Self-control.
Kibum sentía que cada vez estaba más distanciado de Taemin, el maknae estaba de regreso con "press your number" y casi no tenía tiempo para ellos, ni se veían y él solo lo apoyaba votando por él.
La primera semana no pudo estar en m countdown por una sesión de fotos pero esta vez sí estaría. A veces se sentía confundido porque veía a Taemin más lindo y sexy de lo normal cuando él no lo tendría que ver de esa manera pero es que así era, a veces tenía extrañas ganas de besarlo, con el tiempo Taemin había crecido y Kibum sintió la necesidad de dejarlo volar y no verlo como un hijo como antes.
Esto pasó con su primer álbum "Ace", tenía miedo de cómo le fuera a ir pero todo resultó bien y desde ahí no pudo evitar sentirse de otra manera, como si de verdad estuviera atraído a él, como si en verdad lo hubiera dejado ir para abrir paso a un Taemin más varonil, más hombre, más intrigante.
El pelinegro suspiró mientras entraba al camarín, ya estaba vestido y solo le faltaba que lo peinaran cosa que pasó media hora.
-¡Hola Kibum! – Pasó Taemin abriéndole los brazos para un abrazo, Kibum tragó saliva, Taemin estaba realmente hermoso, su cabello rubio levantado, sus ojos delineados y hoy llevaba un jean claro que encajaba de muerte con sus piernas, una remera blanca con cuello de tortuga rojo y encima una chaqueta animal print, Kibum se limitó a pensar más y lo abrazó sintiendo su aroma mortal, que perfume tan rico.
-Por fin nos ve...vemos, ¿Cómo andas? – Kibum no pudo disimular, estaba nervioso y eso lo irritaba, no quería sentirse así, Taemin era su compañero de grupo.
-Todo muy bien, lo único que estoy cansado, no he podido dormir en toda la noche.
-¿Te has dormido tarde?
-Cosas mías. – Kibum asintió despacio, antes hubiera insistido pero ahora casi no quería hablar con él, lo ponía nervioso.
-Creo que ya tenemos que salir. – Taemin chasqueó la lengua y salió después de él.
Kibum caminaba apurado mientras se encontraba con sus demás compañeros con los que conducía "M countdown", no quiso pensar más en Taemin aunque le era imposible y se encargó en ensayar, una vez que estaba todo listo y los artistas comenzaron a pasar, se quedó quieto mirando a Taemin a escondidas, siempre hacía lo mismo, cuando tenía tiempo libre para ver algún programa en el que él estuviera se lo quedaba viendo, amaba press your number, amaba todo el álbum pero más amaba el paso que Taemin hacía con la pelvis mientras mueve la cadera, el famoso paso con el que hace gritar a todas las shawols y a él también, por dentro tiene su corazón latiendo como si hubiera corrido una carrera de miles de kilómetros.
Ya era el final de m countdown y al contar los votos las shawols gritaron de emoción y obviamente el pelinegro también, había ganado Taemin, el rubio dijo su discurso agradeciendo a las shawols, al staff, al manager, a SHINee y a la SM sobre todo.
Una vez que llegaron al camarin Kibum agarró su campera y bolso, ya estaba dispuesto a irse cuando sintió una mano en el hombro.
-¿No me esperas? Hoy no tengo agenda.
-Taemin yo... ¿Dónde querías ir? Porque yo me voy a mi departamento, tienes al manager para que te lleve al dormitorio. – El pelinegro estaba convencido en evitarlo lo más que pudiera, entonces, siguió caminando y antes de subirse al auto escuchó la voz de Taemin detrás de él.
-Me voy con Kibum, muchas gracias por todo lo de hoy. – Kibum se dio vuelta y vio como Taemin venía tras él.
-¿Y? ¿No subes? Tienes que conducir. – Kibum se quedó estático ¿Qué se le había dado a Taemin por venir junto a él, más encima en su mismo departamento?
