El sudor le recorría la frente al igual que sus pulsaciones iban aceleradas, como si quisiera que su pecho expulsara con ansias aquel corazón que atentaba con explotar de un momento a otro, y es que aquella noche, podía decirse que su mismo cuerpo era una bomba de relojería, a la cuál le quedaban escasos momento para estallar en mil pedacitos descompuestos y a la espera de que alguien, no sabía quien, le dijera como parar aquello.
O por el contrarío, recogiera esos fragmentos, uno a uno, y los intentara unir con éxito, cuando tenía más que claro que aquello no se iba a poder arreglar con un poco de tiempo, si no con actos.
...
La cama se le hacía extraña, al igual que las sabanas, o cualquier cosa contra la que apoyara su cuerpo y alma con intenciones de que el sueño lo llevara con el y lo librara de las inquietantes preguntas que en esos momentos nublaban su obtusa y confundida mente.
Y es que no paraba de dar vueltas, una tras otra, intentando encontrar una postura que de verdad le ayudara a conciliar el sueño, por que lo necesitaba, necesitaba olvidarse de lo que aquel rubio de gafas había provocado al besarle de aquella manera, y por ende provocarlo de mala manera, atentando contra la que el denominaba "Auto control."
¿Se penaba que era una roca sin sentimientos?
No. Aunque muchas veces era él, el primero en demostrar que carecía de ellos.
¿Le estarían pagando con la misma moneda con la que había pagado a todas aquellas chicas con las que se acostaba y les dejaba con el corazón roto?¿Era el Karma que le estaba pagando por todas las idioteces que estaba haciendo sin arrepentirse desde que llego al estrellato?
Tal vez.
...
<<¿Por que lo he hecho?>> Resonaba en la cabeza del rubio que se paraba delante del espejo del baño de aquel piso lujoso en el que se hospedaba mientras estaba en el rodaje,las manos estaban apoyadas contra la encimera de granito, apoyando todo el peso de su cuerpo, pero no solo el peso físico, si no también todo el daño que psicológicamente se estaba causando a sí mismo al haber hecho aquello aquella tarde, un rato antes del rodaje.
Y, que es en realidad lo que pretendía con aquello.
¿Calentarle la polla a Kuroo, o por el contrario, calentarse la suya propia? De todas maneras, como el mismo se preguntaba, también sabía la respuesta que más se acercaba a lo que de verdad había pasado por su cabeza, y no era nada más y nada menos, que se había ablandado con la palabras del azabache, viendo que el estaba igual.
¿Celos?¿Envidia?¿Admiración?¿O era algo más?
Sinceramente en su cabeza se juntaban demasiadas cosas y ninguna completa.
...
Las vueltas en la cama habían parado, al igual que había parado el despertador contra la pared a causa de la "mala leche" que en aquel momento atentaba contra el hombre, que una ve mas aquel día respiraba agitado sentado al borde de aquella desecha cama, mirando exactamente hacía la ventana -abierta de par en par- que le dejaba observar el cielo nocturno y sin estrellas que lucia aquella madrugada.
Bajo la cabeza ¿Asqueado? Se podía decir que si.
Por su actitud, su maraña de sentidos inconclusos, incluso asqueado con las acciones "malas" que había hecho hasta ese mismo momento y no habías sentido necesidad de remediar, o simplemente habían causado su decepción personal.
¿Era idiota? Sí, no tal vez, o de vez en cuando, lo era, y no volvería a negar aquel echo que era tan transparente como el mismo agua o el aíre.
Por que...¿Qué era lo que exactamente sentía por aquel metro noventa, esas gafas, y esos rizos?¿Qué era ese sentimiento que se agolpaba en su pecho cada vez que veía como entraba en el personaje delante de él y lo dejaba sin aliento?¿Que era todo ese lío que no había pasado por su mente nunca antes?
...
Salpicaba su cara con ese agua helada que salía a posta así por el grifo del baño, anteriormente nombrado, intentado con ello que todo lo que pasaba por su cabeza desapareciera.
Cerro el grifo de golpe, y se echo hacía atrás, topando con la pared y dejándose caer hacía el suelo con la espalda apoyada contra esta, quedándose en cuclillas, con miedo, mucho miedo.
-No quiero volver a pasar por lo mismo.
Dijo medio en llanto mientras se auto compadecía a sí mismo apoyando la barbilla en sus rodillas, esperando a que las pequeñas gotas que en esos momentos salían de sus ojos hicieran todo el recorrido por sus mejillas.
¿Por que a él?¿Por que de nuevo aquello que tanto daño le había causado en el pasado volvía a su presente?
Tal vez el mundo lo odiaba, o tal vez...
Simplemente, no sabía distinguir de lo bueno de lo malo.