Comienzo de tour. Primer día.
Esa tarde apenas llegamos a Sapporo todos fuimos directo al hotel a dejar nuestras cosas. Pero él es tan impaciente:
Takashi:- ¿Dejas mi maleta en la habitación, por favor?- juntó ambas manos frente a su cara e hizo puchero.
Nosotros siempre compartimos habitación, así que no me costaría nada llevarla:
Tomo:-Está bien, pero ten cuidado-
Takashi:- ¡Gracias!-
Depositó un tierno beso en mi mejilla y salió del hotel.
A decir verdad… es un tanto incómodo cuando es así de cariñoso y amable conmigo. No es que no me guste al contrario…
Al contrario.
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Como ya era entrada la tarde decidimos que ese día no ensayaríamos, pero para recuperar, mañana empezaríamos bien temprano en la mañana.
La habitación era hermosa y tenía buena vista a las transitadas calles, por lo que aproveché ese espacio y panorama que me proporcionaba la ventana para fumar sin que nadie molestase.
Pero ya había anochecido, y Takashi aún no había llegado. Me pregunto dónde estará…:
Takashi:- ¡Ya llegué!- entró a la habitación estruendosamente. Que oportuno.
Tomo:- Justo estaba pensando en ti- dije dándole una calada al cigarrillo.
Takashi:- ¿Ah sí?- dejó unas cuantas bolsas sobre mi cama.
Tomo:- Tardabas mucho-
Se acercó a mí coquetamente y haciendo un lado el cigarrillo acercó sus labios a los míos en un ligero toque, apenas perceptible:
Takashi:- Tomo-chan es muy dulce-
Suspiré:
Takashi:- Iré a ducharme, ¿los demás?-
Tomo:- En la habitación supongo-
Takashi:- ¿Ya cenaron?-
Tomo:- No lo sé, no los vi-
Takashi:- ¿Por qué no vamos a cenar todos juntos?- asentí.
Tomo:- Iré a buscarlos entonces-
Takashi:- Bien- dijo desapareciendo por detrás de la puerta del baño.
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Yoshiatsu:- ¿Cuánto pasó ya? ¿Veinte minutos?- dijo fastidiado.
Tomo:- Ya sabes cómo es…-
Yusuke:- ¿Y si lo vas a buscar?-
Resoplé y de mala gana me levanté de la cama de vuelta a la habitación. Que chico…:
Tomo:- ¡Takashi! ¿Cuánto más piensas-…?-
Me quedé mudo:
Takashi:- Lo siento, no me di cuenta que estaba tardando mucho-
Me observó algo sorprendido por la forma en la que entré a la habitación. Pero más sorprendido quedé yo al encontrarlo apenas cubierto con la toalla:
Tomo:- ¿Puedes taparte por favor?- cubrí mis ojos con una mano y lo escuché reír.
Takashi:- Oh vamos, no hay nada en mí que no hayas visto en ti-
Tomo:- ¡Eso no importa!- me sonrojé- ¡Cúbrete!-
Takashi:- ¿Tomo-chan tiene vergüenza?-
Sentí sus manos apartar la mía, y sus enormes ojos me miraban directamente:
Tomo:- ¿Qué haces?-
Takashi:- Que adorable- sonrió divertido- Me cambio y vamos-
Tomo:- Apúrate- cerré la puerta sonoramente.
Es tan molesto que juegue así…
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Una vez listos todos, salimos del hotel a recorrer las calles de la ciudad. Ninguno había estado en Sapporo antes, por lo que nos dejamos llevar por la pinta de los lugares:
Yoshiatsu:- No creí que fuese tan pintoresco-
Tomo:- ¿Será caro?-
Takashi:- ¡Miren!-señaló- Ese se ve lindo, ¿vamos?-
Yusuke:- Pero se ve caro también-
Takashi:- ¡Vamos!-
Sorpresivamente tomó mi mano y me jaló con él:
Tomo:- Espera-
Takashi:- Si no avanzamos ellos tampoco lo harán, vamos Tomo-chan- sonrió volviendo la vista al frente.
Cuando entramos el restaurante no se veía tan sofisticado como por fuera, quizá tampoco fuese costoso:
Takashi:- Sentémonos ahí- me arrastró hasta la mesa.
Casi apenas tomamos asiento una mesera se acercó a dejarnos los menús:
Yoshiatsu:- ¿Qué van a pedir?-
Takashi:- Todo suena tan bien…-
Tomo:- Quiero ramen-
Takashi:- ¿Ramen? ¿Para eso vienes a un lugar así?-
Tomo:- Yo no elegí, me arrastraste-
Takashi:- Ya, entonces pediré tonkatsu-
Tomo:- ¿Bromeas? Y luego te quejas de mí- me sacó la lengua y sonrió divertido.