Kibum se subió al auto y condujo, venían en silencio hasta que el mismo no lo soportó más y preguntó:
-¿Por qué has venido? Podrías haber ido al dormitorio.
-Podría, pero no quería, quería pasar tiempo contigo ¿Qué hay de malo con eso? – Kibum pasó saliva y siguió conduciendo, al llegar bajó rápido con su bolso y no dijo nada más ¿Para qué? Si Taemin ya estaba con él casi entrando al departamento.
Sus manos le temblaban, no sabía porque, se estaba comportando como un completo imbécil y eso no le gustaba, rebuscó todo lo que pudo en su bolso hasta encontrar las llaves y pudo ver como Taemin hacía ruidos extraños con la boca, puso una de las llaves en el picaporte, la giró y sin más la abrió, sin mentir habrá dado solo un paso adentro que sintió como lo empujaban contra la pared. Gimió levemente al chocar brusco contra la pared y se vio apresado entre la misma y el cuerpo de Taemin.
Abrió un poco los ojos y de la impresión tiró el bolso el cual cayó directo al piso y vio como el rubio pateaba levemente la puerta para cerrarla.
-En realidad, quería venir para esto. – Taemin se abalanzo contra los labios de Kibum, éste quería poder separarlo de los hombros pero no pudo porque lo quería, quería que él lo besara como estaba haciendo, entonces correspondió pasando sus manos delgadas en el cuello grueso del rubio. Era un beso húmedo, con todas las ganas que al parecer los dos habían retenido hasta ahora, Taemin mordió con fuerza el labio inferior de Kibum haciéndolo gemir en su boca, se apretó más al pelinegro agarrándolo con firmeza de la cadera mientras simulaba embestidas rozando sus miembros, Kibum comenzó a tirar del pelo de Taemin acercándolo más empezando a gemir despacio en la oreja del otro y entonces el rubio lo volvió a besar, mierda, Taemin que bien besaba, pensaba Kibum, podía vivir toda la vida en la boca del otro.
Al separarse Kibum gimió en disgusto, no quería que se separaran aunque aun así quiso sacarse la duda.
-¿Qué fue todo esto?
-¿Acaso importa? No, supongo yo. Kibum ¿Crees que soy idiota? - Y antes que Kibum respondiera Taemin volvió a hablar interrumpiéndolo. -¿Crees que no me daba cuenta de la forma en que me mirabas últimamente? ¿En cómo me mirabas a escondidas hoy? Podía sentir perfectamente tu excitación al verme mover las caderas y la pelvis porque sé que quieres sentirla ¿No es así? – El rubio lo volteó rozando su miembro bajo la tela del jean que ya comenzaba a despertar. – Quieres sentir mi pene dentro tuyo, como yo quiero ver como ese culo tan perfecto que vengo resistiendo las ganas de tocar recibe mi pene de forma tan exquisita, lo quieres, lo sé.
-Dios, Taemin. – Kibum no podía hablar si no era para querer sacar todos los gemidos que se estaba aguantando.
-Te quiero hacer mío, ahora y siempre ¿Entiendes? – El rubio lo volvió a voltear y esta vez fue Kibum el que lo besó, no se resistió más y lo besó con desesperación bajando sus manos hacía el cinturón de Taemin y lo desabrochó como también lo intento con el jean bajándolo, Taemin se lo sacó del todo y se ocupo a sacar el de Kibum, al hacerlo apretó fuerte su culo que estaba aun envuelto del bóxer rojo bien ajustado que traía.
-Amhh Taemin quiero que me hagas tuyo, ya, por favor.
Taemin se acercó chupando el cuello de Kibum con paciencia y en ocasiones mordiéndolo.
-Ahh.
Taemin alzó a Kibum haciendo que este enredara sus piernas a su cintura y lo depositó en el sillón que éste tenía, por suerte era grande y había suficiente espacio.
Ambos sacaron sus bóxers como también Kibum sacó rápido la campera de Taemin y la remera, el rubio lo imitó sacando con desesperación la remera que el otro traía.
