Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El corazón no olvida por LizzieVidal

[Reviews - 19]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi y Katsumi Ono♥.

¡Espero que les guste el capítulo de hoy! A mi me gustó :3 nos leemos en las notas finales :D

 

PD: Pasen a darle like a mi página en Facebook https://www.facebook.com/LizzieVidal0809/ Para estar más en contacto con ustedes mis queridos lectores♥, mi página ya se convirtió más que nada en una linda comunidad donde nos une un mismo amor, Yu-Gi-Oh!♥ así que si quieren formar parte de esto tan lindo que se ha creado los espero por allá.♥

 

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~


"Escucha a tu cuerpo y te dirá lo que necesitas saber".


 


—Perdóname por meterte en esto -Dije tristemente.


—Descuida, no está del todo mal porque al menos fue contigo -Dijo separándose un poco de mí para sonreírme -¿Te parece si caminamos un poco más y en caso de no encontrar el camino de regreso esperar a que nos encuentren? -Preguntó sonriéndome.


—Si... -Dije pesadamente.


—Muy bien, entonces vayamos -Dijo soltándome mientras me son reía cálidamente, no importaba tanto el hecho de estar perdidos, me sentía extrañamente feliz.


Caminamos por un pequeño rato sin encontrar el camino, más tarde que temprano comenzó a oscurecer, así debía ser, estábamos en una montaña, oscurecía mucho más temprano de lo habitual, me estremecí de miedo mientras seguía caminando.


—Debemos encender las linternas -Dije pesadamente mirando el cielo.


—Aún se ve, así que no te preocupes, pero en vista de no encontrar el camino es mejor acampar aquí -Dijo mirando a nuestro alrededor.


—¿Crees que este bien hacer eso? -Pregunté sorprendido.


—Eso es mejor que andar vagando en pleno bosque en la oscuridad -Dijo sonriéndome, él tenía razón así que asentí a sus palabras.


Ayudé a buscar un poco de ramas para encender una fogata en lo que Yami ponía una tienda de campaña, si, solo una, y eso gracias a que él era precavido y había llevado ese tipo de cosas, yo solo había pensado que estaríamos unas horas y después bajaríamos así que no le di importancia y no había llevado nada en caso de un percance.


Poco a poco fue oscureciendo más, gracias a Ra la fogata había encendido bien así que ya teníamos que nos iluminara un poco aparte de la luz de la luna que surcaba en la cúpula estelar.


—Yami lo siento, de verdad, no dejaré de disculparme por la tontería que cometí, debí hacer que nos detuviéramos en el momento que perdí la orientación del mapa -Mencioné muy afligido mientras estábamos sentados a un lado de la fogata.


—Oh Yugi... Realmente no debes preocuparte, todo está bien, ya lo dije -Mencionó sonriéndome cálidamente, no sabía cómo podía mantener su sonrisa en un momento como ese.


—Bien... iré a traer un poco más de leña -Dije pesadamente levantándome de mi lugar.


—¿Quieres que te acompañé? -Preguntó dulcemente, yo solo negué con la cabeza.


—Está bien, ahora regreso -Dije sin más.


—¿Seguro? -Cuestionó mirándome sorprendido, yo solo asentí sonriéndole levemente y me encaminé a buscar un poco más de leña.


Caminé por los alrededores buscando más leña encontrando muy poca, me sentí frustrado así que traté de alejarme un poco más para ver si hallaba más sin imaginar que...


Sin imaginarlo y por ir distraído me resbalé por una sección que estaba un poco deslavada, la lámpara que llevaba se me cayó de las manos y me sostuve como pude de unas raíces que había entre la tierra para no caerme.


—¡YAMIIIIIIIIIIIII! -Grité sin saber que más hacer, por otro tonto de mis descuidos estaba en esa situación -¡YAMIIIIIIII AYÚDAMEEEE! -Seguí gritando rogando internamente a Ra que Yami realmente pudiera escucharme.


Y si no me escuchaba... ¿qué es lo que pasaría?, ¿qué haría en ese caso?, era una tontería esperar por él, además le había dicho a mi novio que no necesitaba que Yami me cuidara, que yo podía cuidarme solo.


Intenté con todas mis fuerzas impulsarme hacía arriba sin mucho éxito, estaba comenzando a desesperarme.


—¡YUGIIIIIIII! ¿ESTÁS POR QUÍ? -Como por arte de magia escuché la voz de Yami llamándome, nunca me había alegrado más de escucharlo.


—¡YAMIIIIIIIIIIIIII! ¡POR AQUÍÍÍ! -Grité una vez más -¡AYÚDAME POR FAVOOOR! -Grité sintiendo que estaba a punto de llorar de la desesperación, si caía desde el lugar en el que estaba solo Ra sabía que podía pasarme.


—¡Yugi! -Gritó al posicionarse sobre el lugar donde estaba colgado -¡No te sueltes!


—¡No lo haré! ¡Ayúdame! -Mi voz estaba más entre cortada, me sentía feliz de verlo ahí para mí.


—¡Te subiré en seguida! -Exclamó tratando de sostenerse de unas cuantas ramas para estirar su mano -¡Toma mi mano Yugi! -Dijo una vez que su mano estuvo más cerca de mí, sin embargo, yo tenía miedo, no quería caer, no quería volver a tener otro accidente, no quería volver a olvidar, eso me frustraba en gran manera.


—¡No quiero soltarme! -Exclamé cual niño pequeño haciendo berrinche, tenía mucho miedo -¡Me caeré si me suelto! -Mis lágrimas comenzaron a correr por mis blancas mejillas.


