Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cuando dos almas se reencuentran por kurerublume

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, un nuevo capítulo, y este está algo cortito a comparación de los demás. Que disfruten :)

Otro día se asomaba por la ventana, el azabache abrió sus ojos, casi de inmediato, el recuerdo de lo que había sucedido hacía 3 días volvía a su mente. Durante todo ese tiempo, había estado evitando la compañía de Kazuno, era demasiado vergonzoso y en definitiva no permitiría que eso volviese a suceder.


El camino fue demasiado silencioso, ni las cigarras cantaban, al menos para el azabache el sonido que producían aquellos animales era una melodía, un cántico. Se molestó un poco y frunció el ceño, cuando menos se lo esperaba, una mano se posó sobre su hombro.


-Hola Mizuki


- ¿Q-Qué? Kazuno, no me asustes así.


-Tenía que asegurarme que no vieras que me acercaba a ti. Has estado evitándome estos días


-No es cierto- dijo quitando la mano del otro para seguir su camino, fue inútil, aquel toque se volvió a dar para retenerlo.


-Sí es cierto, escucha, respecto a lo que pasó aquel día…


-No importa, sólo no lo vuelvas a hacer- dio media vuelta y se dirigió a la escuela


-¡Rayos! De verdad se molestó, no hubiera imaginado que se lo tomaría tan mal, de verdad fui un idiota. No puedo simplemente llegar y hacer lo que yo quiera


La semana siguió transcurriendo sin ningún problema, Kazuno y Mizuki hablaban cada vez con menos frecuencia. Comenzaba a ser molesto. El azabache no lo quería admitir, pero extrañaba la conversación del rubio, verlo con otras personas le parecía aún más molesto, aunque realmente no tenía por qué hacerlo.


En ese momento, Kazuno conversaba con una chica, no era hermosa, pero se estaban riendo demasiado fuerte. El azabache no pudo evitar mirarlos con algo de desaprobación y tristeza, Kazuno lo notó.


-¡Nh!- una exclamación de sorpresa fue lo que salió de Mizuki, sólo le dio la espalda al rubio. Cuando la clase empezó, todo se había tranquilizado, excepto por una mirada fija que sentía el de ojos grises sobre él, Kazuno no dejó de observarlo todo ese tiempo. El timbre sonó, por fin. Mizuki se incorporó de su asiento y rápidamente salió de aquel lugar para llegar a la azotea.


-¿Qué pretendes?


-No pretendo nada


-Hace rato te me has quedado mirando enojado, pero… al mismo tiempo algo triste, ¿por…?


-¡Claro que no! Sólo, esa es mi expresión. Lamento si te incomodé


-¿Por qué estás tan molesto?


-No lo estoy, sólo no he dormido bien. Por favor, con permiso- dijo al rubio para que le dejase pasar por aquella puerta de regreso al salón, quería estar lejos de él y este lo había perseguido. Kazuno no se movió del marco de la puerta, no iba a dejarlo pasar


-Sólo si me dices la verdad- acercó su rostro al otro, sus ojos brillaban suplicando una razón


-N-No, ya te dije el por qué


-Mizuki, por favor,no te molestes conmigo, llevas varios días así y es molesto


-¿Molesto?, ¿Cómo puedes decir eso? El que empezó con toda esta situación fuiste tú, te pedí que me dejaras de tomar la mano y volviste a hacerlo, y aquel día querías que te besara. ¿Crees que soy idiota? Sólo te estás burlando de mí


-No lo hago, simplemente quise hacerlo- tomó en sus brazos al azabache, impidiéndole  liberarse de aquel agarre-  Mizuki, perdóname, no volveré a hacerlo, te lo prometo.


-Maldita sea Kazuno… bien- contestó dándole una palmada en la espalda- sólo ya no seas tan impulsivo


-Lo siento, así soy. Pero está bien, te lo he prometido y lo cumpliré Mizuki, a no ser que luego me pidas lo contrario- comenzó a reír, tomando del hombro al azabache para que continuaran su camino.


El tiempo pasó con mucha tranquilidad, una clase resultó bastante interesantes, estaban en Educación para la Salud, veían el tema de sinapsis, neuronas, bastante información, pero lo que hizo interesante aquella clase fue…


-Seguramente tengo un problema con la cabeza


-¿Seguramente? si eso ya lo sabíamos- ambos comenzaron a reír, Mizuki llegaba a ser tan lindo cuando quería- pero ya en serio, ¿por qué lo dices?


-últimamente he tenido dolores de cabeza, constantemente me punza en esta parte- señalando su sien- no sé por qué, ya llevo varias semanas así


-¿D-De verdad? Qué raro Kazuno, deberías ir al doctor


-Lo sé, pero simplemente no me da la gana, sin mencionar esos extraños sue…


No pudo terminar la oración, la maestra les pidió que dejaran de hablar. Lo que no dijo el ojigris, fue que él también tenía dolores de cabeza desde hacía semanas. Cuando escuchó “sue…” los ojos se le hicieron más grandes, sí, él también tenía sueños extraños sobre un joven al que ayudaba a huir, un joven apuesto de cabello claro.


Tenía que ser una coincidencia

Notas finales:

Espero les haya gustado, si es así o no, háganmelo saber :D con confianza jajaja muchas gracias por seguir esta historia


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).