se acercó al de cabellera larga y tomó un mechón para depositar un beso - el cabello largo te sienta bien Bakaito - susurró en el oído del mencionado para alejarse.
Kaito se quedó parado mientras cubría el rubor de su rostro - estúpido - susurró con él corazón latiendo a mil.
Se alejó del ventanal y se acercó al hermoso ataúd de mármol blanco con una tapa de cristal donde un durmiente joven de cabellera plateada se hallaba durmiendo.
Perdón Zero... ¿podrías no interferir si tus memorias con Kai regresan al despertar? - pidió con voz quebradiza.