Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Una serie de cartas y otras anécdotas. por Neove

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

¡Hola a todos! Este es un fic al que sinceramente le tengo un montón de cariño. Aunque bueno, sería una mentira decir que no es lo mismo con todos mis demás fics xD

Debo decir que la construcción de la historia será un poco lenta. Intentaré volver las cosas un poco más rápidas pero me temo que si no le doy un ritmo adecuado a las cosas terminaré por no estar conforme con el resultado.

Pido una disculpa de antemano para todos aquellos que prefieren una historia que vaya rápido, pero es lo que hay :(

¡Muchas gracias por leer!

Notas del capitulo:

Y este es el prólogo. Creo que debería hacer un par de aclaraciones antes de continuar:

Sí, las cartas -como prefiero llamarles en vez de e-mails- serán algo frecuente por aquí, de hecho me atrevo de momento a afirmar que va a haber una en cada capítulo escrita por Aiden. Sin embargo y a pesar de que este prólogo solo cuenta con una carta en el siguiente capítulo esta estructura cambiará, habiendo también narración. Esto lo digo para evitar malentendidos.

Por supuesto, los siguientes capítulos tendrán una mayor extensión :3

Y creo que eso es todo lo que debo decir por el momento. Espero que les guste tanto como a mí.

Querido Dan,

Hoy ha sido mi primer día de clases en la nueva ciudad. La verdad es que no sé qué pensar al respecto de todo lo que ha pasado hoy, pero espero que tengas la paciencia de leer todo lo que estoy a punto de escribir y no te parezca aburrido.

Aunque bueno, entendería perfectamente que dejaras de leerlo en cualquier momento. Siéntete libre de hacerlo.

La verdad es que no tenía más que malos presentimientos de todo esto. Después de todo, es la primera vez en toda mi vida que me mudo y cambiar de ambiente tan abruptamente no me tenía en el mejor estado que digamos. Aunque claro, no dejé que papá se enterará de ello en ningún momento ya que él parecía bastante animado al respecto.

En el camino de mudanza no hacía más que darme un enorme discurso de cómo esto sería nuestro «gran nuevo comienzo». Y por supuesto, yo luché con todas mis fuerzas para no decirle que lo único que quería era quedarme en casa.

Pero no debo quejarme del todo, eso no sería justo ni sincero. Admito que la habitación que he elegido me gusta mucho más de lo que pensé que lo haría. Es decir, sí, elegí el ático… ¡pero es enorme! Aun con todas mis cosas puestas en su sitio sobra espacio que aunque creo que nunca usaré queda bastante bien.

Ahora, ya que te he contado que la mudanza ha ido a la perfección y ya no tengo ninguna caja que desempacar es hora de que te cuente lo que ha sido lo más extraño que me ha pasado esta última semana: el primer día de clases.

Como sabrás, estamos justo a medio curso por lo que el presentarme frente a toda la clase fue totalmente extraño. Hubiera sido mucho mejor mudarnos cuando iniciara el ciclo, pero papá estaba totalmente ansioso y bueno, ya sabes cómo son estas cosas.

Regresando al tema: Me sentí totalmente incómodo en ese sitio. Todo es tan diferente a pesar de no encontrarse a más que un par de horas de distancia. Quería salir corriendo de allí y no regresar hasta estar graduado.

Y como verás, no puedo permanecer más que unas cuantas líneas sin pasar a ser un absoluto fatalista.

Bueno, regresando a lo nuestro, cuando sonó el timbre del receso me sentí mucho más incómodo que cuando tuve que presentarme más de cuatro veces frente al mismo grupo. No tenía ni idea de a dónde ir y ninguno de mis compañeros parecía demasiado dispuesto a ayudar a un chico vestido completamente de negro.

O al menos eso creí, ya que cuando estuve a punto de salir de salón de clases se plantó frente a mí el chico pelirrojo más colorido que he visto en toda mi vida –como nota: parece que lleva su ukelele a todos lados ya que en todo el tiempo que estuve con él nunca lo soltó– y me dijo algo como «hey, ¿Aiden, verdad? Mi nombre es Elijah».

Lo cierto es que es lo único que recuerdo casi a la perfección, ya que para cuando quise darme cuenta ya estaba frente a un grupo de desconocidos que eran sus amigos.

O bueno, quizá sí que lo recuerdo pero me siento demasiado idiota al respecto así que prefiero no pensar en ello, espero que me disculpes.

Como sea, estos chicos parecen ser muy buenas personas, o al menos esa fue la impresión que me dieron. Eso, y que son quizá demasiado extraños, pero aun así totalmente agradables.

A la primera que conocí de aquel grupo fue a una chica de cabello llamativamente verde, su nombre es Hayley. Ella es de mi edad y parece que le gusta más la música que cualquier otra cosa en el mundo. Aun cuando estábamos hablando nunca se quitó sus audífonos de los oídos. Me pregunto qué clase de música escuchará.

Después me presentaron a Noviembre. Lo cierto es que realmente no sé qué decir de este chico. Su cabello es color miel y sus ojos son de un peculiar color turquesa. Es realmente agradable y en todo momento procuró que me sintiera cómodo en esa atmósfera, aun cuando eso solo lograba hacerme sentir mucho más nervioso.

Quizá lo más curioso de él es que parece ser realmente cuidadoso al elegir sus palabras, sobre todo cuando está tratando de emitir una opinión. Aunque bueno, quizá eso solo haya sido una impresión mía.

Luego vino Pierce y aquí es donde me sentí realmente extrañado. Cuando yo llegué con ellos, este chico estaba dormido sobre la mesa de la cafetería, aunque yo diría que su imagen se asemejaba mucho más a un cadáver de cabello castaño no identificado. Por supuesto, Hayley fue la que me dijo como se llamaba, y luego cuando él despertó se presentó a sí mismo.

Dicen que él duerme demasiado como para ser un joven saludable. Me preguntó cuánto será «mucho» para ellos.

Ellos eran todos hasta ese momento, cabe destacar que mientras todos teníamos algo así como una conversación –que solo constó realmente en mi procedencia y cosas por el estilo–, Elijah no dejó de tocar su ukelele en ningún momento. Comió con el ukelele en las manos, practicó una y otra canción y cuando ya no recordaba alguna más regresaba a la primera, comentó cuando lo creyó necesario.

El ukelele parece ser algo así como una extensión de su cuerpo. La buena noticia es que es realmente bueno tocándolo.

En ese momento fue cuando llegó Brooke. ¿Mi opinión respecto a ella? Demasiado intimidante. Es como una de esas madres exigentes que esperan lo mejor de ti porque te quieren, o algo así. Todo el receso se la pasó intentando que Pierce permaneciera despierto.

Lo cierto es que los demás me dijeron que ellos dos son exnovios, pero todo eso pareció quedar atrás para parecer madre e hijo. Es una imagen realmente graciosa.

Y así se pasaron los treinta minutos de receso. Todos me invitaron a que me juntara con ellos de ahora en adelante si es que me sentía cómodo con ello.

A mí lo que realmente me inquieta es no agradarle yo a ellos.

Pero antes de ponerme realmente depresivo, tal y como estoy seguro que detestas, creo que es hora de que me despida de momento esperando que no te haya resultado demasiado molesto.

Espero que todo vaya bien por allí, saluda a tu familia de mi parte.

Con el cariño de siempre,

Aiden.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).