Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Right behind you. por deep desire

[Reviews - 41]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Heey c: lamento la tardanza, espero que hayan estado esperando este cap y bueno... nada más nos queda el próximo y ya se acaba la historia :c no les entretengo más para que lean el penúltimo <3

Nathan


 


 


“Efímero”


 


 


Nunca esperé que todo llegara a esto. De todas las cosas que alguna vez deseé, la situación de ahora, era casi imposible con Ry.


Y aquí estoy, completamente nervioso y un poco asustado de cómo hacer todo esto. Sobre todo siento inseguridad. ¿Qué pasa si el sexo no le parece bueno en comparación con lo que ha tenido antes con mujeres?


Mi corazón está por salirse de su lugar, pero tengo algo parecido a mariposas en el estómago y una descarga eléctrica me recorre cada vez que Ry me besa.


– No quiero hacerte daño –susurra Ry en mi cuello.


– No me importa –sonrío– Porque eres tú –.


Y es verdad. No me importa todo el dolor que pueda sentir siempre y cuando sea con él.


Nos besamos con lentitud y Ry desliza una mano hasta mi entrada, introduciendo un dedo para prepararme. Gimo sin pudor en su boca y pongo una mano sobre su miembro. Él introduce otro dedo, pero esta vez es más notoria la intrusión, por lo que muerdo su hombro para no quejarme, sin embargo continúo masturbándolo con fuerza.


– No puedo soportarlo si continuas haciendo eso –sisea lamiendo la piel sensible de mi garganta.


– Vamos, hazlo ya –susurro en su oreja– Mételo ya, Ry…


– Demonios, Nathan –masculla poniendo otro dedo dentro de mí, preparándome para cuando me penetre. Sus dedos se mueven dentro de mí ampliando mi entrada para recibir su longitud bien dotada.


– Hazlo, Ry –lo incito mordiendo su oreja– Penétrame ya –.


Él suelta un gruñido mitad placer, mitad animal, y me besa mordisqueando mi labio mientras sin previo aviso guía su erección a mi entrada.


Duele. Mierda si no duele, y más duele al saber que aún no mete su longitud por completo, pero poco a poco me acostumbro y lo insto a moverse balanceando mis caderas contra las suyas.


– Nathan, demonios, no te muevas o me perderé en ti y te dolerá más de lo que te duele ahora –sisea Ry con la mandíbula tensa por el esfuerzo de contenerse.


Ignoro sus maldiciones y me entierro más profundo. Es verdad, hay más dolor, pero ya no es como al inicio, puedo soportarlo debido a que es placentero, algo que nunca había experimentado antes.


Continúo moviéndome y Ry se acompasa a mi ritmo, sin embargo poco después comienza a imponer el suyo propio y cada vez es más rápido y demandante. Brusco y salvaje.


– R-Ry… –gimo al sentir cómo toca un punto de placer dentro de mí que me hace llegar al cielo y volver– M-Más rápido –gimo otra vez.


– Mierda, Nathan, no pidas eso cuando tienes lágrimas en los ojos –gruñe– No quiero hacerte daño.


– Si te detienes, te castraré –siseo.


Muerdo su cuello y le dejo una pequeña marca justo debajo de su oreja.


Ry hace caso a mis amenazas y apuro el ritmo de sus embestidas. Por mi lado, gimo en su oído con la intención de provocarlo y poco a poco, me voy acercando al orgasmo


– Ry…


– Nathan… –gruñe bajo– Yo también –.


Entonces Ry toma mi miembro y lo aprieta provocando el detonante para que me corra entre nosotros, mis paredes se aprietan en torno a su pene, de ese modo llevando Ry a la cima de su orgasmo, derramando su esencia dentro de mí y llenándome satisfactoriamente.


Nuestras respiraciones están agitadas y no tengo nada de fuerzas para permanecer despierto. Ry me toma entre sus brazos con delicadeza y me deposita sobre la cama. Sale de mí con cuidado y se aleja.


Al principio pienso que va a acostarse a mi lado, pero luego escucho el susurro de la ropa siendo recogida. Mi corazón se hace pedazos cuando abro los ojos y lo veo vistiéndose.


– ¿T-Te vas? –pregunto apoyándome sobre los codos para mirarlo mejor.


– ¿Eh? –se voltea a mirarme con el ceño fruncido.


– Te vas –digo esta vez más como una afirmación que como una pregunta.


