Aome, su hermano y amigos/as, estaban jugando en las computadoras, que el cyber de su hermano tenía, cuando algo luminoso aparece detrás de ellos, lo cual los asusta:
Abi -¿Qué mierda está sucediendo?-
Aome -No lo sé...-
¿? -Eh de cumplir tres deseos... sus deseos se harán realidad si me los piden-
Abi -En ese caso... conviértenos en saiyajines-
¿? -Eso es fácil-
Sonia -Ay... que linda cola-
Shey -Si, la verdad está muy bonita-
Abi -Shey pareces un maldito homosexual-
Shey -Cállate-
¿? -Su segundo deseo-
Aome -Em... vivir en el mundo de Dragon Ball... dios como amo a esos tipos-
Sonia -Y nuestro tercer deseo es tener más dinero que Bulma en ese mundo-
¿? -Sus tres deseos están cumplidos... ahora me retiro-
Aome, Abi y los demás fueron transportados a una ciudad, era muy transitada, todo el mundo los miraba muy raro.
Aome -¡¿Qué diablos miran chismosos?!-
Abi -Aome sé más cortés-
Aome -Seré cortés con quien se lo merezca-
Sonia -Oigan, se dieron cuenta de que no pudimos empacar nada... y que ahora que somos saiyajines, podemos morirnos de hambre-
Keriim -Pero tenemos más dinero que Bulma... no lo olvides...-
Danna -Miren... allá arriba-
Alguien había pasado volando, y parecía apresurado.
Aome -Hay que seguirlo, a lo mejor nos guía a un buen lugar-
Abi -Si-
Aome, Abi y los demás siguieron al saiyajin que iba apresurado, este no se dió cuenta de las presencias, hasta que llegaron a un lugar en donde se vieron más relajados, hasta que el saiyajin habló:
¿? -¿Qué quieren aquí?-
Aome -Descuida... somos como tú-
¿? -¿Cómo que son como yo?.... ¿que diablos?-
Aome -O.O... aguarda, aguarda... ¿eres Vegeta?-
Vegeta -Siempre he sido Vegeta... no sé que te sorprende-
Aome -Ah... siempre soñé con conocerte, mira esos brazos, y esos pectorales-
Abi -Aome... ¡Aome ya basta!-
Aome -Lo siento-
Vegeta -¿Es tu novio?-
Aome -De echo es mi hermano mayor-
Vegeta -Entiendo... ¿de dónde diablos salieron ustedes?... nunca los había visto por aquí-
Keriim -Venimos del planeta Nibiru, somos Annunakis-
Vegeta -No entendí nada de lo que dijiste... pero, entiendo que hay saiyajines en todas partes de la galaxia-
Vegeta examinaba a todos mientras que Aome y Mika lo miraban profundamente enamoradas, cuando Mika le preguntó por qué iba tan apresurado.
Vegeta -Es que Bulma tiene problemas conmigo, y ya no soporto que me grite...-
Aome -Tenemos mucho dinero, podríamos comprar una casa, o materiales y construirla... y podrías vivir con nosotros-
Mika -Es cierto... la pasarías muy bien- le guiña un ojo a Vegeta.
Vegeta -Tienen razón... son saiyajines, podría entrenar con ustedes, ya no más regaños, ya no más Bulma... es perfecto, ¿qué estamos esperando?-
Aome/ Mika -Perfecto-
Decidieron comprar una casa, no en la ciudad en donde vivía Bulma, sino en la ciudad más cercana, lo bueno era que Vegeta estaba de buen humor, lo malo era que debería entrenar a los nuevos saiyajin para que den batalla durante horas.
Al otro día:
En la c.c:
Goku -Bulma, ¿sabes en dónde está Vegeta?-
Bulma -Hace dos días que no viene a casa, y no me pregunto por qué... aun que debería hacerlo... ¿podrías encontrarlo por su ki Goku?-
Goku -Es cierto... bien... ahí está-
Luego de usada la teletransportación:
Vegeta estaba luchando con una chica, quien daba mucha pelea y por más agitada que estuviera seguía luchando como si nada.
Vegeta -Vamos Mika, esfuérzate un poco más... quizá así logres llegar a súper saiyajin-
Mika -Eso intento maestro... pero no puedo, no siento tanta furia recorrer mi cuerpo-
Vegeta -Es tu mente la que debe estar llena de furia, no tu cuerpo-
Goku -Vegeta-
Vegeta -Dime que no es cierto, dime que no es cierto-
Continuará.......................................................................