La mesera se acercó a nosotros nuevamente y pidió las órdenes. Pero daba igual, sea lo que sea que pidamos luego terminamos probando la comida de todos:
Takashi:- ¡Está muy rico!- exclamó sorprendido.
Pero si, a pesar de que el lugar no es muy vistoso por dentro, y los precios son asequibles, no pierde la calidad:
Takashi:- Prueba- acercó un trozo de fritura a mi boca- Di “Ah”- los otros dos rieron.
Tomo:-Bobo…- mascullé- ¡Aaah!-
Me miró expectante:
Tomo:- Mm… si es muy rico-
Takashi:- Dame de eso- metió sus palillos en mi plato.
Tomo:- Eres un asco-
Takashi:- Yusuke, prueba-
Yusuke:- Aaah-
Yoshiatsu:- El resto de la gente debe pensar que somos un asco-rió.
Tomo:-Y no se equivocan…-
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Volvimos a nuestras habitaciones ya entrada la noche, estábamos muy llenos pero él no se veía para nada cansado:
Y/Y:- ¡Buenas noches!- saludaron entrando a su habitación.
Takashi:- Buenas noches-
Tomo:- Nos vemos-
Portazo. Suspiré cansado y cuando levanté la vista, él estaba allí parado, mirándome con esa sonrisa encantadora y ojos de mirada inocente que posee. Que para nada reflejan cómo es él:
Tomo:- ¿Qué?-
Takashi:- Aún no tengo sueño-
Tomo:- ¿Y qué?-
Takashi:- Hagamos algo- se sentó en mi cama cruzando las piernas.
Tomo:- Juguemos a ver quién se duerme primero- me tiré sobre la cama abrazando la almohada, haciendo caso omiso a su berrinche por mi propuesta.
Takashi:- ¡Hagamos algo!-
Empezó a brincar simplemente por el mero hecho de molestar y paró cuando escuchó que algo cayó al piso:
Tomo:- ¿Qué tiraste?- miré curioso.
Eran unas cuantas cajas de dulces y entre ellas había otra bolsita, pero de tela.
Tomó las cosas ordenándolas nuevamente, pero la bolsita de tela la miró por unos cuantos segundos. Sonrió sagaz. Me miró peligrosamente…:
Takashi:- Mira, compré algo que me resultó muy curioso cuando lo vi- se sentó sobre la cama y acercó la cosa a mí.
“Dices” decía la etiqueta:
Tomo:- ¿Nunca en tu vida viste dados?-
Takashi:- Tonto, mira-
Abrió la bolsa y dejó los dejó rodar.
Eran dados de seis caras comunes.
O aparentaban ser comunes…:
Tomo:- ¿En serio?- lo miré aturdido, pero él solo sonreía de la misma forma que antes.
Takashi:-No pensaba usarlos, pero ya que estamos aburridos… ¿jugamos?-
Tomo:- Ni en joda-
Takashi:- ¿Tienes miedo de perder?-
No me gusta que me desafíen, pero esto definitivamente no era una buena idea:
Tomo:- En serio, no-
Me levanté de la cama pero él me sujetó del antebrazo:
Takashi:- Solo diez tiros, y si ganas, no volveré a molestarte… Tomo-chan- arrastró las sílabas de mi nombre.
Solo diez tiros. No puede resultar tan mal.
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“Solo diez tiros”
Por favor… si este tipo logra que acabe en diez tiros dejo que haga conmigo lo que quiera por el resto del tour:
Takashi:- ¿Quieres ser quien dé el primer paso?-
Tomo:- Para nada, tú fuiste el de la idea- rió.
En qué carajo estaba pensando…:
Takashi:- “Besar”/”Cuello”-
Tomo:- ¿Y se supone que lo haces tú o lo hago yo?-
Pasó una de sus manos por mi mejilla y acercó su rostro a mi cuello:
Takashi:- Yo tontito- soltó una risilla.
Sus labios se sentían suaves y cálidos. Subió hasta besar por debajo de mi oreja y luego hasta llegar a la clavícula:
Tomo:- ¿No es solo un beso?- sonreí, su aliento me hacía cosquillas.
Takashi:- Quince segundos- volvió a su posición frente a mí y me extendió los dados- Tienes quince segundos para hacer lo que los dados digan-
Tiré los dados sin darle muchas más vueltas al asunto.
“Besar”/”Piernas”
Esto se pondría jodido:
Takashi:- Uy, con lo que me gustan los besos-
Tomo:- ¿Esto va en serio?- creo que estoy temblando.