—¡Yugi, esta vez estoy aquí, por nada del mundo te dejaré volver a caer! -Al escuchar sus palabras, no entendí a qué se refería, ¿no me dejaría volver a caer?, sin embargo, no era momento de pensar en eso, debía seguir sosteniéndome fuertemente si no quería caer.


—¡Tengo miedo!


—¡Solo debes tomar mi mano, te prometo que todo estará bien! -Sentí como mis brazos iban perdiendo su fuerza poco a poco, tenía que tomar la mano de Yami si o si, de lo contrario caería.


Busqué todo el valor dentro de mi corazón y quité una de mis manos con las que me sostenía de las raíces para tomar la mano de Yami.


Al simple contacto de su mano con la mía tuve un rápido recuerdo, una vez más la escena de mi sueño apareció ante mis ojos, ¿acaso mi cuerpo recordaba algo que mi mente no...?, Yami se trató de sujetar lo mejor que podía de unas ramas que estaban por sobre su cabeza y con toda la fuerza que sus músculos le podían otorgar me subió.


Al verme a salvo comencé a maquinar pensamientos, como el hecho de que al tocar su mano había dejado de llorar, ¿quién era Yami?, ¿por qué había recordado en ese preciso momento mi sueño?, ¿por qué me había dicho que esta vez estaba ahí y que no me dejaría volver a caer?, me sentía lleno de preguntas a las cuales no tenía respuestas.


—¡Yami! -Exclamé abrazándome a él en cuanto estuve arriba haciendo que él se cayera de espaldas conmigo sobre de él, solo lo abracé con fuerza, sentí que estuve a punto de morir, gracias a Ra él había llegado -¡Pensé que moriría, gracias! -Exclamé sintiendo como cálidas lágrimas bajaban nuevamente de mis ojos, pero hora estaba a salvo y me sentía dichoso de que hubiera sido él quien me rescatara.


—Ya ángel, no llores, todo está bien -Dijo acariciando mis cabellos tricolores con suavidad, de nuevo sus manos se sentían tan bien, además "ángel", esa palabra me hizo reaccionar, por alguna razón me sonaba familiar, se sentía tan dulce y cálida.


Nos quedamos así unos minutos hasta que por fin nos tranquilizamos.


—Lamento haberte tirado mencioné intentado ponerme de pie, pero al momento sentí que al poner mi peso sobre el pie con el que me había resbalado una corriente eléctrica acompañada de dolor recorrió mi cuerpo haciéndome caer de sentón.


—¿Yugi qué tienes? -Preguntó preocupado al mirarme.


—Es mi pie... -Dije tomándolo con suavidad revisando que todo estuviera en orden.


—Te lastimaste, será mejor que no te esfuerces -Dijo poniéndose frente a mi revisándolo.


—No hay problema, puedo caminar -Dije sonriéndole.


—No me arriesgaré a que te lastimes más -Dijo sonriéndome -¡Ra! No estás hecho para estás cosas -Sonrió ladinamente sin embargo podía notar preocupación en su semblante, además no entendí porque lo había dicho -Recuérdame no volver a dejarte ir a otra excursión o salir de Domino -Dijo agachándose para tomarme entre sus brazos, yo solo asentí ante sus palabras.


—No es necesario que me cargues -Dije apenado, sentí como mis mejillas se colorearon de un tono rojizo.


Al estar entre los brazos del oji-rubí sentí una melancolía que no supe identificar, Yami era la segunda persona que podía cargarme sin que pudiera repelar tanto, no entendía cómo... además, eso se sentía familiar, era como si lo hubiera vivido antes, solo miré a Yami detenidamente mientras mis brazos descansaban tras su cuello de camino a donde estaba la tienda.


Al llegar a esta me colocó sobre una pequeña sabana y comenzó a sacar cosas de primeros auxilios de su mochila.


—Gracias por ir a rescatarme -Dije Apenado -Si no, tal vez... no sé qué hubiera pasado -Dije agachando mi rostro.


—Perdóname -Dijo poniendo las cosas que tenía en sus manos a un lado abrazándose a mí, yo no entendí por qué su accionar, pero correspondí su abrazo -Perdóname por no haber ido contigo desde el principio, si te hubiera vuelto a pasar algo nunca me lo hubiera perdonado -Dijo aferrándose con fuerza a mi cuerpo.


—¿De qué hablas Yami? ¿Sí me hubiera vuelto a pasar algo? ¿Qué es lo que sabes? -Pregunté intrigado, tal vez Ry-chan y Mariku-chan le habían dicho algo sobre mi accidente de hace años y por eso Yami se sentía culpable de no acompañarme y de que me pudo haber pasado algo de nuevo.


—Ángel... sé que no me recuerdas, sé que soy una nada en tu pasado, pero ahora soy parte de tu presente y no dejaré que nada malo vuelva a pasarte -Dijo separándose de mi sonriéndome mientras unas cuantas lágrimas bajaban de sus orbes rubís.


—¿Yami...? ¿Quién eres? -pregunté mirándolo fijamente sintiendo como mi corazón latía rápidamente.


—Yugi yo... -Comenzó a decir torpemente, podía ver como trataba de encontrar las palabras correctas para hablarme...


 


----Continuará----


  ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Notas finales:

Espero que les haya gustado :D ya sé que el capítulo se quedo en una buena parte, no me maten por eso x'D espero que nos leamos pronto para que vean como reaccionó Yugi ante la confesión :3 Hasta luego n.n


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).