KYUNGSOO:
Estaba sentado en mi mesa desayunando mientras escuchaba un poco de música, mi vista seguía en aquel jarrón de flores azules “admítelo no lo puedes olvidar”
“You make it look like it's magic
Because I see nobody, nobody but you
I'm never confused”
Aquella canción era muy conocida para mí, me levante para ir hacia el lavatorio a lavar los servicios mientras la cantaba; tenía mucho miedo de verlo al rostro “tienes que admitirlo Kyungsoo te gusta ese hombre”, el tenia algo que me llamaba demasiado, me atraía y eso me daba mucho miedo… debía admitirlo, el que me engañaran antes me había provocado ciertos temores, rencores y desconfianzas.
“Kyungsoo ¿Por qué tienes miedo a hacerlo conmigo? ¿Acaso no soy tu novio?”
“Kyungsoo, no vas a encontrar a otro hombre como yo; te van a rechazar por ser alguien que no sirve en nada, ni siquiera en darle un poco de placer a tu novio…”
“Kyungsoo ¡porque demonios no has llegado temprano!”
“¿piensas estudiar? ¿Tu? Alguien que ni siquiera puede mantenerse estable económicamente”
“Soy tu único sustento… me debes demasiado así que solo obedece”
Me observaba en el espejo de mi habitación, estaba llorando al recordar a ese ser que me hizo daño, que me hirió para siempre.
“¿Cómo? ¿Qué has dicho?... dime que es mentira”
Respire profundo no debía llegar de esa forma al trabajo, no hoy… el plan de hoy era que no debía mirarlo a los ojos, no debía prestarle atención a Kai; tenía que mentalizarme el cómo ignorarlo “no quiero volver a sufrir”.
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Kai como siempre andaba revoloteando alrededor mío, necesitaba alejarme lo más rápido lo cual no funciono; estaba hablando el que quería ser amigo mío ¿Qué le ocurría?; continúe ignorándolo olímpicamente hasta que escuche mencionar que conocía a todos.
A Jo in sung a penas lo estaba conociendo, él era un hombre espectacular cuando estaba conmigo, le pregunte de él a Kai sólo por casualidad y este último me conto muchas cosas que provocaron en mí una decepción... “odias a tipos así Kyungsoo”.
Luego de charlar él se acercó a mi colocando sus manos en mis caderas, me susurro con la voz ronca; no podía negarlo… mi cuerpo sucumbía a él, mis manos empezaban a temblar a lo cual tuve que disimular, mi respiración se hizo lenta… no podía negarlo, aquel joven tenía ese aroma muy masculina que me hacía delirar demasiado así que Para acabar con la tensión que ocurría en esos momentos lo golpee con el destapador de inodoros.
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Después de ese incidente, lo observe irse sobándose la cabeza; me encerré en un cubículo para poder apoyarme en la puerta de este, me toque el pecho mientras soltaba todo el oxígeno retenido. “Kyungsoo debes hacer algo de inmediato”, suspire pesadamente ¿sería bueno decirle que aceptaba ser su amigo? ¿Sería bueno arriesgarme a permanecer a su lado?, “todo para que deje de estar molestando”
Camine para buscarlo hasta que lo encontré golpeándose contra la pared, su rostro de preocupación y angustia hicieron que se activara en mí un instinto protector.
-¿Kai? – le pregunte mientras me acercaba
-Eh – se giró hacia mí con rostro de sorpresa
-¡tú frente está sangrando! ¡que te ocurre! –corrí hacia el asustado - ¿Por qué has hecho eso? – lo enoje, no podía auto dañarse
-Mal día – suspiro pesadamente – noticias inesperadas – me miro por un buen momento
-No te voy a preguntar los detalles en concreto –toque su frente delicadamente, no quería dañarlo mas– pero no debes golpearte para desquitarte lo estresado o furioso que te encuentres, vamos… te voy a curar esa herida.
-Está bien – me contesto algo tranquilo
Lo lleve hasta la sala del área de limpieza, busque todo lo que necesitaba para cuidarlo, su mirada estaba puesta en mi ¿en que estaría pensando?