Takashi:- Vamos…- subió sus piernas a la cama sonriendo seductoramente- Sin miedo… esto queda entre nosotros-
Tomé el extremo de su pantalón y lo bajé hasta retirarlo por completo. No es la primera vez que veo sus piernas, de hecho él suele usar faldas, pero… esto era diferente. No quería mirarlo a la cara, probablemente me moriría de vergüenza:
Tomo:- ¿Quince segundos?-
Takashi:- Quince segundos-
Alcé un poco una de ellas y besé su tobillo, para poco a poco ir avanzando.
Su piel era muy suave, realmente a veces dudo que sea un chico:
Takashi:- Me haces cosquillas- rió.
Tomo:- Calla…-
Pasé a la otra pierna y besé la cara interna de su muslo. Si vamos a jugar entonces lo hacemos bien:
Takashi:- Ya… se acabó el tiempo- lo mordí ligeramente antes de dejarlo- No puedes hacer eso, respeta las reglas del juego- sonreí ladino- Mi turno-
“Morder”/”labios”
Rió:
Takashi:- Sería cruel si solo te muerdo- tomó mi rostro desde el mentón- Y tú rompiste las reglas, así que tengo derecho al menos una vez también-
Sin duda sentir sus labios sobre los míos era mucho mejor que en el cuello. Miento si digo que no he deseado besarlo en otras ocasiones, y es mucho mejor de lo que esperaba.
Sus dientes hicieron presión suavemente en mi labio inferior y pasó la punta de su lengua por el mismo lugar.
Una vez pasados los quince segundos nos separamos:
Takashi:- Quién diría que Tomo-chan sería tan besable- reí ligeramente- Parece que ahora le estás tomando el gusto…-
Tomo:- Quizá- tiré los dados.
“Lamer”/”pecho”:
Takashi:- ¡Ah, eso significa que vas a verme casi desnudo!- dijo dramático.
Tomo:- Ya lo hice hace un rato-
Takashi:- Y te horrorizaste-hizo puchero.
Tomo:- No me horroricé-
Takashi:- Claro que si, incluso te tapaste los ojos. Ni que fuera tan feo…-
Lo tomé del brazo y lo jalé hacia mí:
Tomo:- Ven-
Me miró algo sorprendido cuando lo senté a horcajadas sobre mí:
Takashi:- ¿Qué haces?- metí mis manos por debajo de su remera para retirarla.
Tomo:- Cumplir con lo que dicen los dados-
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Takashi:- Mm…- enredó sus dedos en mi cabello cuando sintió mi lengua pasar sobre uno de sus pezones- Ya se termina el tiempo…-
Tomo:- No me importa-
Takashi:- ¿Eh?- apoyó sus manos en mis hombros y soltó un quejido cuando mordí su costado izquierdo.
Tomo:- Que no me importa-
Coloqué mi mano en su nuca mientras que con la otra lo sujetaba firmemente desde la cintura y pasé del pecho a sus labios. No parecía querer oponerse a ello tampoco.
No tardó en colar su lengua dentro de mi boca para entrelazarla con la mía, realmente se sentía muy bien besarlo. Lo mordí ligeramente, besé su cuello y a medida que descendía fui dejando unas cuantas marcas. Pasando por su abdomen, llegando al inicio de la tela de sus bóxers, acariciando el largo de sus piernas con la yema de mis dedos:
Takashi:- Que bueno eres con las caricias- suspiró esbozando una sonrisa- ¿Puedo también?-
Se reincorporó frente a mí y pasando su lengua por mi cuello llevó sus manos al extremo de mi remera apresurado por quitarla.
El contacto de la piel de su pecho contra el mío era excitante, aunque dudo poder estar más excitado de lo que ya me siento:
Takashi:- Tomo-chan parece estar disfrutándolo- volvió a sentarse a horcajadas sobre mí, moviendo su cadera lo suficientemente cerca como para que su entrepierna roce con la mía- Dime… ¿hasta dónde quieres llegar?-
Tomo:- Hasta donde tú quieras-
Sonrió lascivo.
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Antes de volver a echarlo sobre la cama desaté su cabello:
Tomo:- Me gusta mucho como te luce suelto- deposité unos cuantos besos en su cuello.
Takashi:- Que halagador-
Ahogó un suspiro cuando bajé mi boca por su pecho, jugando con sus pezones y acariciando sus piernas con una de mis manos.