-Sí, por fin.
-¿Impaciente?
-Demasiado, Taemin.
Taemin se adentró en su entrada sin lubricar, sin nada.
-¡Dios! – Gimió Kibum y Taemin se quedó quieto mientras lo besaba y volvía a su cuello chupándolo, distrayéndolo, fue a su oreja lentamente y chupo el lóbulo de la misma. Kibum acariciaba la espalda morena de Taemin, no sabía dónde era que se había tostado así pero era un tostado lindo, el pelinegro definitivamente no se cansaba de besarlo, de morder esos labios tan gruesos, le encantaban.
El ambiente era hermoso, nunca lo había hecho en un sillón pero era demasiado romántico como la luz del atardecer comenzaba a entrar por el gran ventanal, ya se estaba haciendo de noche.
-Dios Kibum estás tan mmh apretado. – El rubio rompió el beso.
-Muevete. – Entonces eso hizo, se fue moviendo lento y Kibum sentía que esto era la tortura en vida, quería comerse literalmente a Taemin esta casi noche, como se movía era la muerte, nunca lo había hecho con un bailarín y menos como Taemin pero era lo mejor que estaba viviendo, la forma en que se movía Taemin, en como entraba y salía en su entrada era crimen, podría llamarse crimen.
-Mmhhh creo que voy a llegar al orgasmo rápido.
-Yo también, me aprietas tanto que es mmmh tan excitante tan ahh rico.
Kibum comenzó a rasguñar la espalda del rubio mientras empezaba a gemir sin vergüenza alguna, enrosco sus piernas a la cintura de Taemin dando más profundidad y fue lo mejor que pudo hacer, sentía con más profundidad el pene de Taemin entrar y salir llenándolo de semen en el camino.
El rubio cambió de posiciones sentándose con Kibum encima, apoyándose del respaldo del sillón, Kibum volvió a auto penetrarse, ambos gimieron y Kibum comenzó a saltar agitadamente sobre Taemin.
-Mmhh así ahhh mm por dios ki Kibum ahh.
-Tae taennngg no doy mas ahh ahhh ahhh.
-Yo tampoco anghh.
El rubio apretaba las caderas de Kibum hasta al punto de dejar sus dedos marcados pero no importaba con total de hacerlo saltar con mas firmeza y profundidad y disfrutar del placer no importaba nada.
Las embestidas se hicieron cada vez mas rápidas y brutas.
-Omhh ya ya estoy llegan..anhhghh taemin ohh.
-Ya falta poco precioso ya falta casi ammm.
-Dios esto es ahhhahhhh.- Kibum ya comenzaba a sentir el semen caliente de Taemin salpicando su entrada.
-Lo sé, lo sé amhhh me estas ahhh apretando much... ummm.
Taemin sintió como la entrada de Kibum lo apretaba tan deliciosamente y sin más se vino escurriendo su semen por toda la entrada mientras el pelinegro siguió saltando hasta perder fuerzas y caer contra el pecho de Taemin salpicando ambos vientres, apoyó su cabeza en el hombro del rubio y éste comenzó a acariciar su pelo negro.
-Pareces un muñeco cuando llegas al orgasmo, con ese pelo negro, esos pómulos tan firmes y esa carita de placer que me vuelve loco.
-Dios Taemin, eres tan bueno. – Apenas pudo decir, estaba tan agitado.
-Lo soy contigo nomas, tú solo haces que me mueva así. – Taemin aún dentro de Kibum dio una embestida empujando fuerte.
-¡OHH!
-Mmh como te gusta eh.
-Si es contigo todo me gusta. – Kibum lo agarró del cuello abrazándolo mientras lo besaba, Taemin apretaba el culo de Kibum tocándolo a su antojo como tanto había querido mientras correspondía el pasional y obsceno beso.
Kibum trató de tener autocontrol pero si Taemin quería que las cosas fueran así entonces así serían, a la mierda el autocontrol cuando su cuerpo y su corazón pedía aún más de Taemin.