-Kyung – susurro algo pensativo
- ¿dime? – le respondí mientras estaba ocupado colocando una gasa para cubrir su herida
- ¿podemos ser amigos? –me pregunto muy serio
-Kim - lo observe serio– seamos amigos – le respondí con una sonrisa, quizás no sea malo conocerlo
-Está bien – el me regreso la sonrisa traviesa.
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Llegue a casa muy cansado, me dirigí a tomar una ducha rápida para luego buscar un libro de filosofía para estudiar, solo faltan tres meses para que anuncien la fecha del examen de becas… tres meses.
Estaba recostado en mi cama concentrado en el libro, cuando de repente una imagen del moreno se cruzó por mi mente “al final de todo ya no lo volverás a ver cuándo renuncies al trabajo” ¿ser su amigo sería complicado?
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A la mañana siguiente el señor Jung se acercó a decir que Kim Kai estaba con gripe y por el bienestar de todos se quedó en casa “¿acaso no le importaba los descuentos que le podían hacer?”. Después de varios minutos empezó a indicarnos que nuestro trabajo de hoy debía ser más minucioso debido a que llegaría por primera vez el señor Kim Jongin.
Estaba limpiando las oficinas cuando escuche comentarios acerca del señor Kim, que era un hombre con un cuerpo tonificado y eso se notaba debido a que el traje le quedaba espectacular, que había llegado con otro hombre con el rostro muy serio, que estaba rodeado de guardaespaldas y que ¿llevaba un pasamontañas? por que “era alérgico al sol” o “había tenido inflamación en el rostro”, que su voz era muy gruesa, sexy e imponente algo que la secretaria principal al escucharlo en la mañana llamarla por su nombre se quedó impactada. “Kyungsoo sabes que no se quedó impactada, por el rostro que tiene era seguro que le había dado un orgasmo”.
Me dirigí al ascensor para regresar a mi puesto… tenia hambre y ya faltaba poco para que sea el descanso del personal.
Mientras ingresaba con la cabeza gancha haciendo un puchero del nada masculino no me había percatado de la presencia de alguien, levante mi rostro para toparme con un hombre vestido con un traje color vino, una camisa negra con un pasamontañas cubriendo su rostro y unos guantes negros con el mismo propósito.
Al verlo me llevé una gran sorpresa que salte instintivamente al igual que aquel extraño.
-¿disculpe? – lo mire aterrado - ¿trabaja aquí? – “que pregunta más estúpida Kyungsoo”
- ¿eh? – se señalo
- Lo siento es que al cubrirse el rostro tenía la cierta idea de que era un ladrón – me cubrí mi boca al percatarme a lo que había oído media hora antes en la oficina, lo describían perfectamente ¡ESTABA FRENTE AL JEFE KIM!
- … - movió la cabeza negando, era seguro que estaría pensando en despedirme
De un momento a otro el ascensor paró haciendo que las luces del interior se apagaran ¡TRAGAME TIERRA!; mire al jefe enmascarado y pude percatarme que se había quedado apegado a una esquina del ascensor, como si temiera estar encerrado por mucho tiempo en esta caja de metal; me acerque para ayudarlo, sin embargo me hizo un ademan que me alejara de él, vi que cerró los ojos… “tiene miedo a estar encerrado en esta lugar Soo”.
De inmediato estuve a su lado, ya para eso él hombre con el cuerpo tan imponente estaba abrazándose en el piso mientras se mecía, los sostuve del rostro cubierto por esa tela negra
-Tranquilo, mírame por favor – mis manos temblaban de miedo, sabía que ese tipo de personas no podían controlar sus emociones en esos momentos – míreme señor Kim Jongin , respire profundamente
Sus orbes marrones claros atraparon mi mirada temerosa ¿acaso ya había visto ese par de ojos?
- Ya presione el botón de emergencia, en unos minutos estarna aquí para sacarnos – le dije mientras lo veía al rostro – sólo no temas… no te voy a dejar solo.
-Gracias – pronuncio con la voz grave, ¿esa voz la conocía? ¿era un dejavu?
En aquel momento ingresaron dos gorilas gigantes para resguardarlo mientras un joven con el rostro serio lo ayudaba a ponerse de pie, me observo atento para luego llevárselo con cuidado.
Ese fue el encuentro más extraño de mi vida.