– ¿Qué?


– Deja de hacer como si no supieras de qué hablo, Ry –me tiro de nuevo en la cama y me tapo con una manta haciéndome un ovillo y cerrando los ojos con fuerza… los ojos me pican con lágrimas que no quiero derramar.


– Nathan… eres tan malditamente idiota –suspira.


– Déjame solo de una vez y vete ya –.


Sé que estoy siendo infantil al actuar de esta forma, pero me siento fatal. Me siento usado y eso duele…


– ¡Oye, idiota! –exclama Ry.


La manta que me cubre desaparece y abro los ojos para ver qué demonios le pasa, pero de la nada, una bomba de ropa cae sobre mi rostro.


– Vístete. Debemos irnos… ¡Ahora, Nathan! Rápido –exclama apurándome.


No comprendo qué es lo que planea, pero me visto rápidamente… aunque no puedo levantarme. Mi espalda baja y mi cadera duelen, creo que incluso las piernas me tiemblan.


– R-Ry –murmuro cuando caigo al suelo sobre mis rodillas.


– ¿Nathan? –aparece a mi lado y me toma por los hombros – ¿Estás bien?


– No puedo caminar –respondo confundido.


Ry ríe y se apoya en mí. Por mi lado no sé si reírme o enfadarme, pero es… raro ver a Ry de este modo feliz. Ahora recuerdo porqué le dije que no sonriera porque daba miedo verlo… no era miedo, su sonrisa no era escalofriante ni maniática, sino que era demasiado hermosa y verla me hacía sentir nervioso y me hizo sonrojar… lo mismo siento ahora que lo veo reír. Tengo el impulso de besarlo y abrazarlo para no soltarlo nunca más.


– Supongo que es normal que no puedas hacerlo –pone una mano en mi espalda y la otra detrás de mis rodillas– No hay otra forma entonces…


– ¡No me cargues! –exclamo tratando de empujarlo pero él solo me sujeta más fuerte.


– Mírate, no puedes caminar, déjame cuidarte ahora –.


Vuelve a dejarme en la cama y comienza a vestirme.


– Esto es vergonzoso, Ry. Deja de hacerlo. No soy un niño ni una chica.


– En ambos casos, pareces una chica pequeña –se burla.


Abrocha mi jeans y me pone su chaqueta sobre los hombros. Veo la camiseta que lleva puesta y sonrío al darme cuenta que es la que yo le puse en mi casa.


– Ésa es mía –apunto a su pecho.


– ¿Sí?


– Sí –asiento– Ry ¿A dónde vamos?


– Vamos a huir.


– ¿Huir? ¿De quién? ¿A dónde? ¿Por qué?...


– Shh –me da un beso suave– Dijiste que confías en mi ¿no? –asiento y lo miro más confuso que antes– Bueno, déjamelo todo a mí.


– Bien, haz lo que necesites hacer, te confío todo lo que necesites de mí.


– Es bueno saberlo –sonríe– Ahora no te quejes y cállate –.


Siento que lo que hicimos hace poco fue demasiado efímero, pero me consuelo con saber que esto volverá a repetirse en algún otro momento futuro. Sin embargo hay algo que me angustia… no me gusta que no me diga lo que sucede justo ahora…


– Quiero que me digas lo que sucede, pero hazlo cuando tú lo creas necesario –digo entre sus brazos.


Ahora me está cargando como a una chica y al inicio es incómodo, pero a medida que estoy en contacto con su cuerpo, olvido todo tipo de vergüenza.


– No te preocupes de más, mocoso. Sólo quiero llevarte a un lugar más bonito, así que ahora cállate.


– Deja de decirme que me calle y lo haré –gruño.


– Entonces bien –se burla apretujándome.


Decido dejar de fastidiarlo con dudas sin sentido y en cuanto apoyo la cabeza en su pecho, me relajo con el vaivén de sus pasos y me quedo dormido.


Sea lo que sea que planeas, por favor, dímelo en algún momento”

Notas finales:

Bueno... como ya dije, el próximo cap será el último de este fic :c gracias por aquellas personitas que han leído hasta aquí c: y espero que les haya gustado la historia <3 nos leemos en el próximo cap y... bueno, que tengan una bonita semana y nos leemos pronto ;) L@s quiero y besoos :)


https://www.facebook.com/DeepdesireFic


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).