Seriamente no entiendo cómo un juego de solo diez turnos terminó en esto, pero tampoco siento ganas de dejar esto acá. La verdad… si, las ganas de follarme a Takashi me consumen:
Tomo:- Solo lo preguntaré una vez- me coloqué sobre él mirándolo a los ojos- ¿Quieres continuar?- abrió los ojos sorprendido- No me detendré, es todo lo que diré-
Sus labios se separaron ligeramente aún sin borrar la expresión de su rostro. Pero bastaron un par de segundos para que la típica sonrisa suya volviera:
Takashi:- No me negaré a nada- se abrazó a mi espalda clavando ligeramente las uñas en los omoplatos.
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Takashi:- Aah…- suspiró mordiendo su labio inferior.
Pasé mi lengua a lo largo de su miembro jugando a estimularlo con el piercing, lo cual al parecer daba resultado. Los pequeños gemidos que escapaban de su garganta y la expresión de su rostro por los espasmos de placer… ¿Quién diría que se vería tan adorable de este modo?:
Takashi:- Mm…- llevó su mano a mi cabello jalándome hacia abajo.
Si así lo quería entonces, ¿por qué no complacerlo?:
Takashi:- ¡Aah, Tomo!- gimió alzando la voz.
Pasé mi lengua por su entrada e introduje lentamente un dedo:
Takashi:- Ah… espera, duele- se quejó mirándome adolorido.
Lo retiré lentamente y volví a pasar mi lengua por allí, humedeciendo la zona lo más posible, deleitándome con sus suspiros:
Takashi:- Je… jamás habría imaginado…- suspiró- Que esto pasaría…- cubrió su rostro con el antebrazo esbozando una sonrisa.
Me coloqué sobre él haciendo a un lado el brazo. Sus mejillas estaban totalmente sonrojadas:
Tomo:- Yo tampoco, pero no me disgusta para nada-
Besé su mejilla y poco a poco volví a introducir mis dedos. Ahora no se quejaba más.
Buscó con insistencia mis labios, aferrándose a mi espalda cada vez que movía mis dedos en su interior, soltando gemidos a milímetros de mi oído:
Tomo:- ¿Aquí?-
Takashi:- ¡Aah!, si sigues así voy a correrme- masculló y no pude evitar sonreír victorioso.
Tomo:- Claro que no- atrapé sus labios con los míos- No aún…-
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Sus gemidos haciendo eco en las paredes, el calor del interior de su cuerpo y la magnífica vista que tenía de él, eran más que suficiente para hacer del ambiente en ese cuarto perfecto. Jamás me habría imaginado teniendo este tipo de relación con él a pesar de todo; de los acercamientos, de los “besos” que suele darme en tono de juego, de fingir para los fans…
Jamás pensé que pasaría de un “fingir”:
Tomo:- Te ves perfecto- acaricié con una de mis manos su mejilla y deposité un beso en la otra, mirando embobado sus expresiones llenas de placer.
Takashi:- Qué dices…- soltó una risilla.
Me repuse y lo alcé conmigo sentándolo a horcajadas. Dejó salir un suspiro y rápidamente siguió moviendo sus caderas, aferrándose firmemente a mis hombros.
Enredé mis dedos en su largo cabello sujetándolo con algo de fuerza, volví a su boca y acorralándolo entre mi cuerpo y la pared lo penetré unas cuantas veces más, terminando en su interior y él en el vientre de ambos.
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Takashi:- Estoy agotado…- se tiró sobre mi cama una vez terminó de secarse el cabello- El baño me dejó más cansado-
Tomo:- Vamos a dormir, ya es muy tarde- intenté apartarlo a un costado pero parecía peso muerto- Ve a tu cama-
Takashi:- No…-
Tomo:- Te tiro al suelo- lo empujé con el pie.
Pero antes de caer, se sentó de golpe y quedó de frente mirándome a los ojos:
Takashi:- Gané, recuerda lo que apostamos-
Tomo:- ¿Eh?-
Takashi:- Si aguantabas diez tiros yo no te molestaba más. Pero gané, así que me toca pedir-
Me dejó mudo:
Tomo:- Mm… ¿y qué quieres?- mascullé desconfiado.
Sonrió alegre, corrió un poco las sábanas, y se acomodó a mí lado bajo las mismas dándome la espalda:
Takashi:- Dormiré con Tomo-chan por el resto del tour- rió.
Tomo:- ¿Qué?-
Takashi:- Lo que oíste. A dormir- cerró los ojos y no dijo más. Resoplé.
Tomo:- Más te vale que te quedes quieto mientras duermes-
Me acomodé detrás suyo amoldándome a su cuerpo, y apoyando mi rostro sobre su nuca le susurré “Buenas noches”.