No sabía exactamente qué era lo que le estaba pasando, pero desde varias días atrás, desde ese fatídico día en el que decidió dejar plantado a... No, realmente no quería volver a pensar en eso, pero desde ese día se había sentido bastante cansado. Era como si la magia lo abandonara de a pocos.
No quería ni imaginar que era lo que podría estar pasando, pero después de eso vinieron las náuseas, vómitos y mareos sin explicación aparente. Aunque en los primeros días de su "soltería" no se sintió así, bueno al menos no se acordaba, puesto que la mayor parte del tiempo se la pasaba en los antros tratando de ahogar la voz de su conciencia que le gritaba lo equivocado que estaba al haber abandonado a Dra... No podía pensar en su nombre sin lograr evitar que eso lo doliera. Pero sabía que no tendría que quejarse porque así lo había decidido.
No sabía exactamente cuanto tiempo estuvo cavilando acerca de la posibilidad de visitar a un medimago pues realmente sentía que no podría continuar así y desde hace aproximadamente 3 días que los síntomas habían aumentado, aunque realmente sentía que no tenía ni fuerzas para caminar.
Después de tanto pensarlo decidió que al fin llamaría vía floo a alguien de San Mungo. A duras penas se pudo acercar a la chimenea y lanzar polvos floo.
-¿Alguien podría ayudarme?- Harry sentía que poco faltan para que se desmayara. Pero al parecer nadie le escuchaba, sentía que no podría aguantar mas, cuando estaba cayendo en la inconsciencia escucho como se activaba la red floo y alguien entraba, apenas logro distinguir el grito asustado de alguien que lo llamaba por su nombre y luego todo se puso negro.
Después de no sabia cuanto tiempo por fin despertó, se sentía tan cansado, empezó a tratar de recordar lo que había pasado, pero no lograba enfocar bien los recuerdos, se dio cuenta que se encontraba en una habitación en San Mungo, escuchó que la puerta se abría y vio a un medimago entrar.
-Señor Potter, veo que al fin ha despertado, soy el medimago Johnson y estoy a cargo de usted, ¿cómo se siente?- decía el medimago mientras le lanzaba hechizos de diagnostico.
-La verdad es que no me siento muy bien- su voz era apenas audible - ¿Qué es lo que me está pasando?
-Le hicimos varios análisis y no sabemos exactamente lo que esta pasando con usted, pues es un estado en el cual su núcleo mágico se ve afectado y tiene, por decirlo de alguna manera, fugas de magia, las cuales no sabemos exactamente a donde van a parar, buscamos residuos de algún tipo de hechizo pero no se encontró ninguno. Su condición es parecida a cuando se produce un embarazo mágico y el padre debe "cederle" cierta cantidad de magia a la madre, salvo que en su caso es mas grande la cantidad de magia. Esta seguro que usted no tiene a alguien esperando un hijo suyo.
Harry se horrorizó en solo pensarlo, pero estaba seguro que no había tenido sexo con nadie, salvo con cierto rubio de ojos grises, pero era imposible que un hombre quedara embarazado, la sola idea lo hacia querer reír a carcajadas histéricas.
-Estoy seguro que no medimago Johnson, pero que podría ser entonces si no es eso?- Estaba muy confundido, no sabia lo que podría estarle pasando realmente y tenia miedo de que fuera residuos de algún hechizo que pudo haber recibido durante la guerra.
-Esta bien, entonces seguiremos realizando estudios- Con esto el medimago se retiró de su habitación.
Ya no se sentía tan cansado, es como si de pronto todo lo que había pasado hubiera sido solo un mal sueno, pero aun así quería estar seguro que todo estuviera bien, esperaría hasta que terminaran de evaluarlo. Pasó por lo menos cinco días mas internado en San Mungo, en donde le realizaron toda clase de pruebas que se le pudieron haber ocurrido a los medimagos, pero todas tenían resultados normales, y se dieron cuenta que ya tampoco tenia fugas de magia, por lo que decidieron catalogarlo como un caso aislado de fugas de magia, le dieron pociones revitalizantes y lo mandaron a su casa.
Como se sentía bastante bien decidió dar un paseo por el callejón Diagón, en esos días los únicos que lo habían visitado habían sido Blaise y Pansy, al parecer Hermione y Ron estaban definitivamente muy enfadados con el, pues en todo el tiempo que había pasado no habían ni siquiera intentado comunicarse con el, no que el los culpara, porque lo que había hecho realmente había sido lo mas cobarde en su vida. Tan ensimismado iba en sus pensamientos que no se había dado cuenta de casi nada, hasta que de repente escucho ese nombre y fue cuando empezó a poner atención a lo que hablaban ese par de brujas.
-Escuche que Draco Malfoy estuvo internado en San Mungo, no se sabe realmente porque, todo eso fue un misterio, fue hace aproximadamente una semana pero que se encontraba tan mal que sus padres decidieron trasladarlo a su mansión.- Las dos jóvenes brujas se fueron alejando y no logró escuchar mas, la desesperación empezó a embargarlo, ¿qué había pasado con él? ¿realmente estaba tan mal como decían? quería ir corriendo hacia la mansión Malfoy y exigir ver al rubio, pero sabia que seguramente lo sacarían a crucios de allí. Apesadumbrado y desorientado decidió dirigirse de nuevo a su apartamento para descansar un poco, ya después buscaría la forma de poder encontrar mayor información sobre el hombre que aun le robaba el sueño.
Pasaron alrededor de 3 días mas, en los cuales sus amigos Slytherin casi vivían con él, en especial Pansy que era la que se mostraba mas preocupada e incluso había insinuado la posibilidad de quedarse a dormir allí en su apartamento para estar al pendiente si volviera a tener otra recaída. En un momento en el cual se encontraba solo pensó que lo mejor era distraerse un poco, en ese tiempo no había logrado encontrar ningún tipo de información acerca del rubio por lo que para distraerse fue nuevamente al callejón Diagón, en una tienda compro el diario El Profeta pero no se preocupó por leerlo en seguida, fue a un café a desayunar y leer que tonterías habían publicado hoy, pero se percató que en la mesa en la que se sentó se encontraba el diario del día anterior.
Al abrir el diario y ver la primera plana se quedo de piedra, claramente sentía como una mano helada estrujaba su corazón, allí en grandes letras se podía leer el titular "HEREDERO DE LOS MALFOY ATACADO EN EL MUNDO MUGGLE" y se veía una foto del rubio cuando era ingresado al hospital mágico acompañado de Ron y Hermione. Rápidamente fue a la pagina en la cual se ofrecían mayores detalles.
"Después de tantos días de intensa investigación, y, a pesar de las muchas dificultades que encontramos, por fin logramos averiguar que el heredero Malfoy fue atacado en el mundo muggle, según nuestra fuente el joven heredero se encontraba en una cafetería junto a sus amigos Ronald Wesley, Hermione Granger, y un sujeto desconocido, cuando al salir un hombre, del cual aun no hemos averiguado el nombre, le atacó con un objeto muggle el cual lanza proyectiles que le impactaron en el vientre, al estar rodeados de muggles, sus amigos no pudieron hacer mas que tratar de parar la hemorragia, para cuando llegó a San Mungo se encontraba en estado critico".
Todo lo demás hablaba acerca de las armas muggles que eran utilizadas, por lo que ya no le presto mayor atención, y ahora si decidió a leer el diario que acababa de comprar, con las manos temblorosas fue abriéndolo y no daba crédito a lo que sus ojos veían. "¿DRACO MALFOY EMBARAZADO?" "Realmente el heredero de los Malfoy no deja de asombrarnos, apenas ayer publicábamos sobre el ataque del cual había sido victima el joven Malfoy, pero nuestras fuentes nos han informado que no solo fue herido gravemente, sino además su condición se agravaba debido a que en su interior estaba alojando una vida, se consulto con el medimago experto en embarazos Alan Stone, quien informa que ese suceso no se había dado desde hace mas de 500 años..."
Harry sentía que se ahogaba, eso no podía ser cierto, no podía haberle pasado eso a él, a todos menos a él, ahora mas que nunca quería ir corriendo a la mansión y pedir, incluso rogar porque le dejaran ver a su Dragón, no sabia muchas cosas sobre el mundo mágico, a pesar de ya llevar muchos años viviendo allí, aun había cosas que no entendía, el articulo seguía hablando que los embarazos masculinos se habían dado debido a la caza de brujas y muchas mas cosas a las cuales no les había puesto mayor atención, pero su Draco, ¿el hombre del cual aun estaba enamorado iba a darle un hijo?
No podía sentirse mas tonto y enojado consigo mismo, ¿cómo había sido tan estúpido para dejar a Draco? en ese momento tomo una decisión, iría a la mansión Malfoy y de allí no se movería hasta que le dejaran ver y hablar con Draco, solo esperaba que el ya se hubiera recuperado y si no entonces el estaría con Draco hasta que despertara, tenia un largo camino por delante, pero estaba dispuesto a todo con tal de recuperar a su rubio.